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Unas vacaciones inolvidables

Este es un relato real cuyo protagonista me autorizó a publicar y se los redactaré en primera persona.


Desde chico siempre sentí esa fascinación por la ropa femenina, recuerdo la primera vez que me quedé solo en casa y entré a la habitación de mis hermanas y casi como hipnotizado fui hacia su ropa y empecé a vestirme con ella, esa sensación hermosa que me es difícil describir con palabras esa suavidad esa adrenalina y a la vez excitación de verme tan feminizado, en tanga, mostrando la cola en el espejo y cambiando de genero aunque sea por un momento.
Siempre fui una persona muy atlética pero si tengo que destacar algo son mis piernas fornidas y sobre todo mi culo que siempre fue la envidia de mis dos hermanas mayores, no podían creer como yo siendo varón tenga mejor culo que ellas y cuando estaba solo disfrutaba viendo como su ropa me quedaba incluso mejor que a ellas.
Está practica se volvió algo habitual, no veía la hora de estar solo para salir corriendo a mi mundo de fantasía en el que era feliz y se encendían todos mis mas profundos deseos.
A veces la espera se hacía tan larga que me vi obligado a robar tangas de mis hermanas para tenerlas escondidas en mi pieza y probármelas cuando entraba a mi cuarto. No podía parar con ese vicio era un camino de ida en el que cada vez estaba más adentro.
No solo no me empezó a bastar esos momentos empecé a llevar la tanga puesta por debajo de mi ropa y poco a poco la adrenalina subía y quería mas sensaciones nuevas. Salí a la calle y un día fui a la escuela y a entrenar. Olvidé mencionar que hago patín artístico por lo que eso supongo que también ayudó a desarrollar mis piernas y glúteos de una forma realmente femenina. Yo diría que hasta el más hetero se tentaría al verme de espaldas.
Ese verano fuimos de vacaciones a el campo de mis abuelos era una casa antigua pero grande, con la tranquilidad del campo solo tenía algunos vecinos y cerca había un arroyo en el que podíamos ir a refrescarnos, recuerdo que me llevé algo de ropa de mis hermanas en la mochila.
Los vecinos estaban del campo de al lado rara vez aparecían, con el que más tenía relación es con Pedro ya lo había conocido en otros veranos pero tampoco era una gran relación, era más grande que yo y era el hijo del dueño del campo de al lado. A veces venía a trabajar en el campo de mis abuelos.
Una tarde de esas que el calor era abrumador decidí ir a bañarme al arroyo para refrescarme un poco. Había llevado una de las tangas de mis hermanas y como el arroyo quedaba a 15 minutos caminando y en la tranquilidad del campo decidí aventurarme a meterme en tanga al agua, deje mis cosas al lado de un árbol grande que a la vez hacia de barrera visual pero igualmente me percaté de que no había nadie en kilómetros la redonda.
Creo que perdí la noción del tiempo por la tranquilidad del lugar. Hasta que esa paz se vió interrumpida por una voz conocida.
Mi corazón se agitó a mil por hora, que hacía Pedro acá?
Seguramente ya me había estado observando a la distancia y decidió acercarse atraído por lo que veía.
Me llamó la atención que él me hablaba como si nada de como estaba el día de caluroso, de lo refrescante que era el arroyo y yo no podía calmar mis nervios y dije “me tengo que ir” y fui a juntar mis cosas. Estaba de espaldas a él y sentía su mirada clavada en mi culo.
Me distraje guardando las cosas para irme rápido sin notar que él se acercó, me sobresalté cuando tomo mi muñeca y me dijo quédate un rato más vamos a bañarnos juntos. No se si al sentir su mano sobre mi me tranquilicé un poco o al sobresaltarme y rosar su bulto con mi cola hicieron que los nervios se conviertan en sensaciones nuevas, tal vez excitación.
Decidí quedarme con él un rato, después de todo ya había visto todo y no tenía nada que ocultar. Y la idea de estar entangado con otra persona al lado me estaba volando la cabeza.
Él se empezó a desvestir porque no había llevado bañador, en el campo siempre andan con esos pantalones largos por mas que haga 30°. No pude evitar bajar la vista cuando lo ví en boxer negro un poco marcado su bulto, tal vez por la situación, pero no del todo duro.  
Nos metimos al agua y charlamos un rato. Yo salí a secarme porque ya era tarde y quería volver a casa.
Cuando el salió del agua no hizo falta imaginarme nada porque el agua había mojado todo su boxer y se marcaba a la perfección ese tronco erguido bordeado por la tela. No me di cuenta pero tal vez me perdí unos minutos viéndolo. Verdaderamente estaba en trance y me gustaba lo que veía, también era la primera vez que veía uno de tan cerca.
El no dudó en acercarse más y me pregunto: “Te gusta?”
Yo me quede sin responder y en ese tiempo él tomo mi mano y la puso sobre su boxer.
La sensación fue increíble, le estaba tocando la pija a otra persona por primera vez por arriba del boxer y me estaba explotando la cabeza. De un momento para otro el bajó su boxer y la pija saltó como un resorte frente a mi cara. Mis ojos quedaron como dos platos, era hermosa y necesitaba degustar por primera vez una poronga, ese pedazo de pija que tenía adelante mió me miraba, tenía vida, y como una reacción involuntaria o tal vez no tanto, me acerque lentamente, sentí su calor cerca de mi cara, su suavidad y olor, quería probarla, sin pedir permiso se la empecé a chupar despacito poco a poco un poco más hasta que fui tomando ritmo como si fuera un profesional, notaba que lo estaba haciendo bien por su cara de placer. Ninguno podía creer lo que estaba pasando. Trataba de engullir todo ese pedazo hasta el fondo como había visto en los videos pero no podía, igualmente eso no me detuvo, hacía arcadas me ahogaba y volvía a la carga, se había formado mucha baba que colgaba en un hilo de mi boca a la punta de su pija cada vez que me  la sacaba, me ahogaba con su pija y él parecía estar disfrutando mucho de eso. Hasta que me dijo “te quiero coger ese culito hermoso”. Lo dudé mucho pero era lo que quería, por fin iba a sentir una pija de carne en mi culito y estaba dispuesto a entregárselo. Después de todo el me había descubierto y tendría que pagar su silencio con mi culo.
Me puse en cuatro y el corrió mi tanga para un costado, mi culito estaba un poco entrenado pero nunca me habían penetrado. El puso la cabeza de su pija en la entrada de mi culo, su pija estaba bien lubricada por toda la saliva y empujo con fuerza, pero lentamente. Sentía como mi culito oponía resistencia, pero iba cediendo lentamente, el dejó de empujar para aflojar un poco y volvió a intentar, esta vez mi culo lo fue tragando lentamente, esa sensación fue inolvidable, había pasado el punto de no retorno, me habían penetrado el culo, la cabeza estaba totalmente adentro y se sentía raro pero excitante. Me la dejó un rato adentro para que mi culo se acostumbre y se movía muy lentamente, seguramente lo sintió apretado, al poco tiempo el que se movía era yo, tal vez su jueguito de quedarse quieto haciéndome desear mas pija estaba funcionando y la quería mas adentro por lo que empecé a mover la colita. Sentía como que me estaba cagando pero a su vez era lindo, me fui acostumbrando y me estaba excitando cada vez más. La quería toda, por lo que mis movimientos fueron cada vez más profundos hasta llegar a meterme todo ese pedazo adentro, y me cogía yo ida y vuelta eso me volvió loco.
En ese momento él tomo el mando y me agarró de las caderas y me empezó a culear con mas fuerza, ya se había puesto de un modo salvaje, mi culo sonaba como una cachetada con cada embestida. Fue un rato hasta que me la metió hasta el fondo y sentí como todos sus músculos se tensionaban y acto seguido sentí los chorrazos de leche caliente dentro de mí.
Segundo punto de no retorno. Que te dejen la cola llena de leche.
Ese día fue un antes y un después. Y esa fue la historia de como mis vacaciones en la casa de mis abuelos pasarían a ser uno de mis destinos favoritos por mucho tiempo y de cómo empezó mi amor por la pija, como fue probarla por primera vez y como me convertí en una putita.
Espero les haya gustado esta historia tanto como a mí.
Seguramente habrá una continuación… 

6 comentarios - Unas vacaciones inolvidables

femboycitoarg +2
Uffff que linda experiencia!!! Donde queda el campo para visitar a pedro?
Gian_e3 +1
En el valle medio de Rio Negro, me dijo el protagonista
femboycitoarg +1
@Gian_e3 ufff podríamos ir pero ya no con tangas solamente. Con la bikini completa y muchas ganas de verga!!
Gian_e3 +1
@femboycitoarg hacemos el paraíso femboy!
dedevoto +1
Que lindo relato
Gian_e3
Gracias 🙂
SygmaPhi +1
que calorrrrrrrrr
Gian_e3
Lo tuve que escribir en dos partes por la calor jajaj
bisexmadurotrio +1
buen relato y muy bien contado te sigo y a fav
Gian_e3
Gracias! es el primero que escribo pero ya vendrán más
vanesacrosslopez +2
Preciosoo
Gian_e3
gracias vane, me alegro que te haya gustado.
bernini1548 +1
Me encantó, me recordó a mi primera vez chupando
Gian_e3 +1
Gracias, ya quiero saber más 🙂