Esta es la última parte de mis relatos sobre el fin de semana sola en casa.
Como ya saben me desperté vestidita en lenceria como toda una puta.
Me levante me prepare la comida y me dispuse a lavar mi ropa (era domingo día de lavar ropa y además también debía lavar la lenceria de mi madre), pero se me ocurrió algo divertido qué tal si me ponía a lavar con ropa de mujer aunque sea de calle.
Así que lo hice busque una truza qué mi mamá ya no usará, no se algo que no se diera cuenta si le faltaba o algo así, y encontré justo lo que necesitaba un cachetero hasta el fondo de su cajón era de franjas rojas y negras me quedaba muy bien y resaltaba mi culto de nena, me miraba bien encalzonada, busque un brasier deportivo era negro algo desgastado y pero me ajustaba muy bien, de hecho hacia qué casi me desaparecieran mi tetitas de adolescente.
Mi madre tenia un par de pants deportivos de la marca bebe eran color rosa, me lo puse porque creí que era cómodo y sería algo que una mujer usaría para sus deberes del hogar y es lo que yo haría, todo iba bien desayune lave los platos y mi ropa espere para tender toda al sol y cuando salí al patio, creí que todo estaba bien, todo iba como uan nena perfecta hasta que de la nada escuche la voz de un hombre.
-Chiquita putita, qué bien te vez - escuche a la distancia.
Yo me quedé paralizada se me bajó la sangre y me dio una ereccion de golpe.
-Siguele haciendo tus cosas de nena maricon.
Regrese corriendo a casa y deje mi ropa afuera no sabía que había pasado ni quien me estaba hablando era una situación completamente nueva para mi, era la primera vez que alguien me veía vestido de mujer, estaba nerviosa y no sabía cómo actuar, asome la cabeza por la ventana y vi que se trataba de un albañil qué estaba trabajando en un edificio de departamentos nuevos a lado de mi casa.
-Ya salte ni te voy a hacer nada - Me dijo - nomas quiero verte niña, se trababa de un albañil de unos 50 años panzon, moreno y completamente sucio lleno de cemento - ya vente joto.
Yo no sabia que hacer pero tímidamente salí, aún vestido.
-No pues si estas bien rica puta.
No dije nada, pero me gustaba como me trataba, me excitaba.
-Qué? no hablas?
De nuevo no conteste.
-No pues no pasa nada, no te voy a hacer nada nomas quería verte... Porque ni me puedo saltar para cogerte - Había una reja con alambre de puaz qué no dejaba que se cruzará y solo podía verme desde la ventana en la que trabajaba - Me llamo Mariano y tu puto como te llamas?
-Me llamo Armando (No es mi nombre real ni en la historia ni en la vida real).
-Y que no hay nadie en tu casa? Porque te vistes así?
-Me gusta vestirme así.
-No pos esta bien, yo respeto eso, no hay pedo me gustan las jotas y los vestidos como tu, aprietan muy rico.
-Enserio? - Pregunte con sorpresa, no esperaba esa respuesta.
-Si la neta aprietan bien rico y pues se ve que tu también apretarías bien rico, cuantos años tienes?
-Quince - Respondió tímidamente.
-Mmju no pues si estarías super bien... Me vas a dejar cogerte? Me bajo y me meto a tu casa
Yo dude no supe que responder me quede paralizada congelada completamente.
-No pues supongo que no... Ta gueno.... Pero te puedo pedir un favor?
-Si? Pero no dira nada?
-Nombre si yo solo vine hoy a ayudar a un compadre, pero pues mira desde aquí vamos a hacer algo.
-Qué cosa?
-Vamos a jalarnosla.
-Como?
-Quítate la ropa dejame verte y date vueltas caliéntame.
Hice lo que me pidió me desnude poco a poco dejándole ver mi ropa interior aunque poco provocativas yo creía que era sexy.
-¿No tienes algo más cachondo?
-Si - Respondió y rápidamente fui a ponerme la ropa que tenia puesta antes de que el me viera, me puse la tanga las medias y el babydoll, además de las botas, camine lo mejor que pude para que me viera bien.
-Qué rico jotito, como me dan muchas ganas de cogerte - Me dijo mientras se veía el movimiento de su brazo - Date la vuelta quiero ver tus nalgas.
Yo obedecía y hacia todo lo que él me decía sin protestar, me dijo que me bajara la tanga y me abriera las nalgas y ahí fue cuando escuche que se vino.
Me pidió que me masrurbara también y eso hice me gustó mucho que alguien me viera hacerlo me encantó.
Me dijo que le gustaba cogerse jotitos y si eran jóvenes mejor, platicamos un poco mientras yo hacía mis cosas vestida en lenceria y el hacia las suyas, de repente me pedía que me desnudara y se la jalaba hasta que termino de hacer su trabajo y se fue.
Jamás volví a verlo pero me pregunte que hubiese pasado si hubiese podido cruzar a mi casa y cogerme.
Eso me calentó y me fui a mi habitación a masturbame el ano primero de perrito como dijo que le gustaría darme, después de piernas abiertas mientras me la jalaba, el imaginar la situación donde ese hombre fuerte panza y sucio me tomará fuertemente por la caderas y me cogiera como mujer, terminé muy rápido porque estaban muy exitada.
Termine extasiada sobre la cama, en cuanto termine de descansar me cambié, ya faltaba poco para que mi familia regresara guarde todo y me fui a dormir, mi familia jamás supo que paso y creo que jamás lo sabrá, pero ese fue mi primer fin de semana como nena más adelante tuve otro pero se los contaré después.
Mi siguiente relato será sobre las veces que me atraparon y casi me atraparon
Como ya saben me desperté vestidita en lenceria como toda una puta.
Me levante me prepare la comida y me dispuse a lavar mi ropa (era domingo día de lavar ropa y además también debía lavar la lenceria de mi madre), pero se me ocurrió algo divertido qué tal si me ponía a lavar con ropa de mujer aunque sea de calle.
Así que lo hice busque una truza qué mi mamá ya no usará, no se algo que no se diera cuenta si le faltaba o algo así, y encontré justo lo que necesitaba un cachetero hasta el fondo de su cajón era de franjas rojas y negras me quedaba muy bien y resaltaba mi culto de nena, me miraba bien encalzonada, busque un brasier deportivo era negro algo desgastado y pero me ajustaba muy bien, de hecho hacia qué casi me desaparecieran mi tetitas de adolescente.
Mi madre tenia un par de pants deportivos de la marca bebe eran color rosa, me lo puse porque creí que era cómodo y sería algo que una mujer usaría para sus deberes del hogar y es lo que yo haría, todo iba bien desayune lave los platos y mi ropa espere para tender toda al sol y cuando salí al patio, creí que todo estaba bien, todo iba como uan nena perfecta hasta que de la nada escuche la voz de un hombre.
-Chiquita putita, qué bien te vez - escuche a la distancia.
Yo me quedé paralizada se me bajó la sangre y me dio una ereccion de golpe.
-Siguele haciendo tus cosas de nena maricon.
Regrese corriendo a casa y deje mi ropa afuera no sabía que había pasado ni quien me estaba hablando era una situación completamente nueva para mi, era la primera vez que alguien me veía vestido de mujer, estaba nerviosa y no sabía cómo actuar, asome la cabeza por la ventana y vi que se trataba de un albañil qué estaba trabajando en un edificio de departamentos nuevos a lado de mi casa.
-Ya salte ni te voy a hacer nada - Me dijo - nomas quiero verte niña, se trababa de un albañil de unos 50 años panzon, moreno y completamente sucio lleno de cemento - ya vente joto.
Yo no sabia que hacer pero tímidamente salí, aún vestido.
-No pues si estas bien rica puta.
No dije nada, pero me gustaba como me trataba, me excitaba.
-Qué? no hablas?
De nuevo no conteste.
-No pues no pasa nada, no te voy a hacer nada nomas quería verte... Porque ni me puedo saltar para cogerte - Había una reja con alambre de puaz qué no dejaba que se cruzará y solo podía verme desde la ventana en la que trabajaba - Me llamo Mariano y tu puto como te llamas?
-Me llamo Armando (No es mi nombre real ni en la historia ni en la vida real).
-Y que no hay nadie en tu casa? Porque te vistes así?
-Me gusta vestirme así.
-No pos esta bien, yo respeto eso, no hay pedo me gustan las jotas y los vestidos como tu, aprietan muy rico.
-Enserio? - Pregunte con sorpresa, no esperaba esa respuesta.
-Si la neta aprietan bien rico y pues se ve que tu también apretarías bien rico, cuantos años tienes?
-Quince - Respondió tímidamente.
-Mmju no pues si estarías super bien... Me vas a dejar cogerte? Me bajo y me meto a tu casa
Yo dude no supe que responder me quede paralizada congelada completamente.
-No pues supongo que no... Ta gueno.... Pero te puedo pedir un favor?
-Si? Pero no dira nada?
-Nombre si yo solo vine hoy a ayudar a un compadre, pero pues mira desde aquí vamos a hacer algo.
-Qué cosa?
-Vamos a jalarnosla.
-Como?
-Quítate la ropa dejame verte y date vueltas caliéntame.
Hice lo que me pidió me desnude poco a poco dejándole ver mi ropa interior aunque poco provocativas yo creía que era sexy.
-¿No tienes algo más cachondo?
-Si - Respondió y rápidamente fui a ponerme la ropa que tenia puesta antes de que el me viera, me puse la tanga las medias y el babydoll, además de las botas, camine lo mejor que pude para que me viera bien.
-Qué rico jotito, como me dan muchas ganas de cogerte - Me dijo mientras se veía el movimiento de su brazo - Date la vuelta quiero ver tus nalgas.
Yo obedecía y hacia todo lo que él me decía sin protestar, me dijo que me bajara la tanga y me abriera las nalgas y ahí fue cuando escuche que se vino.
Me pidió que me masrurbara también y eso hice me gustó mucho que alguien me viera hacerlo me encantó.
Me dijo que le gustaba cogerse jotitos y si eran jóvenes mejor, platicamos un poco mientras yo hacía mis cosas vestida en lenceria y el hacia las suyas, de repente me pedía que me desnudara y se la jalaba hasta que termino de hacer su trabajo y se fue.
Jamás volví a verlo pero me pregunte que hubiese pasado si hubiese podido cruzar a mi casa y cogerme.
Eso me calentó y me fui a mi habitación a masturbame el ano primero de perrito como dijo que le gustaría darme, después de piernas abiertas mientras me la jalaba, el imaginar la situación donde ese hombre fuerte panza y sucio me tomará fuertemente por la caderas y me cogiera como mujer, terminé muy rápido porque estaban muy exitada.
Termine extasiada sobre la cama, en cuanto termine de descansar me cambié, ya faltaba poco para que mi familia regresara guarde todo y me fui a dormir, mi familia jamás supo que paso y creo que jamás lo sabrá, pero ese fue mi primer fin de semana como nena más adelante tuve otro pero se los contaré después.
Mi siguiente relato será sobre las veces que me atraparon y casi me atraparon
1 comentarios - Mi domingo y el señor albañil