Como ya conté en su oportunidad, Mariana es mi traviesa favorita, su onda, sus besos, su pija que se pone dura altoque, hace que la visite seguido.
Una nochecita me escapé a su depto y estaba por cierto algo sudado. Llego, besito, ella de musculosa sin nada y shortcito.
Pasamos al baño y mientras ella hacía pis, le pedi permiso para ducharme. me desnudé y yo tenía una erección importante. Solo fue cuestion de segundos que Mariana ya estaba en la ducha, pasandome el jabon y perdiendo su lengua dentro de mi boca. Beso sus pechos mientras ella toma mi pija y la frota contra la suya y busco su agujero para que entre mi dedo. Nos estábamos masturbando entre nosotros hasta que ella me pidio que me arrodille ante su poronga. Así lo hice y recibí una lluvia dorada que se confundía con la lluvia de la ducha, me sentía tan sucio...
Salimos de la ducha enjabonados, a lo cual Mariana se puso el forrito y me cogió, mientras con la otra mano me seguía pajeando hasta que acabé en su mano, la cual tuve que lamer. Otro poco de mi leche la puso sobre su pija y siguió garchándome. Se salío y se sacó el forro, me dio vuelta y acabó sobre mi pubis.
Nos quedamos tirados en la cama, mojados y sucios, por lo que, tras un beso largo con gusto a semen, volvimos a la ducha, algo mas tranquilos. Fue hermoso despues verla con la toalla alrededor. Se la saqué y comencé a chuparsela. Mas tarde la cogí. Luego nos vestimos y fue muy excitante verla cambiarse. Ahi solo pude pajearme. Disfruto de ella a full
Una nochecita me escapé a su depto y estaba por cierto algo sudado. Llego, besito, ella de musculosa sin nada y shortcito.
Pasamos al baño y mientras ella hacía pis, le pedi permiso para ducharme. me desnudé y yo tenía una erección importante. Solo fue cuestion de segundos que Mariana ya estaba en la ducha, pasandome el jabon y perdiendo su lengua dentro de mi boca. Beso sus pechos mientras ella toma mi pija y la frota contra la suya y busco su agujero para que entre mi dedo. Nos estábamos masturbando entre nosotros hasta que ella me pidio que me arrodille ante su poronga. Así lo hice y recibí una lluvia dorada que se confundía con la lluvia de la ducha, me sentía tan sucio...
Salimos de la ducha enjabonados, a lo cual Mariana se puso el forrito y me cogió, mientras con la otra mano me seguía pajeando hasta que acabé en su mano, la cual tuve que lamer. Otro poco de mi leche la puso sobre su pija y siguió garchándome. Se salío y se sacó el forro, me dio vuelta y acabó sobre mi pubis.
Nos quedamos tirados en la cama, mojados y sucios, por lo que, tras un beso largo con gusto a semen, volvimos a la ducha, algo mas tranquilos. Fue hermoso despues verla con la toalla alrededor. Se la saqué y comencé a chuparsela. Mas tarde la cogí. Luego nos vestimos y fue muy excitante verla cambiarse. Ahi solo pude pajearme. Disfruto de ella a full
5 comentarios - Historias con chicas trans: Mariana, otra vez