Como olvidarlo…
Esa noche estaba en mi casa, y recibí la visita de un amigo, alguien a quien conocía hace rato, y decidimos tomarnos algo y hablar, la idea era pasar un rato agradable.
Fue pasando el tiempo y ya estábamos algo entonados, pero lejos aun de emborracharnos, y pasamos a hablar de temas mas candentes, y resultamos hablando de la paja, de lo mucho que nos gusta y nos encanta.
Obviamente nos fuimos excitando y le conté que a veces me pongo ligueros, panty y peluca y quedo como un femboy y que tengo un amigo con el que nos pajeamos y la pasamos rico.
El no me creía, y le dije que si le gustaría verme como femboy, a lo cual dijo que sí; le dije que me esperara un momento, me fui al cuarto y me desnude, poniéndome el liguero, el panty y la peluca, la verdad yo estaba muy excitado, y quería pasar un momento inolvidable.
Llame a mi amigo a la habitación y cuando entro quedo sorprendido, con la boca abierta, me pedía que me diera la vuelta, me miro por todo lado, y me dijo que le parecía increíble, que nunca lo hubiera imaginado.
Después le dije: ¿Te vas a quedar ahí o vas a venir conmigo a la cama? Me sonrió, se acercó y empezó a acariciarme mientras me decía: claro que sí, vamos a pasarla rico, mientras cogía mi mano y la ponía en su entrepierna, su pene ya estaba duro, así que empecé a manosearlo también.
Nos acostamos en la cama, mientras nos tocábamos todo el cuerpo, después de eso lo empecé a desnudar dejándolo sin nada de ropa.
Le pedí que se masturbara un momento para mí, lo cual hizo despacio, su mano bajaba y subía por su hermoso y erecto pene, y yo me tocaba por encima del panty mientras lo veía.
No aguante más y empecé a pajearlo, que rico se sentía su duro pene en mi mano, sus gemidos me excitaban aún más.
Me acosté bocarriba y le pedí que se hiciera encima mío, y empezamos a movernos con pasión, mientras me daba besos en el cuello y me decía lo mucho que me gustaba verme así.
Después de un rato me quite el panty, lo use para envolver su pene y hacerle una paja mientras el cerraba los ojos y disfrutaba.
Tal vez sería el trago, pero estábamos demasiado excitados, ensayamos varias poses, sin penetración, y yo no dejaba de gemir como una putita.
En un momento determinado el estaba encima mío, y empezó a besar mi cuello, mi pecho, mi estomago y cuando me di cuenta su lengua lamio la cabecita de mi pene, varias veces, tras lo cual yo quede sorprendido, nos quedamos viéndonos, y él me dijo: perdona, no pude resistir, tras lo cual lo siguió haciendo, yo solo le dije que no parara.
Su lengua no paraba de acariciar la cabecita de mi pene, que sensación tan deliciosa, lo hacia de una forma espectacular.
Después de eso, me puso en cuatro y con su lengua empezó a lamer mi ano, mientras yo gemía cada vez más duro, tuve que hacer un gran esfuerzo para no eyacular.
Me levante y le pregunte si quería recibir mi corrida en la cara, me dijo que si, me senté en el borde de la cama y el se arrodillo, fue cuestión de segundos para que yo eyaculara, mis chorros de esperma cayeron su cara, dejándola empapada, mientras el tenia los ojos y la boca cerradas, y terminé de limpiarla cabecita de mi pene en su cara.
Después de eso el no aguanto más y eyaculo en mis ligueros, dejando rastros de semen en la tela de los mismos.
Nos levantamos y se quedo un rato tomando aire, con su cara empapada de mi semen, mientras yo lo acariciaba lentamente.
Después con una toalla le limpie la corrida, y le pregunte que sintió cuando me vine en su cara y solo me decía que era mas delicioso delo imaginado.
Me recosté encima de él, mientras nos acariciábamos en silencio, pensando en lo que acabamos de hacer, ya que era la primera vez que un tipo pasaba su lengua por la cabecita de mi pene y según el me dijo es la primera vez que pasaba su lengua no solo por la cabecita del pene sino también por el ano de otro tipo.
Con su dedo acariciaba mi ano, lentamente, lo cual me hizo gemir suavemente, así que lo siguió haciendo un buen rato, hasta que nuestros penes estaban nuevamente erectos.
Empecé a masturbarlo mientras le daba besos en el cuello, ya ratos metía mi lengua en su oreja, lo cual lo ponía a gemir.
Como yo estaba encima después empecé a cabalgar encima de el, y al mismo tiempo me iba masturbando.
Después con su lengua nuevamente lamio mi ano y termino eyaculando en el, dejando allí todo su caliente esperma, mientras yo al mismo tiempo eyaculaba.
Nos recostamos para tomar aire, fue una noche de paja que nunca hubiera esperado.
Esa noche estaba en mi casa, y recibí la visita de un amigo, alguien a quien conocía hace rato, y decidimos tomarnos algo y hablar, la idea era pasar un rato agradable.
Fue pasando el tiempo y ya estábamos algo entonados, pero lejos aun de emborracharnos, y pasamos a hablar de temas mas candentes, y resultamos hablando de la paja, de lo mucho que nos gusta y nos encanta.
Obviamente nos fuimos excitando y le conté que a veces me pongo ligueros, panty y peluca y quedo como un femboy y que tengo un amigo con el que nos pajeamos y la pasamos rico.
El no me creía, y le dije que si le gustaría verme como femboy, a lo cual dijo que sí; le dije que me esperara un momento, me fui al cuarto y me desnude, poniéndome el liguero, el panty y la peluca, la verdad yo estaba muy excitado, y quería pasar un momento inolvidable.
Llame a mi amigo a la habitación y cuando entro quedo sorprendido, con la boca abierta, me pedía que me diera la vuelta, me miro por todo lado, y me dijo que le parecía increíble, que nunca lo hubiera imaginado.
Después le dije: ¿Te vas a quedar ahí o vas a venir conmigo a la cama? Me sonrió, se acercó y empezó a acariciarme mientras me decía: claro que sí, vamos a pasarla rico, mientras cogía mi mano y la ponía en su entrepierna, su pene ya estaba duro, así que empecé a manosearlo también.
Nos acostamos en la cama, mientras nos tocábamos todo el cuerpo, después de eso lo empecé a desnudar dejándolo sin nada de ropa.
Le pedí que se masturbara un momento para mí, lo cual hizo despacio, su mano bajaba y subía por su hermoso y erecto pene, y yo me tocaba por encima del panty mientras lo veía.
No aguante más y empecé a pajearlo, que rico se sentía su duro pene en mi mano, sus gemidos me excitaban aún más.
Me acosté bocarriba y le pedí que se hiciera encima mío, y empezamos a movernos con pasión, mientras me daba besos en el cuello y me decía lo mucho que me gustaba verme así.
Después de un rato me quite el panty, lo use para envolver su pene y hacerle una paja mientras el cerraba los ojos y disfrutaba.
Tal vez sería el trago, pero estábamos demasiado excitados, ensayamos varias poses, sin penetración, y yo no dejaba de gemir como una putita.
En un momento determinado el estaba encima mío, y empezó a besar mi cuello, mi pecho, mi estomago y cuando me di cuenta su lengua lamio la cabecita de mi pene, varias veces, tras lo cual yo quede sorprendido, nos quedamos viéndonos, y él me dijo: perdona, no pude resistir, tras lo cual lo siguió haciendo, yo solo le dije que no parara.
Su lengua no paraba de acariciar la cabecita de mi pene, que sensación tan deliciosa, lo hacia de una forma espectacular.
Después de eso, me puso en cuatro y con su lengua empezó a lamer mi ano, mientras yo gemía cada vez más duro, tuve que hacer un gran esfuerzo para no eyacular.
Me levante y le pregunte si quería recibir mi corrida en la cara, me dijo que si, me senté en el borde de la cama y el se arrodillo, fue cuestión de segundos para que yo eyaculara, mis chorros de esperma cayeron su cara, dejándola empapada, mientras el tenia los ojos y la boca cerradas, y terminé de limpiarla cabecita de mi pene en su cara.
Después de eso el no aguanto más y eyaculo en mis ligueros, dejando rastros de semen en la tela de los mismos.
Nos levantamos y se quedo un rato tomando aire, con su cara empapada de mi semen, mientras yo lo acariciaba lentamente.
Después con una toalla le limpie la corrida, y le pregunte que sintió cuando me vine en su cara y solo me decía que era mas delicioso delo imaginado.
Me recosté encima de él, mientras nos acariciábamos en silencio, pensando en lo que acabamos de hacer, ya que era la primera vez que un tipo pasaba su lengua por la cabecita de mi pene y según el me dijo es la primera vez que pasaba su lengua no solo por la cabecita del pene sino también por el ano de otro tipo.
Con su dedo acariciaba mi ano, lentamente, lo cual me hizo gemir suavemente, así que lo siguió haciendo un buen rato, hasta que nuestros penes estaban nuevamente erectos.
Empecé a masturbarlo mientras le daba besos en el cuello, ya ratos metía mi lengua en su oreja, lo cual lo ponía a gemir.
Como yo estaba encima después empecé a cabalgar encima de el, y al mismo tiempo me iba masturbando.
Después con su lengua nuevamente lamio mi ano y termino eyaculando en el, dejando allí todo su caliente esperma, mientras yo al mismo tiempo eyaculaba.
Nos recostamos para tomar aire, fue una noche de paja que nunca hubiera esperado.
3 comentarios - Nos pajeamos y eyacule en su cara