Mi hijo me valora más que mi marido II

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Para entender, lea la historia anterior.
Yo estaba acostada boca arriba después de ese momento que tuve con mi hijo, mi esposo me dijo que hoy no volvería, ni siquiera me quejé, lo dejé y me quedé en la cama, mi hijo entra y pregunta por su padre, seguí con el culo en alto y le dije que su padre no iba a venir hoy, no sé por qué mi coño empezó a derretirse con solo escuchar la voz de mi hijo y recordar esa gran polla que tiene, recordarlo en mi boca. Mi hijo me pregunta si quiero un masaje.



Acepto de buena gana.
Quería ver hasta donde llegaría mi hijo así que comencé a quitarme los shorts, ni siquiera me importaba que no tuviera bragas debajo, quería probar a mi hijo si se resistiría a su madre caliente.
Mamá: Voy a quitarme la ropa para que te resulte más cómodo hacer el masaje, hijo.

Hijo: está bien mamá, estará bien así.

Me ayuda a quitarme el short, mi hijo me pone la mano en el trasero mientras me quito el top






Mi hijo dice: joder, que culo más caliente.

Yo pregunto: qué hijo.

Hijo: oye mamá, voy a empezar con el masaje.
Hice oídos sordos pero escuché lo que decía, estaba disfrutando de ser deseada y estaba bien que él fuera mi hijo porque le chupé la polla en la mañana, comenzó a masajear mi cuerpo.



Mi hijo no tardó mucho, ya me estaba masajeando el culo, me di la vuelta para provocarlo aún más.



Él gimió un poco y dijo que maravillosa era su mano, dijo, ay hijo, estás delicioso.
Estaba tan cachonda que ni siquiera me di cuenta que mi hijo se había quitado el short, solo lo noté cuando sentí esa gran polla en la entrada de mi coño.



Mamá: Ooh hijo, ¿esto se va a comer a mami?

Hijo: solo una pequeña mamá.

Mamá: ooh hijo no puedo, estoy casada, si hago eso mi marido será un cornudo.
Estaba jugando con mi hijo, tenía muchas ganas de que me metiera esa polla.

Hijo: ay mamá, entonces se va a poner cornudo, te voy a follar mamá.
Mi hijo empieza a comerme rico



Mamá: Ohhh hijo, adelante oooh que gran polla más bonita ooohh aahhhh.

hijo: Ahrg mamá, sé que querías aaahr, toma la polla, mamá, tómala.

Mamá: Aaaah eso es hijo, lo quería aaaaiii aaaaaiii entrar en el coño de mami, vamos hijo.
Vaya que delicioso estaba todo, me lo colocó, levantándose ligeramente, recibiendo la polla de mi propio hijo, pero no tuve ningún remordimiento en gemir contra esa gran polla, mi coño se agrandaba cada vez más por la polla de mi hijo, él se enfurruñó. Más fuerte, rodé sobre esa deliciosa polla.



Mamá: Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaah joder, hijo, hace mucho calor.

Hijo: Aaaahr mamá aaaahr que se mueve en la polla de tu hijo, está riquísima.
que cogida tan caliente hay ahí, entregada a la verga de mi hijo, pidiéndole que me siga follando, pidiéndole que entre al lugar que dejó.



Gemí sobre esa sabrosa polla, mi hijo me folló muy bien.
Madre: Aaaaaah aaaaah hijo ven a comerme de frente.
Me volví hacia él, todo emocionado, esperando la polla.



Mi hijo no dijo una sola palabra, me miró con una mirada de deseo y volvió a meter su polla en el coño de su madre, mi hijo me folló ferozmente, su padre nunca me había follado así, de hecho solo lo hicimos. lo básico, él y yo nunca follamos solos. Tuvimos sexo, pero mi hijo me estaba follando aunque quería, puse su mano en mi cuello.



Mamá: Aaaaaa cuelga mami ve hijo ooohuuuuuuuuuuuuuuuuuuu.
Gemí con picardía, mi hijo simplemente me miró a los ojos y me folló más fuerte y más rápido.



Madre: Aaaaaiiiiii, vamos más rápido, hijo, fóllame, fóllame aaaah aaaah
mi hijo solo empujaba más y más rápido por el vigor que tenía, mi coño estaba siendo aplastado



Mi hijo me estaba acabando, yo gritaba sobre su polla, gemía como una puta sobre su polla y el ruido de nuestros cuerpos se hacía cada vez más fuerte.



Madre: Aaaaaiiiee aaaaaieee aaaaaah aaaaaah aaaaah aaaaaaiie joder aaaaii joder sonoooo ooooooh aaaaaah.

Mi hijo no dijo nada, estaba concentrado en follarme fuerte.

Mamá: Aaaaaaaiiiiii uuuuuuuuiiiiii ven, déjame sentarme en tu polla, hijo.
Pensé en devolverle el favor, me coloqué de espaldas a él para que pudiera ver mi trasero y comencé a sentarme duro sobre su polla.



Hijo: Aaaaa joder madre, que culo tan grande, que se sienta en la verga de tu hijo, perra, vete a la mierda.

Su padre nunca me había llamado perro, lo que peor me gustaba, eso me dio más coraje para sentarme, en medio de mis gemidos se escuchaba el ruido de nuestro sexo y yo lo oía.

Madre: Ploc Ploc Ploc, Aaaaah aaahh Ploc Ploc Aaaaah aaahhh te gusta mami sentada en tu polla, hijo.

Hijo: muy aaar, sigue así mamá, que rica estás, siéntate y ponle los cuernos así al idiota de mi padre.

Madre: Aaaaah Ploc Ploc Ploc, risas, tu madre come rico.

Mi hijo me sujetó por la cintura y empezó a empujar rápida y fuerte.

No pude decir nada, solo le grité a su polla.
Hijo mío: anda mamá, ponte a cuatro patas y te voy a follar, puta mía.

Mamá: jajaja, vamos entonces, bastardo.
Me pongo a cuatro patas, mi hijo empieza a follarme fuerte, abro mi culo para que entre mejor, me toma de los brazos, mis gemidos son contenidos por la cama, muerdo la cama.

No pude decir nada, solo gemí mientras mi hijo me decía puta, perro, decía que me quería comer todos los días. De hecho, a partir de hoy definitivamente se lo daré todos los días.

Mamá: cómete a tu puta aaaaaah ve hijo aaaah cómete a tu puta.

Hijo: aaa madre caliente, que rico coño.

Mi hijo anuncia que está a punto de correrse pero no frena sus embestidas.

Hijo: Aaaah estoy disfrutando Aaaah que culo tan caliente mamá estás deliciosa, quieres ser mi novia aaahr.
Ni siquiera pude responder, mi hijo me remató.
Después de recuperarme le digo que estoy casada y saldría con él y además está el hecho de que es mi hijo, le di una idea mejor, ¿qué te parece follarme solo?
mi hijo acepta de buena gana, le digo que se vaya a su habitación. Y me voy a dormir porque él rompió conmigo