Mi novia me graba mientras su macho me usa (relato sissy)

Para los que no saben, a mi novia hace buen rato se la viene cojiendo un macho, me hace llamarlo papi y está controlando junto con mi novia mi progreso como sissy. Siempre que viene a casa se encarga de chequear que mi castidad esté bien apretada, mi culo llenito y abierto y pantis. Dice que quiere que sea lo más nena posible en todo momento, así que la última vez que vino y yo no llevaba pantis puestas, me puso contra la mesa y me nalgueó hasta que mi cola quedara totalmente roja como castigo.
El otro día estuvo en casa, cojiéndose a mi novia mientras que yo cocinaba. Yo estaba en un shorcito de nena, pupera, bra y pantis, y podía sentir mi clitti contra la castidad y mi conchita llena, muerta de ganas de sentir verga de macho. Hace tanto no toco a mi novia que casi me olvidé cómo es, pero cada vez deseo más sentir a papi dentro mío, y ser lo más mariconcita posible para contentarlo.
Mientras la comida estaba en el fuego, yo me senté en el sillón mientras oía a papi y mi novia coger, y muy de a poquito fui bajando la mano hacia mi culo. El problema es que tengo prohibido meterme dedos solita (papi dice que debo meterme los dedos solo para excitar a un macho, el placer de las sissys como yo no importa) y todavía no puedo frotar mis tetitas porque las perforaron hace poco, así que me quedé con la mano ahí, muy caliente pero queriendo obedecer a papi. Entonces de a poco llevé la mano a mi castidad por sobre mis shorts, apretando un poco sin poder sentir mucho. Puse dos dedos por encima del plástico y la tela, casi en la punta de la caja, y aunque no sentí nada me sentí tan puta y sissy por abrir las piernas para masturbarme como si tuviera un clitti de verdad. Me puse a frotar la caja, frotando la cola contra el sillón con las piernas bien abiertas, gimiendo por lo negada que me sentía.
Estuve así un buen rato, hasta que papi salió de la habitación y me encontró así.
-Que pasa mariconcita? Te gusta tocarte como nena?
-Sí papi -le respondí sin parar. Para mí, no estaba desobedeciendo. -Me encanta no sentir mi clitti.
Se rió y llamó a mi novia, que se asomó para verme. En vez de decirme algo, me preguntó por la comida y fue a checkearlo, ignorándome.
-esto ya está -dijo-, vamos a comer. Vos mariconcita, abajo de la mesa.
Puso ella la mesa y apenas se sentaron yo fui abajo, directo a las piernas abiertas de papi para sentir su bulto, todavía flácido pero tan grande y viril. Lo toqué por sobre el pantalón un rato hasta que se paró, y cuando estaba por bajarle el cierre él me pateó.
-Que ganas tenés de verga eh, vas a tener que esperar. Seguí como antes.
Yo estaba tan necesitada de verga, aunque fuera en mi boca, pero obedecí y seguí así hasta que terminaron de comer, rápido por suerte.
Entonces papi fue al sillón y me explicó que tenía que hacer: iba a sacarse la verga del pantalón y yo me iba a frotar contra ella, pero sin sacarme ni mis pantis ni mi short. Nomás podía frotar el culo contra su verga y masturbar mi cliti como antes, frontando por sobre el plástico sin sentir nada.
Estuve así unos minutos, desesperada intentando sentir lo dura que estaba esa verga contra mi conchita, gimiendo cada que él decidía darme una nalgada y dejarme la mano marcada. Me sentía tan tonta y sissy, usada para el entretenimiento de mi macho y su hembra, porque mi novia sería mi novia pero papi es quien se la coje y la satisface. Cuando ella empezó a grabar con el celular y me dijo que le dijera a la cámara que estaba haciendo, yo me puse toda roja y empecé a gemir en voz alta, excitada por la humillación.
-estoy frotando mi conchita contra la verga de papi -le dije a la cámara con mi voz de nena- y toco mi castidad como si fuera un cliti...
-puedes sentir algo, putito?
-solo la verga de papi contra mis shorts...
-entonces por qué gimes tanto si no sientes nada
-porque me encanta ser un putito y satisfacer a papi!
Mi novia se rió mucho y grabó un rato más, hasta que se cansó. Papi pronto me hizo parar de frotarme y se hizo una paja hasta venirse en mis shorts. Yo, obviamente, quedé caliente y necesitada, y papi ni siquiera me dio permiso para meterme mi dildo. Creo que le divierte verme así de tonta.