Bueno, aca les traigo la parte 2 de la historia con Laura y nuestros primeros acercamientos. Perdon por la demora pero siempre que escribo intento recordar y explayarme en todos los detalles y eso lleva tiempo. Ya estoy escribiendo la tercera parte asi que si me dejan puntos y comentarios seria un buen envion para contarles todo lo que pasó con la profe.
PARTE 1: http://www.poringa.net/posts/relatos/5664963/Laura-la-profe-de-Fisica-Parte-1.html
PARTE 2 - La consejera sexual
La verdad es que nunca supe si ese día la profe había notado mi erección, lo que sí supe es que entré a un grupo selecto al cual ella le daba más atención, básicamente porque éramos buenos en la materia, nos interesaba y eso se notaba. En el colegio teníamos laboratorio, y ella era la encargada de llevarnos. Uno de esos días en el laboratorio, Laura me llama desde su mesa. Cuando me acerco veo que estaba mezclando en un tubo de ensayo, un metal pequeño con un líquido.
LAURA: Mira esto, presta atención.
Cuando vertió el líquido el metal reaccionó enseguida largando un humo rojo qué prontamente se apuro a tapar para que no salga.
LAURA: El níquel reacciona así cuando el ácido sulfúrico lo toca, es increíble el color no?
En ese momento yo alcancé a decir que sí, pero en realidad yo estaba muy concentrado en su pecho. Había traído una blusa bordó bastante pegada al cuerpo que cuando se inclinó a verter el líquido me dejó una vista impresionante de sus pequeñas tetas. En el medio un collar medio hippie con una piedra que se fundía en ese escote… pude ver esos limoncitos pequeños, esos que cuando los ves desnudos te los queres comer despacito y por un buen rato.
LAURA: Pensé que te iba a dejar boquiabierto con esto (señalando el tubo de ensayo). Pero parece que no…
YO: Nono, si… Osea si me gustó. ¿El niquel es de lo que están hechas las monedas? (fue lo primero que se me ocurrió para salir del apuro)
LAURA: Si, en su mayoría si. Con Julieta todo bien?
Esa pregunta me trajo de nuevo a la realidad. Con Juli habíamos cortado hacía 2 semanas y eso ya se notaba en el curso, como un elefante en la sala. La historia terminó porque se empezó a poner muy pesada, quería que estemos todo el tiempo juntos y yo tenía más ganas de vaguear con mis amigos. Ni siquiera habíamos llegado a coger, todo era full franela… Esos meses yo andaba re caliente y debo admitir que terminé metiéndole los cuernos con Anabel, una vecina del barrio que ya estaba en la facultad y siempre tenía la casa sola porque sus viejos laburaban todo el día. Así que cuando se liberaba de los parciales, me tiraba un sms y cogíamos toda la tarde. Yo descargaba toda la calentura que me generaba Julieta y debo admitir que también muchas veces pensé en la profe, con solo pensar en tener ese culo en 4 me excitaba al punto de acabar y quedar exhausto de placer.
YO: No, nos separamos, va… yo le corté. ¿Por? ¿Se nota?
LAURA: Si, no sólo que se nota sino que la encontré llorando en el baño y cuando la fui a consolar me contó todo.
No sé a qué se refería con “todo”, eso me generó mucha intriga.
YO: lo que pasa es que ella dice que me ama y que me necesita pero… a mi no me pasa lo mismo.
LAURA: creo que deberías hablar con ella porque lo que pasa es que piensa otra cosa…
YO: ¿otra cosa? No entiendo
LAURA: Si… piensa que tiene que ver con algo más íntimo… entendes?
No sabía de lo que estaba hablando… Será que la profe estaba insinuando algo de índole sexual? Necesitaba saber hasta dónde poder hablar.
YO: Por favor decímelo vos porque la situación está super tensa y no podemos hablar sin discutir, y estoy cansado de eso…a veces no tengo ganas ni de cruzarmela y compartimos el aula.
LAURA: no tendría que decirte nada, pero también si esto está perjudicando tu desempeño y tus ganas de estar en el colegio creo que podría ayudarte… hagamos una cosa, esto queda entre nosotros. Ok?
YO: Si, despreocúpate.
Esa última frase… eso de que “quede entre nosotros”… me hizo sentir un cosquilleo eléctrico en todo el cuerpo. Tener un secreto con la profe fue el inicio de todo lo que se vendría después.
LAURA: vení acércate (cuando estuve al lado empezó a hablarme en voz baja, para que ninguno de mis compañeros pudiera escucharla). Julieta piensa que la dejaste porque no tuvieron sexo.
No se gastó en maquillar las palabras, fue al hueso. Sus palabras fueron tan directas que quede por unos segundos tildado.
YO: es que… nono, no fue por eso. (Mi voz se entrecortada por el nerviosismo)
LAURA: hablá despacio y tranquilizate por favor, escuchame Julian… es normal a tu edad tener tus primeros acercamientos sexuales y también temores qué se desprenden de la inexperiencia, el problema es que este colegio es muy católico. Yo propuse que tuvieran una charla de educación sexual, hasta yo misma me propuse a darla, pero los directivos no quisieron saber nada. Bueno, como te decía… seguramente te surgen dudas y quiero que sepas que pueden contar conmigo si necesitan algún consejo.
YO: es que profe, no es eso. La dejé porque se puso muy intensa, quería que solo esté con ella y a mi me gusta salir y divertirme con mis amigos. Hasta si iba a jugar a la pelota le molestaba.
LAURA: Ah, discúlpame entonces. Creí que iba por ese lado el asunto… está bien, entiendo la situación. En fin, igual ya sabes que podes contar conmigo si necesitas resolver alguna inquietud.
No quería abandonar una conversación tan “íntima” sin jugar alguna carta más. Acercarme un poco más a la intimidad de nuestro secreto…
YO: bueno… igual yo ya tengo sexo regularmente y pienso que me va bien.
LAURA: Ah, bueno… Mejor.
Iba a decir algo más pero su tono fue muy cortante, enseguida volvió la vista hacia el resto de las mesas del laboratorio y preguntó si ya todos los grupos habían terminado. Entendí que no quería seguir hablando así que volví a mi mesa. Desde ese momento supe que se había habilitado un canal nuevo con la profe y que podía intentar algo, no se me ocurría qué… pero la posibilidad de seguir alimentando su confianza estaba firme.
Nosotros teníamos a Laura dos veces por semana, los lunes íbamos al laboratorio y los jueves hacíamos teórico en el aula. Después de ese lunes donde tuvimos esa charla en el laboratorio, estuve toda la semana pensando qué decirle el jueves, se me ocurrió aceptar su deseo de consejera de educación sexual. Llego el día y a media mañana Laura entro al salón con un jean negro ajustado (qué le marcaba mucho las piernas y la cola) y una camisa blanca al cuerpo cerrada y chiquita que hacía parecer que su parte de arriba era diminuta en comparación a sus caderas, el típico “cuerpo de avispa”. Claramente los pibes cuchicheaban sobre lo buena que estaba y yo seguía pensando en qué decirle. La clase transcurrió normal y cuando nos estábamos yendo con mis amigos al recreo, les invente que me había olvidado el celu en la mochila y volví al aula. Laura estaba terminando de guardar sus cosas en su mochila.
YO: profe quiere que la ayude a borrar el pizarrón?
LAURA: Si dale, mientras yo ordeno un poco mis cosas.
Me arremangué la camisa del colegio y deje a la vista mis brazos y manos (algo que siempre me habían halagado las chicas) y borrador en mano comencé mi tarea.
LAURA: ¿y eso? ¿que es?
La profe me señaló el tatuaje qué me había hecho hace unos meses en el antebrazo. Me di vuelta, ella estaba sentada y estiré el brazo para que lo vea de cerca. Me agarro la mano y lo miro con detalle.
LAURA: ¿El Hombre de Vitruvio de Da Vinci? ¿Por qué te lo hiciste?
YO: Da Vinci me parece un genio y las proporciones que dibujó me parecen increíbles.
LAURA: (riendo) vos sos un nerd como yo, me encanta.
YO: gracias Lau… ¿te puedo decir Lau no?
LAURA: Si, no tenemos que ser formales, no soy ese tipo de profesora.
YO: buenísimo entonces
Laura se incorporó y agarró su mochila indicando que se iba pero enseguida le interrumpí el paso .
YO: Lau sabes que me quedé pensando con lo.que me dijiste el lunes.
LAURA: qué cosa? ¿Lo de Juli?
YO: no, ese es un tema terminado… lo de poder preguntarte.
LAURA: Ah sí… decime.
Volvió a dejar su mochila en la mesa y apoyó su culo como si fuese un taburete
YO: es que hay algo que no entiendo de las chicas
LAURA: vas a tener que ser más específico para que te ayude, tranqui, podes ser directo.
YO: Ok, estoy viéndome con una chica, una vecina que es un poco más grande que yo, y casi siempre uso preservativo pero hay días en los que ella está como loca y ni siquiera llegó a ponérmelo que ya estamos cogiendo.
Me había dicho que sea directo así que aproveché para ser directo y decir “coger”
LAURA: Mmm y decime cuando pasa eso, a la semana es igual?
YO: No, después es todo más tranqui, es solo una ves en el mes masomenos. No sé…
LAURA: Mira , seguramente es porque está ovulando. En ese momento del periodo La mujer hormonalmente esta muy estimulada y deseante. ¿Me entendes? Tenes que tener cuidado porque también es el momento donde más proclive está para quedar embarazada así que ni se te ocurra volver a permitirlo. Es super peligroso por las enfermedades también. ¿Acabaste adentro?
YO: no profe, eso nunca, siempre acabo afuera si no uso preservativos.
LAURA: bueno, al menos eso reduce las posibilidades de embarazo… pero no se te ocurra hacerlo nunca más eh y deberías hacerte estudios ya que estas.
YO: bueno profe no me retes… así que es por la ovulación? Y a vos también te pasa? (Por dentro seguía intentando saber hasta qué punto llegar en la conversación)
Laura se puso colorada y corrió la vista mirando hacia la puerta, de la cual no entraba ni salía nadie…
LAURA: emmm, si, a todas nos pasa. Y a ustedes los varones en la adolescencia pareciera que están ovulando todos los días.
YO: Jajajaj por qué?
LAURA: Porque los veo… déjalo ahí. Me voy que tengo que irme a otra escuela. Chau Julian, portate bien.
Me sonrió mirándome a los ojos, agarró su mochila y salió… Yo quedé con el borrador en la mano y obvio me di vuelta para ver ese culo desfilar hacia la puerta. Creo que ella ya sabía de mis miradas y por eso me había dicho lo que me dijo.
Esa tarde le mande un mensaje a mi vecina diciéndole que quería verla, al toque me respondio que vaya y cuando llegué a su casa me avalancé sobre su boca y apoyé todo mi miembro sobre su vientre.
Anabel era bastante linda, se cuidaba mucho la piel y la estetica en general. Ese tipo de mujer que siempre huelen bien y tienen la piel suave, eso me gustaba mucho… bueno eso y sus tetas. No porque fuese tetona en sí, sino que por la forma de su cuerpo sus pechos naturales eran muy hermosos, tenía los pezoncitos rosados y chiquitos y combinado con su piel y su olor hacía que sea mi merienda preferida.
ANABEL: qué pasó qué estás tan caliente pendejo?
YO: vos me pones así. (Apreté su colita con las manos y la traje hacia mí mientras besaba su cuello y su pecho)
ANABEL: Mmm que rico, cómeme toda. Sácame el corpiño.
Con una mano le desabroche el corpiño y empecé a comerle las tetas como un desesperado, mientras las chupaba no podía dejar de imaginar los limoncitos de la profe, esa blusa y ese escote me habían dejado como loco.
ANABEL: Si bebé,comete todo esto.
Yo con la boca lamia y mordía despacito sus pezones y con la mano empecé a buscar su conchita qué al encontrarla ya estaba completamente húmeda… empecé a pajearla mientras la miraba a los ojos y ella se deshacía de placer. Todo esto sucedía estando parados, ella derretida contra la pared disfrutando de cómo la tocaba y gimiendo como una verdadera puta.
ANABEL: Ufff mira lo mojada que estoy, dame pija pendejo.
Se agacho, me bajo el jogging y liberó una pija qué estaba dura y caliente desde la mañana con Laura. Enseguida se la llevó a la boca y mientras jugaba con su lenguita por la cabeza yo la agarre del pelo para guiarla, quería llenarle la boca de pija, estaba con un nivel de excitación extremo. Apenas empezó a metersela en la boca yo tironie del pelo para que se la coma toda, y a los segundos afloje para que respire. Se le habían puesto los ojos llorosos.
ANABEL: Hijo de puta, que dura tenes la pija.
YO: Hoy te voy a coger la boquita vecina
Con la mano enredada en su pelo seguía guiando las embestidas de pija, qué ella recibía contenta. Me miraba a los ojos y eso me volvía loco. Le dije que vayamos a la habitación y apenas llegamos a la cama se puso en 4 y me dejo toda la colita disponible para mi, tenía una colaless blanca muy chiquita que con mis dedos la corrí y comencé a comerla toda. Mientras con mis manos apretaba y abría sus cachetes, con la lengua recorria su clitoris, pasaba por su vulva y terminaba lamiendole la cola, podía sentir en mi boca el sabor de su calentura. Cada vez que sentía mi lengua, ella se inclinaba y gemía más fuerte.
ANABEL: por favor dame pija, quiero sentirte adentro.
YO: bueno, para que me voy a poner un forro.
Las palabras de la profe me habían dejado en estado de alerta y no quería tener ningún problema así que me prometí ser responsable.
ANABEL: bueno pero apurate que te quiero adentro mio.
Apenas sintió la pija entrando largo un gemido largo y profundo como mi embestida. Empecé a cogerla apretandole el orto.
ANABEL: Así así, dale cogeme fuerte.
Su voz entre cortada me calentó mas aun asi que le di un buen rato hasta que ella empezó a tocarse la conchita, cerró los ojos y empezó a acabar mientras yo seguia cogiendola bien profundo, ahi aproveche cada embestida para sentir cómo su cuerpo llegaba al éxtasis de placer. Enseguida aumenté el ritmo y acabé de una manera bestial, y me tumbé jadeante al lado de su cuerpo húmedo aún estremecido.
VECINA: Dios, que rico me hiciste acabar… Estabas muy caliente hoy.
Ni siquiera le respondí, pero internamente sabía que toda esa tensión sexual que había acumulado tenía profesión y nombre… PROFE LAURA.
CONTINUARÁ
PARTE 1: http://www.poringa.net/posts/relatos/5664963/Laura-la-profe-de-Fisica-Parte-1.html
PARTE 2 - La consejera sexual
La verdad es que nunca supe si ese día la profe había notado mi erección, lo que sí supe es que entré a un grupo selecto al cual ella le daba más atención, básicamente porque éramos buenos en la materia, nos interesaba y eso se notaba. En el colegio teníamos laboratorio, y ella era la encargada de llevarnos. Uno de esos días en el laboratorio, Laura me llama desde su mesa. Cuando me acerco veo que estaba mezclando en un tubo de ensayo, un metal pequeño con un líquido.
LAURA: Mira esto, presta atención.
Cuando vertió el líquido el metal reaccionó enseguida largando un humo rojo qué prontamente se apuro a tapar para que no salga.
LAURA: El níquel reacciona así cuando el ácido sulfúrico lo toca, es increíble el color no?
En ese momento yo alcancé a decir que sí, pero en realidad yo estaba muy concentrado en su pecho. Había traído una blusa bordó bastante pegada al cuerpo que cuando se inclinó a verter el líquido me dejó una vista impresionante de sus pequeñas tetas. En el medio un collar medio hippie con una piedra que se fundía en ese escote… pude ver esos limoncitos pequeños, esos que cuando los ves desnudos te los queres comer despacito y por un buen rato.
LAURA: Pensé que te iba a dejar boquiabierto con esto (señalando el tubo de ensayo). Pero parece que no…
YO: Nono, si… Osea si me gustó. ¿El niquel es de lo que están hechas las monedas? (fue lo primero que se me ocurrió para salir del apuro)
LAURA: Si, en su mayoría si. Con Julieta todo bien?
Esa pregunta me trajo de nuevo a la realidad. Con Juli habíamos cortado hacía 2 semanas y eso ya se notaba en el curso, como un elefante en la sala. La historia terminó porque se empezó a poner muy pesada, quería que estemos todo el tiempo juntos y yo tenía más ganas de vaguear con mis amigos. Ni siquiera habíamos llegado a coger, todo era full franela… Esos meses yo andaba re caliente y debo admitir que terminé metiéndole los cuernos con Anabel, una vecina del barrio que ya estaba en la facultad y siempre tenía la casa sola porque sus viejos laburaban todo el día. Así que cuando se liberaba de los parciales, me tiraba un sms y cogíamos toda la tarde. Yo descargaba toda la calentura que me generaba Julieta y debo admitir que también muchas veces pensé en la profe, con solo pensar en tener ese culo en 4 me excitaba al punto de acabar y quedar exhausto de placer.
YO: No, nos separamos, va… yo le corté. ¿Por? ¿Se nota?
LAURA: Si, no sólo que se nota sino que la encontré llorando en el baño y cuando la fui a consolar me contó todo.
No sé a qué se refería con “todo”, eso me generó mucha intriga.
YO: lo que pasa es que ella dice que me ama y que me necesita pero… a mi no me pasa lo mismo.
LAURA: creo que deberías hablar con ella porque lo que pasa es que piensa otra cosa…
YO: ¿otra cosa? No entiendo
LAURA: Si… piensa que tiene que ver con algo más íntimo… entendes?
No sabía de lo que estaba hablando… Será que la profe estaba insinuando algo de índole sexual? Necesitaba saber hasta dónde poder hablar.
YO: Por favor decímelo vos porque la situación está super tensa y no podemos hablar sin discutir, y estoy cansado de eso…a veces no tengo ganas ni de cruzarmela y compartimos el aula.
LAURA: no tendría que decirte nada, pero también si esto está perjudicando tu desempeño y tus ganas de estar en el colegio creo que podría ayudarte… hagamos una cosa, esto queda entre nosotros. Ok?
YO: Si, despreocúpate.
Esa última frase… eso de que “quede entre nosotros”… me hizo sentir un cosquilleo eléctrico en todo el cuerpo. Tener un secreto con la profe fue el inicio de todo lo que se vendría después.
LAURA: vení acércate (cuando estuve al lado empezó a hablarme en voz baja, para que ninguno de mis compañeros pudiera escucharla). Julieta piensa que la dejaste porque no tuvieron sexo.
No se gastó en maquillar las palabras, fue al hueso. Sus palabras fueron tan directas que quede por unos segundos tildado.
YO: es que… nono, no fue por eso. (Mi voz se entrecortada por el nerviosismo)
LAURA: hablá despacio y tranquilizate por favor, escuchame Julian… es normal a tu edad tener tus primeros acercamientos sexuales y también temores qué se desprenden de la inexperiencia, el problema es que este colegio es muy católico. Yo propuse que tuvieran una charla de educación sexual, hasta yo misma me propuse a darla, pero los directivos no quisieron saber nada. Bueno, como te decía… seguramente te surgen dudas y quiero que sepas que pueden contar conmigo si necesitan algún consejo.
YO: es que profe, no es eso. La dejé porque se puso muy intensa, quería que solo esté con ella y a mi me gusta salir y divertirme con mis amigos. Hasta si iba a jugar a la pelota le molestaba.
LAURA: Ah, discúlpame entonces. Creí que iba por ese lado el asunto… está bien, entiendo la situación. En fin, igual ya sabes que podes contar conmigo si necesitas resolver alguna inquietud.
No quería abandonar una conversación tan “íntima” sin jugar alguna carta más. Acercarme un poco más a la intimidad de nuestro secreto…
YO: bueno… igual yo ya tengo sexo regularmente y pienso que me va bien.
LAURA: Ah, bueno… Mejor.
Iba a decir algo más pero su tono fue muy cortante, enseguida volvió la vista hacia el resto de las mesas del laboratorio y preguntó si ya todos los grupos habían terminado. Entendí que no quería seguir hablando así que volví a mi mesa. Desde ese momento supe que se había habilitado un canal nuevo con la profe y que podía intentar algo, no se me ocurría qué… pero la posibilidad de seguir alimentando su confianza estaba firme.
Nosotros teníamos a Laura dos veces por semana, los lunes íbamos al laboratorio y los jueves hacíamos teórico en el aula. Después de ese lunes donde tuvimos esa charla en el laboratorio, estuve toda la semana pensando qué decirle el jueves, se me ocurrió aceptar su deseo de consejera de educación sexual. Llego el día y a media mañana Laura entro al salón con un jean negro ajustado (qué le marcaba mucho las piernas y la cola) y una camisa blanca al cuerpo cerrada y chiquita que hacía parecer que su parte de arriba era diminuta en comparación a sus caderas, el típico “cuerpo de avispa”. Claramente los pibes cuchicheaban sobre lo buena que estaba y yo seguía pensando en qué decirle. La clase transcurrió normal y cuando nos estábamos yendo con mis amigos al recreo, les invente que me había olvidado el celu en la mochila y volví al aula. Laura estaba terminando de guardar sus cosas en su mochila.
YO: profe quiere que la ayude a borrar el pizarrón?
LAURA: Si dale, mientras yo ordeno un poco mis cosas.
Me arremangué la camisa del colegio y deje a la vista mis brazos y manos (algo que siempre me habían halagado las chicas) y borrador en mano comencé mi tarea.
LAURA: ¿y eso? ¿que es?
La profe me señaló el tatuaje qué me había hecho hace unos meses en el antebrazo. Me di vuelta, ella estaba sentada y estiré el brazo para que lo vea de cerca. Me agarro la mano y lo miro con detalle.
LAURA: ¿El Hombre de Vitruvio de Da Vinci? ¿Por qué te lo hiciste?
YO: Da Vinci me parece un genio y las proporciones que dibujó me parecen increíbles.
LAURA: (riendo) vos sos un nerd como yo, me encanta.
YO: gracias Lau… ¿te puedo decir Lau no?
LAURA: Si, no tenemos que ser formales, no soy ese tipo de profesora.
YO: buenísimo entonces
Laura se incorporó y agarró su mochila indicando que se iba pero enseguida le interrumpí el paso .
YO: Lau sabes que me quedé pensando con lo.que me dijiste el lunes.
LAURA: qué cosa? ¿Lo de Juli?
YO: no, ese es un tema terminado… lo de poder preguntarte.
LAURA: Ah sí… decime.
Volvió a dejar su mochila en la mesa y apoyó su culo como si fuese un taburete
YO: es que hay algo que no entiendo de las chicas
LAURA: vas a tener que ser más específico para que te ayude, tranqui, podes ser directo.
YO: Ok, estoy viéndome con una chica, una vecina que es un poco más grande que yo, y casi siempre uso preservativo pero hay días en los que ella está como loca y ni siquiera llegó a ponérmelo que ya estamos cogiendo.
Me había dicho que sea directo así que aproveché para ser directo y decir “coger”
LAURA: Mmm y decime cuando pasa eso, a la semana es igual?
YO: No, después es todo más tranqui, es solo una ves en el mes masomenos. No sé…
LAURA: Mira , seguramente es porque está ovulando. En ese momento del periodo La mujer hormonalmente esta muy estimulada y deseante. ¿Me entendes? Tenes que tener cuidado porque también es el momento donde más proclive está para quedar embarazada así que ni se te ocurra volver a permitirlo. Es super peligroso por las enfermedades también. ¿Acabaste adentro?
YO: no profe, eso nunca, siempre acabo afuera si no uso preservativos.
LAURA: bueno, al menos eso reduce las posibilidades de embarazo… pero no se te ocurra hacerlo nunca más eh y deberías hacerte estudios ya que estas.
YO: bueno profe no me retes… así que es por la ovulación? Y a vos también te pasa? (Por dentro seguía intentando saber hasta qué punto llegar en la conversación)
Laura se puso colorada y corrió la vista mirando hacia la puerta, de la cual no entraba ni salía nadie…
LAURA: emmm, si, a todas nos pasa. Y a ustedes los varones en la adolescencia pareciera que están ovulando todos los días.
YO: Jajajaj por qué?
LAURA: Porque los veo… déjalo ahí. Me voy que tengo que irme a otra escuela. Chau Julian, portate bien.
Me sonrió mirándome a los ojos, agarró su mochila y salió… Yo quedé con el borrador en la mano y obvio me di vuelta para ver ese culo desfilar hacia la puerta. Creo que ella ya sabía de mis miradas y por eso me había dicho lo que me dijo.
Esa tarde le mande un mensaje a mi vecina diciéndole que quería verla, al toque me respondio que vaya y cuando llegué a su casa me avalancé sobre su boca y apoyé todo mi miembro sobre su vientre.
Anabel era bastante linda, se cuidaba mucho la piel y la estetica en general. Ese tipo de mujer que siempre huelen bien y tienen la piel suave, eso me gustaba mucho… bueno eso y sus tetas. No porque fuese tetona en sí, sino que por la forma de su cuerpo sus pechos naturales eran muy hermosos, tenía los pezoncitos rosados y chiquitos y combinado con su piel y su olor hacía que sea mi merienda preferida.
ANABEL: qué pasó qué estás tan caliente pendejo?
YO: vos me pones así. (Apreté su colita con las manos y la traje hacia mí mientras besaba su cuello y su pecho)
ANABEL: Mmm que rico, cómeme toda. Sácame el corpiño.
Con una mano le desabroche el corpiño y empecé a comerle las tetas como un desesperado, mientras las chupaba no podía dejar de imaginar los limoncitos de la profe, esa blusa y ese escote me habían dejado como loco.
ANABEL: Si bebé,comete todo esto.
Yo con la boca lamia y mordía despacito sus pezones y con la mano empecé a buscar su conchita qué al encontrarla ya estaba completamente húmeda… empecé a pajearla mientras la miraba a los ojos y ella se deshacía de placer. Todo esto sucedía estando parados, ella derretida contra la pared disfrutando de cómo la tocaba y gimiendo como una verdadera puta.
ANABEL: Ufff mira lo mojada que estoy, dame pija pendejo.
Se agacho, me bajo el jogging y liberó una pija qué estaba dura y caliente desde la mañana con Laura. Enseguida se la llevó a la boca y mientras jugaba con su lenguita por la cabeza yo la agarre del pelo para guiarla, quería llenarle la boca de pija, estaba con un nivel de excitación extremo. Apenas empezó a metersela en la boca yo tironie del pelo para que se la coma toda, y a los segundos afloje para que respire. Se le habían puesto los ojos llorosos.
ANABEL: Hijo de puta, que dura tenes la pija.
YO: Hoy te voy a coger la boquita vecina
Con la mano enredada en su pelo seguía guiando las embestidas de pija, qué ella recibía contenta. Me miraba a los ojos y eso me volvía loco. Le dije que vayamos a la habitación y apenas llegamos a la cama se puso en 4 y me dejo toda la colita disponible para mi, tenía una colaless blanca muy chiquita que con mis dedos la corrí y comencé a comerla toda. Mientras con mis manos apretaba y abría sus cachetes, con la lengua recorria su clitoris, pasaba por su vulva y terminaba lamiendole la cola, podía sentir en mi boca el sabor de su calentura. Cada vez que sentía mi lengua, ella se inclinaba y gemía más fuerte.
ANABEL: por favor dame pija, quiero sentirte adentro.
YO: bueno, para que me voy a poner un forro.
Las palabras de la profe me habían dejado en estado de alerta y no quería tener ningún problema así que me prometí ser responsable.
ANABEL: bueno pero apurate que te quiero adentro mio.
Apenas sintió la pija entrando largo un gemido largo y profundo como mi embestida. Empecé a cogerla apretandole el orto.
ANABEL: Así así, dale cogeme fuerte.
Su voz entre cortada me calentó mas aun asi que le di un buen rato hasta que ella empezó a tocarse la conchita, cerró los ojos y empezó a acabar mientras yo seguia cogiendola bien profundo, ahi aproveche cada embestida para sentir cómo su cuerpo llegaba al éxtasis de placer. Enseguida aumenté el ritmo y acabé de una manera bestial, y me tumbé jadeante al lado de su cuerpo húmedo aún estremecido.
VECINA: Dios, que rico me hiciste acabar… Estabas muy caliente hoy.
Ni siquiera le respondí, pero internamente sabía que toda esa tensión sexual que había acumulado tenía profesión y nombre… PROFE LAURA.
CONTINUARÁ
1 comentarios - Laura, la profe de física. Consejera sexual. P. 2