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Mago, bruja y viuda

Mago, bruja y viuda
trio
“¡Ah! ¡Ah , sí! ¡Sí, Harry, eso es tan bueno! ¡Sigue jodiéndome, así como así!

Natasha Romanoff se mordió el labio, sus celos y su lujuria anularon su sentido común mientras se acercaba a la puerta cerrada detrás de la cual su hijo adoptivo se estaba follando a su novia.

A Natasha le gustaba Wanda Maximoff, realmente le gustaba. La niña se había encontrado en Londres, tratando de forjarse una nueva vida después de que Hydra había experimentado con ella y su hermano (que no había tenido la suerte de escapar con su hermana).

La niña rápidamente se había hecho amiga de Harry, y Natasha había Ella también le gustó de inmediato.

En muchos sentidos, la historia de la vida de Wanda le recordó a su yo más joven, y Harry probablemente sintió lo mismo con respecto a la vida que había vivido antes de que ella lo encontrara solo bajo la lluvia.

Tal vez eso fue lo que atrajo a la mujer más joven hacia su hijo adoptivo, o tal vez fue simplemente lo jodidamente sexy que era (en la opinión nada sesgada de Natasha).

Fuera lo que fuera, Wanda lo había invitado a salir hace unos meses. Harry había acudido a Natasha en busca de ayuda sobre cómo decepcionarla suavemente sin perder su estrecha amistad.

Cuando Natasha le hizo admitir que probablemente habría aceptado sus sentimientos y habría salido con ella si no fuera por su relación de amor ilícita con la mujer que lo había criado, lo sorprendió animándolo a hacerlo.

Él no tenía ninguna buena razón para rechazarla ya que no podía decir exactamente que se estaba tirando a su madre adoptiva, y dado que los dos nunca podrían estar juntos públicamente, ella no veía ninguna razón para que él no saliera con una chica que honestamente le gustaba y era. atraído a. Y de todos modos no era como si ella lo estuviera abandonando. Habían continuado su propia relación en secreto, a puerta cerrada.

"¡Tan bueno! ¡Me estás jodiendo tan bien! "

Sin embargo, hubo un problema con eso. Su nueva novia rápidamente había monopolizado todo su tiempo.

Para una mujer que estaba acostumbrada a ser el centro de su vida, especialmente durante el último año después de que él admitiera sus sentimientos y se convirtieran en mucho más que madre e hijo, se había vuelto más difícil de lo que esperaba. retroceda y observe cómo otra chica entraba y ocupaba un lugar tan destacado en su vida.

No había duda de ello; Natasha estaba celosa. Quería los ojos de Harry sobre ella otra vez, quería su polla dentro de ella otra vez, quería follarlo cuando quisiera sin tener que competir por su atención. Pero no quería arruinar lo que había encontrado con Wanda

. A ella le agradaba la mujer más joven, y era obvio lo encariñado que Harry se había vuelto con ella y lo feliz que estaba con ella. La madre que había en ella, la que quería lo mejor para su hijo adoptivo, nunca soñaría con quitarle la felicidad que había encontrado.

Pero la mujer que había en ella, la que se había vuelto tan irremediablemente adicta a su polla, no iba a aceptar que la dejaran en el frío por más tiempo.

Se quedó afuera de la puerta de Harry por unos segundos más, observando, escuchando, esperando que llegara el momento adecuado.

Y tan pronto como escuchó los gritos de Wanda alcanzar un decibelio más alto, Natasha giró la perilla y entró en la habitación de su hijo.

“¡Oh Dios, qué bien , qué bien! Wanda estaba balbuceando, su pecho palpitaba y sus ojos medio cerrados mientras Harry la follaba hasta un clímax satisfactorio.

Natasha conocía bien el sentimiento y lo que le hacía, y confiaba en que tuviera un efecto similar en Wanda. Necesitaría toda la ayuda que pudiera conseguir para lograrlo.

"Eh, ¿mamá?" Harry estaba confundido, pero no pretendió no estar fascinado por su cuerpo desnudo. "Sabes que no estoy solo aquí, ¿verdad?"

Los ojos de Wanda se abrieron y miró a Natasha como si pensara que su mente podría estar jugándole una mala pasada.

Era comprensible; La propia Natasha había sido follada muchas veces hasta el estupor por la polla de su hijo. Por eso había elegido ese momento exacto para entrar.

"¿Mmm? ¿Natacha? ella murmuró. Se puso la mano en la frente sudorosa y se frotó la sien. “¿Q-qué está pasando…?”

Su reacción habría sido muy diferente y mucho más fuerte si hubiera tenido la cabeza despejada, Natasha estaba segura.

Eso es lo que hizo que éste fuera el momento perfecto para atacar. Entra mientras su cabeza todavía estaba en las nubes, y para cuando pudiera volver a pensar racionalmente, estaría demasiado enganchada al placer como para alejarse.

"Estoy cansada de que me dejen en el frío, Harry", dijo simplemente Natasha. "Tu madre se está sintiendo sola y necesita tu polla".

" Entra aqui." Los ojos de Harry estaban nublados por la lujuria mientras miraba el cuerpo desnudo de su madre. Ella había pensado que él podría necesitar un poco más de convencimiento, sólo por el riesgo que estaban tomando y lo radicalmente que estaban alterando todo, pero debería haberlo sabido mejor.

Fue él quien empezó todo esto en primer lugar, él quien confesó sus sentimientos por la mujer que lo había adoptado y la convenció de tener relaciones sexuales con él.

Por supuesto que estaría abierto a esto. Probablemente había tenido fantasías de follar con su madre y su nueva novia al mismo tiempo. No había manera de que dejara pasar una oportunidad como esta.

Ella felizmente se arrastró sobre la cama mientras Harry le sacaba la polla a su exhausta novia y la giraba sobre su espalda. Natasha se emocionó al notar que todavía estaba duro.

"Ven a meterte entre sus piernas", dijo, dirigiendo la atención de Natasha hacia Wanda. La mujer más joven la miró desde entre sus piernas, parpadeando cuando Natasha se puso de rodillas y abrió las piernas aún más. Natasha no necesitaba que le dijeran qué hacer.

Comenzó a lamer el coño de Wanda inmediatamente. Ella quería ser una buena madre putita para Harry y quería mantener a su novia atrapada en el vago placer que actualmente la tenía tan delirante e incuestionable ante esta locura, pero tampoco había duda de la verdad de que quería probar a la otra mujer. también.

El sabor de Wanda no defraudó. Después de dar sus primeras lamidas más ligeras a los labios vaginales de la mujer más joven, Natasha la abrió, enterró su cara entre sus muslos y comenzó a comérsela en serio.

Wanda gimió y sin pensar jorobó sus caderas contra su cara, probablemente demasiado cachonda y demasiado fuera de sí para importarle que fuera la madre adoptiva de su novio la que la estuviera lamiendo mientras sus labios y lengua siguieran haciendo su trabajo.

Habían pasado años desde que Natasha había caído sobre una mujer, pero no había perdido ni un ápice de su antigua técnica. Movió su lengua de un lado a otro, sin darle a Wanda ni siquiera un momento para intentar recuperar el control de su mente o sus sentidos.

La neblina definitivamente no se había disipado; agarró el largo cabello rojo de Natasha, echó su cabeza hacia atrás y gimió como un animal al recibir su placer. Tenía que estar sufriendo una sobrecarga sensorial, siendo devorada así justo después de haber sido conducida a un orgasmo alucinante por Harry y su gran polla.
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El cuerpo de Natasha se tensó cuando sintió las manos de Harry en sus caderas y la cabeza de su polla presionando contra su coño, pero continuó concentrándose en darle a su novia el mejor cunnilingus que podía brindarle.

Incluso cuando su hijo empujó hacia adelante y enterró su polla dentro de ella, ella no cesó en sus esfuerzos orales en lo más mínimo.

Fue una tarea más desalentadora de lo que ella hubiera esperado. Conocía el cuerpo de otra mujer, y no era como si no estuviera acostumbrada a ser follada por la gran polla de Harry, incluso si no lo había estado recibiendo tan a menudo como le gustaría últimamente.

Sin embargo, lidiar con ambos al mismo tiempo fue un desafío incluso para la Viuda Negra. Harry sabía exactamente lo que ella necesitaba sin que ella tuviera que pedírselo y se lo dio. No perdió el tiempo andando por las ramas aquí;

La folló con embestidas profundas y contundentes desde el principio. El thwap thwap thwap de sus caderas golpeando contra su redondo trasero con cada embestida se mezcló muy bien con los balbuceos incoherentes y los gemidos y gemidos sin sentido de Wanda, creando un gran placer para los oídos de Natasha.

Había pasado bastante tiempo desde que escuchó algo que sonara tan erótico y carnal, especialmente porque le llegaba desde ambos extremos de su cuerpo.

Sin embargo, la banda sonora no se podía comparar con el puro placer físico que estaba obteniendo, el placer que sólo su hijo podía brindarle. Habían pasado años desde que cualquier hombre que no fuera él se la hubiera follado, y si ella se salía con la suya, ningún otro hombre lo volvería a hacer.

Nunca nadie la había follado tan bien ni la había ajustado tan perfectamente. Él era su hombre, y esta era su polla que empujaba tan profundamente dentro de ella, que la hacía sentir cosas que nunca antes había sentido.

Él era suyo y nunca lo dejaría ir. Sin embargo, no le importaba compartirlo, al menos no con esta chica amable y encantadora que significaba tanto para él y que sabía tan dulce en su lengua.

Fue sólo a través de un esfuerzo serio y concentrado que Natasha pudo mantener el ritmo y no aflojar en el cunnilingus, pero estaba comprometida a darle a Wanda lo mejor de sí misma.

Eso no era sólo porque quería seguir empujando el placer hacia ella para poder concentrarse en nada más cuando recordara esta noche, sino también porque simplemente quería hacer feliz a la otra mujer.

A ella le agradaba Wanda y, lo que es más importante, le agradaba a su hijo y ella lo hacía feliz, por lo que quería hacer su parte para hacer feliz a su novia también. Incluso con la gran polla de Harry tocando fondo dentro de ella, golpeando su necesitado coño y dándole la cogida que no había tenido suficiente durante los últimos meses, todavía no descuidó a Wanda.

Siguió con la lengua y también involucró los dedos, frotándola y metiendo los dedos dentro para tocarla suavemente. A diferencia del desafortunado golpe con el dedo que Harry intentó darle durante su primera vez, Natasha sabía exactamente lo que estaba haciendo aquí.

Buscó el punto G de Wanda y lo acarició con dos dedos, lo que hizo que el balbuceo de la mujer más joven se volviera aún más fuerte y difícil de entender.

Cuando combinó esto con hacer círculos con su lengua alrededor de su clítoris, las caderas de Wanda se levantaron de la cama y sus piernas se apretaron alrededor de su cabeza.

Había una razón por la que Natasha de repente incrementó sus esfuerzos por complacer a Wanda. Quería asegurarse de que la otra mujer tuviera un segundo orgasmo y no sabía cuánta concentración podría darle cuando llegara su propio orgasmo, y podía sentir eso surgiendo dentro de ella en muy poco tiempo.

Sabía que no pasaría mucho tiempo; Estaba corriendo contra el reloj y contra su propio cuerpo, tratando de hacer que Wanda gemiera, gritara y chorreara antes de que la gran polla de Harry la obligara a hacer lo mismo.

Estuvo cerca, pero entre su lengua sobre su clítoris y sus dedos curvándose hacia adentro y acariciando el punto G de Wanda, Natasha logró su objetivo. Fue Wanda quien se rompió primero, retorciéndose en la cama mientras la conducían a su segundo orgasmo (y esos eran solo los que Natasha realmente había escuchado

. ¿Quién sabía lo que Harry le había hecho antes de que ella llegara a casa?) Con la esperanza, Wanda era una squirter. Ella también gritaba, por supuesto, pero Nat ya lo sabía.

Después de todo, la había oído llorar muchas veces desde que se había juntado con Harry. Sin embargo, esta era la primera vez que lo escuchaba tan cerca y, obviamente, la primera vez que era responsable de ello.

Mirar hacia arriba y ver su bonita cara arrugarse mientras alcanzaba su punto máximo fue muy divertido, al igual que escucharla gritar con tanta fuerza que Natasha estaba segura de que su voz estaría áspera al día siguiente. Podía entender por qué Harry no podía tener suficiente de ella.

Sin embargo, no podía tener suficiente de su madre adoptiva, algo por lo que Natasha estaba eternamente agradecida.

Su polla se estrelló profundamente contra ella y rozó constantemente su punto G durante sus viajes dentro y fuera de ella.

Había sentido la presión acumularse dentro de ella y había estado luchando contra ella en su intento de hacer que Wanda se corriera primero, y ahora que lo había logrado no tenía reparos en ceder, dejarse llevar y disfrutar la emoción de ser follada. hasta su finalización por Harry y su polla perfecta.

Quería gemir, gritar , hacerle saber cuánto lo amaba, pero su rostro todavía estaba enterrado entre los muslos de Wanda.

Sus piernas todavía apretaban su cuello y la mantenían en su lugar, por lo que Natasha no podía ir a ninguna parte, y cualquier intento de hablar con su hijo habría sido sofocado por el coño de su novia. Estaba segura de que él todavía sabía cuánto lo disfrutaba de todos modos.

¿Cómo podría no hacerlo, con lo desesperada que ella siempre estaba por su polla y lo fuerte que él siempre la hacía correrse?

Tal vez no podía oírla gritar de placer al cielo, pero no había manera de que pudiera pasar por alto la forma en que ella se apretaba alrededor de su pene y hacía que sus embestidas fueran aún más fuertes.

Harry era observador y ella lo había entrenado para que pasara de ser un virgen talentoso pero inexperto a convertirse en un amante experimentado capaz de darle a ella, y ahora a Wanda, todo lo que pudieran necesitar.

Lo que Natasha había necesitado de él en ese momento era un polvo bueno, duro y directo al grano, y él se lo había dado con creces.

Así como Natasha se había rendido una vez que había conseguido que Wanda tuviera un orgasmo, Harry también se relajó después de sentir el coño de su madre adoptiva contraerse alrededor de su polla.

Sin embargo, relajarse podría no haber sido la mejor palabra para eso, porque sus caderas en realidad se aceleraron y golpearon contra sus nalgas aún más fuerte ahora.

Lo que estaba haciendo era soltar las riendas que tenía sobre su control y darle todo lo que tenía en nombre de correrse tan pronto como pudiera.

Tampoco pasó mucho tiempo. Después de unas cuantas embestidas más profundas y contundentes, empujó su polla hasta el fondo de ella, tan profundamente que sus pelotas presionaron contra su trasero, y disparó su semen dentro de ella.

Natasha, que no había sentido que él la llenara en casi una semana entera, gimió en el coño de su novia. No podía quedar embarazada, pero eso no significaba que el deseo instintivo de ser reproducida no lo hiciera aún más caliente cuando él la invitó a un creampie.

"Bueno", comenzó Harry, sonando al menos ligeramente sin aliento. "Esa fue casi todas las fantasías sexuales que he tenido en los últimos meses, todas juntas". Le sacó la polla a Natasha y ella se giró sobre su espalda después de finalmente quitarle las piernas a Wanda de su cuello. Se sentó y le sonrió a su hijo, que estaba sentado en cuclillas y secándose la cara sudorosa.

"¿En serio, Harry?" ella preguntó. Ella sacudió la cabeza y le hizo un chasquido. “¿Eso es lo mejor que puedes hacer? Me avergüenzo de tu falta de creatividad”.

"¿Disculpe?" Él arqueó las cejas y la miró fijamente como si ella estuviera diciendo tonterías. “Simplemente me follé a mi novia y luego me follé a mi madre adoptiva por detrás mientras ella se comía a dicha novia. ¿Cómo es que eso no es creativo? ¡Suena como la trama de una película porno de un maldito sitio web fetichista!
Natasha Romanoff
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“Claro que sí”. Natasha se encogió de hombros, indiferente. “¿Pero es eso realmente todo lo que se te ocurre? Vamos, Harry. Hay mucho más que podemos hacer juntos. Nosotros tres, claro.

“¿Nosotros tres?” el Repitió. “¿Eso significa que esto, eh, no fue algo único?” Él no podía ocultar lo esperanzado que estaba y eso la hizo sonreír.

"Supongo que eso realmente depende de ti y de tu novia", dijo. “Pero sé cuál es mi situación. Es una mierda tener que ocultar lo que siento por ti. Siempre hemos lidiado con eso, desde que nos juntamos, pero he tenido que contenerme para no lanzarme mucho más hacia ti ahora que Wanda está en la foto”.

"No lo sabía", comenzó, pero ella lo interrumpió de inmediato.

“No te culpo a ti ni a ella”, se apresuró a decir. “Te animé a aceptar sus sentimientos y me alegro de haberlo hecho. Ella es genial y puedo ver lo feliz que te hace. Nunca me arrepentí de haberte dicho que le dijeras que sí. Es simplemente una mierda, ¿sabes? ¿Tener que pasar mucho más tiempo ocultando lo que realmente siento por ti y lo que quiero hacerte?

"Así es", estuvo de acuerdo asintiendo.


“Pero el gato ya está descubierto, ¿verdad? Ya no tenemos nada que ocultarle. Y ahora que todos los secretos han salido a la luz, al menos entre nosotros tres, piensa en todas las cosas diferentes que podríamos probar juntos.

"Mmm." Cerró los ojos y una sonrisa soñadora apareció en su rostro. “Sí, puedo verlo. Definitivamente puedo verlo. ¿Y tú, Wanda? Sé que todo esto es una locura y surgió de la nada, pero ¿qué…?

"Tendrás que preguntarle más tarde, Harry". Natasha giró la cabeza por encima del hombro, donde Wanda estaba con los brazos extendidos y se desmayó en la cama. "Le has jodido toda la vida, al menos por ahora".

“Tú ayudaste”, señaló. “Tú fuiste responsable de su último orgasmo. Incluso puedo ver algunas de las pruebas en tu cara”. Se inclinó y le lamió las mejillas, y Natasha se rió. Era la primera vez que su hijo lamía los restos del orgasmo de su novia para quitarle de la cara, pero ella esperaba seriamente que no fuera la última.

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"¿Esta noche? No, Ron. No creo que pueda lograrlo”.

Ron Weasley gritó al teléfono, pero no porque estuviera enojado. Simplemente no tenía idea de cómo usar el dispositivo muggle correctamente. Harry hizo una mueca y se quitó el teléfono de la oreja antes de que su amigo pudiera volarle los tímpanos.

Ron continuó hablando, o más bien gritando, pero Harry no le prestó atención. El teléfono colgaba sin fuerzas en una mano, y con la otra le apartó de los ojos los largos mechones rojos del cabello de Natasha mientras ella lo chupaba en el dormitorio que compartían.

Juró que su madre de alguna manera mejoraba cada vez que le hacía una mamada, y esta vez no había hecho nada para cambiar esa percepción.

Ella movió su cabeza suavemente sobre su longitud, lo tomó en su garganta con poco esfuerzo, giró su lengua alrededor de su longitud y también jugó con sus pelotas.

Natasha Romanoff era una experta en chupar pollas, especialmente la suya. Y su continua demostración de habilidad era aún más impresionante si consideraba que tenía muchas cosas que distraerla.

Su novia, Wanda Maximoff, estaba arrodillada detrás de Natasha y lamiendo su coño al mismo tiempo que la pelirroja le chupaba la polla. Wanda no había sido una gran comedora de coños cuando comenzó este arreglo erótico, pero eso era de esperarse.

Al principio tampoco había sido una buena chupapollas; No había tenido mucha experiencia sexual de la que hablar antes de comenzar a salir con Harry.

Pero así como había mejorado en eso gracias a mucha práctica con él como un sujeto de prueba muy dispuesto, Natasha también la había enseñado en el arte del cunnilingus.

Wanda se había sorprendido al principio, una vez que despertó y recuperó los sentidos del coma orgásmico al que él y su madre la habían enviado, pero se había acostumbrado a la idea mucho más rápido de lo que él se hubiera atrevido a esperar.

Probablemente ayudó que su propia educación no hubiera sido nada normal y, como alguien que no había tenido mucho amor en su vida, era sorprendentemente comprensiva y aceptaba los sentimientos que se habían desarrollado entre él y la mujer que lo había adoptado y criado.

Ahora aquí estaba él, viviendo el sueño de todo joven. Bueno, al menos algunos jóvenes. Tal vez su vida no era para todos, pero ¿tener a su ardiente madre y a su hermosa novia dispuestas a chuparlo, follarlo e incluso jugar entre ellas?

Harry no podía imaginar un destino más amable. Si regresara y mirara nuevamente el Espejo de Erised ahora probablemente solo vería su propio reflejo sonriéndole, porque no podía ver cómo su vida podría mejorar.

Entró en la boca de Natasha con un gruñido, asegurándose de tapar la boquilla con la mano para que Ron no pudiera oírlo llenar la boca de su madre con esperma.

Ella se lo tragó todo, apartó la boca de él, sonrió y le indicó a Wanda que cambiara de lugar con ella. Su novia inmediatamente se puso en posición y chupó una de sus bolas con su boca, mientras Natasha se puso detrás de ella y comenzó a frotar su coño.

" Definitivamente no puedo asistir", dijo por teléfono. “Tengo un día muy completo por delante”.
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