Mi vecinita me muestra lo que sabe hacer. Parte 02

Para los que no leyeron la Parte 01, les dejo el link en seguida:


http://www.poringa.net/posts/relatos/5584428/Mi-vecinita-me-muestra-lo-que-sabe-hacer-Parte-01.html



Siguiendo con la historia..., ver la insinuación en su rostro y dándome el permiso a seguir jugueteando, le tome la mano y procedí a subirla al sillón, le dije: Primero recuéstate y ponte cómoda; Ana siguió mis instrucciones y se sentó, pero sus manos rápidamente se dirigieron a sus rodillas y me percaté que se había puesto nerviosa, como un reflejo. Tal vez se dio cuenta que las cosas estaban escalando muy rápido, o simplemente era la vergüenza de anticipar que un chico estaba por mirar su zona mas íntimas.

Fuera la opción que sea, estaba nerviosa, así que mi deber era hacer que se sintiera cómoda y se dejara llevar, por lo que primero me senté a su lado y comencé a acariciar sus manos, las tomé y besé poco a poco, primero su muñeca, después por su brazo, beso a beso hasta llegar al cuello, mientras le susurraba que no haría nada que no me permitiera o que no le gustara, que podía detenerme cuando quisiera.

Me di cuenta que comenzó a relajarse y dejarse llevar, y mientras yo besaba su cuello y bajaba poco a poco, abría su vestido para dejar entre ver sus pechos, dos pequeños y blancos senos, firmes y suaves al tacto. Comencé a chuparlos y jugar con mis dientes en ellos, mordisqueando sus pezones tan suavemente como morderías un par de uvas sin partirlas y romper su delgada cascara. En esos momentos me di cuenta que su mano se había dirigido a mi pene lo apretaba sobre el bóxer con una mano y con la otra comenzó a abrazar mi cabeza, presionando mi cara contra sus pechos diciendo que se sentía rara, pero que siguiera.

Sus gemidos iban en aumento mientras yo seguía mi descenso, recorriendo su vientre, continuando a la parte interna de sus piernas y rodeando al rededor cada parte de piel que su ropa interior me permitía ver.

Hice un pequeño alto y le pregunté, quiere que continúe, y ella sin decir palabra solo asintió.
-Entonces muéstrame que hay debajo, le dije mientras miraba sus pantis. Ana solo pudo decir, me da vergüenza, mientras su mano se acercaba a su vientre y yo esperaba que me diera su aprobación.

Para este punto yo ya estaba de rodillas frente a ella y podía ver su figura semidesnuda frente a mí.
y al poner atención noté que un poco de humedad se estaba impregnando en la tela de su ropa interior. Por lo que me acerqué y le dije, creo que tu cuerpo dice que siga. Ana se puso mas colorada de lo que ya estaba y observaba como me acercaba a su zona íntima, donde me detuve a escasos centímetros y le volví a preguntar, puedo seguir?

Ella volvió a asentir y comencé a lamer justo la parte de la tela que estaba húmeda, en el instante que lo hice, emitió un gemido y sus piernas atraparon mi cabeza, mientras sus manos sujetaban mi cabello, pero sin apartarme, sentía como sus manos se debatían entre alejarme y acercarme, al mismo tiempo que se estremecía cada vez que mi lengua recorría la tela sobre su vagina. Lo estaba disfrutando, y sabia que tenia camino libre. Con la lengua comencé a recorrer cada pliegue y tocar a través de la tela su vagina, cuando vi que la tela se empapaba de sus líquidos le pedí que bajara su ropa interior y al instante lo hizo, por lo que pude ver por primera ves su pequeña y linda vagina, totalmente empapada, un poco rosada, tal vez por juguetear sobre su panti, y tuve un impulso de arremeter contra ella en ese instante, pero volví a recordar que no teníamos protección así que no se podía.

Aprovechando que se estaba quitando la ropa interior, procedí a desnudarla completamente, quería verla, un espectáculo solo para mis ojos. No se como pude contenerme, pero sabia que debía hacer lo posible por cuidarla, era su primera experiencia, no era momento de comportarme como un degenerado, jajaja.

La volví a acomodar en el sillón y levanté un poco sus piernas para ver todo aquello que estaba listo y servido para mí.



Era muy linda.

Sabia por instinto que nadie había cruzado por allí, y estaba ahí para mí. Me abalance sobre ella, y comencé a lamer, besar, chupar, morder, todo lo que pudiera hacer con mi boca y mis manos.

Sus gemidos comenzaban a subir de volumen, por lo que subí el volumen de la película con el control remoto y con una mano traté de tapar su boca, a lo que ella, en el calor del momento, comenzó a chupar mis demos, mientras decía, se siente rico!!, traté de introducir un dedo pero pasando de cierto punto la lastimaba, así que me di a la tarea de hacerle un oral que recordara el resto de su vida, de ser posible. Entre más sentía cómo se ponía de caliente, mas caliente me ponía yo. Comenzaba a pedirme más, que la lamiera más, que la dejara chupar mi pene, así que le pedí que se recostara completamente en el sillón y procedimos a hacer un 69, coloqué mi pene en su boca mientras lamia su vagina, que en ese momento ya era una fuente interminable de liquido.

Así estuvimos unos momentos cuando noto que deja de chupar mi pene y empieza a retorcerse y temblar ligeramente. Estaba teniendo un orgasmo!! (no sabes lo orgulloso de mi mismo que me sentía en ese momento, jajaja).

Me levanté para dejarla respirar y recomponerse, y le pregunté como se sintió, a lo que tapándose un poco la cara contestó, Bien, no sé, rico, siempre se siente así?, y le traté de explicar que eso dependía de muchas cosas, pero en general, si estas con una persona con la que tienes la confianza de experimentar, siempre se sentirá bien cada descubrimiento.

La ayudé a sentarse, y al vernos todos sudados, comenzamos a reír. Ese sentimiento de complicidad estaba en el aire cuando me dice, tu ya lo has hecho?. mi amiga dice que duele las primeras veces, pero después se siente rico, creo que ya se a que se refiere, cuanto tu... si sentí que dolía y solo era tu dedo, no creo que se sienta menos con eso, decía mientras señalaba mi pene que seguía erguido.

Le dije que si, que ya lo había hecho antes, con una exnovia con quien perdí la virginidad. Aunque ella ya no era virgen, por lo que no supe ni pregunté como fue su primera vez.

-Me enseñas?

No lo pensé dos veces. Quería hacerlo desde que me dijo que sabia hacer sexo oral. Así que la tomé y me la llevé a la cama.

Le pedí que se pusiera en cuatro, a lo que no me entendió exactamente como, por lo que procedí a darle instrucciones, muéstrame tu trasero, baja un poco tu espalda y levanta la cadera, y en esa posición volví a lamer su vagina desde el costado de mi cama. Su trasero estaba completamente a mi merced, y quería metérsela como si no hubiera un mañana.



Me acerqué a su vagina, y comencé a masturbarla utilizando mi pene, removiendo su humedad de un lado a otro, pasándolo por encima de su ano y su vagina, llenando de humedad toda la zona, pero al tratar de introducirlo, algo en mi cabeza me dijo: ALTO!!

No se que pasó, simplemente se me bajó.
Un instinto me dijo, no te metas en problemas. Podrías dejarla embarazada, vas iniciando la universidad, no es obligatorio que sea hoy, ve poco a poco.

Así que solo seguí tocando, acariciando su trasero, volviendo a lamer su vagina cuando de repente ella me dice, espera, espera, creo que no quiero hacerlo todavía. Tengo miedo...

Traté de explicarle que yo también estaba considerando no hacerlo, principalmente porque no teníamos preservativos. Así que simplemente nos recostamos y empecé a acariciarla.

Comenzamos a platicar de lo que habíamos hecho y como se había sentido, me rebeló que solo una ves intentó masturbarse pero no sabia como y no se sintió rico. Me platicó de su amiga, de como ella lo hizo desde poco después de entrar a la prepa, y entendí que parte de su interés en el sexo era por presión social, no quería quedarse atrás.

Después de un rato nos vestimos y me dijo que le había encantado todo, que tal ves otro día podríamos repetir, yo le dije, por supuesto, cuando gustes. jajajaj. Un momento mas tarde escuchamos que llego su hermana a su casa y se despidió y se fue, diciendo que me vería al día siguiente.

Yo no hice mas que recostarme en el sillón sin poder creer todo lo que había pasado, y preguntándome por qué se bajó. Nunca me había pasado, aunque nunca había estado en la situación de robar la virginidad de una chica.

Pero a pesar de que no lo hice, sentí que no estuvo mal, mi instinto me ha ayudado en otras ocasiones, así que confiaba en que no había nada de que arrepentirse.

Como espóiler, nunca lo hicimos. En otras ocasiones volvimos a tener encuentros similares, manoseos y demás experiencias superficiales, hasta que unos mese después empezó a salir con un compañero de su escuela y dejó de visitarme. Después me enteré que ese novio la dejó embaraza. al parecer si se dieron vuelo pero no se cuidaron y a la primera, premio mayor...



Aquí termina este relato, tal vez es real, tal vez es ficción, no creo sea necesario especificarlo.
Espero lo hayan disfrutado. En unos días subiré otra historia, tengo varias en mente que podrían interesarles, aunque también me gustaría conocer sus anécdotas en los comentarios.
Nos vemos.