Mi mamá se llama Beatriz, ella tiene 45 años, es una mujer de 1.70 un poco llenita, muy blanca, de cabello negro, tetas grandes, su medida de brasier es 36 D y tiene un culo redondito y grande.
Era cumpleañosmpleaños de mi mamá, ella había rentado un jardín para el evento, esa noche mi mamá llevaba puesta una blusa verde botella con un agujero sobre sus pechos, el cual dejaba ver esa línea deliciosa que se forma entre los pechos de cualquier mujer tetona, se veía esquicito, de hecho ningún hombre en la fiesta podía dejar de mirar sus pechos, todos querían bailar con ella para verlos rebotando.
En un momento yo estaba bailando con ella, hacia pasos bruscos para que le brincaran, cuando de pronto mi abuelo (su papá) ya un poco ebrio me pide bailar con mi mamá, mientras bailaban vi como mi abuelo veía los pechos de mi mamá descaradamente, ya ni siquiera finjiendo no verlos, sino viéndolos directamente, mientras bailaban veía como la pegaba mucho a él para sentir esas tetotas.
Pasó un rato y mi mamá y mi abuelo habían desaparecido de la fiesta, mientras los buscaba llegué a tras del jardin, había un callejón completamente oscuro a excepción de una luz que estaba en medio del callejón, al entrar al callejón nunca imaginé lo que vería.
Estaba mi mamá recargada en el poste con la blusa desabrochada y mi abuelo le estaba chupando las tetas, mi mamá se veía que no quería pero no sé por qué no decía nada, mi abuelo le apretaba las tetas, se las mordisqueaba, luego se sacó la verga y puso su mano de mi mamá sobre ella haciendo que se la jalara mientras le chupaba sus grandes, redondos y enormes pechos blancos, después comenzó a tocarle el trasero, mientras seguía chupándole los pechos, pasaba su lengua sobre ellos, los succionaba y después incó a mi mamá con las tetas de fuera, haciendo que le chupara la verga, el la tomó por la cabeza y la pegaba de manera fuerte a ella, mientras mi mamá se tocaba su vagina, después la levanto y comenzó a besarla mientras la manoseaba, le apretaba las nalgas, la tetas mientras ella lo masturbaba.
Luego mi mamá se acostó en el piso mientras mi abuelo se la cogía de manera busca y le apretaba una teta, metía los pezones de mi mamá entre sus dedos y los apretaba, le tocaba las piernas y las nalgas y yo estaba viendo todo.
Luego la levantó, la pego a la pared y se la comenzó a coger por atrás, giro la cabeza de mi mamá y la comenzó a besar, de un movimiento rápido la volteó completamente y comenzó a chuparle las tetas de nuevo.
Luego mi abuelo se acostó en el piso y mi mamá se sentó sobre el, ella brincoteaba sobre su verga mientras el la veía de frente, con sus tetas rebotando le en la cara, mi abuelo las agarraba, las apretaba y las veía con gran exitación, le estimulaba el ano con una mano mientras le apretaba las tetas con la otra mano, luego se levantaron, la tomó del pelo y la fue acercando a su verga mientras ella le chupaba los huevos y el se masturbaba en su cara, por fin eyaculó y se lo echó todo en la cara y en las tetas, luego mi mamá le limpió la verga con la boca, se chupo la leche que había en sus tetas, luego se levantaron y mi madre se acomodo sus tetotas en su brasier y la blusa para que se vieran de nuevo apretaditas y volvieron a la fiesta, desde ese día no volví a ver con los mismo ojos a mi madre.
Era cumpleañosmpleaños de mi mamá, ella había rentado un jardín para el evento, esa noche mi mamá llevaba puesta una blusa verde botella con un agujero sobre sus pechos, el cual dejaba ver esa línea deliciosa que se forma entre los pechos de cualquier mujer tetona, se veía esquicito, de hecho ningún hombre en la fiesta podía dejar de mirar sus pechos, todos querían bailar con ella para verlos rebotando.
En un momento yo estaba bailando con ella, hacia pasos bruscos para que le brincaran, cuando de pronto mi abuelo (su papá) ya un poco ebrio me pide bailar con mi mamá, mientras bailaban vi como mi abuelo veía los pechos de mi mamá descaradamente, ya ni siquiera finjiendo no verlos, sino viéndolos directamente, mientras bailaban veía como la pegaba mucho a él para sentir esas tetotas.
Pasó un rato y mi mamá y mi abuelo habían desaparecido de la fiesta, mientras los buscaba llegué a tras del jardin, había un callejón completamente oscuro a excepción de una luz que estaba en medio del callejón, al entrar al callejón nunca imaginé lo que vería.
Estaba mi mamá recargada en el poste con la blusa desabrochada y mi abuelo le estaba chupando las tetas, mi mamá se veía que no quería pero no sé por qué no decía nada, mi abuelo le apretaba las tetas, se las mordisqueaba, luego se sacó la verga y puso su mano de mi mamá sobre ella haciendo que se la jalara mientras le chupaba sus grandes, redondos y enormes pechos blancos, después comenzó a tocarle el trasero, mientras seguía chupándole los pechos, pasaba su lengua sobre ellos, los succionaba y después incó a mi mamá con las tetas de fuera, haciendo que le chupara la verga, el la tomó por la cabeza y la pegaba de manera fuerte a ella, mientras mi mamá se tocaba su vagina, después la levanto y comenzó a besarla mientras la manoseaba, le apretaba las nalgas, la tetas mientras ella lo masturbaba.
Luego mi mamá se acostó en el piso mientras mi abuelo se la cogía de manera busca y le apretaba una teta, metía los pezones de mi mamá entre sus dedos y los apretaba, le tocaba las piernas y las nalgas y yo estaba viendo todo.
Luego la levantó, la pego a la pared y se la comenzó a coger por atrás, giro la cabeza de mi mamá y la comenzó a besar, de un movimiento rápido la volteó completamente y comenzó a chuparle las tetas de nuevo.
Luego mi abuelo se acostó en el piso y mi mamá se sentó sobre el, ella brincoteaba sobre su verga mientras el la veía de frente, con sus tetas rebotando le en la cara, mi abuelo las agarraba, las apretaba y las veía con gran exitación, le estimulaba el ano con una mano mientras le apretaba las tetas con la otra mano, luego se levantaron, la tomó del pelo y la fue acercando a su verga mientras ella le chupaba los huevos y el se masturbaba en su cara, por fin eyaculó y se lo echó todo en la cara y en las tetas, luego mi mamá le limpió la verga con la boca, se chupo la leche que había en sus tetas, luego se levantaron y mi madre se acomodo sus tetotas en su brasier y la blusa para que se vieran de nuevo apretaditas y volvieron a la fiesta, desde ese día no volví a ver con los mismo ojos a mi madre.
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