Lectura NO obligatoria
Le había prometido a su mujer que pasarían el día juntos y ella lo estaba deseando en lo más profundo de su ansioso coñito, pero a última hora surgió un negocio que no podía esperar. Andy, que estaba caliente como una moto, pensó que era hora de mezclar los negocios con el placer y llamó al tipo con el que su esposo debía reunirse pidiéndole que pasara a recogerlo por casa. Al llegar, Prince únicamente se encontró con una morenita ardiendo en deseos a la que le fue imposible resisitirse. Moraleja: si no te ocupas de tu mujer, otro lo hará encantado por ti.
0 comentarios - Si no te ocupas de tu mujer alguien lo hara