El VHS fue el gran difusor en la argentina del cine porno. Asentado ya por el año 1986 cuando argentina jugaba el mundial de México que nos impusiéramos, el VHS ya se había instalado en los hogares de los argentinos.
Venia cobijada por un sinnúmero de películas de realización inmediata, cuya estructura básica era. Una relación lésbica, dos hetero, y dos que establecían la variante, blowjob o anal. Cinco mas un pequeño argumento que posicionaba una secuencia que los actores, de muy baja calidad, para la escenificación desarrollaban. Debo recordar de esa época dos mujeres de gran envergadura en lo que fue el comportamiento sexual de los observadores. Tracy Lord, con su cara aniñada y angelical, mas ligada a una cohorte de querubines que al sexo procaz, animaba a todos a correr la frontera de la belleza femenina como virginal tratando de conseguir mejores resultados en la vida sexual. Savannah, que entro a la leyenda por su muerte temprana imponía en la época una mujer rubia, de rostro perfecto y cuerpo de diosa. No quedaba lugar como para volver un día a mirar el cuerpo de la “patrona” que excedida de peso por los partos y poco dispuesta por su trabajo de criar, nos dejaba poco lugar a la fantasía que venia propuesta por el reproductor de video.
Por suerte la computadora nos había dejado en la era digital, fue así que aparecieron a la par las películas de culto y aquellos realizadores que se animaron un poco mas del cine porno comercial.
En estos días, escribí, algo sobre Detrás de la Puerta Verde, pero tampoco dejo de mencionar Inside de Little Oral Annie que revoluciono el deseo sexual por la felatio desde el punto de vista masculino. Y The devil en la Sra. Jones, donde las fuerzas de bien y el mal pujaban por su sexualidad, en realidad el pecado, el cielo o el infierno ponía un poco el desafío a nuestro deseo de experimentar cosas nuevas.
La aparición del DVD tanto como en el cine argumental como en el porno, nos permitió hacer una revisión histórica adecuada del desarrollo del género.
Pero del súper ocho, al betamax y al VHS, debemos a los pioneros darles un grato recuerdo, pero la cumbre fue el VHS.
Le existencia del video club, facilito el transito de estos medios audiovisuales. Sin contar que por aquella época había video exclusivos para las películas de culto porno.
El sexo en toda su manifestación había llegado para quedarse definitivamente como un arte, mucho mas ligado al placer visual, ya que es el único sentido realmente estimulado por este periodo.
Venia cobijada por un sinnúmero de películas de realización inmediata, cuya estructura básica era. Una relación lésbica, dos hetero, y dos que establecían la variante, blowjob o anal. Cinco mas un pequeño argumento que posicionaba una secuencia que los actores, de muy baja calidad, para la escenificación desarrollaban. Debo recordar de esa época dos mujeres de gran envergadura en lo que fue el comportamiento sexual de los observadores. Tracy Lord, con su cara aniñada y angelical, mas ligada a una cohorte de querubines que al sexo procaz, animaba a todos a correr la frontera de la belleza femenina como virginal tratando de conseguir mejores resultados en la vida sexual. Savannah, que entro a la leyenda por su muerte temprana imponía en la época una mujer rubia, de rostro perfecto y cuerpo de diosa. No quedaba lugar como para volver un día a mirar el cuerpo de la “patrona” que excedida de peso por los partos y poco dispuesta por su trabajo de criar, nos dejaba poco lugar a la fantasía que venia propuesta por el reproductor de video.
Por suerte la computadora nos había dejado en la era digital, fue así que aparecieron a la par las películas de culto y aquellos realizadores que se animaron un poco mas del cine porno comercial.
En estos días, escribí, algo sobre Detrás de la Puerta Verde, pero tampoco dejo de mencionar Inside de Little Oral Annie que revoluciono el deseo sexual por la felatio desde el punto de vista masculino. Y The devil en la Sra. Jones, donde las fuerzas de bien y el mal pujaban por su sexualidad, en realidad el pecado, el cielo o el infierno ponía un poco el desafío a nuestro deseo de experimentar cosas nuevas.
La aparición del DVD tanto como en el cine argumental como en el porno, nos permitió hacer una revisión histórica adecuada del desarrollo del género.
Pero del súper ocho, al betamax y al VHS, debemos a los pioneros darles un grato recuerdo, pero la cumbre fue el VHS.
Le existencia del video club, facilito el transito de estos medios audiovisuales. Sin contar que por aquella época había video exclusivos para las películas de culto porno.
El sexo en toda su manifestación había llegado para quedarse definitivamente como un arte, mucho mas ligado al placer visual, ya que es el único sentido realmente estimulado por este periodo.
1 comentarios - El Vhs como detonador del genero porno