Mi primera vez como nena Sissy parte II

Después de terminar la primera sesión de sexo donde me convirtió en su puta, nos quedamos tumbados en la cama durante un rato, mientras yo le acariciaba el pecho y la verga y hacia lo mismo pero acariciandome el culo o mis piernas en fundadas en mis suaves medias.


-¿Te gustó?

-Mucho - Respondí mientras le daba un tierno beso en la boca.

-Qué bueno nena, me da gustó que lo hayas disfrutado yo también lo pase bien, aprietas muy rico ya casi estoy listo para la siguiente ronda, andale cambiate de ropa quiero verté en ese conjunto rojo.

Después de bajarme de la cama tome el conjunto rojo que había puesto sobre el buro qué estaba debajo de la tele de la habitación, acto seguido entre al baño, escuche como el volumen del porno subía anticipando lo que se venía, así que me apresure a cambiarme, me desnude completamente y prosegui a vestirme y darme un retoque en el maquillaje.


Este conjunto era rojo totalmente, comencé por las medias de red rojas con un ancho y elegante encajé en la parte superior, ya saben esa parte que va en el muslo, después el ligero también de encaje pero esta vez sin faldita era pegado al cuerpo una línea, de donde salían cuatro triángulos para las ligas, seguí con la tanga de encaje y como creo que era unas tallas más pequeñas me apretaba el pene y se enterraba muy rico en mis nalgas dejándolas ver muy jugosas y apretadas, seguido de un babydoll de encaje de una sola pieza pegado con una falda qué cubría hasta mis muslos, me puse los tacones y salí del baño viendo como estaba de pie frente a la televisión ya con la verga bien parada mientras se la jalaba.

-Te se te ve muy bien - Ven para acá ya quiero cogerte.

Yo como toda una sumisa obedecí poniéndome de rodillas frente a esa rica verga venida y bien parada qué tenía frente a mi, no dude en metermela a la boca y comenzar a sentir ese delicioso sabor qué tantos nos encanta a las sissys, devoraba esa rica verga incluidos sus huevos, lo que gustó bastante y lo expresaba con sus suspiros de placer.


-Así mamacita - Me decía mientras me tomaba de la cabeza y comenzaba lentamente a empujar su verga hasta el fondo de mi boca - Qué rico mamas putita - Saco la verga de mi boca y me dio unos golpes con ella en la cara lo cual me gustó mucho - ¿Te gusta mi verga verdad?.

-Si mucho dámela toda - Dije regresando su rica verga a mi boca para seguir comiendomela, de la nada gracias a su excitacion el comenzó a follarme la boca mientras a mi me daban arcadas, y recibía insultos de putita zorra te encanta la verga. 

Yo entre arcadas y mientras mi saliva recorría sus huevos y su rica y gruesa verga le respondía si me encanta tu verga papi.

De golpe saco su verga me levanto plantando me un beso muy sensual y caliente, me giro dejando mi culo a su merced y sin perder tiempo se puso un condon al igual que algo de lubricante pero como mi ano ya estaba dilatado por la cogida qué acababa de darme su verga entro muy fácilmente, de inmediato comenzó a escucharse el choque de nuestras pieles mientras yo sentía el movimiento de su verga dentro de mi y sus fuertes manos tomándome por la cadera.

-Si así así más duro maaas papi - le decía entre mis gemidos de placer.


Me tomo del cabello y me giro la cabeza para besarme y apretarme el cuello mientras seguía cogiendome y nalgueandome, me sentía muy nena, muy suya muy mujer entregada a mi macho, tanto fue así que me hizo venir una vez más, fue tan rico y abundante que creo que un poco de orina también salio.


-Vez como te encanta, como te cojo, te hago venir muy fácil, como mi puta - Me decía entre su fuertes bramidos al tiempo que me nalgueo fuertemente lo que me hizo gemir de placer aun más.

-Si si me encanta ser puta, ser tu puta.

Saco su verga de mi culo y me arrojó sobre la cama con las piernas abiertas, sin perder tiempo comenzó a cogerme levantando mis piernas mientras el estaba completamente sobre mi, casi de pie.


A cada embestida qué me daba sentían como su pene palpitaba dentro de mi, no se cuanto tiempo me tuvo en esa posición hasta que se canso y me dijo que lo montará.

Se recostó en la cama con la verga en el aire y por primera vez me subiría a un macho para cabalgarlo como toda una mujer, me subí mirándolo de frente y lentamente sentí como su pene entraba a mi culo, a medida que me sentaba en el y cada centímetro entraba en mi suspiros de placer salían de mi boca, comencé a moverme de arriba hacia abajo sintiendo cada centímetro de su verga dentro de mi, provocando suspiros de placer por parte de ambos. 


-Te mueves bien rico - Me dijo mientras recorría mi cuerpo con sus manos rasposas y apretaba fuertemente mis pezones lo que me causaba si más placer, comenzaba a recorrer mi cuerpo centímetro a centímetro con sus manos hasta que me tomo de la cabeza y me dio un beso lo que me encantó.

Mientras me besaba me tomaba de la empalada y comenzó a metermela más duro mientras yo estaba sobre el sentía como mi pene palpitaba al ritmo que el me cogia, así me mantuvo un rato hasta que volví a cabalgarlo esta vez desde adelanta hasta atrás, fue una sensación deliciosa sentir su verga dentro de mi, ese fue el momento más fantástico porque por la posición en la que nos encontrábamos y el rico movimiento que hacía hizo qué mi pené aunque atrapado por la tanga tuviera una fuerte ereccion y poco a poco me provocaba un segundo orgasmo qué disfrute increíblemente a la vez que me me movía más rápido sobre mi macho.


-Se ve que te encanta ser vieja - Le decía mientras me nalgueaba. 

-Si papi me encanta ser tu vieja - respondí entre gemidos y la sensación de placer completa qué libero mi cuerpo.

No paso mucho hasta que el estuviera a punto de terminar.

Bajate quiero terminarte en la cara, como su vieja que quite y me puse de rodilla para que su semen se derramará en mi cara y un par de jaladas de su su verga bastaron para que mi cara se llenará de su leche caliente algunas gotas de ella llegaron a mi boca lo que despertó mi lujuria y comencé a mamarle la verga llenándome de aquel delicioso sabor.



Ambos terminamos exhaustos en la cama descansamos un poco más y decidimos ducharnos e irnos por cuestiones de ambos ya no pudimos repetirlo pero lo guardo como un buen recuerdo.