El tipo agarra la camarita... se pone comodo y lo filma al negro con la jermu... el mundo esta cada vez más loco... pero con camaras
http://xhamster.com/movies/469006/cuckold_dutch_wife_used_film_made_by_hubby_.html
Romina y la trampa del deseo 17
Antes de acostarnos Romi se quedo solo con la tanguita puesta, se puso la almohada debajo y acostándose boca abajo empezó a pajearse, me dijo que me aguantara y que no podía pajearme, ella pareció quedar más calmada y se quedo dormida. En la mañana cuando nos despertamos, si bien no sabía muy bien como encarar el tema, le dije que me gustaría quedarme escondido viendo que pasaba con el jefe y su mamá, que así le podría contar. Tenía miedo de cual sería la reacción de Romi. Esta sonrió y me dijo que era un pervertido, que le parecía bien, pero que si me concedía ese permiso iba a estar en deuda con ella por muchisimo tiempo. Mi cuerpo estaba temblando.
- Vos sabes que yo cobro todo lo que me deben..., y te va a salir muyyy caro...
- Y que me vas a cobrar?
- No seas tontito..., ya se me va a ocurrir..., vas a satisfacerme hasta el menor caprichito de ahora en más..., ¿queres ver como se cogen a mami...?, si se deja...
- Sí.
- Bueno buscate un lugar para esconderte y después me contas que pasó.
Durante la mañana todo transcurrió normal, fuimos a la playa donde el jefe hablaba todo el tiempo con mi suegra, volvimos a casa a almorzar, yo había preparado un cuartito chiquito que tenía una visión panorámica del living y la cocina, parecía un lugar creado para espiar, estaba más nervioso que nunca. Después de comer mi mujer le dijo a la madre que íbamos a salir con la nena que a eso de las 18 horas volvíamos, mi suegra dijo que iba a aprovechar para descansar. Romi me indicó que me escondiera y salió con la nena, iba a pasar por lo del jefe a decirle que tenía el terreno libre. Al rato golpearon la puerta, mi suegra salió de la cocina en donde estaba terminando de limpiar los platos y fue a abrir, el jefe se anunció y mi suegra le pregunto que quería, este le comento que solo quería charlar un rato, mi suegra abrió con un poco de dudas, el jefe le dio un beso en la mejilla tomándola de la cintura. Mi suegra fue hacia la cocina a seguir con los platos. El jefe se quedo en la arcada de entrada a la misma, apoyado contra la pared mirándola.
- Hacía mucho tiempo que no conocía una mujer tan hermosa.
- Bueno te agradezco el cumplido, pero te recuerdo que soy una mujer casada
- Y hermosa, muy hermosa, dijo el jefe empezando a acercarse a mi suegra lentamente mientras esta seguía con los platos. El jefe acomodó ambas manos al costado de mi suegra aprisionándola contra la pileta suavemente mientras le besaba el cuello, mi suegra se dio vuelta y le pego un empujón que lo tiro contra la mesa.
- Me parece que tenemos que terminar acá.
El jefe libero su pija de la malla mostrándosela.
- Mira como me tenés
Mi suegra intento salir en dirección al living, pero el jefe la tomo del brazo y atrayéndola hacia él la beso mientras la apretaba haciéndole sentir su miembro que seguía fuera de la malla, mi suegra abría su boca y correspondía el beso, el jefe tomo la mano de mi suegra y la llevó a su miembro, se besaron un rato y tomándola de la cintura la sentó en la mesa de la cocina, le corrió la malla a un costado y se la dejo ir despacito, mi suegra parecía desencajada -.
- Esto no esta bien...!!!, Nunca engañe a mi marido...!!! - y empezó a gemir cada vez más locamente mientras el jefe le había bajado la malla enteriza liberándole los pechos a los que saboreaba con fruición. - No esta bien...!!!
- Pero te gusta..., eh perra...?
- No me hables así..., por favor... - El jefe la bajo de la mesa dejándola de pie delante de el, le arranco prácticamente la malla y la giro poniéndola apoyada contra la mesa, se arrodillo entre las piernas y empezó a comerle la concha, mi suegra estaba encantada gemía cada vez más fuerte, luego el jefe empezó a chuparle el culito, sacaba la cabeza de a ratos y le hablaba.
- Que lindo culito tenes..., sabes como te lo voy a llenar de lechita...
- No el culo no..., nunca me lo hicieron..., me va a doler...,
- Si decís que te va a doler es porque sabes que te lo voy a hacer - dijo el jefe y se puso de pie, busco la botella de aceite y empezó a lubricarle el culito a mi suegra.
- Si me duele paras...
- Si..., quedate tranquila - dijo sonriendo, se colocó detrás de ella y primero solo se apoyo un poco, la tomo del pelo a mi suegra y girándola le dio un beso profundo en la boca, con su mano izquierda acomodó su miembro y muy despacito la penetró y se quedo quieto mientras la besaba, mi suegra no se movía. El jefe estuvo un largo rato sin moverse esperando que se acostumbrara.
- Que apretadito se siente..., nunca te lo hizo tu marido...?
- No...
- Que pelotudo!!! - y en ese instante se la metió un poco más quedándose quieto, mi suegra trataba de escaparse hacia delante.
- Que lindo tu culo, es tan rico como el de tu hija. - mi suegra giro la cara mirándolo desorbitada.
- Hay algún otro culito de estos hermosos en la familia que me pueda comer. - en ese momento empezó a bombearla bien fuerte, mi suegra estaba caliente como nunca el comentario de Romi la había puesto más caliente todavía, gemía y pedía más.
- Es un secretito lo de tu hija..., no se lo cuentes a nadie..., viste lo que te estabas perdiendo...?
- Si me encanta..., dame duro..., que raro lo siento..., pero me gusta...
- Te imaginas con las tripas llenas de mi leche...
- No me hables así...,
- Como queres que te hable si estas en la mesa como una perra con mi pija metida en el culo.
Mi suegra empezó a tener un orgasmo muy grande se movía y empujaba el culo más hacia atrás, el jefe se detuvo y se dedicaba a darle besitos dulces tratando de prolongar lo más posible el momento.
- queres sentir mi leche...?
- Si...!!! Dámela....!!! - el jefe la bombeó hasta que la clavó bien a fondo al acabar mientras mi suegra estaba fascinada y le decía que le encantaba lo que le hacía. Se quedaron un largo rato hasta que la pija del jefe se salió sola. Se salió de encima de ella y la acaricio un largo rato mientras la besaba.
- Esto va a ser solo el principio, a mí me encanta el sexo anal y tu culito esta para saborearlo
- No me trates así, no soy un culo. - el jefe no dijo más nada y salió dejándola a mi suegra desnuda en la cocina, tenía cara de enojo.
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Romina y la trampa del deseo 17
Antes de acostarnos Romi se quedo solo con la tanguita puesta, se puso la almohada debajo y acostándose boca abajo empezó a pajearse, me dijo que me aguantara y que no podía pajearme, ella pareció quedar más calmada y se quedo dormida. En la mañana cuando nos despertamos, si bien no sabía muy bien como encarar el tema, le dije que me gustaría quedarme escondido viendo que pasaba con el jefe y su mamá, que así le podría contar. Tenía miedo de cual sería la reacción de Romi. Esta sonrió y me dijo que era un pervertido, que le parecía bien, pero que si me concedía ese permiso iba a estar en deuda con ella por muchisimo tiempo. Mi cuerpo estaba temblando.
- Vos sabes que yo cobro todo lo que me deben..., y te va a salir muyyy caro...
- Y que me vas a cobrar?
- No seas tontito..., ya se me va a ocurrir..., vas a satisfacerme hasta el menor caprichito de ahora en más..., ¿queres ver como se cogen a mami...?, si se deja...
- Sí.
- Bueno buscate un lugar para esconderte y después me contas que pasó.
Durante la mañana todo transcurrió normal, fuimos a la playa donde el jefe hablaba todo el tiempo con mi suegra, volvimos a casa a almorzar, yo había preparado un cuartito chiquito que tenía una visión panorámica del living y la cocina, parecía un lugar creado para espiar, estaba más nervioso que nunca. Después de comer mi mujer le dijo a la madre que íbamos a salir con la nena que a eso de las 18 horas volvíamos, mi suegra dijo que iba a aprovechar para descansar. Romi me indicó que me escondiera y salió con la nena, iba a pasar por lo del jefe a decirle que tenía el terreno libre. Al rato golpearon la puerta, mi suegra salió de la cocina en donde estaba terminando de limpiar los platos y fue a abrir, el jefe se anunció y mi suegra le pregunto que quería, este le comento que solo quería charlar un rato, mi suegra abrió con un poco de dudas, el jefe le dio un beso en la mejilla tomándola de la cintura. Mi suegra fue hacia la cocina a seguir con los platos. El jefe se quedo en la arcada de entrada a la misma, apoyado contra la pared mirándola.
- Hacía mucho tiempo que no conocía una mujer tan hermosa.
- Bueno te agradezco el cumplido, pero te recuerdo que soy una mujer casada
- Y hermosa, muy hermosa, dijo el jefe empezando a acercarse a mi suegra lentamente mientras esta seguía con los platos. El jefe acomodó ambas manos al costado de mi suegra aprisionándola contra la pileta suavemente mientras le besaba el cuello, mi suegra se dio vuelta y le pego un empujón que lo tiro contra la mesa.
- Me parece que tenemos que terminar acá.
El jefe libero su pija de la malla mostrándosela.
- Mira como me tenés
Mi suegra intento salir en dirección al living, pero el jefe la tomo del brazo y atrayéndola hacia él la beso mientras la apretaba haciéndole sentir su miembro que seguía fuera de la malla, mi suegra abría su boca y correspondía el beso, el jefe tomo la mano de mi suegra y la llevó a su miembro, se besaron un rato y tomándola de la cintura la sentó en la mesa de la cocina, le corrió la malla a un costado y se la dejo ir despacito, mi suegra parecía desencajada -.
- Esto no esta bien...!!!, Nunca engañe a mi marido...!!! - y empezó a gemir cada vez más locamente mientras el jefe le había bajado la malla enteriza liberándole los pechos a los que saboreaba con fruición. - No esta bien...!!!
- Pero te gusta..., eh perra...?
- No me hables así..., por favor... - El jefe la bajo de la mesa dejándola de pie delante de el, le arranco prácticamente la malla y la giro poniéndola apoyada contra la mesa, se arrodillo entre las piernas y empezó a comerle la concha, mi suegra estaba encantada gemía cada vez más fuerte, luego el jefe empezó a chuparle el culito, sacaba la cabeza de a ratos y le hablaba.
- Que lindo culito tenes..., sabes como te lo voy a llenar de lechita...
- No el culo no..., nunca me lo hicieron..., me va a doler...,
- Si decís que te va a doler es porque sabes que te lo voy a hacer - dijo el jefe y se puso de pie, busco la botella de aceite y empezó a lubricarle el culito a mi suegra.
- Si me duele paras...
- Si..., quedate tranquila - dijo sonriendo, se colocó detrás de ella y primero solo se apoyo un poco, la tomo del pelo a mi suegra y girándola le dio un beso profundo en la boca, con su mano izquierda acomodó su miembro y muy despacito la penetró y se quedo quieto mientras la besaba, mi suegra no se movía. El jefe estuvo un largo rato sin moverse esperando que se acostumbrara.
- Que apretadito se siente..., nunca te lo hizo tu marido...?
- No...
- Que pelotudo!!! - y en ese instante se la metió un poco más quedándose quieto, mi suegra trataba de escaparse hacia delante.
- Que lindo tu culo, es tan rico como el de tu hija. - mi suegra giro la cara mirándolo desorbitada.
- Hay algún otro culito de estos hermosos en la familia que me pueda comer. - en ese momento empezó a bombearla bien fuerte, mi suegra estaba caliente como nunca el comentario de Romi la había puesto más caliente todavía, gemía y pedía más.
- Es un secretito lo de tu hija..., no se lo cuentes a nadie..., viste lo que te estabas perdiendo...?
- Si me encanta..., dame duro..., que raro lo siento..., pero me gusta...
- Te imaginas con las tripas llenas de mi leche...
- No me hables así...,
- Como queres que te hable si estas en la mesa como una perra con mi pija metida en el culo.
Mi suegra empezó a tener un orgasmo muy grande se movía y empujaba el culo más hacia atrás, el jefe se detuvo y se dedicaba a darle besitos dulces tratando de prolongar lo más posible el momento.
- queres sentir mi leche...?
- Si...!!! Dámela....!!! - el jefe la bombeó hasta que la clavó bien a fondo al acabar mientras mi suegra estaba fascinada y le decía que le encantaba lo que le hacía. Se quedaron un largo rato hasta que la pija del jefe se salió sola. Se salió de encima de ella y la acaricio un largo rato mientras la besaba.
- Esto va a ser solo el principio, a mí me encanta el sexo anal y tu culito esta para saborearlo
- No me trates así, no soy un culo. - el jefe no dijo más nada y salió dejándola a mi suegra desnuda en la cocina, tenía cara de enojo.
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