Tres relatos cortos, la vida misma!

En estos tres relatos, una idea de como me gusta vivir la vida y el sexo. Espero les guste.

1.
Era una tarde, después del mediodía, primavera, llovía despacio pero parejo, me quedé en casa y la invité, no se hizo rogar. Yo estaba desnudo, como me gusta estar, y ella no tardó mucho en estar igual.
Nos gustaba sentirnos piel con piel, ella se subió a mi sofá sobre mi, pasando una pierna de cada lado, abrazándome, apretando sus generosos pechos sobre el mío. Y así quedamos un buen rato hasta que nos empezamos a besar. Mi pija había quedado acomodada sobre sus labios vaginales y ya comenzó a latir, mi cabeza sobre su clítoris, sus jugos comenzaron a fluir bañandola y yo para esa altura ya estaba lamiendo, chupando y mordisqueando sus pezones, sabía lo loca que esto la ponía....
Ella comenzó un muy leve movimiento de cadera rozando su ya muy mojada concha sobre mi pija... sabía lo loco que esto me ponía...
Su respiración comenzó a agitarse y me preparé para su orgasmo mientras seguía chupando sus gloriosas tetas...
Cuando comenzaba a acabar, con un simple movimiento de mis manos sobre su cadera, le ensarté mi verga hasta el fondo de su concha y esto solo incrementó su orgasmo. Ella no tenía ya mucho control de su cuerpo entonces con mis manos en su culo comencé un rítmico bamboleo para la cogida perfecta. Acabó así varias veces hasta que, teniéndola fuertemente contra mí, acabe varios chorros de semen, bien adentro suyo.
Quedamos así un buen rato, sentía como mi leche y sus jugos escurrian por mi pija...
Luego ella se incorporó y comenzó a lamerme para limpiarme. Mi pija, mis huevos, mi culo.... quedé limpio y lleno de placer. Afuera seguía lloviendo y nosotros teníamos una larga tarde para seguir dándonos placer.


2.
Alguien como yo, a esta altura de mi vida, en el sexo solo busca placer, sin tantas complicaciones. Y entonces surgen cosas como la de este buen amigo, muy pasivo de por cierto y verdaderamente amigo mío. Lo doblo en edad pero le gusto, lo caliento. Es casado y a veces se puede escapar un ratito, como esa mañana que salió a hacer un tramite y le quedaron unos minutos antes de volver a su casa. Me dijo si podía pasar y mi respuesta fue si. Entró y me comió la boca, mis manos fueron a su generoso culo y entonces se arrodilló y bajándome los pantalones se apoderó de mi pija con su boca. Sabe bien como chuparmela, le encanta, la saborea y tiene el don de dejarmela dura como una roca. No tenía mucho tiempo, se agarro del respaldo de una silla y así de parado me entregó su cola. Dos lengüetazos bien ensalibados y se la enterré. Primero bombazos tranquilos y después una culeada frenética porque no había tiempo.
El se pajeaba y acabamos casi juntos...
Se subió su pantalón y se llevó mi leche en su cola. Otro beso y a correr a su casa antes de que sospechen.


3.
Con ella hacíamos masajes juntos hace bastante tiempo (somos masajistas profesionales los dos, con mucha experiencia de vida), después por cosas de la vida cada uno siguió por su lado. Masajes para parejas, masajes a 4 manos a hombres y mujeres donde surgían cosas muy calientes... les conté sobre aquella vez que una pareja nos pidió que el Masaje sea mujer-mujer hombre-hombre? No?... bueno, será tema para otro relato.
La cosa es que ella me llamó por una consulta y un tema llevó al otro hasta que hablamos de la posibilidad de volver a las andanzas.
Lo bueno de trabajar con ella es que siempre, por una cosa o la otra, terminábamos garchando entre nosotros.
Si terminábamos un masaje y estábamos calientes, si hacíamos una foto o un videito para mostrar, si nos poníamos a charlar y las manos juguetonas tocaban de más.... si alguno de los dos le dolia la espalda y el otro le hacia masajes... siempre la cosa terminaba en garche y yo quieria recuperar eso.
Vino, charlamos, tomamos unos mates, compartimos calientes experiencias, nos pusimos de acuerdo para hacer algo juntos, aunque ella mantiene su gabinete, va a venir acá cuando salgan masajes para parejas o a 4 manos.
Quisimos renovar las fotos, una chaqueta mía y su sexy lencería y estaba todo listo.
Mis manos, su cuerpo, el pedido de que la toque para que su concha se vea bien mojada en la foto... un pete simulado, otro pete no simulado... una acabada en su boca para mostrar como la toma... una comida de concha para devolverle el favor y una tarde muy caliente para sellar el pacto de sociedad para el trabajo más lindo de todos.