El día que le partí el culo a mi amante !!
Ese día llegamos a la fría capital de mi país , era un día soleado y yo llevada días sin verlo sin tenerlo sin olerlo, teníamos el tiempo para ir y devorarlo, ya que estábamos solos en el apto ya que la roomie no se encontraba ahí, dije hoy es el día !!Me dirigí a la droguería y compré un lavado rectal ya que yo quería que ese día me partiera el culo (debo decir que me encanta cuando lo hace), me excita mucho verle la cara de maldad que pone, me moja al 100%. Por fin llegamos al apto y de inmediato me puse el lavado para disfrutar. Al salir del baño el ya se encontraba desnudo y con su polla como me gusta -dura y levantada esperándome para atender mis enormes ganas de placer-. Nose si él tenía las mismas ganas, pero yo solo quería disfrutar …..
Lentamente me acosté encima de él y bajé hasta su verga palpitando, que solamente con verla me mojaba y sentía como mi vagina goteaba por tenerla adentro. Como estábamos solos, me tomé el tiempo de disfrutar al máximo. Empecé a tocarlo y a besarlo, me encanta mamárselo hasta el fondo, y su verga bota líquido delicioso el cual unto siempre en mis senos. En medio de eso me unté un aceite en mi culo para que no me doliera tanto y empecé a masajearlo, pero mientras tanto ya no aguanté y me senté encima de él penetrándome al tiempo que empezó a acariciar mis senos - esto es lo que más me pone cachonda - y a chuparlos así como solo él lo sabe hacer. Mi respiración se agitaba mientras me penetraba delicioso con sus movimientos a ritmo con los míos que me hacían sentir una excitación única haciéndome venir un par de veces, ya que soy multiorgásmica, y yo perdí el control sobre mi.... hasta el punto de querer seguir sin parar hasta donde me dan mis fuerzas.
Yo gemía y gemía, y el seguía acariciando mis senos deliciosos, lo cual me pone a mil y en medio del acto le pido que se deje aplicar mi aceite para yo también meterle los dedos y hacerlo gemir ….. y oh sorpresa me dice que sí y yo dije ohhhh es mi momento de verlo a plenitud.
Le unté aceite en la cola, y mientras hacía efecto el me puso en cuatro para partirme el culo a mi, lo cual gustosa yo accedí. El empezó a penetrarme lentamente y cada vez más fuerte, lo cual me hacía gritar de placer, yo mordía la sábana para poder resistir la dureza de sus embestidas. Duramos tal vez 5 o 10 minutos, él partiéndome el culo hasta que dije. es mi turno de desquitarme contigo.
En ese momento, el se acostó boca arriba y yo bajé a besarlo y acariciarlo. debo decir que por lo general él casi nunca gime, lo cual cuando lo hace me pone a reventar. En ese momento empiezo a meterle el dedo mientras le chupaba el culo y empieza a gemir real, empieza a pedir más, se imaginan como estaba mi vagina empapada de líquido acuoso y leche , me pedía que no parara lo que me excitaba más. Eso de chuparle el culo es lo más delicioso que hay en la vida con respecto al sexo, sentir su respiración agitada y uno que otro gemido que salía de su boca me calentaban más, siento que cada vez que le penetraba el culo me salía más leche, mi clítoris se pone duro y grande como si yo también tuviera con que hacerlo gemir. Esa noche fue fantástica, logre partirle el culo a mi amante y yo disfruté como nunca ese momento.
Mientras más penetraba su culo más me venía en leche, mis pezones cada vez más duros y sensibles, es una sensación que es difícil de explicar pero me encanta cuando los dos nos dejamos llevar por el placer, la lujuria, la excitación y solo somos nosotros disfrutando nuestros cuerpos ……
1 comentarios - Vaya enculada aquel día, que felicidad