Bueno aca les traigo mi aventura con un viejo de la plaza de cerca de mi casa.
Tenia 20 años,ya hacia como 1 año que no cogia, me tocaba todas las noches y siempre tuve una fantasía recurrente cuando me pajeaba, los maduros. estabamos en marzo y me fui a la plaza sola a leer un poco.
Ese día hacia calor pero estaba lindo tenia un vestido de una tela muy finita con flores y abajo como siempre una tanguita, siempre me fueron más cómodas. No tenia corpiño porque tengo 90 bien paraditas, lo que si tengo grande es la cola, patine muchos años y eso creo que ayudó.
Elegí un árbol más alejado que tenia un poco de sombra y me sente a leer, al rato me levante y fui a dar una vuelta. Pasando por al lado de la calesita, que no estaba funcionando, veo a un tipo grandote con la ropa sucia de grasa, arreglando algo adentro de la calesita, me senté a mirarlo de lejos, se lo veia muy concentrado. En un momento se levanta y lo veo de frente, pelo medio canoso, tendria como unos 70 años pero bastante fuerza, se llevaba uno de los caballos para un taller y en el camino se le cayo una pinza.
Me levanté rapido fui a buscarla para alcanzarla y cuando llegué hasta la puerta golpee para no mandarme sola, pero como no respondió abri de una. La verdad me estaba divirtiendo la aventura y el viejo laburando me habia mojado un poquito.
Cuandro abrí se dió vuelta de una y le mostré la pinza:
-Disculpe, se le cayó.- le dije
- Uh nena, gracias siempre ando perdiendo cosas, pasa pasa.
Mientras entraba veia los posters de minitas en bolas, bastante contraste con las calesita y me reí.
Me preguntó que me causaba risa y le dije:
- Cuantas minas en bolas, en tu laburo nada de esto no? y me reí.
Se sonrió y me dijo: A veces si eh..aparece alguna trayendo algun pibe, asi linda como vos, y despues las memorizo para buenos momentos.
Nos reimos los dos, yo en ese momento me incomodé un poco y le dije:
- Bueno ya me voy
- Cuantos años tenes nena?
- 20, por?
- No, te queria invitar una cervecita como agradecimiento.
Y bien rapidita le dije:
- Dale, obvio.
Primero cerró la puerta, lo cual me calentó un poco, y mientras estaba de espaldas me desabroche el primer botón de mi vestido asi se me veian un poco las tetas.
Se sentó cerca y me dijo:
-Tomas del pico?
-Si, obvio.
Y me dio en la boca con la botella en su mano, y con la otra mano me empezó a acariciar las piernas. Al toque las abrí y cuando me rozó con la punta de los dedos la bombacha me dijo:
-Ay nena, estas toda mojada.
Tiró la botella al carajo y me empezó a chupar las tetas, las apretaba, las mordia y mientras me metia un dedo el concha. Yo empecé a jadear y se paró a prender la radio. Cuando volvió se paro adelante mio y pelo la pija, estaba toda chorreada en la punta, me agarró la cara me metió un beso y me la metio en la boca. Se la chupe toda, estaba toda hinchada y dura, seguia mojandome y el viejo no paraba de apretarme las tetas y yo jadeaba con la pija en la boca.
Me paró agarrada de la cintura, me saco el vestido y me dijo: Te voy a pegar la cogida de tu vida putita.
Me puso de espaldas y me empezo a chupar toda, me apretaba por todos lados y cuando le acabe en la boca, se paró me la metio entera y despues de bombear entre nalgueadas y gritos, me acabó todo arriba de la cola.
Me fui rapidito al baño me limpie y cuando volvi se estaba clavando una paja sentado frente a la puerta, me puse de rodillas y se la chupe hasta tragarmela toda...
Fue genial ese viejo, volví dos veces mas. 🙂
Tenia 20 años,ya hacia como 1 año que no cogia, me tocaba todas las noches y siempre tuve una fantasía recurrente cuando me pajeaba, los maduros. estabamos en marzo y me fui a la plaza sola a leer un poco.
Ese día hacia calor pero estaba lindo tenia un vestido de una tela muy finita con flores y abajo como siempre una tanguita, siempre me fueron más cómodas. No tenia corpiño porque tengo 90 bien paraditas, lo que si tengo grande es la cola, patine muchos años y eso creo que ayudó.
Elegí un árbol más alejado que tenia un poco de sombra y me sente a leer, al rato me levante y fui a dar una vuelta. Pasando por al lado de la calesita, que no estaba funcionando, veo a un tipo grandote con la ropa sucia de grasa, arreglando algo adentro de la calesita, me senté a mirarlo de lejos, se lo veia muy concentrado. En un momento se levanta y lo veo de frente, pelo medio canoso, tendria como unos 70 años pero bastante fuerza, se llevaba uno de los caballos para un taller y en el camino se le cayo una pinza.
Me levanté rapido fui a buscarla para alcanzarla y cuando llegué hasta la puerta golpee para no mandarme sola, pero como no respondió abri de una. La verdad me estaba divirtiendo la aventura y el viejo laburando me habia mojado un poquito.
Cuandro abrí se dió vuelta de una y le mostré la pinza:
-Disculpe, se le cayó.- le dije
- Uh nena, gracias siempre ando perdiendo cosas, pasa pasa.
Mientras entraba veia los posters de minitas en bolas, bastante contraste con las calesita y me reí.
Me preguntó que me causaba risa y le dije:
- Cuantas minas en bolas, en tu laburo nada de esto no? y me reí.
Se sonrió y me dijo: A veces si eh..aparece alguna trayendo algun pibe, asi linda como vos, y despues las memorizo para buenos momentos.
Nos reimos los dos, yo en ese momento me incomodé un poco y le dije:
- Bueno ya me voy
- Cuantos años tenes nena?
- 20, por?
- No, te queria invitar una cervecita como agradecimiento.
Y bien rapidita le dije:
- Dale, obvio.
Primero cerró la puerta, lo cual me calentó un poco, y mientras estaba de espaldas me desabroche el primer botón de mi vestido asi se me veian un poco las tetas.
Se sentó cerca y me dijo:
-Tomas del pico?
-Si, obvio.
Y me dio en la boca con la botella en su mano, y con la otra mano me empezó a acariciar las piernas. Al toque las abrí y cuando me rozó con la punta de los dedos la bombacha me dijo:
-Ay nena, estas toda mojada.
Tiró la botella al carajo y me empezó a chupar las tetas, las apretaba, las mordia y mientras me metia un dedo el concha. Yo empecé a jadear y se paró a prender la radio. Cuando volvió se paro adelante mio y pelo la pija, estaba toda chorreada en la punta, me agarró la cara me metió un beso y me la metio en la boca. Se la chupe toda, estaba toda hinchada y dura, seguia mojandome y el viejo no paraba de apretarme las tetas y yo jadeaba con la pija en la boca.
Me paró agarrada de la cintura, me saco el vestido y me dijo: Te voy a pegar la cogida de tu vida putita.
Me puso de espaldas y me empezo a chupar toda, me apretaba por todos lados y cuando le acabe en la boca, se paró me la metio entera y despues de bombear entre nalgueadas y gritos, me acabó todo arriba de la cola.
Me fui rapidito al baño me limpie y cuando volvi se estaba clavando una paja sentado frente a la puerta, me puse de rodillas y se la chupe hasta tragarmela toda...
Fue genial ese viejo, volví dos veces mas. 🙂
7 comentarios - El Sr. de la calesita