La segunda vez con Victoria.

Hoy les voy a contar cómo fue el segundo encuentro con esta escort trans de Lanús. Si no leíste como empezó te dejo el link abajo.
https://m.poringa.net/posts/relatos/5445265/Mi-primera-vez-con-una-trans.html

La segunda vez empezó de la misma manera. Un mensajito el día anterior pero esta vez no me respondió hasta la mañana siguiente, bien tempranito. Cómo yo siempre estoy arriba desde temprano enseguida concreté un encuentro para esa mañana a las 10:00, que es la hora en la que empieza a atender.
Otra vez me pegué una buena ducha para estar lo más presentable posible. Y a las 10:05 estaba tocándole el timbre.
Está vez abrió la puerta envuelta en una bata roja que no mostraba mucho pero, al saber lo que había debajo, me excitó demasiado igual.
Una vez pagados sus honorarios me dijo que me ponga cómodo que ya volvía. Así que como estaba ansioso y un poco molesto por haber llegado tarde enseguida me desvesti casi por completo quedando solo en boxer.
A los pocos minutos volvió ella sin la bata pero en tanga y corpiño negros. Un conjunto con encaje que a ella le quedaba divino, con el plus de que está vez por el costado de la tanga se asomaba lo que yo tanto estuve esperando.
Apenas entró en la habitación se subió encima mío como la primera vez y me fui directamente a comerle la boca diciéndole lo que la había extrañado y que la primera vez me dejó deseando más.
Si hay algo que hace muy bien esta puta divina es calentarte sólo con las palabras. Me empezó a preguntar si me estuve pajeando pensando en ella y cosas así que no hicieron más que ponerme más dura la pija, que ya me dolía adentro del boxer. Mientras me susurraba que quería pija, yo fui bajando por su cuello hasta llegar a sus tetas, las que descubrí sacandole el corpiño con una sola mano, ya que la otra la tenía concentrada en su culo.
No me detuve tanto a jugar con sus tetas porque estaba impaciente. Lo que me llevó a agarrarla fuerte de la cola y levantarme de la cama con ella a upa para tirarla en la cama.
Apenas la vi acostada no aguante la desesperación y le arranque la tanga para disponerme a chupar su pija, que en cuestión de segundos ya estaba completamente dura y parada, lo que también me hizo ponerme loco y enseguida estaba yo intentando meterme todo ese pedazo de carne en la boca. Fue la primera vez que intentaba una garganta profunda.
Se ve que eso le encantó porque al primer intento me agarró fuerte del pelo y empezó a guiarme la cabeza para tragarme toda su verga.
Escucharla gemir me ponía más al palo la pija, que ya me estaba goteando demasiado adentro del boxer.
Me saque su verga de la boca para recuperar el aliento pero enseguida estaba como hipnotizado lamiendo y chupando sus bolas.
El olorcito a pija que largaba era demasiado agradable y hasta casi femenino diría (si es posible semejante contradicción). No era de transpiración o de falta de higiene. Se sentía muy natural y excitante.
En eso me cortó en seco pidiéndome que pare. Me asusté porque pensé que había hecho algo mal o dicho algo que no debía porque entre chupada y chupada le dije tantas cosas que ni me acuerdo. La calentura me llevó a halagarle la pija y todo lo demás.
Para mí alivio se disculpó y me dijo que debía bajar a abrirle la puerta a su compañera que también atiende en el mismo dpto.
Volvió enseguida preguntando como seguíamos a lo que le pedí que se suba encima mío. Esperaba que me ponga la pija en la boca pero lo que hizo fue refregar su ano en mí boca. Uno de los mejores sentones en la cara que me dieron. Empecé a lamer ese culo como un desesperado a lo que ella respondió poniéndome un forrito y chupándome la pija de una manera magistral.
Así estuvimos un rato hasta que le dije que no aguantaba más las ganas de cogerla. A lo que respondió dándose vuelta y, ahora de frente a mí, clavándose mí verga en el culo despacito pero sin parar.
Así empezó a cabalgarme la pija como una jinete desesperada, mientras me tocaba el pecho y me decía lo que le gustaba que la coja asi. De las ganas de acabar que me estaba causando lo único que me salió hacer fue agarrarla de la cintura y empujarla más fuerte contra mí verga lo que le arrancó unos gemidos fuertes que me hicieron sacar leche como un hdp. Para rematar me sacó las últimas gotas apretándome la pija con ese estrecho culo con una fuerza y una experiencia increíble.
Una vez que mí pija no dio más señales de poder seguir, se bajó suavemente de arriba mío con un beso de lo más dulce. Otra vez ya se había ido el tiempo pagado y debía irme.
Así que me vestí rápido y bajamos juntos a la salida del dpto, con la promesa de que la próxima ocasión le iba a entregar el culo...
Jamás fui pasivo y nunca tuve más de uno o dos dedos adentro del culo. Pero estas ganas de ser cogido son cada vez más fuertes y peor ahora que quiero que la primera pija sea la de ella.

Bueno hasta aquí el relato de hoy. Ya saben, sugerencias, comentarios, experiencias que quieran compartir me las dejan en comentarios o en los msjs.

Besos a todos y todas.