Mi novio me convenció y ahora no se parar

Además, tú también lo estás pasando mal porque a ti también te limita mucho. Han pasado ya meses sin que aparezca un esbozo de nuestro hijo y nunca te has quejado, pero yo te veo cada vez más preocupada y últimamente menos feliz, como insatisfecha con el sexo que tenemos.
A lo que Chus respondió:

Sí Juan, yo lo echo mucho de menos. Pero la idea de quedarme embarazada de ti lo compensa todo. Sin embargo en ti sé que es distinto. Y he estado pensando algo: quiero que tú sigas teniendo sexo con otras mujeres. Podemos quedar con ellas y los dos lo pasaremos bien. Lo único que te pido es que la primera eyaculación siempre sea dentro de mi. Así aumentaremos las posibilidades de embarazo.
Mi respuesta fue:

Pero yo no quiero que tú no disfrutes; que tú no tengas sexo con otros. Quizá podríamos quedar con parejas sin que él eyaculara dentro de ti, o que uséis preservativo.
No estaba dispuesto a disfrutar yo solo penetrando a otra mujer y que Chus no se sintiera llena de otro hombre. Pero ese era el dilema a resolver.

En los días siguientes no dejé de darle vueltas al asunto. Sabía que Chus era difícil de convencer y hacerle cambiar de opinión. Pero me preocupaba que durante el tiempo que estuviéramos buscando el embarazo ella se viera privada de lo que tanto le gustaba. Por más que pensaba en una forma de solucionarlo, no se me ocurría ninguna.




Y como siempre, fue Chus quien propuso el camino a seguir.

… Continuará