Mi hermano era más grande que yo, me llevaba 3 años. No lo pude disfrutar mucho tiempo ya que se fue de casa muy joven por tema de trabajo y enseguida se enamoró.
De chiquita lo había visto varias veces desnudo, o sea vi su pene muchas veces, y fue creciendo en mi esa curiosidad.
En muchas ocasiones yo me escondía en la ducha, bien calladita y lo miraba cuando hacía pis. Siempre buscaba la forma de poder mirarle el pito. Ya me atraía desde chiquita esa cosa que cuelga.
Con el correr del tiempo, fui mirando en la tele, varias películas donde la gente salía desnuda y cada tanto se veía una verga, hasta que un día encontré una revista porno de mi hermano , ya tenia más o menos 14 años y el 17. Con mucha curiosidad la abro , me latía el corazón a mil por hora, por que sabía que mi hermano andaba por ahí, y lo primero que vi era un tipo en traje con la pija afuera del pantalón, re grande, parada , yo no podía creer que tenga eso y que esté erguida. Cerré la revista y salí de la pieza rápidamente, pero al darme cuenta que mi hermano estaba en el baño, no pude aguantar las ganas, la intriga, que volví rápidamente a su pieza, y abrí la revista nuevamente; otra imagen que me dejó perpleja y con la boca abierta; otro chabón con una verga más grande todavía, bien dura ( daba la impresión ) , y al lado otra imagen con una mujer con vestido, bien arregladita, metiéndose la pija del tipo en la boca. Yo no podía creer , me agarró un calor impresionante, cerré la revista y me fui corriendo a mi pieza. Tenia los latidos a mil, esas imágenes no salían de mi cabeza. Ahora estaba con más s intrigas y curiosidades que antes. Nunca había visto un pene erguido , no sabía que había de esas formas y de esos tamaños , solo escuché rumores y bromas de los chicos del colegio, pero no sabía que se ponían así, ni que eran tan grandes.
Era otra época, casi era imposible acceder a la pornografía y que se hable normalmente de sexo en una casa , como es ahora. En mi inocencia pensaba como hacían esos tipos para salir a la calle y que no se note tanto. Tal vez sea un truco, un pene de broma con dimensiones exageradas para hacer chistes, pensaba.
Desde ese día, moría por ver una verga como las de la revista, quería ver mas cosas de esas, me llamaba mucho la atención y me gustaban. Por suerte, cada tanto que no estaba mi hermano en casa y mis papás no se daban cuenta, yo me metía a su cuarto a ver de nuevo esa revista porno. Quedaba embobada mirándola una y otra vez.
Una vez me dejaron sola una hora más o menos y fui a la pieza de mi hermano y le encuentro 4 revistas, siiii…re contenta , me tiro en la cama a mirar una, y sin darme cuenta, lleve mi mano a mi entrepierna apretándola con la otra pierna y comencé a moverme como lo había visto en una película española, y fue tocar el cielo con las manos, el placer que empecé a experimentar, era grandioso. Así empezaron mis primeras pajas.
Me ponía de costado, dejaba mi mano apretada entre las piernas y sin darme cuenta comenzaba a moverme Sutilmente; a veces me ponía la almohada entre las piernas o algún peluche.
Muchas veces mirando películas cuando aparecía una escena erótica, yo estaba en el sillón y nadie volteaba a verme, tapada con aalgun almohadon ,dejaba la mano apoyada en la bombacha y me tocaba lo más silenciosamente. Muchas veces lo hacía hasta que un día mi hermano me vió y no me animé hacerlo más.
Una de tantas tardes silenciosas en mi casa, costumbre de dormir la siesta, yo pensando que mi hermano se había ido, me fui para su pieza, pero justo antes de entrar, siento ruido a hojas, freno mi marcha, encuentro la puerta casi cerrada, la empujó despacito y veo algo que no podía creer, estaba mi hermano haciéndose una paja mirando una de sus revista. Una pija parada, como yo quería ver, se la tiraba toda para abajo dejando la cabeza afuera y luego volvía a subir su pielcita, yo no podia dejar de mirarle la verga, era mucho la diferencia de tamaño con el pene que le conocía, era como la de las revistas, pero no tan grande. Me quedé un ratito más mirando ese espectáculo, me fui por las dudas y no pude evitar acostarme a frotarme la concha con mi almohada. Ahí me di cuenta que verle la verga parada fue peor para mi , ya que fue lo único que pensaba y quería ver todo el tiempo.
Intenté varias veces volver a repetir abrir un poco la puerta de su pieza pero muchas veces estaba con llave, o solamente se lo veía acostado mirando la tele.
Una noche que él estaba con su amigo que era nuestro vecino, un año mas que él (18 años) vecino de al lado, se los escuchaba reír, murmurar de cosas pornos, mujeres , por lo menos eso escuchaba yo cada vez que pasaba por la puerta de la pieza y miraba con disimulo para adentro de la pieza. Se ve que pase varias veces y no fui tan disimulada como yo creía, que Ramiro ( vecino ) me miró y me llamó para que entre a la pieza, yo toda vergonzosa ( el era un lindo pibe ) entro y pregunto que pasaba, ellos estaban tomando cerveza y eso hacía que mi hermano que era bastante serio , se ponga jodón y se ría de todo, entonces Ramiro me mira de arriba abajo y me pregunta si tengo novio, yo riéndome le digo que no, él que se lo veía bastante en pedo, me agarra de la mano y me pregunta si quiero ser su novia, mi hermano se cagaba de la risa, yo me puse toda colorada , me solté de la su mano y riéndome me fui de la pieza.
Unas semanas después mis papás iban a salir y yo me quede solo con mi hermano. Al rato yo estaba aburrida y escucho qu4 mi hermano me llama . Entro en su pieza, el había salido de bañarse y estaba desnudo con una toalla en la cintura y yo bromeando le digo
- Ojo! No se te va a caer la toalla
Y me río. El se sonríe y me dice
- Ahh…pero si era Ramiro, no te molestaría, no?
Y se sonríe, mirándome con cara de hacerse el malo. Yo me pongo colorada por la vergüenza y le digo que nada que ver. El mientras se acomodaba la toalla, yo le miraba el bulto y escucho que me pregunta
- ¿Te gusta?
Y yo inocentemente le digo
- ¿Qué cosa?
- Ramiro!! ¿Qué va a hacer?
Y yo como tonta casi creo que me hablaba de su entrepierna, y antes de contestarle , él se da cuanta que yo no sacaba la mirada de su bulto y me dice:
- ¿Querés verlo? Yo te lo muestro, pero no le digas a nadie
Mientras me iba diciendo eso, su pene comenzó a tomar otro tamaño, comenzó a pararse y ya era muy notorio.
Yo en silencio no decía nada pero me era imposible no mirar ahí. Yo no sabia si estaba bromeando o poniéndome a prueba.
- Veni sentate en mi cama
Me agarra de la mano, yo me siento. Se pone frente mío y me dice
- Yo te vi un par de veces espiarme mientras me cambiaba el calzoncillo.
Yo sorprendida y avergonzada le digo que nada que ver, el me vuelve agarrar la mano y me dice que me quede tranquila que siempre supo que yo lo miraba y que era normal, que las mujeres miren lo que tienen los hombres, no se lo dije a nadie.
Yo haciéndome la enojada le dije
- ¿Qué!?? Nada que ver, nene!!
Haciéndome la enojada, conteste así, pero nunca me levanté da la cama. Yo seguía frente a él y su toalla. Él sonriéndome y con una voz de mando , firme me dice:
- Tranquila!! No sabe nadie, ahora aprovecha y tocalo, nadie se va a enterar.
Me lleva mi mano hacia su bulto y lo deja ahí. Yo sentía esa dureza extraña, saco la mano , pero el riéndose me obliga a tocarlo , yo quedo con mi mano agarrándole la verga por arriba de la toalla, obvio , y no sabia que hacer jaja. Era una escena bizarra, pero realmente no sabía que más hacer pero yo estaba en donde quería estar. El me toma la mano y hace que yo se la acaricié , lo hago, mucho silencio entre los dos, después de un rato , el se sienta en la cama , abre las piernas, me llama para que yo me acerque , voy sin decir nada, me siento al lado de él, me vuelve a tomar la mano y la coloca dentro de la toalla , ufff que momento!! Parecían segundos interminables hasta que pude tocar la piel de su verga , era caliente, dura, estaba mojada con un líquido viscoso, a lo que enseguida me aclaró que no era pis, yo sonreí y seguí tocándolo. Era una sensación rara pero me encantaba. De repente comienza a desatarse la toalla, yo no podía creer que me la iba a mostrar, era mucho para un solo día, que de repente nose que mierda me pasó que me levanté como resorte y me fui corriendo a mi pieza, una boluda impresionante. El me llamaba para que vuelva, se vino hasta mi pieza y me pidió perdón, yo solo le dije que esta todo bien , que no paso nada.
Al pasar los días no podía sacarme de la cabeza esa hermosa sensación de tener una verga parada en mi mano y obvio que el arrepentimiento de no quedarme a vérsela me estaba carcomiendo la cabeza por dentro. Me tocaba pensando en la pija de mi hermano , con la esperanzada por qué se vuelva a dar una situación parecida.
Los días fueron pasando y nadir mencionó nada, hasta que una tarde cuando mis papas todavía no habían vuelto de trabajar, me llamó y me dijo si no quería ver una película con el en su pieza. Yo acepte y al rato fui.
Era una peli de terror, los dos nos acostamos en su cama. Al principio charlábamos lo más bien , hasta que apareció una escena de sexo y al protagonista se le vió el pene y nos quedamos callados. yo no podía dejar de mirarle a cada rato su entrepierna que para mi sorpresa se notaba que estaba teniendo una erección. El tenía un short cortito y yo estaba también con un short y una musculosa. La tensión fue subiendo , ya que se pusieron a coger en la película y mostraban bastante, era un poco incómodo, así que tuve que romper el hielo y bromear diciéndole si era una película de terror o erótica, el se rió y solo dijo
- Bueno, un poco de acción nunca viene mal jaja
Y tomo mi mano y la apoyó en su verga. Yo comencé a acariciarle con los dedos un rato. Los dos mirábamos la tv, yo acariciándole la pija. El pide disculpa, se levanta diciendo que entraba mucha luz por la ventana, así que la cierra casi toda dejando bien oscura la pieza solamente iluminada por la televisión. Vuelve a la cama , mientras hablábamos de la película, me agarra la mano, pero me la pone dentro del short para que le agarre la pija de una , y eso fue lo que hice. El se fue moviendo y bajándose el pantaloncito quedando todo desnudo con la poronga afuera agarrada por mi. Era imposible no mirarla, me gustaba, cada ves que había una escena que iluminaba bien la pieza, no perdía oportunidad de mirarle la pija, verla agarrada por mi mano me daba mucha exitacion que empecé a mojarme como nunca, nunca me había calentado tanto. El se acerca a mi oido y me dice:
- Te voy a enseñar algo que nos da mucho placer a los hombre.
Y agarró mi mano y me explicó como masturbarlo. Se tiraba toda la piel para abajo dejando ver la cabeza. Yo fascinada pero en silencio comencé a pajear a mi hermano con mucha suavidad. Hice lo mismo que él, sacaba toda la cabeza de la pija lentamente y volvía a cubrir ese glande que era de un color violáceo y brillaba por el liquido preseminal que lo cubría. Mi mano también se manchó. El me explicaba lo de la eyaculación y yo soló lo había visto en sus revistas, y moría de ganas de ver como salía de ahí, la guasca, pero no sucedió, por lo menos ese día.
El se terminó sacando el short, y faltando poco para que termine la película comenzó a acariciarme la pierna muy cerquita de la concha. Tenía la pija muy dura, y al terminar la película me levanté como si nada , solo dijo que la semana que viene podíamos ver otra.
Ese dia creo que me masturbé 3 veces , a la tarde , dos a la noche, era mucha la calentura que me provocó hacerle la paja a él.
Bueno las películas que “vimos” juntos desde ese momento fueron muchas, apenas nos tirábamos en la cama , automáticamente se bajaba el calzoncillo y yo comenzaba a hacerla la paja.
Cada película que veíamos su mano estaba más cerca de mi vulva pero se notaba que no se anima a tocarme, seguramente por miedo a mi reacción. Hasta que un día fui en pollera cortita para incentivar un poco , mientras lo masturbaba apoyé mi pierna sobre la suya ,abriéndola bien, el apoyó su mano y comenzó a acariciarme como siempre, hasta que se fue animando y llegó a mi bombacha, la cual ya la tenia mojada por la excitación que me producia toda la secuencia. Me pasaba el dedo de arriba abajo produciendo en mi una hermosa sensación que se enfatizó cuando sentí como sus dedos se estaban metiendo dentro de mi bombacha. El tenia la pija cada vez mas dura, yo por la calentura se la miraba a cada rato. Hasta que sentí sus dedos tocar mi concha ufff!! Por dios!! Yo cerré las piernas automáticamente al rozarme el clítoris , el me preguntó si me lastimó, yo le dije que nó, y me pidió que saque la bombacha para estar mas cómoda. Yo dudé bastante y a lo primero solo le dije que no hacía falta, pero después le dije que iba al baño y ahí me la saqué, dejándola en mi pieza. Al volver, me acosté de la misma forma, el vuelve a tocarme y me encuentra desnuda. Se pone contento se le escuchó un
- Mmmmm….!!
Y comenzó a acariciarme los pelitos suavemente. Mi calentura era inexplicable.
- Mirá, para que no te dé cosquillas, hago esto..
Se lleva el dedo a la boca, le pone saliva y comienza a pasármelo muy despacio por el clitoris, y los labios vaginales, varias veces lo hizo hasta dejarme bien lubricada.
Uy!! Yo explotaba, era una sensación hermosa, muy placentera, nos estábamos masturbando con mí hermano, algo impensado para mí. El se concentró un raro en mi clítoris haciéndome gemir bastante y yo no paraba de pajearlo. Era una locura, termino la película y como siempre sin decirnos nada , nos levantamos y cada uno a su pieza, era muy obvio que el se quedaba haciendose la paja hasta acabar y yo lo hacía en mi pieza.
Mis masturbaciones fueron mejorando, ya no usaba mis almohadas ni nada por el estilo, ahora me sacaba la bombacha , y jugaba con mis dedos en toda mi conchita y de apoco me iba introduciendo un poco el dedo en la vagina , pero no me animaba tanto.
Continuará………
De chiquita lo había visto varias veces desnudo, o sea vi su pene muchas veces, y fue creciendo en mi esa curiosidad.
En muchas ocasiones yo me escondía en la ducha, bien calladita y lo miraba cuando hacía pis. Siempre buscaba la forma de poder mirarle el pito. Ya me atraía desde chiquita esa cosa que cuelga.
Con el correr del tiempo, fui mirando en la tele, varias películas donde la gente salía desnuda y cada tanto se veía una verga, hasta que un día encontré una revista porno de mi hermano , ya tenia más o menos 14 años y el 17. Con mucha curiosidad la abro , me latía el corazón a mil por hora, por que sabía que mi hermano andaba por ahí, y lo primero que vi era un tipo en traje con la pija afuera del pantalón, re grande, parada , yo no podía creer que tenga eso y que esté erguida. Cerré la revista y salí de la pieza rápidamente, pero al darme cuenta que mi hermano estaba en el baño, no pude aguantar las ganas, la intriga, que volví rápidamente a su pieza, y abrí la revista nuevamente; otra imagen que me dejó perpleja y con la boca abierta; otro chabón con una verga más grande todavía, bien dura ( daba la impresión ) , y al lado otra imagen con una mujer con vestido, bien arregladita, metiéndose la pija del tipo en la boca. Yo no podía creer , me agarró un calor impresionante, cerré la revista y me fui corriendo a mi pieza. Tenia los latidos a mil, esas imágenes no salían de mi cabeza. Ahora estaba con más s intrigas y curiosidades que antes. Nunca había visto un pene erguido , no sabía que había de esas formas y de esos tamaños , solo escuché rumores y bromas de los chicos del colegio, pero no sabía que se ponían así, ni que eran tan grandes.
Era otra época, casi era imposible acceder a la pornografía y que se hable normalmente de sexo en una casa , como es ahora. En mi inocencia pensaba como hacían esos tipos para salir a la calle y que no se note tanto. Tal vez sea un truco, un pene de broma con dimensiones exageradas para hacer chistes, pensaba.
Desde ese día, moría por ver una verga como las de la revista, quería ver mas cosas de esas, me llamaba mucho la atención y me gustaban. Por suerte, cada tanto que no estaba mi hermano en casa y mis papás no se daban cuenta, yo me metía a su cuarto a ver de nuevo esa revista porno. Quedaba embobada mirándola una y otra vez.
Una vez me dejaron sola una hora más o menos y fui a la pieza de mi hermano y le encuentro 4 revistas, siiii…re contenta , me tiro en la cama a mirar una, y sin darme cuenta, lleve mi mano a mi entrepierna apretándola con la otra pierna y comencé a moverme como lo había visto en una película española, y fue tocar el cielo con las manos, el placer que empecé a experimentar, era grandioso. Así empezaron mis primeras pajas.
Me ponía de costado, dejaba mi mano apretada entre las piernas y sin darme cuenta comenzaba a moverme Sutilmente; a veces me ponía la almohada entre las piernas o algún peluche.
Muchas veces mirando películas cuando aparecía una escena erótica, yo estaba en el sillón y nadie volteaba a verme, tapada con aalgun almohadon ,dejaba la mano apoyada en la bombacha y me tocaba lo más silenciosamente. Muchas veces lo hacía hasta que un día mi hermano me vió y no me animé hacerlo más.
Una de tantas tardes silenciosas en mi casa, costumbre de dormir la siesta, yo pensando que mi hermano se había ido, me fui para su pieza, pero justo antes de entrar, siento ruido a hojas, freno mi marcha, encuentro la puerta casi cerrada, la empujó despacito y veo algo que no podía creer, estaba mi hermano haciéndose una paja mirando una de sus revista. Una pija parada, como yo quería ver, se la tiraba toda para abajo dejando la cabeza afuera y luego volvía a subir su pielcita, yo no podia dejar de mirarle la verga, era mucho la diferencia de tamaño con el pene que le conocía, era como la de las revistas, pero no tan grande. Me quedé un ratito más mirando ese espectáculo, me fui por las dudas y no pude evitar acostarme a frotarme la concha con mi almohada. Ahí me di cuenta que verle la verga parada fue peor para mi , ya que fue lo único que pensaba y quería ver todo el tiempo.
Intenté varias veces volver a repetir abrir un poco la puerta de su pieza pero muchas veces estaba con llave, o solamente se lo veía acostado mirando la tele.
Una noche que él estaba con su amigo que era nuestro vecino, un año mas que él (18 años) vecino de al lado, se los escuchaba reír, murmurar de cosas pornos, mujeres , por lo menos eso escuchaba yo cada vez que pasaba por la puerta de la pieza y miraba con disimulo para adentro de la pieza. Se ve que pase varias veces y no fui tan disimulada como yo creía, que Ramiro ( vecino ) me miró y me llamó para que entre a la pieza, yo toda vergonzosa ( el era un lindo pibe ) entro y pregunto que pasaba, ellos estaban tomando cerveza y eso hacía que mi hermano que era bastante serio , se ponga jodón y se ría de todo, entonces Ramiro me mira de arriba abajo y me pregunta si tengo novio, yo riéndome le digo que no, él que se lo veía bastante en pedo, me agarra de la mano y me pregunta si quiero ser su novia, mi hermano se cagaba de la risa, yo me puse toda colorada , me solté de la su mano y riéndome me fui de la pieza.
Unas semanas después mis papás iban a salir y yo me quede solo con mi hermano. Al rato yo estaba aburrida y escucho qu4 mi hermano me llama . Entro en su pieza, el había salido de bañarse y estaba desnudo con una toalla en la cintura y yo bromeando le digo
- Ojo! No se te va a caer la toalla
Y me río. El se sonríe y me dice
- Ahh…pero si era Ramiro, no te molestaría, no?
Y se sonríe, mirándome con cara de hacerse el malo. Yo me pongo colorada por la vergüenza y le digo que nada que ver. El mientras se acomodaba la toalla, yo le miraba el bulto y escucho que me pregunta
- ¿Te gusta?
Y yo inocentemente le digo
- ¿Qué cosa?
- Ramiro!! ¿Qué va a hacer?
Y yo como tonta casi creo que me hablaba de su entrepierna, y antes de contestarle , él se da cuanta que yo no sacaba la mirada de su bulto y me dice:
- ¿Querés verlo? Yo te lo muestro, pero no le digas a nadie
Mientras me iba diciendo eso, su pene comenzó a tomar otro tamaño, comenzó a pararse y ya era muy notorio.
Yo en silencio no decía nada pero me era imposible no mirar ahí. Yo no sabia si estaba bromeando o poniéndome a prueba.
- Veni sentate en mi cama
Me agarra de la mano, yo me siento. Se pone frente mío y me dice
- Yo te vi un par de veces espiarme mientras me cambiaba el calzoncillo.
Yo sorprendida y avergonzada le digo que nada que ver, el me vuelve agarrar la mano y me dice que me quede tranquila que siempre supo que yo lo miraba y que era normal, que las mujeres miren lo que tienen los hombres, no se lo dije a nadie.
Yo haciéndome la enojada le dije
- ¿Qué!?? Nada que ver, nene!!
Haciéndome la enojada, conteste así, pero nunca me levanté da la cama. Yo seguía frente a él y su toalla. Él sonriéndome y con una voz de mando , firme me dice:
- Tranquila!! No sabe nadie, ahora aprovecha y tocalo, nadie se va a enterar.
Me lleva mi mano hacia su bulto y lo deja ahí. Yo sentía esa dureza extraña, saco la mano , pero el riéndose me obliga a tocarlo , yo quedo con mi mano agarrándole la verga por arriba de la toalla, obvio , y no sabia que hacer jaja. Era una escena bizarra, pero realmente no sabía que más hacer pero yo estaba en donde quería estar. El me toma la mano y hace que yo se la acaricié , lo hago, mucho silencio entre los dos, después de un rato , el se sienta en la cama , abre las piernas, me llama para que yo me acerque , voy sin decir nada, me siento al lado de él, me vuelve a tomar la mano y la coloca dentro de la toalla , ufff que momento!! Parecían segundos interminables hasta que pude tocar la piel de su verga , era caliente, dura, estaba mojada con un líquido viscoso, a lo que enseguida me aclaró que no era pis, yo sonreí y seguí tocándolo. Era una sensación rara pero me encantaba. De repente comienza a desatarse la toalla, yo no podía creer que me la iba a mostrar, era mucho para un solo día, que de repente nose que mierda me pasó que me levanté como resorte y me fui corriendo a mi pieza, una boluda impresionante. El me llamaba para que vuelva, se vino hasta mi pieza y me pidió perdón, yo solo le dije que esta todo bien , que no paso nada.
Al pasar los días no podía sacarme de la cabeza esa hermosa sensación de tener una verga parada en mi mano y obvio que el arrepentimiento de no quedarme a vérsela me estaba carcomiendo la cabeza por dentro. Me tocaba pensando en la pija de mi hermano , con la esperanzada por qué se vuelva a dar una situación parecida.
Los días fueron pasando y nadir mencionó nada, hasta que una tarde cuando mis papas todavía no habían vuelto de trabajar, me llamó y me dijo si no quería ver una película con el en su pieza. Yo acepte y al rato fui.
Era una peli de terror, los dos nos acostamos en su cama. Al principio charlábamos lo más bien , hasta que apareció una escena de sexo y al protagonista se le vió el pene y nos quedamos callados. yo no podía dejar de mirarle a cada rato su entrepierna que para mi sorpresa se notaba que estaba teniendo una erección. El tenía un short cortito y yo estaba también con un short y una musculosa. La tensión fue subiendo , ya que se pusieron a coger en la película y mostraban bastante, era un poco incómodo, así que tuve que romper el hielo y bromear diciéndole si era una película de terror o erótica, el se rió y solo dijo
- Bueno, un poco de acción nunca viene mal jaja
Y tomo mi mano y la apoyó en su verga. Yo comencé a acariciarle con los dedos un rato. Los dos mirábamos la tv, yo acariciándole la pija. El pide disculpa, se levanta diciendo que entraba mucha luz por la ventana, así que la cierra casi toda dejando bien oscura la pieza solamente iluminada por la televisión. Vuelve a la cama , mientras hablábamos de la película, me agarra la mano, pero me la pone dentro del short para que le agarre la pija de una , y eso fue lo que hice. El se fue moviendo y bajándose el pantaloncito quedando todo desnudo con la poronga afuera agarrada por mi. Era imposible no mirarla, me gustaba, cada ves que había una escena que iluminaba bien la pieza, no perdía oportunidad de mirarle la pija, verla agarrada por mi mano me daba mucha exitacion que empecé a mojarme como nunca, nunca me había calentado tanto. El se acerca a mi oido y me dice:
- Te voy a enseñar algo que nos da mucho placer a los hombre.
Y agarró mi mano y me explicó como masturbarlo. Se tiraba toda la piel para abajo dejando ver la cabeza. Yo fascinada pero en silencio comencé a pajear a mi hermano con mucha suavidad. Hice lo mismo que él, sacaba toda la cabeza de la pija lentamente y volvía a cubrir ese glande que era de un color violáceo y brillaba por el liquido preseminal que lo cubría. Mi mano también se manchó. El me explicaba lo de la eyaculación y yo soló lo había visto en sus revistas, y moría de ganas de ver como salía de ahí, la guasca, pero no sucedió, por lo menos ese día.
El se terminó sacando el short, y faltando poco para que termine la película comenzó a acariciarme la pierna muy cerquita de la concha. Tenía la pija muy dura, y al terminar la película me levanté como si nada , solo dijo que la semana que viene podíamos ver otra.
Ese dia creo que me masturbé 3 veces , a la tarde , dos a la noche, era mucha la calentura que me provocó hacerle la paja a él.
Bueno las películas que “vimos” juntos desde ese momento fueron muchas, apenas nos tirábamos en la cama , automáticamente se bajaba el calzoncillo y yo comenzaba a hacerla la paja.
Cada película que veíamos su mano estaba más cerca de mi vulva pero se notaba que no se anima a tocarme, seguramente por miedo a mi reacción. Hasta que un día fui en pollera cortita para incentivar un poco , mientras lo masturbaba apoyé mi pierna sobre la suya ,abriéndola bien, el apoyó su mano y comenzó a acariciarme como siempre, hasta que se fue animando y llegó a mi bombacha, la cual ya la tenia mojada por la excitación que me producia toda la secuencia. Me pasaba el dedo de arriba abajo produciendo en mi una hermosa sensación que se enfatizó cuando sentí como sus dedos se estaban metiendo dentro de mi bombacha. El tenia la pija cada vez mas dura, yo por la calentura se la miraba a cada rato. Hasta que sentí sus dedos tocar mi concha ufff!! Por dios!! Yo cerré las piernas automáticamente al rozarme el clítoris , el me preguntó si me lastimó, yo le dije que nó, y me pidió que saque la bombacha para estar mas cómoda. Yo dudé bastante y a lo primero solo le dije que no hacía falta, pero después le dije que iba al baño y ahí me la saqué, dejándola en mi pieza. Al volver, me acosté de la misma forma, el vuelve a tocarme y me encuentra desnuda. Se pone contento se le escuchó un
- Mmmmm….!!
Y comenzó a acariciarme los pelitos suavemente. Mi calentura era inexplicable.
- Mirá, para que no te dé cosquillas, hago esto..
Se lleva el dedo a la boca, le pone saliva y comienza a pasármelo muy despacio por el clitoris, y los labios vaginales, varias veces lo hizo hasta dejarme bien lubricada.
Uy!! Yo explotaba, era una sensación hermosa, muy placentera, nos estábamos masturbando con mí hermano, algo impensado para mí. El se concentró un raro en mi clítoris haciéndome gemir bastante y yo no paraba de pajearlo. Era una locura, termino la película y como siempre sin decirnos nada , nos levantamos y cada uno a su pieza, era muy obvio que el se quedaba haciendose la paja hasta acabar y yo lo hacía en mi pieza.
Mis masturbaciones fueron mejorando, ya no usaba mis almohadas ni nada por el estilo, ahora me sacaba la bombacha , y jugaba con mis dedos en toda mi conchita y de apoco me iba introduciendo un poco el dedo en la vagina , pero no me animaba tanto.
Continuará………
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