Desde que era adolescente que tuve acceso libre y sin supervision a internet, lo que me permitió llegar a lugares que a esa edad quizas no eran apropiados. Sin embargo, mi primera experiencia pasó en mi ultimo año de secundaria, cuando ya habia cumplido 18 años. Habia fallado un curso, tampoco era la mente mas brillante, siempre estaba distraida, pensaba en otras cosas, cosas que les contaré a lo largo de estas historias.
Podemos considerar que ese fue el punto de partida, de cosas que ni yo creo seria capaz.
Debo decir que si bien, en la fantasia y seguridad de internet, podia sentirme mucho mas comoda, invadiendome una confianza en mi misma que hasta entonces desconocia, en la vida real me sentia nerviosa y llena de miedos, lo que me hizo, obligadamente, esperar hasta esta edad para lograr avanzar en esto, que me causaba curiosidad y mucho temor, aunque no fui yo quien dio el primer paso esa vez.
Ya quisiera tener la misma seguridad en persona.
En fin, era mi ultimo año de secundaria, a esta altura ya no importaba mucho lo que venia, el año escolar estaba terminando y el asistir o no ya era una pregunta trivial, por lo general la segunda opcion era la favorita. Mis padres siempre me dejaban despierta y relativamente lista para asistir a clases. Cuando ellos se iban a su trabajo restaban unos 20 minutos para emprender mi viaje a esa escuela. Era tiempo suficiente para ver un capitulo de alguna serie o por lo general, escuchar musica y sentarme en el sillon a decir si ir o no a clases. Si decidia ir a clases, debia caminar 20 minutos hasta la estacion del subterraneo, y me esperaban 30 minutos de viaje en tren, donde era invisible cuando los mares de gente arremetian para entrar en los pequeños espacios que quedaban, y yo, siempre apretada casi sin respirar, entre alguna señora con sobrepeso y la mochila de alguien.
Durante el año, era bastante responsable, no solia faltar, pero no se si alguna vez han tenido esa sensacion como que nada tiene sentido o importancia, como que no quieres tomar el control de nada porque cualquier responsabilidad se torna un fastidio del cual quieres escapar, o que simplemente ya no quieres esforzarte mas... espero que no, pero si lo has sentido, lo lamento mucho.
En esa situacion estaba, sin ganas de nada, perdida. El final del año me tenia ansiosa, todos me preguntaban que pensaba estudiar, y la verdad, yo no queria hacer nada mas que estar acostada en la cama, ojala durmiendo.
En fin.
Era uno de esos de esos dias que invitaban a no levantarse, mis padres estaban ya alistandose al trabajo, y yo, apenas despegaba los ojos, intentando procesar el trauma de un nuevo dia. Por lo general cuando ellos se iban, yo estaba lista, tomando desayuno o buscando algo para llevarme y comer en la sala si no tenia mucha hambre.
Se despidieron de mi, mientras miraba en mi telefono un episodio de una serie mientras tomaba desayuno, caminaron y escuche como la puerta se cerraba, para pasar a un total silencio en la casa.
Ese dia habia decidido no ir, por lo que apenas se fueron me cambie el uniforme y me puse de vuelta el pijama.
Me acoste en la cama y prendi la television. Busque en ella algo que me hiciera ruido de fondo, para poder estar en el telefono un rato antes de dormir.
Llevaba desde hace un tiempo en aplicaciones de citas, por lo general las cosas solo quedaban en chats y algunas fotos, pero otros querian mas que eso. Despues de un tiempo ya empece a acceder a videollamadas, en un principio solo miraba, siquiera hablaba, no mostraba mi rostro, apenas si parte de mi boca para hacer algun gesto que motivara a la otra persona a seguir. Era curioso, parecia ser algo implicito que el aceptar un videollamada significaba que la persona al otro lado pondria un primer plano de su pene, a veces erecto, a veces no, eso era lo que variaba, pero todos sin ninguna pregunta previa, un buenos dias, nada.
Si era curioso, me molestaba de alguna forma que fuera asi, pero por otra parte, yo seguia aceptando las llamadas. No es como que esperara que algo cambie, simplemente creo que me gustaba que fuera tan impulsivo, grosero, sucio. Lo hacia a diario, veia como se corrian y luego cortaba la llamada, yo no mostraba nada, solo miraba.
Esos 20 minutos, antes de ir a clases, ahora eran ocupados por algun tipo al azar dispuesto a ser visto. Se volvio parte de mi rutina, mataba mi aburrimiento, ninguno me llamaba la atencion por ser atractivo, solo era el morbo de lo que hacian y yo simplemente los miraba, de vez en cuando una foto en ropa interior y algun gesto con la boca era suficiente para armarlos de valor y aventurarse a enseñarme.
Abri una de las tantas aplicaciones donde chateaba con gente, de mi pais, de otras regiones, incluso de lugares que no imaginaba, gente de egipto, pakistan, europa muchas veces, todos buscaban un poco lo mismo. Empece a buscar conversaciones, no era dificil, en general entrar a algun grupo facilitaba las cosas, algunos eran amables y lograban hacer que las cosas se fueran desviando hasta su objetivo, otros no tenian esa sutileza, ambos eran bienvenidos en mis mensajes.
Esa mañana fue algo diferente, estaba respondiendo mensajes, y hubo uno que me llamo la atencion. No era nada en particular, pero el chico de la foto era muy atractivo, ademas tenia un gato muy lindo, por lo general, cuando son personas asi, suelen ser usuarios falsos, por lo que empece sin expectativa alguna a responderle. Resulta que era bastante amable, estaba esperando que comenzara a coquetear pero no lo hizo, solo hablaba, me sacaba tema, tenia opinion, no se, era muy agradable hablar con el.
Y esto comenzó a ser diario.
Llevabamos hablando una semana, y aun no habia un doble sentido, morboseo o calentura, simplemente estaba siendo amable. Me mostraba lo que hacia dia a dia, aunque nunca salia él en las fotos, solo mostraba que estaba haciando o donde estaba. Esto me resultaba sospechoso, si era tan guapo imagino que no tendria problemas para hacerlo, seria algo sencillo. Empecé a dudar si era real, aun asi, no estaba haciendo algo malo en realidad, y me estaba acostumbrando a hablar con el.
Pasaron los dias y el seguia igual de amable, me mostraba lo que hacia, hablabamos de todo y me seguia llamando la atencion cada vez mas y mas. Debo decir que aunque seguia hablando con mi nuevo amigo, no habia dejado de lado mis otras actividades, de hecho estaba empezando a ser mas habitual y descarada. Como casi no iba gente a clases, y a los profesores ya no les importaba nada, empece a aceptar videollamadas mientras estaba en la sala de clases. Me sentaba al fondo de la sala, y como mis amigos eran de otros cursos, era habitual el estar sola en clases usando el telefono, nadie me molestaba. Ademas, me habia dado cuenta que con el uniforme todos se calentaban mucho mas, me pregunto por qué.
Una vez pase todo el dia en videollamadas, ningun profesor estaba dando clases y la sala estaba practicamente vacia. Yo con mis audifonos escuchaba las frotaciones y leves gemidos de quienes me contactaban para descargar sus deseos, mientras miraba, solo miraba.
Cuando llegue a casa me sentia excitada, llevaba todo el dia viendo tipos correrse, algunos tardaban mas, otros menos, algunos acaban mucho u otros solo un poco. Imaginaba muchas cosas, habia visto mucha pornografia desde siempre y tenia algunas ideas, aunque claro, no sabia que se sentia, si tenia algunas fantasias sexuales, en realidad mas que nada por curiosidad, me planteaba escenarios imaginarios en la cabeza, inventaba historias para mi, en los cuales no era tan timida y era mucho mas facil en persona llegar a concretar algo, cosa que no habia pasado.
Me tocaba mucho, no se lo mostraba a nadie, aunque si tenia en mi telefono muchas fotos y videos, que me sacaba solo para guardarlas, me gustaban, me gusta verme en las fotos y sentirme linda, atractiva, a veces me tocaba viendo mis propios videos, sola. Habia experimentado mucho conmigo misma, me conocia, sabia como tocarme de muchas formas que me generaban demasiado placer, y tambien le habia agarrado el gusto a dedearme el ano mientras me masturbaba. Mis manos son pequeñas y no era tan dificil, pero al principio dolia y tambien me ensuciaba, por lo que empece a buscar formas de hacerlo sin ese dolor, y de forma mas higienica, aprendi a relajarme y dilatarlo, luego ya no usaba solo mis dedos, y a veces me saltaba directo a esta parte.
Sola, tenia mucha experiencia, pero socialmente era alguien tranquila, introvertida, de hecho aprendi a callarme los gemidos y tocarme en silencio para que mis padres no me descubrieran. Asi que, en persona y cara a cara, no habia logrado hacer algo con alguien.
Bueno, salvo por una experiencia...
Desde siempre habia visto pornografia, como dije antes, y la verdad tenia una particular fijacion por los videos donde aparecen chicas asiaticas siendo manoseadas en trenes o buses. Lo se, esos videos son falsos, actuados, sin embargo la situacion me provocaba, me causaba deseo de saber que se sentia, pero era eso, solo una fantasia.
Pero un dia, similar al resto, iba viajando en el subterraneo camino a mi colegio. Eran unos 30 minutos de viaje en tren, pero a esa hora siempre se colapsa, lo que hacia un martirio el viajar.
Cuando yo subia aun no iba lleno, habia espacio para todos, pero avanzadas las estaciones, el tren se volvia un mar de gente agolpandose, unos con otros, pegados, hasta no poder moverse. Esta situacion me dejó en una posicion incomoda, delante mio un tipo de unos 30 años, y detras otro a quien no alcanzaba a mirar, ambos pegados a mi cuerpo sin poder hacer nada al respecto.
La situacion era ya incomoda, sin embargo, se pondria peor... El que estaba frente mio comenzo a moverse, pensaba que se estaba intentando acomodar, sin embargo, note que algo se iba abriendo espacio entre mi falda, toscamente disimulando no estar ahi. Podria decir que me paralicé, pero no.
Sabia lo que se venia, era cosa de mirar su rostro, sin reparos me miraba mientras buscaba algo con su mano, yo lo miraba tambien. La situacion me recordaba a las videollamadas y tambien los videos que habia visto, la impulsividad, el morbo, lo grosero, lo sucio... Era como los tipos de mis llamadas, empece a pensar que podria ser uno de ellos, pero seria ridiculo. Debo decir que si bien esta situacion incomodaria a muchas, mi cabeza fantaseaba algunas cosas que distorsionaron mi percepcion en ese momento, estoy segura que si decia algo, muchas personas saltarian a mi defensa, y pense en hacerlo, pero mi fantasia era mucho mas fuerte.
Sentia como frotaba sus dedos contra mi pubis por encima de la falda, cada vez mas insistente. Lo miré directamente, hacia arriba, era mas alto que yo. Él me dio una mirada de vuelta a la cual sonrei.
Al parecer ese gesto indicaba algo. Cuando hacia las videollamadas, solo mostraba un aparte de mi cara, mi boca, para poder hacer gestos que ayudaran a mis compañeros de llamada, sacar la lengua, morderme los labios, tirar algun beso, eran siempre bien recibidos por ellos, sin embargo, el mantener una sonrisa cuando estaban en ello, por lo general hacia que colocaran mas enfasis en su actividad, mas energia.
Aqui paso lo mismo, luego de sonreir, senti como su mano se aventuro con mayor descaro y profundidad, aun asi, no fue suficiente para que el llegara donde queria hacerlo. En este punto siquiera recordaba que estaba en un tren con mas gente, nada importaba. Mis fantasias me jugaban mala pasada, y cuando lo note, estaba levantando levemente la parte delantera de mi falda, facilitando el acceso. Él, al ver esto no dudo en actuar, y lo que ya le estaba tomando minutos, solo tardo unos segundos.
Apenas levante un poco de mi falda sus dedos se colaron rapidamente entre mis piernas, ya, sin la resistencia de mi ropa, salvo la ropa interior. Podia sentir el calor de su mano a traves de mi calzon, él se veia agitado, seguro estaba muy excitado, sus manos tiritaban y el miraba hacia todos lados, pero como si nada pasara, disimulando.
Cuando volvio a mirarme directamente, comenzo a mover sus dedos de un lado hacia el otro, de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo. Ya estaba excitada, podia sentir mi propia humedad, seguramente mi ropa interior estaba empapada y sus dedos tambien. El seguia moviendo los dedos de izquierda a derecha, presionando firmemente su mano contra mi vagina.
Podia descifrar lo que estaba haciendo, podia sentirlo, sus dedos hacia los lados intentaban hacer aparte mi ropa interior... Y lo estaba logrando.
Como creci viendo pornografia, parte de mi "educacion sexual" salio desde ahi, lamentablemente, y me desarrolle viendo mujeres que no tenian ningun tipo de pelo, salvo sus cejas y su cabello, los cuales tambien debian estar arreglados. Asi forme mis estandares, donde reforzada por los comentarios en los videos, haciendo mucho enfasis en lo rico que se sentia, desde muy pronto empecé a controlar su crecimiento, a tal punto que dentro de mi rutina diaria, junto con ducharme y ver hombres masturbarse, removia cada minima aparicion de bello púbico.
En un principio, utilizaba navajas tipo gillette, porque estaban a mi alcance, era lo que habia por ahi, ademas, no era mucho lo que debia quitar. Sin embargo, pronto note que era una opcion un tanto perjudicial para mi piel, por lo que conversando por aqui y por allá, me hablaron de cremas que servian para quitar los vellos, y para mi sorpresa, o no, tambien podia encontrarla en mi casa. Asi fui, quitandole un poco cada cierto tiempo a mi mamá, o quitandome con dolorosas pinzas algunos de esos indeseados pelos. Luego, cuando descubri que todas mis tias y otras mujeres usaban estas cremas, fue menos vergonzoso ir a una tienda y pedirla, juntando dinero para poder comprarla, diciendo que era un encargo o algo asi.
El punto es que si, precisamente en ese momento, estaba completamente depilada, lo que ayudó a esparcir toda mi humedad, y a motivar a este tipo para actuar, y cuando logro hacer a un lado el calzon, no hubo respiro ni tiempo para arrepentimientos, pues metio sus dedos dentro de mi, profundo, fuerte.
Naturalmente mi cuerpo reacciono, por una parte mi boca dejo soltar un gemido que espero se haya perdido en el sonido del tren, y por otra parte mis musculos se contrajeron de forma que incline mi torso hacia adelante, haciendo que mi trasero se hiciera hacia atras, donde precisamente estaba este otro tipo. Mi culo choco con su pene, logrando sentir lo que estaba entre sus pantalones, por unos segundo me vi siendo masturbada por un total extraño, y frontando mi trasero contra el pene de otro desconocido a quien no podia siquiera mirarle el rostro. Mi fantasia se habia cumplido, al final, estos videos resultaron no ser tan falsos...
Aunque yo senti que todo el viaje en el tren fue una eternidad, solo habían pasado unos 25 minutos desde que subí a este, y un par de minutos desde que este tipo empezo a buscar entre mi falda, pero yo no tenia ninguna conciencia del tiempo, el lugar o de mi misma. Podia sentir como entraban y salian sus dedos de mi, como movia estos dentro de mi, y al menos yo, si podia escuchar el sonido que generaba sus fuertes y grandes manos dentro de mi pequeñez, y con cada movimiento, me empujaba levemente hacia atras, lo suficiente para comenzar a estimular al chico detras mio con los constantes choques entre mi trasero y su pene, que en un principio fueron involuntarios, ahora los hacia a proposito, sintiendo como iba creciendo, cada vez mas y mas.
Era un delirio, no sabia que estaba haciendo, bueno, en realidad si, pero no sabia por qué lo estaba haciendo. Me habia dispuesto a ir a clases como todos los dias, pero ahora, estaba siendo masturbada por un desconocido que me tenia tan prendida que empecé a calentar al sujeto de atras, alguien que eventualmente pude haber visto cuando el tren iba mas vacio, pero que en realidad no tenia ninguna idea de como era, solo sabia que su miembro estaba entre mis gluteos, y yo no queria sacarlo de ahi.
Me seguia frotando contra el, mientras estaba siendo tocada de la forma mas vulgar posible, me sentia suspendida en el tiempo, esperando que vendria despues.
No sabia si el tipo de atras lo estaba disfrutando realmente, o si habia comprendido que estos movimientos no eran casualidad, sino mas bien una especie de invitacion, a unirse. Sin embago, mis dudas se disiparon cuando senti su mano subiendo por mi pierna hacia mi trasero. Yo me incliné un poco mas, dentro de lo que se podia, quedé apoyando mi cabeza en el pecho del desconocido de adelante y mi trasero lo mas elevado para el desconocido de atras. En realidad la posicion habia variado solo un par de centimetros, no caia un alma en ese vagon.
Yo solo respiraba, ahogando los gemidos como siempre lo tenia que hacer al tocarme para no levantar sospechas de mis papás, por lo que ya tenia practica, sin emabargo esto se estaba complicando. En mi cabeza habia sido mucho tiempo, pero se que solo llevamos unos minutos, todo escalo demasiado rapido, y el tipo de atras me estaba levantando la falda levemente, colocando su mano entre mis piernas por detras, topandose obviamente con la mano del otro desconocido.
Crei que en ese momento ambos se detendrian, pero al parecer el hecho de que ambos estuvieran tocandome los provocó aun mas, coordinandose sin hablar para meterme sus dedos. Los de el eran mas delgados que los de el primero, aunque eran igual de largos. Pronto al parecer, el desconocido de atras se aburrio de esperar su turno, dejando al otro exclusivamente tocando mi vagina, para el desplazarse hacia atras con sus dedos, haciendo circulos en la entrada de mi ano.
Sus dedos estaban mojados por mi humedad, y sin oponer ninguna resistencia, senti como entraba lenta y firmemente uno de sus dedos por mi ano. En este punto no pude contenerme, cuando entró solte un quejido, dolio un poco por lo que me enderecé, al parecer no habia aprendido tanto, aunque tambien estaba super nerviosa, asi que empece a relajarme y disfrutar lo que estaba pasando. Cuando ya habia metido su primer dedo, el segundo no tardo en aparecer, entrando de la misma forma, lenta y firmemente.
Era increible en todo sentido, no podia creer lo que estaba dejando pasar, dos desconocidos masturbando mi vagina y mi ano al mismo tiempo, en un tren subterraneo, esto era por lejos mil veces mejor que mis fantasias, porque estaba pasando, y me estaba pasando a mi. Han sido los segundos mas placenteros de mi vida, esperando que nunca acabara, solo recordaba lo mucho que habia esperado un momento para ser yo, entregarme sin miedo, disfrutar sin importar lo que digan de mi, por esos instantes me sentia viva por primera vez desde hace mucho tiempo.
Mi extasis duró solo esos breves segundos, un aviso al abrir las puertas me devolvio a la realidad. Era mi estacion, debia bajarme y actue rapido, al moverme senti como salian sus dedos de mi y empujando a todos al pasar, sali del tren, excitada y confundida, dejando atras a los dos desconocidos y mi bolsa.
Esta escena fue mi imagen mental por mucho tiempo, la utilizaba cada vez que me tocaba, la recreaba una y otra vez, usando mis dos manos para simular estos dos desconocidos. El dia que estuve contestando videollamadas de tipos corriendose, recorde esa situacion para tocarme cuando llegue a la casa. Aunque estaba excitada, nada igualaria lo que viví ese dia, donde me deje hacer todo lo que pudieron en ese tren.
A veces, fantaseo de las cosas que podría haber pasado si no me bajaba en mi estacion y la verdad, me arrepiento, era el momento perfecto para quitarme todos los "pero" que me detienen de expresar mi sexualidad como yo queria, si esos dos tipos hicieron eso conmigo frente a muchos espectadores ciegos, imagino, y tristemente solo imagino, lo que podrán hacerme en privado.
Durante un tiempo evite irme en tren para no toparme con ellos, no le conte esto a ningun conocido, amigo o familiar. Volvi a ser la chica mojigata y timida para los demas, excepto por las videollamadas que seguian siendo parte de mi rutina diaria, de esta vez ver, y solo ver.
Podemos considerar que ese fue el punto de partida, de cosas que ni yo creo seria capaz.
Debo decir que si bien, en la fantasia y seguridad de internet, podia sentirme mucho mas comoda, invadiendome una confianza en mi misma que hasta entonces desconocia, en la vida real me sentia nerviosa y llena de miedos, lo que me hizo, obligadamente, esperar hasta esta edad para lograr avanzar en esto, que me causaba curiosidad y mucho temor, aunque no fui yo quien dio el primer paso esa vez.
Ya quisiera tener la misma seguridad en persona.
En fin, era mi ultimo año de secundaria, a esta altura ya no importaba mucho lo que venia, el año escolar estaba terminando y el asistir o no ya era una pregunta trivial, por lo general la segunda opcion era la favorita. Mis padres siempre me dejaban despierta y relativamente lista para asistir a clases. Cuando ellos se iban a su trabajo restaban unos 20 minutos para emprender mi viaje a esa escuela. Era tiempo suficiente para ver un capitulo de alguna serie o por lo general, escuchar musica y sentarme en el sillon a decir si ir o no a clases. Si decidia ir a clases, debia caminar 20 minutos hasta la estacion del subterraneo, y me esperaban 30 minutos de viaje en tren, donde era invisible cuando los mares de gente arremetian para entrar en los pequeños espacios que quedaban, y yo, siempre apretada casi sin respirar, entre alguna señora con sobrepeso y la mochila de alguien.
Durante el año, era bastante responsable, no solia faltar, pero no se si alguna vez han tenido esa sensacion como que nada tiene sentido o importancia, como que no quieres tomar el control de nada porque cualquier responsabilidad se torna un fastidio del cual quieres escapar, o que simplemente ya no quieres esforzarte mas... espero que no, pero si lo has sentido, lo lamento mucho.
En esa situacion estaba, sin ganas de nada, perdida. El final del año me tenia ansiosa, todos me preguntaban que pensaba estudiar, y la verdad, yo no queria hacer nada mas que estar acostada en la cama, ojala durmiendo.
En fin.
Era uno de esos de esos dias que invitaban a no levantarse, mis padres estaban ya alistandose al trabajo, y yo, apenas despegaba los ojos, intentando procesar el trauma de un nuevo dia. Por lo general cuando ellos se iban, yo estaba lista, tomando desayuno o buscando algo para llevarme y comer en la sala si no tenia mucha hambre.
Se despidieron de mi, mientras miraba en mi telefono un episodio de una serie mientras tomaba desayuno, caminaron y escuche como la puerta se cerraba, para pasar a un total silencio en la casa.
Ese dia habia decidido no ir, por lo que apenas se fueron me cambie el uniforme y me puse de vuelta el pijama.
Me acoste en la cama y prendi la television. Busque en ella algo que me hiciera ruido de fondo, para poder estar en el telefono un rato antes de dormir.
Llevaba desde hace un tiempo en aplicaciones de citas, por lo general las cosas solo quedaban en chats y algunas fotos, pero otros querian mas que eso. Despues de un tiempo ya empece a acceder a videollamadas, en un principio solo miraba, siquiera hablaba, no mostraba mi rostro, apenas si parte de mi boca para hacer algun gesto que motivara a la otra persona a seguir. Era curioso, parecia ser algo implicito que el aceptar un videollamada significaba que la persona al otro lado pondria un primer plano de su pene, a veces erecto, a veces no, eso era lo que variaba, pero todos sin ninguna pregunta previa, un buenos dias, nada.
Si era curioso, me molestaba de alguna forma que fuera asi, pero por otra parte, yo seguia aceptando las llamadas. No es como que esperara que algo cambie, simplemente creo que me gustaba que fuera tan impulsivo, grosero, sucio. Lo hacia a diario, veia como se corrian y luego cortaba la llamada, yo no mostraba nada, solo miraba.
Esos 20 minutos, antes de ir a clases, ahora eran ocupados por algun tipo al azar dispuesto a ser visto. Se volvio parte de mi rutina, mataba mi aburrimiento, ninguno me llamaba la atencion por ser atractivo, solo era el morbo de lo que hacian y yo simplemente los miraba, de vez en cuando una foto en ropa interior y algun gesto con la boca era suficiente para armarlos de valor y aventurarse a enseñarme.
Abri una de las tantas aplicaciones donde chateaba con gente, de mi pais, de otras regiones, incluso de lugares que no imaginaba, gente de egipto, pakistan, europa muchas veces, todos buscaban un poco lo mismo. Empece a buscar conversaciones, no era dificil, en general entrar a algun grupo facilitaba las cosas, algunos eran amables y lograban hacer que las cosas se fueran desviando hasta su objetivo, otros no tenian esa sutileza, ambos eran bienvenidos en mis mensajes.
Esa mañana fue algo diferente, estaba respondiendo mensajes, y hubo uno que me llamo la atencion. No era nada en particular, pero el chico de la foto era muy atractivo, ademas tenia un gato muy lindo, por lo general, cuando son personas asi, suelen ser usuarios falsos, por lo que empece sin expectativa alguna a responderle. Resulta que era bastante amable, estaba esperando que comenzara a coquetear pero no lo hizo, solo hablaba, me sacaba tema, tenia opinion, no se, era muy agradable hablar con el.
Y esto comenzó a ser diario.
Llevabamos hablando una semana, y aun no habia un doble sentido, morboseo o calentura, simplemente estaba siendo amable. Me mostraba lo que hacia dia a dia, aunque nunca salia él en las fotos, solo mostraba que estaba haciando o donde estaba. Esto me resultaba sospechoso, si era tan guapo imagino que no tendria problemas para hacerlo, seria algo sencillo. Empecé a dudar si era real, aun asi, no estaba haciendo algo malo en realidad, y me estaba acostumbrando a hablar con el.
Pasaron los dias y el seguia igual de amable, me mostraba lo que hacia, hablabamos de todo y me seguia llamando la atencion cada vez mas y mas. Debo decir que aunque seguia hablando con mi nuevo amigo, no habia dejado de lado mis otras actividades, de hecho estaba empezando a ser mas habitual y descarada. Como casi no iba gente a clases, y a los profesores ya no les importaba nada, empece a aceptar videollamadas mientras estaba en la sala de clases. Me sentaba al fondo de la sala, y como mis amigos eran de otros cursos, era habitual el estar sola en clases usando el telefono, nadie me molestaba. Ademas, me habia dado cuenta que con el uniforme todos se calentaban mucho mas, me pregunto por qué.
Una vez pase todo el dia en videollamadas, ningun profesor estaba dando clases y la sala estaba practicamente vacia. Yo con mis audifonos escuchaba las frotaciones y leves gemidos de quienes me contactaban para descargar sus deseos, mientras miraba, solo miraba.
Cuando llegue a casa me sentia excitada, llevaba todo el dia viendo tipos correrse, algunos tardaban mas, otros menos, algunos acaban mucho u otros solo un poco. Imaginaba muchas cosas, habia visto mucha pornografia desde siempre y tenia algunas ideas, aunque claro, no sabia que se sentia, si tenia algunas fantasias sexuales, en realidad mas que nada por curiosidad, me planteaba escenarios imaginarios en la cabeza, inventaba historias para mi, en los cuales no era tan timida y era mucho mas facil en persona llegar a concretar algo, cosa que no habia pasado.
Me tocaba mucho, no se lo mostraba a nadie, aunque si tenia en mi telefono muchas fotos y videos, que me sacaba solo para guardarlas, me gustaban, me gusta verme en las fotos y sentirme linda, atractiva, a veces me tocaba viendo mis propios videos, sola. Habia experimentado mucho conmigo misma, me conocia, sabia como tocarme de muchas formas que me generaban demasiado placer, y tambien le habia agarrado el gusto a dedearme el ano mientras me masturbaba. Mis manos son pequeñas y no era tan dificil, pero al principio dolia y tambien me ensuciaba, por lo que empece a buscar formas de hacerlo sin ese dolor, y de forma mas higienica, aprendi a relajarme y dilatarlo, luego ya no usaba solo mis dedos, y a veces me saltaba directo a esta parte.
Sola, tenia mucha experiencia, pero socialmente era alguien tranquila, introvertida, de hecho aprendi a callarme los gemidos y tocarme en silencio para que mis padres no me descubrieran. Asi que, en persona y cara a cara, no habia logrado hacer algo con alguien.
Bueno, salvo por una experiencia...
Desde siempre habia visto pornografia, como dije antes, y la verdad tenia una particular fijacion por los videos donde aparecen chicas asiaticas siendo manoseadas en trenes o buses. Lo se, esos videos son falsos, actuados, sin embargo la situacion me provocaba, me causaba deseo de saber que se sentia, pero era eso, solo una fantasia.
Pero un dia, similar al resto, iba viajando en el subterraneo camino a mi colegio. Eran unos 30 minutos de viaje en tren, pero a esa hora siempre se colapsa, lo que hacia un martirio el viajar.
Cuando yo subia aun no iba lleno, habia espacio para todos, pero avanzadas las estaciones, el tren se volvia un mar de gente agolpandose, unos con otros, pegados, hasta no poder moverse. Esta situacion me dejó en una posicion incomoda, delante mio un tipo de unos 30 años, y detras otro a quien no alcanzaba a mirar, ambos pegados a mi cuerpo sin poder hacer nada al respecto.
La situacion era ya incomoda, sin embargo, se pondria peor... El que estaba frente mio comenzo a moverse, pensaba que se estaba intentando acomodar, sin embargo, note que algo se iba abriendo espacio entre mi falda, toscamente disimulando no estar ahi. Podria decir que me paralicé, pero no.
Sabia lo que se venia, era cosa de mirar su rostro, sin reparos me miraba mientras buscaba algo con su mano, yo lo miraba tambien. La situacion me recordaba a las videollamadas y tambien los videos que habia visto, la impulsividad, el morbo, lo grosero, lo sucio... Era como los tipos de mis llamadas, empece a pensar que podria ser uno de ellos, pero seria ridiculo. Debo decir que si bien esta situacion incomodaria a muchas, mi cabeza fantaseaba algunas cosas que distorsionaron mi percepcion en ese momento, estoy segura que si decia algo, muchas personas saltarian a mi defensa, y pense en hacerlo, pero mi fantasia era mucho mas fuerte.
Sentia como frotaba sus dedos contra mi pubis por encima de la falda, cada vez mas insistente. Lo miré directamente, hacia arriba, era mas alto que yo. Él me dio una mirada de vuelta a la cual sonrei.
Al parecer ese gesto indicaba algo. Cuando hacia las videollamadas, solo mostraba un aparte de mi cara, mi boca, para poder hacer gestos que ayudaran a mis compañeros de llamada, sacar la lengua, morderme los labios, tirar algun beso, eran siempre bien recibidos por ellos, sin embargo, el mantener una sonrisa cuando estaban en ello, por lo general hacia que colocaran mas enfasis en su actividad, mas energia.
Aqui paso lo mismo, luego de sonreir, senti como su mano se aventuro con mayor descaro y profundidad, aun asi, no fue suficiente para que el llegara donde queria hacerlo. En este punto siquiera recordaba que estaba en un tren con mas gente, nada importaba. Mis fantasias me jugaban mala pasada, y cuando lo note, estaba levantando levemente la parte delantera de mi falda, facilitando el acceso. Él, al ver esto no dudo en actuar, y lo que ya le estaba tomando minutos, solo tardo unos segundos.
Apenas levante un poco de mi falda sus dedos se colaron rapidamente entre mis piernas, ya, sin la resistencia de mi ropa, salvo la ropa interior. Podia sentir el calor de su mano a traves de mi calzon, él se veia agitado, seguro estaba muy excitado, sus manos tiritaban y el miraba hacia todos lados, pero como si nada pasara, disimulando.
Cuando volvio a mirarme directamente, comenzo a mover sus dedos de un lado hacia el otro, de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo. Ya estaba excitada, podia sentir mi propia humedad, seguramente mi ropa interior estaba empapada y sus dedos tambien. El seguia moviendo los dedos de izquierda a derecha, presionando firmemente su mano contra mi vagina.
Podia descifrar lo que estaba haciendo, podia sentirlo, sus dedos hacia los lados intentaban hacer aparte mi ropa interior... Y lo estaba logrando.
Como creci viendo pornografia, parte de mi "educacion sexual" salio desde ahi, lamentablemente, y me desarrolle viendo mujeres que no tenian ningun tipo de pelo, salvo sus cejas y su cabello, los cuales tambien debian estar arreglados. Asi forme mis estandares, donde reforzada por los comentarios en los videos, haciendo mucho enfasis en lo rico que se sentia, desde muy pronto empecé a controlar su crecimiento, a tal punto que dentro de mi rutina diaria, junto con ducharme y ver hombres masturbarse, removia cada minima aparicion de bello púbico.
En un principio, utilizaba navajas tipo gillette, porque estaban a mi alcance, era lo que habia por ahi, ademas, no era mucho lo que debia quitar. Sin embargo, pronto note que era una opcion un tanto perjudicial para mi piel, por lo que conversando por aqui y por allá, me hablaron de cremas que servian para quitar los vellos, y para mi sorpresa, o no, tambien podia encontrarla en mi casa. Asi fui, quitandole un poco cada cierto tiempo a mi mamá, o quitandome con dolorosas pinzas algunos de esos indeseados pelos. Luego, cuando descubri que todas mis tias y otras mujeres usaban estas cremas, fue menos vergonzoso ir a una tienda y pedirla, juntando dinero para poder comprarla, diciendo que era un encargo o algo asi.
El punto es que si, precisamente en ese momento, estaba completamente depilada, lo que ayudó a esparcir toda mi humedad, y a motivar a este tipo para actuar, y cuando logro hacer a un lado el calzon, no hubo respiro ni tiempo para arrepentimientos, pues metio sus dedos dentro de mi, profundo, fuerte.
Naturalmente mi cuerpo reacciono, por una parte mi boca dejo soltar un gemido que espero se haya perdido en el sonido del tren, y por otra parte mis musculos se contrajeron de forma que incline mi torso hacia adelante, haciendo que mi trasero se hiciera hacia atras, donde precisamente estaba este otro tipo. Mi culo choco con su pene, logrando sentir lo que estaba entre sus pantalones, por unos segundo me vi siendo masturbada por un total extraño, y frontando mi trasero contra el pene de otro desconocido a quien no podia siquiera mirarle el rostro. Mi fantasia se habia cumplido, al final, estos videos resultaron no ser tan falsos...
Aunque yo senti que todo el viaje en el tren fue una eternidad, solo habían pasado unos 25 minutos desde que subí a este, y un par de minutos desde que este tipo empezo a buscar entre mi falda, pero yo no tenia ninguna conciencia del tiempo, el lugar o de mi misma. Podia sentir como entraban y salian sus dedos de mi, como movia estos dentro de mi, y al menos yo, si podia escuchar el sonido que generaba sus fuertes y grandes manos dentro de mi pequeñez, y con cada movimiento, me empujaba levemente hacia atras, lo suficiente para comenzar a estimular al chico detras mio con los constantes choques entre mi trasero y su pene, que en un principio fueron involuntarios, ahora los hacia a proposito, sintiendo como iba creciendo, cada vez mas y mas.
Era un delirio, no sabia que estaba haciendo, bueno, en realidad si, pero no sabia por qué lo estaba haciendo. Me habia dispuesto a ir a clases como todos los dias, pero ahora, estaba siendo masturbada por un desconocido que me tenia tan prendida que empecé a calentar al sujeto de atras, alguien que eventualmente pude haber visto cuando el tren iba mas vacio, pero que en realidad no tenia ninguna idea de como era, solo sabia que su miembro estaba entre mis gluteos, y yo no queria sacarlo de ahi.
Me seguia frotando contra el, mientras estaba siendo tocada de la forma mas vulgar posible, me sentia suspendida en el tiempo, esperando que vendria despues.
No sabia si el tipo de atras lo estaba disfrutando realmente, o si habia comprendido que estos movimientos no eran casualidad, sino mas bien una especie de invitacion, a unirse. Sin embago, mis dudas se disiparon cuando senti su mano subiendo por mi pierna hacia mi trasero. Yo me incliné un poco mas, dentro de lo que se podia, quedé apoyando mi cabeza en el pecho del desconocido de adelante y mi trasero lo mas elevado para el desconocido de atras. En realidad la posicion habia variado solo un par de centimetros, no caia un alma en ese vagon.
Yo solo respiraba, ahogando los gemidos como siempre lo tenia que hacer al tocarme para no levantar sospechas de mis papás, por lo que ya tenia practica, sin emabargo esto se estaba complicando. En mi cabeza habia sido mucho tiempo, pero se que solo llevamos unos minutos, todo escalo demasiado rapido, y el tipo de atras me estaba levantando la falda levemente, colocando su mano entre mis piernas por detras, topandose obviamente con la mano del otro desconocido.
Crei que en ese momento ambos se detendrian, pero al parecer el hecho de que ambos estuvieran tocandome los provocó aun mas, coordinandose sin hablar para meterme sus dedos. Los de el eran mas delgados que los de el primero, aunque eran igual de largos. Pronto al parecer, el desconocido de atras se aburrio de esperar su turno, dejando al otro exclusivamente tocando mi vagina, para el desplazarse hacia atras con sus dedos, haciendo circulos en la entrada de mi ano.
Sus dedos estaban mojados por mi humedad, y sin oponer ninguna resistencia, senti como entraba lenta y firmemente uno de sus dedos por mi ano. En este punto no pude contenerme, cuando entró solte un quejido, dolio un poco por lo que me enderecé, al parecer no habia aprendido tanto, aunque tambien estaba super nerviosa, asi que empece a relajarme y disfrutar lo que estaba pasando. Cuando ya habia metido su primer dedo, el segundo no tardo en aparecer, entrando de la misma forma, lenta y firmemente.
Era increible en todo sentido, no podia creer lo que estaba dejando pasar, dos desconocidos masturbando mi vagina y mi ano al mismo tiempo, en un tren subterraneo, esto era por lejos mil veces mejor que mis fantasias, porque estaba pasando, y me estaba pasando a mi. Han sido los segundos mas placenteros de mi vida, esperando que nunca acabara, solo recordaba lo mucho que habia esperado un momento para ser yo, entregarme sin miedo, disfrutar sin importar lo que digan de mi, por esos instantes me sentia viva por primera vez desde hace mucho tiempo.
Mi extasis duró solo esos breves segundos, un aviso al abrir las puertas me devolvio a la realidad. Era mi estacion, debia bajarme y actue rapido, al moverme senti como salian sus dedos de mi y empujando a todos al pasar, sali del tren, excitada y confundida, dejando atras a los dos desconocidos y mi bolsa.
Esta escena fue mi imagen mental por mucho tiempo, la utilizaba cada vez que me tocaba, la recreaba una y otra vez, usando mis dos manos para simular estos dos desconocidos. El dia que estuve contestando videollamadas de tipos corriendose, recorde esa situacion para tocarme cuando llegue a la casa. Aunque estaba excitada, nada igualaria lo que viví ese dia, donde me deje hacer todo lo que pudieron en ese tren.
A veces, fantaseo de las cosas que podría haber pasado si no me bajaba en mi estacion y la verdad, me arrepiento, era el momento perfecto para quitarme todos los "pero" que me detienen de expresar mi sexualidad como yo queria, si esos dos tipos hicieron eso conmigo frente a muchos espectadores ciegos, imagino, y tristemente solo imagino, lo que podrán hacerme en privado.
Durante un tiempo evite irme en tren para no toparme con ellos, no le conte esto a ningun conocido, amigo o familiar. Volvi a ser la chica mojigata y timida para los demas, excepto por las videollamadas que seguian siendo parte de mi rutina diaria, de esta vez ver, y solo ver.
4 comentarios - Capitulo 1: Yo, el nuevo chico y el tren