Todo comenzó una noche de verano, estaba solo en casa, mi esposa había salido para festejar el cumpleaños de una de sus amigas, así que volvería tarde. Eran como las 7 de la noche y ese día en especial andaba muy caliente. Siempre me ha gustado el exhibicionismo; desde la secundaria me gustaba estar en mi cuarto completamente desnudo, obvio si salían mis padres de casa pa pronto me despojaba de lo que trajera para pasearme por mi casa sin ropa, claro abría las persianas del cuarto esperando que alguno de los vecinos se percatara de mi atrevimiento, yo creo que nunca se dieron cuenta, pero me excitaba mucho el pensar que podían verme.
Hoy después de muchos años aún sigo disfrutando de la desnudez, aunque cada vez se ha vuelto más difícil (por los hijos) pero tan pronto tengo oportunidad me encanta andar sin ropa. En fin, la historia que hoy les traigo sucedió hace ya algunos años con una vecina que me llevó a experimentar nuevos placeres.
Esa noche mi esposa se despidió con un beso, me dijo - pórtate bien, yo le sonreí con una sonrisa picara, ella bien sabía que tan pronto se fuera me iba a quitar la ropa para masturbarme viendo porno, pero ni de ley se imaginaba lo que tenía en mente para esa noche.
Ese día (mientras ella estaba en su trabajo) me dediqué a depilar mi cuerpo, siempre me ha gustado andar sin vellos (más allá en la zona genital), ojo, nunca he sido un macho alfa de esos con un cuerpo espectacular al contrario desde que me casé subí de peso, pero por alguna razón a la vecina le parecí un hombre deseable.
Ya hace tiempo la venía saludando, ella llamó mi atención un día de mucho calor, yo barría la cochera de mi casa y ella lavaba su coche con una camiseta corta y unos shorts que dejaban poco a la imaginación, desde ese día me propuse tratar de conocerla.
Con el tiempo pasamos del saludo a entablar platica; ella es una mujer muy atractiva, blanca, con unas chichis enormes y unas piernas muy torneadas por sus clases de spinning, sí eso sí, con algo de pancita (pero eso es lo de menos), en ese entonces yo tenía unos 33 años y ella unos 42, ambos estábamos casados, pero ella tenía una relación abierta con su esposo, pues le cacho una infidelidad y estaban en el proceso de divorciarse.
Nunca me propasé con ella, solo me limitaba a saludarla o una ligera platica, yo solo la veía como la vecina (atractiva) hasta que un día afuera de nuestras casas ella me saludó y me preguntó por mi esposa, que a qué se dedicaba, pero donde cambió la cosa fue cuando preguntó que si tenía una relación abierta con mi esposa, le dije - abierta, ¿cómo? y ahí me di cuenta que ella observaba mis movimientos.
Por razones de seguridad le cambiaré el nombre, me referiré a ella como Montserrat.
M: Es que me doy cuenta que por las mañanas cuando tu esposa no está… vienen chicas y… (ligera pausa) chicos a tu casa yyyyyy… pues uno piensa mal cuando se tardan más de dos horas contigo allá adentro
Yo me sonreí (sonrisa nerviosa), no sabía si contarle pero algo me hizo confiar en ella, así que le pedí mucha discreción.
R: Quizá me taches de loco, pero desde hace mucho tiempo vengo haciendo sesiones de exhibicionismo aquí en mi casa
M: Exhibicionismo ¿cómo? No entiendo
R: Sí (pausa), yo soy exhibicionista, me encanta mostrarme desnudo frente a la gente
Ella tenía una cara de, no mames, no te creo… y sí me lo dijo
M: No te creo ¿me estas choreando?
R: No para nada, te lo juro, si por mi fuera en este momento estaría desnudo frente a ti aquí en la calle (silencio). No sé qué me pasa, pero me excita mucho estar desnudo frente a extraños
M: ¿Y qué hacen en esas sesiones? (ella trataba de indagar más)
R: Pues mira desde hace tiempo tengo un anuncio en un sitio de contactos donde busco chicas y chicos que les gusté el exhibicionismo, y cuando encuentro alguien les invitó a pasar un rato en mi casa. La idea es andar sin ropa; con algunos me tomo un café, con otros vemos porno… digo cada sesión es diferente, pero eso sí, solo es exhibicionismo, para nada se vale tocar al de enfrente o sexo entre nosotros.
M: Que loco ¿y tu esposa lo sabe?
R: Sabe que me encanta la desnudez, en días de mucho calor me gusta dormir desnudo y ella también lo ha hecho aunque no le late mucho, pero noooo, no sabe que me veo con otra gente para desnudarnos
M: ¿Oye, pero entonces eres gay? ¿O porqué invitas hombres?
R: Jeje (sonrisa nerviosa), mira la verdad es que al que le gusta mostrarse desnudo le da igual si lo ve un hombre o una mujer, para el caso es lo mismo, aunque te soy sincero no me disgusta ni me da miedo ver a un chico desnudo, de hecho, también me excita, digo yo no tengo pedo con verle la verga a un chico o las chichis o panocha a las chicas, simplemente me excita verlos y sentirme observado
M: Orale que rico… suena muy provocador y muy cachondo
R: Sí, es muy cachondo, me encanta sentirme observado por alguien desconocido (PAUSA LARGA) ¿cómo ves, te gustaría probar algún día? Obvio, si te deja tu esposo
M: Yo creo que sí lo haría y sobre mi esposo, no te preocupes por él, la verdad me estoy separando y puedo hacer lo que quiera, mientras no se enteren nuestros hijos
R: Ok, pues entonces quedas invitada a una de mis sesiones, pero ojo, es andar totalmente desnudos, la verdad si me gustaría verte sin ropa y que tú me vieras a mí.
Ella esbozó una ligera sonrisa, algo sonrojada.
Los días pasaron y un par de meses también, hasta que un día que iba saliendo de casa me abordó
M: Oye, me dejaste esperando con lo del exhibicionismo, nomás ya no me buscaste
R: Sí lo sé, perdón, estaba buscando el momento ideal, pero qué te parece este viernes, mi esposa va salir con unas amigas y yo me voy a quedar solo unas cuatro o cinco horas ¿cómo ves?
M: Va, cuenta conmigo… pero no me vayas a quedar mal, la verdad sí me excitó mucho lo que me platicaste.
R: Sí no te preocupes, pero antes estaría chido un juego previo ¿cómo ves si todos los días por las mañanas me mandas fotos tuyas totalmente desnuda y yo te comparto unas fotos totalmente desnudo ¿cómo ves?
M: Me da algo de pena, pero si tu me mandas una foto totalmente desnudo cuenta que yo también te mandaré
Y sí, al día siguiente me estaba mandando fotos totalmente desnuda con un dildo enorme en su vagina, yo me prendí mucho y solo pensaba en que ya pasaran los días para verla el viernes, lo que me resultó extraño es que me dijo que me iba a presentar a su señor dildo en persona, cosa que me puso un poco nervioso pues para que iba a querer yo semejante juguetote negro y venudo.
Total, que se llegó el viernes, escuche que mi esposa encendía el auto y salía de la cochera, esperé unos 10 minutos y le hable por teléfono a la vecina
R: Ya se fue mi esposa, cuando quieras venir, ya estoy totalmente desnudo
M: Ya salgo para allá ¿oye te gusta la lencería? ¿vaya las tangas?
R: Sí claro, le contesté
M: Tengo unas para ti, yo creo que si te quedan
Yo me quedé pensativo con lo que me dijo y le dije…
R: No pasa nada, lo que hagamos solo queda entre nosotros, y mientras sea para aumentar el erotismo, nos ponemos de acuerdo, ntp
M: Te va encantar, hay voy
Después de eso escuché el timbre de la casa, literalmente solo tenía que cruzar la calle y ya estaba aquí, le abrí la reja (automática) y entró a la cochera
Tocó la puerta y le abrí, yo estaba en una bata blanca la cual tan pronto cerré la puerta me quité para quedar totalmente desnudo frente a ella, mi verga ya estaba a mil, nunca he batallado para que se me paré.
Al voltear a verme se dio cuenta que efectivamente ya estaba totalmente desnudo y con la verga bien dura, y no dudo en voltear a verme el paquete, que no es la mamada en lo largo pero sí en lo ancho, cuando la vio me dijo.
M: A no manches tu verga es casi igual al grosor de mi señor dildo, la tienes bien gruesa
Yo me reí y le dije
R: A tus órdenes, ya verás que nos vamos a divertir
M: Oye antes que nada ¿no tienes cámaras grabando?
R: No para nada, solo nos vamos a cachondear ¿te late que nos masturbemos frente a frente mientras vemos videos porno?
M: Como tu quieras bebé
En eso se acercó y me tocó la verga
M: Guau, que bonita verga, me gustan grandes y gruesas, y así la tienes, gruesota, de hecho ahorita te voy a presentar a mi señor dildo
R: Jeje (risa nerviosa) ok, luego me lo presentas, lo que sí quiero es verte yaaaa desnuda.
M: ¿Tienes música para irme quitando la ropa? algo cachondo
R: Claro vecina, lo que usted pida
Así que pa pronto puse musica sensual… y dicho y hecho se fue quitando la ropa poco a poco, traía una blusa y una mini falda las cuales se quitó para quedarse solo en brasier y una micro tanga de hilo dental, un conjuntito rosa de encaje muy bonito que traía, pero no se los quitó de golpe, fue cachondeandome con el baile, de repente me mostraba sus pezonsotes pues bajaba la parte frontal del brasier y lo mismo con su panochita la cual traía recién depilada con un triangulito de vello pubico muy bien delineado.
Me tenía a mil, yo ya no aguantaba, solo pensaba en cogermela pero no la había invitado para eso, esto era una sesión de exhibicionismo que por la cachondes terminó en otra cosa.
Esta soy yo ¿cómo ves? me dijo cuando termino de bailarme y sí, ahí estaba desnuda, con unas chichotas, unas piernotas y un culo de infarto, le dije -Estas bien rica mamita, me encantaron tus pezones y no se diga tu culote.
M - ¿Bueno y ahora qué?
R – Pues, qué te parece si ponemos videos porno y sacas a tu amiguito (el dildo) y te masturbas frente a mí ¿qué te parece?
M: Bueno, pon videos pero yo soy más de tocar, oler, vaya si algo me excita es que me toquen, pero la verdad sí me prende el que me veas masturbandome
Le dije ok y me puse a abrir la página de videos porno, que en esa época solo la podíamos ver en la computadora (vaya no podía transmitir el video a la televisión como ahora).
R: Qué te late que ponga ¿videos caseros, negros?
M: Pon de tríos, me gusta ver ver como una mujer ve a dos hombres cogiendo entre ellos
Me quede de a cuatro con la petición, yo solo sonreí y voltee a verla con una sonrisa pícara, así que busque un video y lo puse, en este una pareja (hombre y mujer) invitaban a un negro y este se los cogía a los dos; escogí ese video por el dildo que ella me mostró en sus fotos: era negro y grande, dije a huevo le va gustar este video.
Ambos nos sentamos en los sillones de mi sala, le dije ponte cómoda, ella se recostó y abrió sus piernas, y en cosa de nada ella sobaba su panochita con sus dedos y de vez en cuando subía sus manos hasta sus chichotas.
Yo estaba en el otro sillón también sentado, me acomodé, abrí mis piernas y comencé a jalarme la verga la cual tenía extremadamente dura; por dentro decía ‘despacito no te vengas tan rápido’, me tocaba las huevos y bajaba mi mano hasta el culo.
De pronto ella me dijo - deja saco mi amiguito - y de su bolso sacó un dildote de unos 25 centimetros y muy grueso, negro y venudo el cual tenía unas huevos en su base y vibraba; me lo mostró y le dije – guau, sí está enorme tu amiguito, y me dice - no tan solo es para mí.
Ahí le dije ¿qué traes en mente mujer? Y me dijo - Hoy vas a gozar como nunca alguien te ha hecho gozar, le dije - ¿qué me lo vas a meter en el culo o qué? Y para mi sorpresa dijo - pues si te dejas sí, ¡ups! me desarmó con su respuesta, no sabía qué decirle solo me limité a sonreírle y tocar semejante dildote.
Ella se sentó de nueva cuenta en el sillón abrió de nueva cuenta sus piernas y pensé que se lo llevaría a su panocha pero no, se lo puso en la boca, lo chupaba con una ganas de que le salieran mecos del dildo, chupaba los huevos y recorría toda la verga por fuera, de repente se lo metía completo en la boca, yo solo veía como lo hacía jaladome la verga tranquilamente para no venirme.
De rato lo bajo a su panocha y se lo puso en su clitoris, lo utilizaba para venirse más rápido, en eso me dijo
M: Quiero intentar algo contigo, ven acercate, no me tengas miedo
R: Montse, recuerda que esto es una sesión de exhibicionismo
M: Sesión mis ovarios, quiero que me cojas y chuparte esa vergota ¿no te excito como chupaba esta verga de latex?
Ya no le dije nada, pa pronto me paré y le pusé la verga en la boca, de la punta me salía mucho liquido, me dijo ya te viniste y le dije - no para nada, es preseminal, le valió verga y se la metió completa en su boca, con la lengua jugueteaba con la cabeza de mi verga y con la mano me la jalaba, yo de lo caliente que andaba empece a mover mis caderas para adelante y detrás, sentía que me venía pero mi mente daba ordenes a mi verga de aguantar un poco más.
En eso siento sus dedos jugando en mi ano, ahí sí le dije ¿qué onda? ella me dijo - dejate, vas a ver que te va gustar; al principio fue un poco doloroso pero después de ponerme un poco de vaselina (que ella traía en su bolsa) la cosa fue diferente.
Sin duda alguna estaba experimentando una nueva sensación y no se sentía nada mal. Me puso en cuatro en el sofa y ella de rodillas me comenzó a comer el culo, no lo podía creer, la vecina me lo estaba chupando y yo estaba gozando.
Me tenía en el cielo, de rato me pidió que me volteara y me recostara en el sofá, ella abrió mis piernas me agarró la verga y me la volvió a chupar pero esta vez su lengua recorría desde mi culo hasta la punta de mi verga; me tenía a mil; de rato ya solo me chupaba la verga y en eso siento sus dedos penetrarme, ahí si solté un gesto de dolor, pues nunca nadie me había hecho eso antes, me dijo - no te preocupes, lo voy hacer con cuidado, y poco a poquito me fue metiendo sus dedos, primero uno, luego otro y de rato (yo pensé que tenía dos) ya tenía cuatro dedos dentro de mi culo, literalmente la vecina me estaba cogiendo a mi.
La verdad si estaba algo preocupado pues dije, de rato me va querer ensartar a su amiguito negro y venudo… y para cuando acorde ya lo tenía encendido en la punta de mi ano. Nombreeeeeee, creo que eso es lo mejor que he sentido en esa parte, el vibrador en mi culo, lo cachondo que estaba y las ganas de venirme me hicieron decirle si lo vas a meter hazlo ya, nunca hubiese pensado en decir eso pero estaba muy caliente en ese momento.
M: Sí te lo meto, pero quiero que te pongas esta ropita que traje para ti
Yo le dije – mujer, es una sesión de exhibicionismo, es para estar desnudos y tú quieres que me ponga ropa, en eso se levantó y sacó unas medias negras, una tanga negra y unos zapatos altos, yo me quedé, ni de pedo, pero ella dijo si no lo haces entonces me voy. Obvio no me quedaba otra que ponermelos, me ayudo con las medias, pues nunca me había puesto unas, la tanga me quedo a la perfección y los zapatos ni me entraron pero aún así me los puso a como pudo
M: Te ves muy bien, es más nunca imaginé que estarías totalmente depilado, hoy vas a ser mi perrita y quiero que gimas como una puta en celo
Ahí dije esta pinche vieja si que esta bien loca pero lo peor de todo es que me estaba gustando, estaba excitadísimo.
Me pidió me acostara en el sofá, hizo la tanga a un lado y comenzó a penetrarme el culo con su dildote, la verdad si me dolía pero a la vez sentía rico, fue cosa de dos minutos para que me viniera en su boca, fácil le lance unos seis chiguetazos, le llené la cara y la boca de mecos.
No mames me había venido como nunca.
Nunca pensé que alguien me iba a dominar como lo hizo ella, cuando regularmente es al revés, yo domino, yo mando; hoy ella hizo lo que quiso conmigo y mi culo, el cual por cierto me dolió por un par de días, pero pedía a gritos que volviera a repetir esa nueva experiencia.
En fin, ella me pidió el baño, para pasar a limpiarse pues le había dejado la cara llena de mecos, cuando salió me dijo, te faltó gemir más, pero con el tiempo lo vas a lograr, vas a ser mi putita… caminó hasta el sofá se tumbó y con el dedo me hizo la señal que me acercará para chuparle las chichotas.
La segunda parte se las cuento pronto.
Cachondos y cachondas yo soy Ricardo el exhibicionista regio, vivo en Monterrey, México y aquí iré dejando algunas historias vividas por un servidor.
Si quieres que hagamos una sesión de exhibicionismo escríbeme por este medio para ponernos de acuerdo, quien quite y después seas tú el que se desnude conmigo.
Saludos a todos.
Hoy después de muchos años aún sigo disfrutando de la desnudez, aunque cada vez se ha vuelto más difícil (por los hijos) pero tan pronto tengo oportunidad me encanta andar sin ropa. En fin, la historia que hoy les traigo sucedió hace ya algunos años con una vecina que me llevó a experimentar nuevos placeres.
Esa noche mi esposa se despidió con un beso, me dijo - pórtate bien, yo le sonreí con una sonrisa picara, ella bien sabía que tan pronto se fuera me iba a quitar la ropa para masturbarme viendo porno, pero ni de ley se imaginaba lo que tenía en mente para esa noche.
Ese día (mientras ella estaba en su trabajo) me dediqué a depilar mi cuerpo, siempre me ha gustado andar sin vellos (más allá en la zona genital), ojo, nunca he sido un macho alfa de esos con un cuerpo espectacular al contrario desde que me casé subí de peso, pero por alguna razón a la vecina le parecí un hombre deseable.
Ya hace tiempo la venía saludando, ella llamó mi atención un día de mucho calor, yo barría la cochera de mi casa y ella lavaba su coche con una camiseta corta y unos shorts que dejaban poco a la imaginación, desde ese día me propuse tratar de conocerla.
Con el tiempo pasamos del saludo a entablar platica; ella es una mujer muy atractiva, blanca, con unas chichis enormes y unas piernas muy torneadas por sus clases de spinning, sí eso sí, con algo de pancita (pero eso es lo de menos), en ese entonces yo tenía unos 33 años y ella unos 42, ambos estábamos casados, pero ella tenía una relación abierta con su esposo, pues le cacho una infidelidad y estaban en el proceso de divorciarse.
Nunca me propasé con ella, solo me limitaba a saludarla o una ligera platica, yo solo la veía como la vecina (atractiva) hasta que un día afuera de nuestras casas ella me saludó y me preguntó por mi esposa, que a qué se dedicaba, pero donde cambió la cosa fue cuando preguntó que si tenía una relación abierta con mi esposa, le dije - abierta, ¿cómo? y ahí me di cuenta que ella observaba mis movimientos.
Por razones de seguridad le cambiaré el nombre, me referiré a ella como Montserrat.
M: Es que me doy cuenta que por las mañanas cuando tu esposa no está… vienen chicas y… (ligera pausa) chicos a tu casa yyyyyy… pues uno piensa mal cuando se tardan más de dos horas contigo allá adentro
Yo me sonreí (sonrisa nerviosa), no sabía si contarle pero algo me hizo confiar en ella, así que le pedí mucha discreción.
R: Quizá me taches de loco, pero desde hace mucho tiempo vengo haciendo sesiones de exhibicionismo aquí en mi casa
M: Exhibicionismo ¿cómo? No entiendo
R: Sí (pausa), yo soy exhibicionista, me encanta mostrarme desnudo frente a la gente
Ella tenía una cara de, no mames, no te creo… y sí me lo dijo
M: No te creo ¿me estas choreando?
R: No para nada, te lo juro, si por mi fuera en este momento estaría desnudo frente a ti aquí en la calle (silencio). No sé qué me pasa, pero me excita mucho estar desnudo frente a extraños
M: ¿Y qué hacen en esas sesiones? (ella trataba de indagar más)
R: Pues mira desde hace tiempo tengo un anuncio en un sitio de contactos donde busco chicas y chicos que les gusté el exhibicionismo, y cuando encuentro alguien les invitó a pasar un rato en mi casa. La idea es andar sin ropa; con algunos me tomo un café, con otros vemos porno… digo cada sesión es diferente, pero eso sí, solo es exhibicionismo, para nada se vale tocar al de enfrente o sexo entre nosotros.
M: Que loco ¿y tu esposa lo sabe?
R: Sabe que me encanta la desnudez, en días de mucho calor me gusta dormir desnudo y ella también lo ha hecho aunque no le late mucho, pero noooo, no sabe que me veo con otra gente para desnudarnos
M: ¿Oye, pero entonces eres gay? ¿O porqué invitas hombres?
R: Jeje (sonrisa nerviosa), mira la verdad es que al que le gusta mostrarse desnudo le da igual si lo ve un hombre o una mujer, para el caso es lo mismo, aunque te soy sincero no me disgusta ni me da miedo ver a un chico desnudo, de hecho, también me excita, digo yo no tengo pedo con verle la verga a un chico o las chichis o panocha a las chicas, simplemente me excita verlos y sentirme observado
M: Orale que rico… suena muy provocador y muy cachondo
R: Sí, es muy cachondo, me encanta sentirme observado por alguien desconocido (PAUSA LARGA) ¿cómo ves, te gustaría probar algún día? Obvio, si te deja tu esposo
M: Yo creo que sí lo haría y sobre mi esposo, no te preocupes por él, la verdad me estoy separando y puedo hacer lo que quiera, mientras no se enteren nuestros hijos
R: Ok, pues entonces quedas invitada a una de mis sesiones, pero ojo, es andar totalmente desnudos, la verdad si me gustaría verte sin ropa y que tú me vieras a mí.
Ella esbozó una ligera sonrisa, algo sonrojada.
Los días pasaron y un par de meses también, hasta que un día que iba saliendo de casa me abordó
M: Oye, me dejaste esperando con lo del exhibicionismo, nomás ya no me buscaste
R: Sí lo sé, perdón, estaba buscando el momento ideal, pero qué te parece este viernes, mi esposa va salir con unas amigas y yo me voy a quedar solo unas cuatro o cinco horas ¿cómo ves?
M: Va, cuenta conmigo… pero no me vayas a quedar mal, la verdad sí me excitó mucho lo que me platicaste.
R: Sí no te preocupes, pero antes estaría chido un juego previo ¿cómo ves si todos los días por las mañanas me mandas fotos tuyas totalmente desnuda y yo te comparto unas fotos totalmente desnudo ¿cómo ves?
M: Me da algo de pena, pero si tu me mandas una foto totalmente desnudo cuenta que yo también te mandaré
Y sí, al día siguiente me estaba mandando fotos totalmente desnuda con un dildo enorme en su vagina, yo me prendí mucho y solo pensaba en que ya pasaran los días para verla el viernes, lo que me resultó extraño es que me dijo que me iba a presentar a su señor dildo en persona, cosa que me puso un poco nervioso pues para que iba a querer yo semejante juguetote negro y venudo.
Total, que se llegó el viernes, escuche que mi esposa encendía el auto y salía de la cochera, esperé unos 10 minutos y le hable por teléfono a la vecina
R: Ya se fue mi esposa, cuando quieras venir, ya estoy totalmente desnudo
M: Ya salgo para allá ¿oye te gusta la lencería? ¿vaya las tangas?
R: Sí claro, le contesté
M: Tengo unas para ti, yo creo que si te quedan
Yo me quedé pensativo con lo que me dijo y le dije…
R: No pasa nada, lo que hagamos solo queda entre nosotros, y mientras sea para aumentar el erotismo, nos ponemos de acuerdo, ntp
M: Te va encantar, hay voy
Después de eso escuché el timbre de la casa, literalmente solo tenía que cruzar la calle y ya estaba aquí, le abrí la reja (automática) y entró a la cochera
Tocó la puerta y le abrí, yo estaba en una bata blanca la cual tan pronto cerré la puerta me quité para quedar totalmente desnudo frente a ella, mi verga ya estaba a mil, nunca he batallado para que se me paré.
Al voltear a verme se dio cuenta que efectivamente ya estaba totalmente desnudo y con la verga bien dura, y no dudo en voltear a verme el paquete, que no es la mamada en lo largo pero sí en lo ancho, cuando la vio me dijo.
M: A no manches tu verga es casi igual al grosor de mi señor dildo, la tienes bien gruesa
Yo me reí y le dije
R: A tus órdenes, ya verás que nos vamos a divertir
M: Oye antes que nada ¿no tienes cámaras grabando?
R: No para nada, solo nos vamos a cachondear ¿te late que nos masturbemos frente a frente mientras vemos videos porno?
M: Como tu quieras bebé
En eso se acercó y me tocó la verga
M: Guau, que bonita verga, me gustan grandes y gruesas, y así la tienes, gruesota, de hecho ahorita te voy a presentar a mi señor dildo
R: Jeje (risa nerviosa) ok, luego me lo presentas, lo que sí quiero es verte yaaaa desnuda.
M: ¿Tienes música para irme quitando la ropa? algo cachondo
R: Claro vecina, lo que usted pida
Así que pa pronto puse musica sensual… y dicho y hecho se fue quitando la ropa poco a poco, traía una blusa y una mini falda las cuales se quitó para quedarse solo en brasier y una micro tanga de hilo dental, un conjuntito rosa de encaje muy bonito que traía, pero no se los quitó de golpe, fue cachondeandome con el baile, de repente me mostraba sus pezonsotes pues bajaba la parte frontal del brasier y lo mismo con su panochita la cual traía recién depilada con un triangulito de vello pubico muy bien delineado.
Me tenía a mil, yo ya no aguantaba, solo pensaba en cogermela pero no la había invitado para eso, esto era una sesión de exhibicionismo que por la cachondes terminó en otra cosa.
Esta soy yo ¿cómo ves? me dijo cuando termino de bailarme y sí, ahí estaba desnuda, con unas chichotas, unas piernotas y un culo de infarto, le dije -Estas bien rica mamita, me encantaron tus pezones y no se diga tu culote.
M - ¿Bueno y ahora qué?
R – Pues, qué te parece si ponemos videos porno y sacas a tu amiguito (el dildo) y te masturbas frente a mí ¿qué te parece?
M: Bueno, pon videos pero yo soy más de tocar, oler, vaya si algo me excita es que me toquen, pero la verdad sí me prende el que me veas masturbandome
Le dije ok y me puse a abrir la página de videos porno, que en esa época solo la podíamos ver en la computadora (vaya no podía transmitir el video a la televisión como ahora).
R: Qué te late que ponga ¿videos caseros, negros?
M: Pon de tríos, me gusta ver ver como una mujer ve a dos hombres cogiendo entre ellos
Me quede de a cuatro con la petición, yo solo sonreí y voltee a verla con una sonrisa pícara, así que busque un video y lo puse, en este una pareja (hombre y mujer) invitaban a un negro y este se los cogía a los dos; escogí ese video por el dildo que ella me mostró en sus fotos: era negro y grande, dije a huevo le va gustar este video.
Ambos nos sentamos en los sillones de mi sala, le dije ponte cómoda, ella se recostó y abrió sus piernas, y en cosa de nada ella sobaba su panochita con sus dedos y de vez en cuando subía sus manos hasta sus chichotas.
Yo estaba en el otro sillón también sentado, me acomodé, abrí mis piernas y comencé a jalarme la verga la cual tenía extremadamente dura; por dentro decía ‘despacito no te vengas tan rápido’, me tocaba las huevos y bajaba mi mano hasta el culo.
De pronto ella me dijo - deja saco mi amiguito - y de su bolso sacó un dildote de unos 25 centimetros y muy grueso, negro y venudo el cual tenía unas huevos en su base y vibraba; me lo mostró y le dije – guau, sí está enorme tu amiguito, y me dice - no tan solo es para mí.
Ahí le dije ¿qué traes en mente mujer? Y me dijo - Hoy vas a gozar como nunca alguien te ha hecho gozar, le dije - ¿qué me lo vas a meter en el culo o qué? Y para mi sorpresa dijo - pues si te dejas sí, ¡ups! me desarmó con su respuesta, no sabía qué decirle solo me limité a sonreírle y tocar semejante dildote.
Ella se sentó de nueva cuenta en el sillón abrió de nueva cuenta sus piernas y pensé que se lo llevaría a su panocha pero no, se lo puso en la boca, lo chupaba con una ganas de que le salieran mecos del dildo, chupaba los huevos y recorría toda la verga por fuera, de repente se lo metía completo en la boca, yo solo veía como lo hacía jaladome la verga tranquilamente para no venirme.
De rato lo bajo a su panocha y se lo puso en su clitoris, lo utilizaba para venirse más rápido, en eso me dijo
M: Quiero intentar algo contigo, ven acercate, no me tengas miedo
R: Montse, recuerda que esto es una sesión de exhibicionismo
M: Sesión mis ovarios, quiero que me cojas y chuparte esa vergota ¿no te excito como chupaba esta verga de latex?
Ya no le dije nada, pa pronto me paré y le pusé la verga en la boca, de la punta me salía mucho liquido, me dijo ya te viniste y le dije - no para nada, es preseminal, le valió verga y se la metió completa en su boca, con la lengua jugueteaba con la cabeza de mi verga y con la mano me la jalaba, yo de lo caliente que andaba empece a mover mis caderas para adelante y detrás, sentía que me venía pero mi mente daba ordenes a mi verga de aguantar un poco más.
En eso siento sus dedos jugando en mi ano, ahí sí le dije ¿qué onda? ella me dijo - dejate, vas a ver que te va gustar; al principio fue un poco doloroso pero después de ponerme un poco de vaselina (que ella traía en su bolsa) la cosa fue diferente.
Sin duda alguna estaba experimentando una nueva sensación y no se sentía nada mal. Me puso en cuatro en el sofa y ella de rodillas me comenzó a comer el culo, no lo podía creer, la vecina me lo estaba chupando y yo estaba gozando.
Me tenía en el cielo, de rato me pidió que me volteara y me recostara en el sofá, ella abrió mis piernas me agarró la verga y me la volvió a chupar pero esta vez su lengua recorría desde mi culo hasta la punta de mi verga; me tenía a mil; de rato ya solo me chupaba la verga y en eso siento sus dedos penetrarme, ahí si solté un gesto de dolor, pues nunca nadie me había hecho eso antes, me dijo - no te preocupes, lo voy hacer con cuidado, y poco a poquito me fue metiendo sus dedos, primero uno, luego otro y de rato (yo pensé que tenía dos) ya tenía cuatro dedos dentro de mi culo, literalmente la vecina me estaba cogiendo a mi.
La verdad si estaba algo preocupado pues dije, de rato me va querer ensartar a su amiguito negro y venudo… y para cuando acorde ya lo tenía encendido en la punta de mi ano. Nombreeeeeee, creo que eso es lo mejor que he sentido en esa parte, el vibrador en mi culo, lo cachondo que estaba y las ganas de venirme me hicieron decirle si lo vas a meter hazlo ya, nunca hubiese pensado en decir eso pero estaba muy caliente en ese momento.
M: Sí te lo meto, pero quiero que te pongas esta ropita que traje para ti
Yo le dije – mujer, es una sesión de exhibicionismo, es para estar desnudos y tú quieres que me ponga ropa, en eso se levantó y sacó unas medias negras, una tanga negra y unos zapatos altos, yo me quedé, ni de pedo, pero ella dijo si no lo haces entonces me voy. Obvio no me quedaba otra que ponermelos, me ayudo con las medias, pues nunca me había puesto unas, la tanga me quedo a la perfección y los zapatos ni me entraron pero aún así me los puso a como pudo
M: Te ves muy bien, es más nunca imaginé que estarías totalmente depilado, hoy vas a ser mi perrita y quiero que gimas como una puta en celo
Ahí dije esta pinche vieja si que esta bien loca pero lo peor de todo es que me estaba gustando, estaba excitadísimo.
Me pidió me acostara en el sofá, hizo la tanga a un lado y comenzó a penetrarme el culo con su dildote, la verdad si me dolía pero a la vez sentía rico, fue cosa de dos minutos para que me viniera en su boca, fácil le lance unos seis chiguetazos, le llené la cara y la boca de mecos.
No mames me había venido como nunca.
Nunca pensé que alguien me iba a dominar como lo hizo ella, cuando regularmente es al revés, yo domino, yo mando; hoy ella hizo lo que quiso conmigo y mi culo, el cual por cierto me dolió por un par de días, pero pedía a gritos que volviera a repetir esa nueva experiencia.
En fin, ella me pidió el baño, para pasar a limpiarse pues le había dejado la cara llena de mecos, cuando salió me dijo, te faltó gemir más, pero con el tiempo lo vas a lograr, vas a ser mi putita… caminó hasta el sofá se tumbó y con el dedo me hizo la señal que me acercará para chuparle las chichotas.
La segunda parte se las cuento pronto.
Cachondos y cachondas yo soy Ricardo el exhibicionista regio, vivo en Monterrey, México y aquí iré dejando algunas historias vividas por un servidor.
Si quieres que hagamos una sesión de exhibicionismo escríbeme por este medio para ponernos de acuerdo, quien quite y después seas tú el que se desnude conmigo.
Saludos a todos.
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