Durante los años 2013-2014 estuve viviendo en el departamento de mi hermana (ella 23 y yo 18) y aunque ya la había visto varias veces en ropa interior, en ese momento con las hormonas a full y verla tan seguido en tanga, hizo que me empiece a excitar, encima mi hermana siempre tuvo un terrible culo.
Ya había llegado un punto en el que no me importaba que sea mi hermana y le dedicaba pajas.
Dormíamos en la misma pieza con las camas una al lado de la otra y una vez que ya estaba dormida, me hacía la paja a su lado oliendo sus tangas y frotándolas en mi pija.
A la mañana siguiente apenas se iba a trabajar yo seguía haciendo lo mismo. Incluso una mañana le lecheé algunas tangas limpias y ni cuenta se dio.
Pero un día fui mas lejos: la espié al entrar y salir de bañarse, unas lindas tetas grandes, la concha peluda y el tremendo orto. Un cuerpo descomunal, me daban ganas de entrar ahí nomas y chuparla toda. A veces apenas salía yo entraba a oler esa tanguita recién cambiada y todavía húmeda, un aroma riquísimo!
Ya no me importaba que sea mi hermana, lo que mas deseaba era comerle el culo y hacerle tremendo anal. Hoy en día ya no tengo esos pensamientos ni me la quiero garchar, pero si se diera la oportunidad, tal vez lo haría.
Ya había llegado un punto en el que no me importaba que sea mi hermana y le dedicaba pajas.
Dormíamos en la misma pieza con las camas una al lado de la otra y una vez que ya estaba dormida, me hacía la paja a su lado oliendo sus tangas y frotándolas en mi pija.
A la mañana siguiente apenas se iba a trabajar yo seguía haciendo lo mismo. Incluso una mañana le lecheé algunas tangas limpias y ni cuenta se dio.
Pero un día fui mas lejos: la espié al entrar y salir de bañarse, unas lindas tetas grandes, la concha peluda y el tremendo orto. Un cuerpo descomunal, me daban ganas de entrar ahí nomas y chuparla toda. A veces apenas salía yo entraba a oler esa tanguita recién cambiada y todavía húmeda, un aroma riquísimo!
Ya no me importaba que sea mi hermana, lo que mas deseaba era comerle el culo y hacerle tremendo anal. Hoy en día ya no tengo esos pensamientos ni me la quiero garchar, pero si se diera la oportunidad, tal vez lo haría.
5 comentarios - Confesión sobre mi hermana y sus tangas
Yo espero en algún momento también dejar que me de morbo mirarla a escondidas o verla en ropa interior