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Me doy el gusto con Naty

(Las fotos son ilustrativas, la nena es muy parecida a Naty)

Realmente era lindísima. Menudita, flaquita, piel morena, bonita cara de nena, pelo negro hasta la cintura, nariz chiquita, ojos marrones grandes, boca pequeña de labios carnosos.
Me recibió en su departamento vestida con un baby doll negro, corpiño y tanga, arriba de tacos aguja. Al acercarse para darme un beso se le abrió un poco la prenda y le miré las tetas. Eran preciosas, duritas, con pezones paraditos.

Me tomo de la mano y llevó hasta un sillón. Al sentarme, ya tenía la pija dura. Naty se sentó a mi lado y puso su mano en el bulto, al mismo tiempo que me besó. Busqué con mis manos y boca sus tetas.

- Esperá…, no te apurés, tengo mucho para darte… Pero primero voy a traer un vino para brindar -dijo.

Al levantarse y caminar seductoramente hacia la cocina contemplé su cola. Era para delirar: levantada, firme, redonda. Todo su cuerpo era maravilloso, la chica más hermosa con la que había estado un hombre de 48 años.
Una preciosa trans, de 20 años.

La había conocido por Facebook dos meses atrás. En la tercera charla me mandó fotos de ella, desnuda. Yo le envié las mías, y dijo que le encantaba mi pija grande, de hombre maduro. Le conté que deseaba estar con una trans, para sentirla como mujer con pija.
Me doy el gusto con Naty

Y estaba en su casa. Naty regresó, se acomodó junto a mí y brindamos. Tras un trago, busco mi boca y comenzó a besarme. ¡Fue impresionante! Entre su aliento dulce, lengua recorriendo paladar, encías; dientes mordiendo mis labios y lengua, maravilloso modo, me excitaron al máximo. Ella tocó mi bulto, abrió mi bragueta y saltó mi pija.
- ¡Qué lindo pedazo! –exclamó. Y se agachó para tragársela.
Toda su habilidad besando se trasladó a mi pene.
Al advertir que estaba cerca de acabar, la aparté.
- Nena, quiero verte, completa… Acordate lo que te conté… -sostuve.

pete
En nuestras largas charlas por internet le había confesado mi deseo de coger con una transexual como ella: linda, jovencita, delgada, femenina en todo, pero con pija. Naty me preguntó si ya había probado o me masturbado mirando trans. En lo primero dije no, y por lo segundo, muchas veces. Al requerirme como me pajeaba, le describí que usaba todas las variantes, entre las que prefería ponerme tangas, embardunarme con aceite desde el ombligo hasta las rodillas, sentarme sobre zanahorias, comerme las acabadas.

pendeja
Desde entonces, me mandó cinco videos, tres pajeándose por el culo y pija, y dos cogiendo. Además de disfrutar a la preciosa Naty, deliraba con su verga: larga, gorda, con bolas depiladas.
- Me acuerdo, y de tu rica pija, que me ibas a coger y comerme mi pedazo… ¿Seguís queriendo lo mismo? – preguntó la pendeja.
- Si mi amor…

pija
Naty giró su cuerpito para mostrarme su colita sabrosa y moverla, a treinta centímetros de mi rostro. Sin doblar las rodillas, la putita se agachó, y lentamente fue bajándose la tanguita. Entonces admiré como el hermoso culito continuaba en una bonita poronga.
- Si te gusta, demostralo… -susurró la nena.
Empecé lamiendo sus nalgas morenas, mientras mis dedos corrieron hacia la pija. Ella gimió. Entonces me animé y se la agarré con mi mano derecha.
Naty se paró y dio vuelta, apuntándome con su pedazote.
- Comela…
Y la tragué.

chupar
Notar como latía dentro de mi boca, sentir el glande en mi lengua me excitó al máximo. Bajé mis pantalones, quedando en tanga, con mi pija saliendo por el costado. Y seguí chupando. Ella me levantó, tomó mis nalgas y puso sus labios en los míos, metiéndome su lengua hasta mi garganta.
Naty se acostó sobre el sillón y me atrajo hacia su cuerpito adolescente. Apoyé mi pija sobre la suya. ¡Qué placer! Las dos erectas, duras, mojadas, mientras mi lengua, labios y manos recorrieron sus pechos, ombligo, axilas. Bajé nuevamente hasta su polla, la chupé lentamente, deleitándome con cada vena, con cada centímetro de su miembro, mientras escuchaba sus gemidos.
- Papi, voy a acabar… ¿Querés probar mi lechita…?
- ¡¡¡Si!!!

gay
Apenas contesté, la preciosa nena con pija empezó a largar su leche dentro de mi boca. El jugo caliente, espeso, rico, lo tragué en parte, y algo se escurrió por mis labios. Naty chillaba de placer.
(Continúa)

7 comentarios - Me doy el gusto con Naty

fuko99 +1
rica historia amigo
cyberdax +2
Que ganas de chupar una buena pija!!!
fl22lf +1
tremenda japi me volvio loco
tujovenamigo +1
Muy buen relato, que continúe por favor!
come-trabas +1
Me encantó, me dejaste la poronga a mil.
gjf_10 +1
Muy buen relato! Se puede contactar a Naty?