Dejaremos en paz a la puta de Sofi por un momento, aprovecho este espacio que me brinda mi hermano para hacer una confesión muy morbosa, pues fue una sucesión de hechos de los cuales creo que no está consciente o quizá sospeche algo, su ex mujer tenía 18 años y el 20 cuando se casaron, físicamente es muy parecida a Sofi, 1.65 de estatura, tetas medianas y un buen par de nalgas, desde que la presentó a la familia se íntegro de buena manera, era una chica bastante mona y muy bonita de rostro, pero especialmente llamaba la atención su forma de vestir, casi siempre con ropa holgada ocultando sus curvas, no así en las noches, usaba como pijama un short pequeño, también holgado que cientos de veces me dejó disfrutar la vista de su vulva, una blusa ombliguera sin sostén dejaba apreciar sus firmes tetas y marcaba pezón en cualquier momento.
Muchas veces fui de vista a su casa, tenía una relación bastante buena con ella y no parecía molestarle "vestir" de esa manera en mi presencia, muchas noches disfrutamos de películas, acompañados de generosas porciones de pizza, hamburguesas, papas a la francesa etcétera, de tan bien que me llevaba con Lucia y pese a nuestra edad, jugábamos a las luchas o a las cosquillas lo que terminaba siempre con una marcada erección tanto en mi hermano como en mí, llegamos a practicar ese juego tantas veces que los roces en sus partes eran muy comunes, hasta una noche en especial, llegué a su casa entrada la noche, venía de casa de mi novia con un calentón terrible, la muy cabrona me dejó sumamente cachondo, teníamos toda la tarde besándonos y metiendonos mano, pero la abrupta llegada de sus padres fastidio el polvo, pase a comprar la cena y también a alquilar una peli, después de dar cuenta de la cena y la referida película, nos pusimos a platicar, cuando en un afán descarado por mi parte, avente un cojín directo a la cara de Lucia, desencadenando una batalla campal que termino con la zorrita de mi cuñada montada sobre mi estómago, sus manos hacian presión sobre mis muñecas y yo me deleitaba con el Vaivén de sus tetas bajo la blusa, hacía fuerza apenas para que ella volviera a "dominar" la situación levanté mi cadera un poco haciendo que perdiera el equilibrio y restregara esas ricas masas de carne en mi pecho, ella se acomodó mas abajo presionando mi verga contra mi cuerpo y juro que sentí a través de la ropa como sus gajos acunaban la longitud y grosor de mi pene, el roce me tenia a mil y force tanto como pude el juego para que ella terminara siempre sobre mi, estoy 100% seguro que sintió todas y cada una de las veces que le arrime la verga, hasta que en el colmo de mi calentura me traicionó, pues al sentir de nuevo la presión de su concha contra mi verga, exploté, soltando toda la leche acumulada en la semana, un ligero estremecimiento la sacudió al sentir la humedad en su concha, sus mejillas se tornaron carmesí y su respiración se agitó, antes de que se quitará empuje la cadera para arriba encajando mi miembro por su abertura, Lucia apresurada se despidió y entró a su habitación, durante mis visitas evitaba caer en mis provocaciones y no pasaba absolutamente nada, meses después me cambiaron de trabajo y tenia que cambiar de residencia, mi hermano me ofreció asiló en su casa mientras encontraba cuarto en renta pues el nuevo trabajo quedaba apenas a media hora de su domicilio, debido a mi presencia constante en casa y supongo que por el tiempo paso sin jugar, unq noche antes de acostarnos fue ella quien comenzo la guerra, estábamos en el cuarto de ellos pues su televisor era mas grande que el de la sala, yo traía puesto un short deportivo y una trusa ella con su acostumbrada pijama y mi hermano salió a atender una llamada de su trabajo, recuerdo que apenas me aventó la almohada tome otra de la cama y le aseste varios golpes por todos lados mientras ella reia divertida, con una mano sostuve las de ella sobre su cabeza y ataque su abdomen con cosquillas, estaba montado sobre su estómago y mi mano libre viajaba por su pierna haciendo presión sobre la rodilla, regresaba a su abdomen o le revolvía el cabello, cosa que le molestaba y divertía a la vez, consiente de mi victoria, me quite y di las buenas noches, un error fatal, pues la canija me agarro desprevenido y en una hábil pirueta logro tumbarme, presa de la risa mis fuerzas eran minimas y fui sometido, mi verga tenia mucho rato erecta y me dolía levemente, dolor que crecio cuando ella la aplastó con su cadera, decidí que tomaría revancha y busque quitarla de arriba, empuje mi cadera varias veces encajando mi verga en sus pliegues y ella hacia que no lo notaba, en un movimiento imposible, logré safar una mano para sujetar una de sus piernas y apretarla sin hacerle daño, ella con ambas manos trataba de quitar mi mano y separo su concha de mi verga, la distracción surtió efecto así que baje la otra mano hasta el elástico de mi short y también de mi trusa, dejando el glande libre, debo decir que lo tengo en forma de champiñon y bastante grueso, estaba tan cachondo que mi mano quedo pringada de líquido preseminal y no me importo en absoluto, era jugar el todo por el todo, tenia unas ansias enormes de sentir su concha a pelo y me saldría con la mía, me hice el tonto dejando que nuevamente tomara mis muñecas mientras ella repetía que me rindiera, yo no tenia ninguna intención de hacerlo sin lograr mi cometido, asi que empuje varias veces mi verga contra su concha y tras varios intentos logré mi objetivo, el glande encontró camino por la abertura de su short y nuestras carnes hicieron contacto supongo que al principio no lo notó, concentrada en ganar, pero mis movimientos pélvicos se hicieron descarados y me vine como no recuerdo haberlo hecho antes, fue ahí cuando Lucia tomó consciencia de lo ocurrido su cara se puso seria y de manera inconsciente movió su concha, de arriba a abajo un par de veces, el fluido caliente ayudó a qué yo experimentará aún más placer y gemí, un gemido auténtico, ella separo apenas unos centímetros su cadera y metió una mano entre nuestros cuerpos, sus deditos tocaron la superficie de mi glande y se movieron hasta su concha, maricon! Que hiciste!? Me dejaste perdida de leche, pero no estaba enojada, si acaso, cachonda perdida, se quitó y entró al baño, la verdad es que me acobarde y me fui a mi cuarto, aun tenia la verga dura y me hice tremenda paja recordando todo, quisiera decir que solo pasó esa vez, pero de un modo u otro, moví las fibras sexuales de mi cuñada y esos juegos continuaron muchos días...
Muchas veces fui de vista a su casa, tenía una relación bastante buena con ella y no parecía molestarle "vestir" de esa manera en mi presencia, muchas noches disfrutamos de películas, acompañados de generosas porciones de pizza, hamburguesas, papas a la francesa etcétera, de tan bien que me llevaba con Lucia y pese a nuestra edad, jugábamos a las luchas o a las cosquillas lo que terminaba siempre con una marcada erección tanto en mi hermano como en mí, llegamos a practicar ese juego tantas veces que los roces en sus partes eran muy comunes, hasta una noche en especial, llegué a su casa entrada la noche, venía de casa de mi novia con un calentón terrible, la muy cabrona me dejó sumamente cachondo, teníamos toda la tarde besándonos y metiendonos mano, pero la abrupta llegada de sus padres fastidio el polvo, pase a comprar la cena y también a alquilar una peli, después de dar cuenta de la cena y la referida película, nos pusimos a platicar, cuando en un afán descarado por mi parte, avente un cojín directo a la cara de Lucia, desencadenando una batalla campal que termino con la zorrita de mi cuñada montada sobre mi estómago, sus manos hacian presión sobre mis muñecas y yo me deleitaba con el Vaivén de sus tetas bajo la blusa, hacía fuerza apenas para que ella volviera a "dominar" la situación levanté mi cadera un poco haciendo que perdiera el equilibrio y restregara esas ricas masas de carne en mi pecho, ella se acomodó mas abajo presionando mi verga contra mi cuerpo y juro que sentí a través de la ropa como sus gajos acunaban la longitud y grosor de mi pene, el roce me tenia a mil y force tanto como pude el juego para que ella terminara siempre sobre mi, estoy 100% seguro que sintió todas y cada una de las veces que le arrime la verga, hasta que en el colmo de mi calentura me traicionó, pues al sentir de nuevo la presión de su concha contra mi verga, exploté, soltando toda la leche acumulada en la semana, un ligero estremecimiento la sacudió al sentir la humedad en su concha, sus mejillas se tornaron carmesí y su respiración se agitó, antes de que se quitará empuje la cadera para arriba encajando mi miembro por su abertura, Lucia apresurada se despidió y entró a su habitación, durante mis visitas evitaba caer en mis provocaciones y no pasaba absolutamente nada, meses después me cambiaron de trabajo y tenia que cambiar de residencia, mi hermano me ofreció asiló en su casa mientras encontraba cuarto en renta pues el nuevo trabajo quedaba apenas a media hora de su domicilio, debido a mi presencia constante en casa y supongo que por el tiempo paso sin jugar, unq noche antes de acostarnos fue ella quien comenzo la guerra, estábamos en el cuarto de ellos pues su televisor era mas grande que el de la sala, yo traía puesto un short deportivo y una trusa ella con su acostumbrada pijama y mi hermano salió a atender una llamada de su trabajo, recuerdo que apenas me aventó la almohada tome otra de la cama y le aseste varios golpes por todos lados mientras ella reia divertida, con una mano sostuve las de ella sobre su cabeza y ataque su abdomen con cosquillas, estaba montado sobre su estómago y mi mano libre viajaba por su pierna haciendo presión sobre la rodilla, regresaba a su abdomen o le revolvía el cabello, cosa que le molestaba y divertía a la vez, consiente de mi victoria, me quite y di las buenas noches, un error fatal, pues la canija me agarro desprevenido y en una hábil pirueta logro tumbarme, presa de la risa mis fuerzas eran minimas y fui sometido, mi verga tenia mucho rato erecta y me dolía levemente, dolor que crecio cuando ella la aplastó con su cadera, decidí que tomaría revancha y busque quitarla de arriba, empuje mi cadera varias veces encajando mi verga en sus pliegues y ella hacia que no lo notaba, en un movimiento imposible, logré safar una mano para sujetar una de sus piernas y apretarla sin hacerle daño, ella con ambas manos trataba de quitar mi mano y separo su concha de mi verga, la distracción surtió efecto así que baje la otra mano hasta el elástico de mi short y también de mi trusa, dejando el glande libre, debo decir que lo tengo en forma de champiñon y bastante grueso, estaba tan cachondo que mi mano quedo pringada de líquido preseminal y no me importo en absoluto, era jugar el todo por el todo, tenia unas ansias enormes de sentir su concha a pelo y me saldría con la mía, me hice el tonto dejando que nuevamente tomara mis muñecas mientras ella repetía que me rindiera, yo no tenia ninguna intención de hacerlo sin lograr mi cometido, asi que empuje varias veces mi verga contra su concha y tras varios intentos logré mi objetivo, el glande encontró camino por la abertura de su short y nuestras carnes hicieron contacto supongo que al principio no lo notó, concentrada en ganar, pero mis movimientos pélvicos se hicieron descarados y me vine como no recuerdo haberlo hecho antes, fue ahí cuando Lucia tomó consciencia de lo ocurrido su cara se puso seria y de manera inconsciente movió su concha, de arriba a abajo un par de veces, el fluido caliente ayudó a qué yo experimentará aún más placer y gemí, un gemido auténtico, ella separo apenas unos centímetros su cadera y metió una mano entre nuestros cuerpos, sus deditos tocaron la superficie de mi glande y se movieron hasta su concha, maricon! Que hiciste!? Me dejaste perdida de leche, pero no estaba enojada, si acaso, cachonda perdida, se quitó y entró al baño, la verdad es que me acobarde y me fui a mi cuarto, aun tenia la verga dura y me hice tremenda paja recordando todo, quisiera decir que solo pasó esa vez, pero de un modo u otro, moví las fibras sexuales de mi cuñada y esos juegos continuaron muchos días...
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