Era una noche de verano de terror, hacia un calor insoportable. Fui a la heladera, me abri una cerveza, estaba helada, me la empecé a pasar por el cuello, ese frío me hizo temblar, pero seguí pasandome la botella.
Me la pasé por las tetas y automáticamente los pezones se me pararon, muy duros, la sensación era divina. Seguí bajando y me pasé la botella por los labios de la concha, el contacto con ese frío, me puso a mil.
Me fui al cajón de los juguetes, saqué un consolador negro, que tiene la cabeza bien definida, me lo metí un poco, pero era tanta la calentura que tenía, que me pajee con el hasta acabar.
Me puse una camisa que deje abierta, abrí otra cerveza y me acosté en el sillón que está en el balcón. Puse música y estaba ahí disfrutando el viento que corría, cuando miro al edificio de enfrente y veo que había un tipo masturbándose. Apagué la luz para poder espiarlo in que me viera, encendí un cigarrillo y me dediqué a disfrutar de espiarlo. Creía que el no me veía, se pajeaba lento y se acercaba a la baranda cada vez más.
Pensé, se está pajeando para mi? La idea me excitaba mucho...
Llegó al borde del balcón y empezó a refregar su pija por el vidrio, creía que me miraba y siguió tocándose despacio.
De repente veo como el vidrio se llena de leche y como temblaba del orgasmo que tenía. Empecé a tocarme otra vez y veo que me hace señas. Paré y me quedé mirándolo.-Vení, me gritó.
Que hago? No lo conozco, me da un poco de miedo. Entré a mi dormitorio y me quedé ahí pensando que hacer. Es mi vecino, no va a hacerme nada, me cruzo, o mejor no, me quedo acá haciendome una paja.
Volví a agarrar el consolador y me lo metí hasta quedarme dormida.
Al día siguiente, voy al supermercado y mientras iba por las góndolas comprando, siento que me dicen -Qué pasó, te dió miedo?
Me doy vuelta y veo a mi vecino de enfrente. Toda colorada, le digo-No, que se yo, si...
-Te propongo algo, hoy a las 3, voy a hacerme una paja para que vos me veas y si queres, podes hacerte una paja para mi.
-Bueno, no sé, gracias
Fui a la caja, pagué rápido para poder irme. Ni quise darme vuelta para ver si me estaba mirando.
A la noche me puse a mirar una serie, me re enganché, miro la hora, eran las 2.45....voy a seguir mirando la serie, no voy a salir a ver a este tipo.
Obviamente a las 3, estaba detrás de la cortina a ver si salía. Estaba ahí, solo con un jean puesto.
Salí, se bajó el cierre y empezó a pajearse. Que calentura me dió. Tomé un consolador de esos que tienen sopapa, lo puse en el vidrio, abrí las cortinas y encendí la luz.
Quería que me viera como me lo metía todo. Me desnudé , miré enfrente y me lo metí todo, me lo iba clavando y me daba vuelta para verlo. Había dejado de pajearse y solo me estaba mirando.
Seguí, estaba cada vez más caliente, quería sentir esa pija dentro mío, no solo verla de lejos.
Me doy vuelta y no estaba en el balcón. Me quedé mirando, cuando suena el timbre.
Atiendo el portero y me dice -Acá estoy, si querés baja.
Me tiré una bata encima, subí al ascensor y bajé. Le abrí la puerta y nos besamos como locos. Subimos al ascensor y empezó a meterme mano por todos lados. Paró el ascensor y agachándose, puso una de mi piernas sobre su hombro y me empezó a chupar. Que bien lo hacía, me metía la lengua despacito, me mordía el clítoris, me metía toda la lengua adentro, la sacaba, volvía a morderme.
Lo corrí y lo apoyé contra la pared del ascensor y le bajé el cierre: obviamente calle por medio no pude ver el tamaño de pija que tenía, era inmensa, tenía unos huevos bien grandes y sin un pelo.
Me metí la cabeza en la boca y la fui tragando despacito, quería disfrutar de esa verga toda para mí.
Intenté metermela más profundo, pero no me entraba, tiraba la cabeza para atrás a ver si podía y nada, era demasiado para mi.
Apoyandome contra el espejo del ascensor me dice -Quiero ver por el espejo como gozas cuando te la ponga entera. Me incliné un poco y poniendo mi mejor cara de puta, jadeaba, me empujaba contra su pija, el me agarraba del pelo para metermela mejor.
Estaba tan bien cogida, esa pija me estaba reventando, pero estaba tan caliente, que me la aguantaba toda.
-Yo sabía que ibas a coger así, hace meses que veo como te pajeas, andas en bolas por toda la casa. Me calentaste tanto que me compré un telescopio para verte mejor.
Lo miré sorpendida, me había calentado tanto lo que me dijo, que acabé en ese momento. Apreté el botón para destrabar el ascensor y marqué mi piso.
Abrí la puerta y me tiró sobre el piso, me abrió las piernas y volvió a chuparme la concha desesperado. Cada tanto, me rozaba el culo con la lengua.
Levantó mis piernas y poniendoselas al hombro me clavo esa pija enorme. Aunque estaba toda mojada, sentía como me abría, me daba unos pijazos terribles.
Yo solo quería más, me apretaba las tetas, me pellizcaba los pezones, me los empecé a chupar y el seguía cogiendome como loco.
Bajandome las piernas me la sacó y me dijo te quiero llenar la cara de leche, hace meses pienso como quedarías con mi leche chorreandote por tu cara
Se la meneó unas veces y sentí el primer chorro en mi cara-Dejá que te chorree, decía, que caiga en tu boca y sacá la lengua para lamertela.
No solo me la lamí, sino que me la pasé por las tetas. -Perdón, no me pude aguantar, ahora te voy a hacer gozar a vos.
Me metió dos dedos en la concha mientras me chupaba el clítoris, sacó sus dedos y me metío la lengua, siguió hasta mi culo y me chupaba haciendo círculos sobre el agujerito. Volvió a meterme los dedos y cuando empecé a acabar, cubrió mis gritos besandome.
Nos quedamos en el piso y me dijo -Que maleducado soy, nunca me presenté. Soy Carlos
Me reí y le dije -Soy Caro
Fuimos a la cocina y saqué una cerveza para cada uno. Encendí un pucho, me lo sacó de los dedos y se lo puso en la boca, encendí uno para mi y riendome le dije -Contame lo del telescopio
Me contó que hacía 3 meses se había mudado, que un día me vió como había llegado y me había desnudado con las cortinas abiertas, se quedó espiandome y vió como me había pajeado en el sofá. Al día siguiente se quedó esperando. Vió como me había cogido a mi amante. Ahí decidió comprarse el telescopio. Lo dejó en su living, detrás de la cortina para poder ver lo que hacía.
Pese a que debía haberme sentido molesta por esa invasión, me calenté más. Pensaba en todas las veces que me habría visto coger, y le dije -Te gusta espiar? -Sí, más que obvio -Mañana, llamo a mi amante para que me veas como me lo cojo. A las 11, ponete a espiar -Me vas a dedicar una cogida? -Si, y después que se vaya, vas a venir a cogerme vos.
Se le volvío a poner dura, cogimos otra vez, pero ya estaba pensando en mañana.
Llamé a Lucio por la mañana invitandolo a venir a la noche. Me puse un body bien cavado y muy profundo metido en el culo, Lu entró, lo puse sobre el respaldo del sillón y me agaché a chuparsela. El quería cogerme, pero yo quería q me ensuciara la cara de leche para que Carlos me viera.
Se la escupía, me la metía toda en la boca, le mordía la cabeza, me metía los huevos en la boca, mientras lo pajeaba, cuando noté que estaba por acabar, me puse de perfil así mi vecino veía mi cara llena de leche
Se quedó un rato más y le dije que tenía que levantarme temprano para que se fuera.
Salí desnuda al balcón y le hice señas para que viniera. Diez minutos después tocaba el portero.
-Como me pusiste, saber que lo hacías para que te viera me volvió loco. Fuimos al dormitorio y bajandose el cierre, me la puso en la boca, me la metí casi toda, esta vez no fue suave, me estaba cogiendo la boca, no paraba, me ahogaba con cada embestida, me agarraba de la cabeza me la metío toda, como me ahogaba, se quedaba quieto y volvía a empezar. Empecé a chuparla más rápido y me paró.
-Quiero probar otra cosa. Me puso boca abajo, abrió mis piernas y me abrío el culo con su lengua. Me chupaba bien adentro, me metía un dedo, volvía a chupar y me ponía otro dedo, volvío con su lengua y me metío otro dedo más
-Ahora si estas lista. Me metío la cabeza y sentí dolor, se dío cuenta, me la sacó un poco y me la refregaba, Volvío a probar y entró la cabeza, la sacó, me la frotó contra el culo, volvío a meter la punta, volvió a entrar un poco más.
Así estuvo un rato y pese a que me dolía, quería sentirla toda. Se acomodó nuevamente, entro la mitad y ya completamente sacada le dije -La quiero toda, sentí como entraba, como sus huevos me golpeaban el culo y solo podía gemir y decirle -No pares de cogerme
Empujaba más y más fuerte, yo me pajeaba mientras, hasta que sentí chorros dentro.
Seguía con tantas ganas que le pedí que me la chupara otra vez, metiendome los dedos y chupandola, me hizo acabar.
Nos terminamos haciendo amigos y calentandonos de balcón a balcón. Ahora quiero verlo a el cogiendose a alguien, voy a tener que comprarme un telescopio
Me la pasé por las tetas y automáticamente los pezones se me pararon, muy duros, la sensación era divina. Seguí bajando y me pasé la botella por los labios de la concha, el contacto con ese frío, me puso a mil.
Me fui al cajón de los juguetes, saqué un consolador negro, que tiene la cabeza bien definida, me lo metí un poco, pero era tanta la calentura que tenía, que me pajee con el hasta acabar.
Me puse una camisa que deje abierta, abrí otra cerveza y me acosté en el sillón que está en el balcón. Puse música y estaba ahí disfrutando el viento que corría, cuando miro al edificio de enfrente y veo que había un tipo masturbándose. Apagué la luz para poder espiarlo in que me viera, encendí un cigarrillo y me dediqué a disfrutar de espiarlo. Creía que el no me veía, se pajeaba lento y se acercaba a la baranda cada vez más.
Pensé, se está pajeando para mi? La idea me excitaba mucho...
Llegó al borde del balcón y empezó a refregar su pija por el vidrio, creía que me miraba y siguió tocándose despacio.
De repente veo como el vidrio se llena de leche y como temblaba del orgasmo que tenía. Empecé a tocarme otra vez y veo que me hace señas. Paré y me quedé mirándolo.-Vení, me gritó.
Que hago? No lo conozco, me da un poco de miedo. Entré a mi dormitorio y me quedé ahí pensando que hacer. Es mi vecino, no va a hacerme nada, me cruzo, o mejor no, me quedo acá haciendome una paja.
Volví a agarrar el consolador y me lo metí hasta quedarme dormida.
Al día siguiente, voy al supermercado y mientras iba por las góndolas comprando, siento que me dicen -Qué pasó, te dió miedo?
Me doy vuelta y veo a mi vecino de enfrente. Toda colorada, le digo-No, que se yo, si...
-Te propongo algo, hoy a las 3, voy a hacerme una paja para que vos me veas y si queres, podes hacerte una paja para mi.
-Bueno, no sé, gracias
Fui a la caja, pagué rápido para poder irme. Ni quise darme vuelta para ver si me estaba mirando.
A la noche me puse a mirar una serie, me re enganché, miro la hora, eran las 2.45....voy a seguir mirando la serie, no voy a salir a ver a este tipo.
Obviamente a las 3, estaba detrás de la cortina a ver si salía. Estaba ahí, solo con un jean puesto.
Salí, se bajó el cierre y empezó a pajearse. Que calentura me dió. Tomé un consolador de esos que tienen sopapa, lo puse en el vidrio, abrí las cortinas y encendí la luz.
Quería que me viera como me lo metía todo. Me desnudé , miré enfrente y me lo metí todo, me lo iba clavando y me daba vuelta para verlo. Había dejado de pajearse y solo me estaba mirando.
Seguí, estaba cada vez más caliente, quería sentir esa pija dentro mío, no solo verla de lejos.
Me doy vuelta y no estaba en el balcón. Me quedé mirando, cuando suena el timbre.
Atiendo el portero y me dice -Acá estoy, si querés baja.
Me tiré una bata encima, subí al ascensor y bajé. Le abrí la puerta y nos besamos como locos. Subimos al ascensor y empezó a meterme mano por todos lados. Paró el ascensor y agachándose, puso una de mi piernas sobre su hombro y me empezó a chupar. Que bien lo hacía, me metía la lengua despacito, me mordía el clítoris, me metía toda la lengua adentro, la sacaba, volvía a morderme.
Lo corrí y lo apoyé contra la pared del ascensor y le bajé el cierre: obviamente calle por medio no pude ver el tamaño de pija que tenía, era inmensa, tenía unos huevos bien grandes y sin un pelo.
Me metí la cabeza en la boca y la fui tragando despacito, quería disfrutar de esa verga toda para mí.
Intenté metermela más profundo, pero no me entraba, tiraba la cabeza para atrás a ver si podía y nada, era demasiado para mi.
Apoyandome contra el espejo del ascensor me dice -Quiero ver por el espejo como gozas cuando te la ponga entera. Me incliné un poco y poniendo mi mejor cara de puta, jadeaba, me empujaba contra su pija, el me agarraba del pelo para metermela mejor.
Estaba tan bien cogida, esa pija me estaba reventando, pero estaba tan caliente, que me la aguantaba toda.
-Yo sabía que ibas a coger así, hace meses que veo como te pajeas, andas en bolas por toda la casa. Me calentaste tanto que me compré un telescopio para verte mejor.
Lo miré sorpendida, me había calentado tanto lo que me dijo, que acabé en ese momento. Apreté el botón para destrabar el ascensor y marqué mi piso.
Abrí la puerta y me tiró sobre el piso, me abrió las piernas y volvió a chuparme la concha desesperado. Cada tanto, me rozaba el culo con la lengua.
Levantó mis piernas y poniendoselas al hombro me clavo esa pija enorme. Aunque estaba toda mojada, sentía como me abría, me daba unos pijazos terribles.
Yo solo quería más, me apretaba las tetas, me pellizcaba los pezones, me los empecé a chupar y el seguía cogiendome como loco.
Bajandome las piernas me la sacó y me dijo te quiero llenar la cara de leche, hace meses pienso como quedarías con mi leche chorreandote por tu cara
Se la meneó unas veces y sentí el primer chorro en mi cara-Dejá que te chorree, decía, que caiga en tu boca y sacá la lengua para lamertela.
No solo me la lamí, sino que me la pasé por las tetas. -Perdón, no me pude aguantar, ahora te voy a hacer gozar a vos.
Me metió dos dedos en la concha mientras me chupaba el clítoris, sacó sus dedos y me metío la lengua, siguió hasta mi culo y me chupaba haciendo círculos sobre el agujerito. Volvió a meterme los dedos y cuando empecé a acabar, cubrió mis gritos besandome.
Nos quedamos en el piso y me dijo -Que maleducado soy, nunca me presenté. Soy Carlos
Me reí y le dije -Soy Caro
Fuimos a la cocina y saqué una cerveza para cada uno. Encendí un pucho, me lo sacó de los dedos y se lo puso en la boca, encendí uno para mi y riendome le dije -Contame lo del telescopio
Me contó que hacía 3 meses se había mudado, que un día me vió como había llegado y me había desnudado con las cortinas abiertas, se quedó espiandome y vió como me había pajeado en el sofá. Al día siguiente se quedó esperando. Vió como me había cogido a mi amante. Ahí decidió comprarse el telescopio. Lo dejó en su living, detrás de la cortina para poder ver lo que hacía.
Pese a que debía haberme sentido molesta por esa invasión, me calenté más. Pensaba en todas las veces que me habría visto coger, y le dije -Te gusta espiar? -Sí, más que obvio -Mañana, llamo a mi amante para que me veas como me lo cojo. A las 11, ponete a espiar -Me vas a dedicar una cogida? -Si, y después que se vaya, vas a venir a cogerme vos.
Se le volvío a poner dura, cogimos otra vez, pero ya estaba pensando en mañana.
Llamé a Lucio por la mañana invitandolo a venir a la noche. Me puse un body bien cavado y muy profundo metido en el culo, Lu entró, lo puse sobre el respaldo del sillón y me agaché a chuparsela. El quería cogerme, pero yo quería q me ensuciara la cara de leche para que Carlos me viera.
Se la escupía, me la metía toda en la boca, le mordía la cabeza, me metía los huevos en la boca, mientras lo pajeaba, cuando noté que estaba por acabar, me puse de perfil así mi vecino veía mi cara llena de leche
Se quedó un rato más y le dije que tenía que levantarme temprano para que se fuera.
Salí desnuda al balcón y le hice señas para que viniera. Diez minutos después tocaba el portero.
-Como me pusiste, saber que lo hacías para que te viera me volvió loco. Fuimos al dormitorio y bajandose el cierre, me la puso en la boca, me la metí casi toda, esta vez no fue suave, me estaba cogiendo la boca, no paraba, me ahogaba con cada embestida, me agarraba de la cabeza me la metío toda, como me ahogaba, se quedaba quieto y volvía a empezar. Empecé a chuparla más rápido y me paró.
-Quiero probar otra cosa. Me puso boca abajo, abrió mis piernas y me abrío el culo con su lengua. Me chupaba bien adentro, me metía un dedo, volvía a chupar y me ponía otro dedo, volvío con su lengua y me metío otro dedo más
-Ahora si estas lista. Me metío la cabeza y sentí dolor, se dío cuenta, me la sacó un poco y me la refregaba, Volvío a probar y entró la cabeza, la sacó, me la frotó contra el culo, volvío a meter la punta, volvió a entrar un poco más.
Así estuvo un rato y pese a que me dolía, quería sentirla toda. Se acomodó nuevamente, entro la mitad y ya completamente sacada le dije -La quiero toda, sentí como entraba, como sus huevos me golpeaban el culo y solo podía gemir y decirle -No pares de cogerme
Empujaba más y más fuerte, yo me pajeaba mientras, hasta que sentí chorros dentro.
Seguía con tantas ganas que le pedí que me la chupara otra vez, metiendome los dedos y chupandola, me hizo acabar.
Nos terminamos haciendo amigos y calentandonos de balcón a balcón. Ahora quiero verlo a el cogiendose a alguien, voy a tener que comprarme un telescopio
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