Reina anal

"Reina anal" ese es el apodo que mi hermano me ha puesto desde hace muchos años atrás, supongo porque está obsesionado con mi trasero o porque le encanta la forma tan sumisa en la que dejó que me haga lo que desee de formas muy rudas y toscas mientras me hace temblar las piernas y me hace correr dándome sexo anal.
El amor entre mi hermano y yo es algo especial... podemos llegar a hacer cosas extremadamente pervertidas y denigrantes haciéndome sentir realmente su puta o su juguete sexual pero también podemos llegar a ser tan románticos mientras me acaricia suavemente y me besa con pasión diciendo que ni siquiera mi esposo merece mis besos y mis caricias, que me ama y que quiere formar una familia conmigo.
Sexo tan duro y extremo como montarme tomándome del cabello mientras me da sexo anal en seco siempre manteniendo una penetración profunda colocando todo su peso sobre mí mientras me hace gritar, mis ojos se llenan de lágrimas y me dice que soy una sucia puta, una mala esposa y una mujer ridícula que se calienta con el pene de su propio hermano y le pone los cuernos a su marido porque le excita hacerlo ya que es tan patética que solamente puede conseguir placer de las formas más perversas y denigrantes.
Pero hay veces en donde es tan romántico que me acaricia el cabello y me besa tiernamente la boca mientras me mira a los ojos, me desnuda con tanta delicadeza y pasión, me besa las manos, sube a mi cuello, baja hasta mi abdomen y juega con mi ombligo mientras besa mi barriguita diciendo que yo seré la madre de sus bebés luego me toma entre sus brazos y me abraza mientras me hace el amor
Le gusta mirarme a los ojos mientras incrementa el ritmo de la penetración pues sabe que por atrás duele pero cuando mi cuerpo empieza a agitarse y empiezo a jadear respirando por la boca, él me besa con mucha pasión abrazándome muy fuerte haciéndome sentir tan vulnerable pero tan protegida, haciendo el amor con el hombre que amo mientras me sujeta tiernamente de la cintura o de las nalgas diciendo que yo soy su mujer y que con una hermana como yo no necesita una esposa. 
Aparte de prostituirme en exceso o invitar a sus amigos para que me persigan por toda la casa y el primero que me atrapa puede someterme, somos una pareja sólida pues entendemos mucho lo que el uno quiere del otro, ambos nos amamos y vivimos nuestra sexualidad de una forma libre... él no tiene ningún tipo de complejo al compartirme con otros hombres y yo, no es como que sea muy decente que digamos y disfruto el delicioso castigo de ser sometida por hombres que no conozco los cuales obviamente agotan mi cuerpo y me dejan muy sensible para luego ser tomada por mi hermano y sentirme tan dominada y sometida a él pues mi cuerpo ya no puede más pero ahí estoy levantando el culo para el hombre que ama.
Mi vida con mi esposo es una vida normal y tranquila, soy una mujer decente felizmente casada la cual le prepara la comida y siempre está dedicándose a las labores de la casa... él se va a trabajar muy tranquilo confiando en que su dulce y fiel esposa se queda en casa esperando su regreso cuando en realidad mi rutina empieza cuando él se va de casa.
Satisfacer sexualmente a mi hermano no necesariamente sucede cuando mi esposo no está en casa pues incluso cuando él está durmiendo o viendo algún partido de fútbol puedo darme alguna escapadita para poder satisfacer a mi verdadero amor, mi amado hermano 
Pero parte de las rutinas que tengo cuando mi esposo no está en casa es ir a asilos a darle sexo oral a ancianos a ver si alguien puede mantener una erección lo suficientemente firme como para darme sexo anal por el simple morbo de hacerlo con alguien físicamente desagradable... ya saben, el morbo de juntar algo lindo con algo desagradable, una chica joven con un cuerpo voluptuoso con alguien ya decadente.
Aparte de ello está la prostitución ya sea parándome en una esquina con ropa sugestiva o atendiendo a los pervertidos amigos de mi hermano que siempre llegan con mucha emoción y me manosean las nalgas intentando comprobar las maravillas que mi hermano les ha hablado sobre mí.
Infidelidad, prostitución y sexo anal con mi propio hermano... esa es mi rutina de vida, esa es la vida que jamás anhelé pero que definitivamente quiero vivir hasta retirarme y tener una vida tranquila con mi hermano y nuestros hijos, envejecer junto a él sin arrepentirme de decisiones que no tomé. Es por eso que cuando tengo una idea o él tiene una idea la conversamos y buscamos la manera de llevarlo a la realidad por más pervertida que sea.












Ahora esta es una pregunta para ustedes mis queridos lectores que de cierta forma también son parte de la perversión que vivo con mi hermano... ¿Qué tipo de publicaciones les gustaría leer, qué tipos de historias? Algo más centrado en mi hermano y yo, en las cosas sucias que suelo hacer en los asilos o cuando me prostituyo o incluso cómo es mi vida sexual con mi esposo... estoy abierta a sugerencias para que así todos puedan leer un poco de mi vida.