Cuando le vi la cara a la minita me parecio un traba, pero no claro. Y sigue la historia picante picante...
http://www.slutload.com/watch/sNHCoIiLEdm/Fucking-Hard-My-Wife-s-Best-Friend-Drunk-In-My-Bedroom-This-Is-Real.html
Romina y la trampa del deseo 7
Estaba esperando llegar a casa después de lo de la oficina, me moría de ganas que Romi me masturbara por lo menos. Entre en casa estaba la nena en el comedor y Romi en la cocina, estaba con una bata y los zapatos de taco aguja puestos. Se abrió la bata y empezó a acariciarse las tetas, tenía las medias con liguero y la tanguita del conjunto sin corpiño.
-Te gusto lo de hoy...?
-Si...
-Quedaste calentito...?, dijo sacándose la bata y poniéndose a lavar los platos. Estaba con los zapatitos de taco, el culo estaba más hermoso que nunca, me fui acercando hacia ella.
-Quedate en donde estas..., vos solo podes mirarme..., y si quiero yo te voy a tocar..., te gusta ser cornudito...?
-Si...
-Pero..., tanto????, -y se rió- andate para el baño que voy a ser buena y te voy a sacar la calentura. –me metí en el baño y me desnude. Enseguida entró romi.
-Bien que te desnudaste así no pierdo el tiempo con pajeritos..., -y volvió a reírse.- te voy a aliviar ahora no porque sea buena..., en realidad tengo ganas de que me cojas a la noche..., y si no te saco la lechita..., -me rodeo desde atrás abrazándome y me colocó junto a la bañera, apuntando con mi miembro hacia la misma. Con su mano izquierda empezó a acariciarme las pelotas. Y con la derecha a jugar con mi miembro.
-Que duro esta..., lo tenías así de duro mientras tomabas la leche de tu jefe de mi culito... –mi pija dio un pequeño saltito- Como se entusiasma, contesta por vos..., -su mano izquierda dejó de acariciarme las pelotas y fue hacia mi culo separo mis nalgas y sus dedos empezaron a hurgar en mi culito. Su mano derecha empezó a masturbarme más rápido mientras con su dedo índice de la otra mano me cogía el culo.
-Voy a tener que humillarte cada día más..., Hasta donde voy a tener que llegar...?, me dijiste que era un señor atractivo tu papá..., no???, mi pija escupió leche en todas direcciones. Romi se reía mientras me apretaba la pija con fuerza y me cogía el culo con el dedo.
-Es una broma lo de tu papi..., aunque por ahí..., quien te dice...? –y mi pija volvió a dar como un cabezo. Romi se dio media vuelta y salió del baño diciendo.
-Me voy a preparar el mate..., limpia todo.
Mientras tomábamos mate me pregunto ya más calmados que le contara algo de mi familia.
Le conté algunas pocas cosas de mi madre, mi hermana, sus amantes y de mi padre que era un tipo de mal carácter y que era bastante recio y complicado. Que cuando supo que el portero se había acostado con mi madre, habló serenamente con él, sin siquiera levantar el tono de su voz, el portero quedó tan asustado después de hablar con él que ni siquiera aparecía por el piso. Que nadie sabía en que negocios andaba y otras cosas, la mayoría de las cosas que conocía de él eran por comentarios, algunos decían que era medio mafioso y otras cosas.
Tomaba ella del mate y me miro a los ojos.
-Algún día me gustaría conocerlo..., -dijo con voz de putita. Mi pija reaccionó un poco y traté de disimularlo. Romi siguió con su voz de putita.
-Tendría que conocer a la nieta..., no???. Y la nuera..., que le parecerá. –me acerque la bese y la llevé hacia el cuarto. La nena estaba durmiendo. La tiré en la cama y la empecé a coger.
-Que caliente estas mi amor..., me gusta que estés así..., -se la clavé bien a fondo.
Ni siquiera jodas con lo de mi papá estamos peleados y no quiero que lo menciones el tema ni como chiste.
-Esta bien..., le gustará mi culito...?
la clave más duro y acabé en ese momento. Romi tenía una cara de perversa como nunca le había visto.
-Es un jueguito mi amor..., no seas tonto...
Ya más calmo le dije que no me gustaba, que bastante traumático había sido todo lo pasado para mí. Romi se acostó en mi pecho y me rodeó mi miembro con su mano me acariciaba suavemente las bolas y la pija. Me beso un largo rato y luego me hablaba al oído.
-No seas tontito mi amor..., -me apretó fuerte la pija- Es que lo describís de una manera a tu papi..., que a una le dan ganitas de conocerlo..., -mi pija empezó a crecer en la mano de Romi.- Ay.., amor!!!, otra vez reacciona..., me parece que nunca se pone de acuerdo con vos. Y vos sabes a quien le hago caso yo...
mi cara era de la máxima seriedad posible. Romi cambio el tema y me dijo que no pensaba el sábado ir a ninguna fiesta, que no le gustaba que pensaran que podían ordenarle que hacer y que no, que una cosa es que ella estuviera caliente y provocara situaciones y otra que los tipos pensaran que podían organizar sus cosas. Me beso otro largo rato, se levanto a ver a la nena, yo me fui a dar un baño. Cenamos muy tranquilos los dos y dormimos muy abrazados. Pensaba en mi familia y sentí una oleada de temor. Recordé a mi padre, como siempre me había desacreditado y considerado un pobre taradito, quizás tuviera razón, yo no era nada. Mi padre era un gran señor, la mayoría le temía, algunos los respetaban. Ni siquiera pensaba en la situación de que la conociera a Romi, siempre había sido putañero, y sabiendo que también siempre le había gustado humillarme, prefería no pensar. Esa noche tuve unas cuantas pesadillas. Romina parecía tener cada vez menos limites, en realidad los dos estábamos totalmente fuera de control.
http://www.slutload.com/watch/sNHCoIiLEdm/Fucking-Hard-My-Wife-s-Best-Friend-Drunk-In-My-Bedroom-This-Is-Real.html
Romina y la trampa del deseo 7
Estaba esperando llegar a casa después de lo de la oficina, me moría de ganas que Romi me masturbara por lo menos. Entre en casa estaba la nena en el comedor y Romi en la cocina, estaba con una bata y los zapatos de taco aguja puestos. Se abrió la bata y empezó a acariciarse las tetas, tenía las medias con liguero y la tanguita del conjunto sin corpiño.
-Te gusto lo de hoy...?
-Si...
-Quedaste calentito...?, dijo sacándose la bata y poniéndose a lavar los platos. Estaba con los zapatitos de taco, el culo estaba más hermoso que nunca, me fui acercando hacia ella.
-Quedate en donde estas..., vos solo podes mirarme..., y si quiero yo te voy a tocar..., te gusta ser cornudito...?
-Si...
-Pero..., tanto????, -y se rió- andate para el baño que voy a ser buena y te voy a sacar la calentura. –me metí en el baño y me desnude. Enseguida entró romi.
-Bien que te desnudaste así no pierdo el tiempo con pajeritos..., -y volvió a reírse.- te voy a aliviar ahora no porque sea buena..., en realidad tengo ganas de que me cojas a la noche..., y si no te saco la lechita..., -me rodeo desde atrás abrazándome y me colocó junto a la bañera, apuntando con mi miembro hacia la misma. Con su mano izquierda empezó a acariciarme las pelotas. Y con la derecha a jugar con mi miembro.
-Que duro esta..., lo tenías así de duro mientras tomabas la leche de tu jefe de mi culito... –mi pija dio un pequeño saltito- Como se entusiasma, contesta por vos..., -su mano izquierda dejó de acariciarme las pelotas y fue hacia mi culo separo mis nalgas y sus dedos empezaron a hurgar en mi culito. Su mano derecha empezó a masturbarme más rápido mientras con su dedo índice de la otra mano me cogía el culo.
-Voy a tener que humillarte cada día más..., Hasta donde voy a tener que llegar...?, me dijiste que era un señor atractivo tu papá..., no???, mi pija escupió leche en todas direcciones. Romi se reía mientras me apretaba la pija con fuerza y me cogía el culo con el dedo.
-Es una broma lo de tu papi..., aunque por ahí..., quien te dice...? –y mi pija volvió a dar como un cabezo. Romi se dio media vuelta y salió del baño diciendo.
-Me voy a preparar el mate..., limpia todo.
Mientras tomábamos mate me pregunto ya más calmados que le contara algo de mi familia.
Le conté algunas pocas cosas de mi madre, mi hermana, sus amantes y de mi padre que era un tipo de mal carácter y que era bastante recio y complicado. Que cuando supo que el portero se había acostado con mi madre, habló serenamente con él, sin siquiera levantar el tono de su voz, el portero quedó tan asustado después de hablar con él que ni siquiera aparecía por el piso. Que nadie sabía en que negocios andaba y otras cosas, la mayoría de las cosas que conocía de él eran por comentarios, algunos decían que era medio mafioso y otras cosas.
Tomaba ella del mate y me miro a los ojos.
-Algún día me gustaría conocerlo..., -dijo con voz de putita. Mi pija reaccionó un poco y traté de disimularlo. Romi siguió con su voz de putita.
-Tendría que conocer a la nieta..., no???. Y la nuera..., que le parecerá. –me acerque la bese y la llevé hacia el cuarto. La nena estaba durmiendo. La tiré en la cama y la empecé a coger.
-Que caliente estas mi amor..., me gusta que estés así..., -se la clavé bien a fondo.
Ni siquiera jodas con lo de mi papá estamos peleados y no quiero que lo menciones el tema ni como chiste.
-Esta bien..., le gustará mi culito...?
la clave más duro y acabé en ese momento. Romi tenía una cara de perversa como nunca le había visto.
-Es un jueguito mi amor..., no seas tonto...
Ya más calmo le dije que no me gustaba, que bastante traumático había sido todo lo pasado para mí. Romi se acostó en mi pecho y me rodeó mi miembro con su mano me acariciaba suavemente las bolas y la pija. Me beso un largo rato y luego me hablaba al oído.
-No seas tontito mi amor..., -me apretó fuerte la pija- Es que lo describís de una manera a tu papi..., que a una le dan ganitas de conocerlo..., -mi pija empezó a crecer en la mano de Romi.- Ay.., amor!!!, otra vez reacciona..., me parece que nunca se pone de acuerdo con vos. Y vos sabes a quien le hago caso yo...
mi cara era de la máxima seriedad posible. Romi cambio el tema y me dijo que no pensaba el sábado ir a ninguna fiesta, que no le gustaba que pensaran que podían ordenarle que hacer y que no, que una cosa es que ella estuviera caliente y provocara situaciones y otra que los tipos pensaran que podían organizar sus cosas. Me beso otro largo rato, se levanto a ver a la nena, yo me fui a dar un baño. Cenamos muy tranquilos los dos y dormimos muy abrazados. Pensaba en mi familia y sentí una oleada de temor. Recordé a mi padre, como siempre me había desacreditado y considerado un pobre taradito, quizás tuviera razón, yo no era nada. Mi padre era un gran señor, la mayoría le temía, algunos los respetaban. Ni siquiera pensaba en la situación de que la conociera a Romi, siempre había sido putañero, y sabiendo que también siempre le había gustado humillarme, prefería no pensar. Esa noche tuve unas cuantas pesadillas. Romina parecía tener cada vez menos limites, en realidad los dos estábamos totalmente fuera de control.
3 comentarios - Brasilera y Romina 34
te felicito
gracias por compartir