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La Madura de la Tienda 4

Continuación…
M: señora Fabyyyy, me sorprende.
F: ¿Qué, me veo muy gorda?
M: gorda de ninguna manera podría hacer mi vista ante usted mi lady, está, se ve maravillosa, excelente decisión al traer ese vestido.
F: gracias bebé, muchas gracias, me sonrojas, y dime ¿te gustan los tacones?

Ahora si se voló la barda, ese vestido le quedaba perfecto, claro, sin ropa interior debajo sería mas perfecto, pero con esas grandes ubres no era lo mas adecuado andar marcando sus pezonazos, así como estaba sentada, el vestido se le subía hasta mas de media pierna, a cada movimiento que hacía el auto, sus gelatinosas tetas se movían como olas en el mar, me daba la impresión de que se había puesto aceite en todo su cuerpo, un muy adecuado maquillaje en su hermoso rostro de latina madura, su piel morena clara llamaba la atención e invitaba a acariciarla, a besarla, a saborearla, la veía de arriba para abajo y viceversa, mientras se quitaba sus sandalias y se ponía unos tacones de plataforma ancha, alcancé a ver un poco la ropa interior que traía, me parece que se traslucía la tela blanca y que era un tanga (después descubrí que efectivamente era un tanga de encaje).

M: me encantan, y mas en una mujer de bandera como usted.
F: ¿de bandera? ¿eso que significa? Me miró extrañada.
M: que es un mujerón, de pies a cabeza.
F: aaah, pues tienes razón, de lo que se pierde mi marido, ¿verdad?
M: pues si, pero el la tuvo en su juventud y le acomodó dos chamacos.
F: pues si, la calidad de una decae, cuando uno se va haciendo vieja.
M: no pues… yo observo detalladamente y sin mentirme ni un momento, que calidad hay, y de sobra, y mas si esa carne viene en una envoltura como ese vestido, se ve mas antojable de lo normal, digo… con todo el respeto que se merece (se echa a reir).
F: jijijiji, ay que chistoso y barbero eres.
M: no que va, solo soy completamente honesto.
F: asi son los hombres, adulan hasta que ya no disimulan.
M: ¿a poco yo disimulo?
F: jijijj, no, mejor ya pon tu vista al frente y acelera, que si no vas a chocar y tenemos que llegar algo rápido si no se acaban las cosas.
M: ash, de todos modos, yo voy a ir viendo el paisaje eh, porque paisajes como ese (volteando a verla de pies a cabeza) y en mi auto, muy pocas veces se ven.
F: jijii, mentiroso.
M: nooo, en serio, quizás en mi vida, solo he estado con dos mujeres que quizás le podrían hacer competencia a usted.
F: igual de gordas, yo creo que sí.

Ese era retarme, que me lanzo a magrear su pierna que estaba a su alcance, aprovechando que estaba agachada sujetando sus tacones

M: ¿goooorda?, esta jugosa carne no me parece para nada gorda
Hasta brincó de sentir mi mano en su pierna y se incorporó, quité mi mano rápido.
F: ay, escuincle tentón, ¿Qué no te amarraron las manos de niño? (Me da un manotazo, que por supuesto, no me dolió)
M: si, claro que si, pero las tuve amarradas mucho tiempo, ahora créame que cada oportunidad la aprovecho.
F: si ya vi, nomás te falta ser pulpo.
M: quisiera serlo, cuando veo tanta carne a mi alcance. (vuelve a soltarme un manotazito).
F: bueno, al menos tenías la mano calientita (mas caliente tenía la verga).
M: ah si soy de manos calientes, yo no sufro mucho que digamos de frio.
F: ¿en serio?, porque yo soy bien friolenta, si no trajera este carro calefacción, me estaría muriendo de frio.
M: a mi me parecía que no era tan friolenta, la he visto algo destapada esta semana.
F: ash, pues es que una mujer puede cambiar de temperatura corporal de la noche a la mañan, una semana estar friolenta y otra no tanto y así, además ya sabes que nosotras tenemos unos días en los que estamos mas alegres y menos friolentas.
M: si si si, ya se a qué se refiere.
F: jijiji, si, ando en esos días de la canícula, jijiji.
M: jajajaja, canícula, yo lo llamo de otra forma.
F: ay, cállate, no lo digas (me da otro manotazito).
M: bueno, me callo entonces, pero dígame, ¿esa canícula le ha jugado malas pasadas?
F: jijijiji, si, por eso tengo dos hijos.
M: jajaja, ¿son hijos de la canicula?
F: jijijiji, no tanto de eso, pero sí.
M: también del amor que sentía por su esposo, ¿no?
F: sii, fue mi primer hombre, y el único, para mi no había como el, que ciega de amor estaba de veras, ahora comprendo que eché a perder mi juventud con el.
M: no Doña Faby, no lo vea tanto así (se volteo hacia mi ya con los tacones puestos, con su bolso arriba tapaba lo que se le pudiera ver en medio de sus sabrosas piernotas, hizo contacto con mi mano en la palanca de velocidades, yo por supuesto al sentir su templada piel, ni de chiste la iba a quitar de ahí, es mas, hasta quinta metí, y poco a poco aprovechando la plática, fui extendiendo mi mano hasta quitarla por momentos y dejarla puesta encima de su rodilla, sin abrir la palma de mi mano), al menos de eso tiene a sus hijos.
F: pues si, es lo único, aunque siento que quieren mas a su papá.
M: pero viven con usted mas que con el.
F: pues si pero porque soportan menos a la pinche roba maridos que tiene ahorita, igual mi hijo ya no me visita tanto como antes.
M: oh ya, pues que mal, pero al menos su hija vive con usted.
F: pues si, a ella no la voy a dejar que desperdicie su juventud como lo hice yo con su padre.
M: claro, ella que si tenga los novios que quiera, que pruebe mas experiencias que nos ofrece este mundo tan grande.
F: no te creas, ya tuvo dos novios, o bueno, los que me ha presentado a mi, si se me ha salido algo de las casillas, y eso que de cosas mas intimas no hablamos, pero yo creo que a mi ya me rebasó mucho en cuanto a esas cosas, uno de sus novios estaba mas grande que tu, y traía siempre buen carro, le regalaba muchas cosas y la sacaba a muchas partes, terminaron porque se puso de toxico y la quería traer bien checada. (y como no, si tiene un cuerpecito de modelo esa mina).
M: no pues es que, yo que el igual iba a estar celoso, salió como la mamá de bella.
F: pero ella en güera como su papá.
M: si, seguramente es su vivo retrato de usted cuando era joven.
F: pues la verdad si, así estaba como ella.
M: no pues si, aunque ella entonces si anda provechando la canícula.
F: jijijiji, siii, canija.
M: y a poco usted, solo con su marido aprovechó la canícula.
F: jijijji, pues casi eh, o sea, casi la aprovecho con alguien mas, pero que bueno que no se dio, se entera mi ex esposo y me habría dejado de patitas en la calle.
M: a ver, cuénteme.
F: ni debería niño, pero pues tu ya me contaste unas de tus locuras.
M: viene viene.
F: pues verás que, una vez nos dejó mi marido como seis meses.
M: ijole, se fue a trabajar lejos seguramente.
F: siii, y yo a los tres meses estaba que me subía por la paredes de que no soportaba la canícula, jijiji.
M: ¿y cómo fue eso?
F: pues casi le pongo los cuernos a mi marido.
M: ah caray, ¿con quién?
F: ay pues tu no lo conoces.
M: no pues yo creo no, pero ¿cómo fue el asunto?
F: pues, como te dije, fueron meses sin mi marido.
M: si comprendo, y aguantó mucho, hoy no hay muchas mujeres aguantando infidelidades sin ellas pagar con la misma moneda.
F: si caray, si lo hubiera hecho sería una de esas, que bueno que no probé el meterle los cuernos, porque trabajo es que una se atreve y después se les hace vicio como a muchas que he conocido.
M: pero dice que casi se los pone, pero cuénteme porfa, no me deje con la duda.
F: ay, que curiosito eh, pero bueno, casi le pongo los cuernos con un cobrador.
M: jajajaja, la clásica historia de la mujer casada con un cobrador.
F: siii, ya sé, es un clásico ¿verdad?
M: ni que lo diga eh, donde estaba yo que no estaba trabajando de cobrador, jajajaja.
F: jijijiji, no hombre yo creo que eras un crio que apenas y comenzabas a fijarte en las mujeres, yo ya tenía 30.
M: han pasado doce años entonces.
F: si, hace doce tenías 14 años, a penas y estaban empezando a gustarte las mujeres, jijijiji.
M: como cree Doña Faby, a mi desde la primaria, ¿a poco no sabe que a nosotros desde la primaria se nos despiertan las hormonas?
F: uy, si hasta desde bebés se les anda parando el asuntito, jijijiji.
M: jajaja, bueno, pues ya ve.
F: si si, te creo Mati, te creo.
M: pero bueno, ¿cómo es que caaasi engaña a su ex marido?
F: pues si, casi.
M: o sea, tipo como, ¿ya se estaban encuerando y que los encuentran?
F: noooo, no como crees.
M: entonces.
F: casi nos encuentra besándonos mi hijo, es lo único que hice con el, solo una vez nos besamos y esa vez que llega temprano de la escuela mi hijo, casi nos encuentra en el faje.
M: uy, que mala suerte para el cobrador, y supongo que para usted también, pudo haber conocido el estar con otro que no fuera su esposo.
F: no Mati, estuvo bien, o iba a ser igual que mi marido, y nunca lo fui, afortunadamente, nunca perdí la dignidad como el, que sepa con cuanta piruja se metía.
M: bueno, pues viéndolo por ese lado, tiene razón, aunque si si lo hizo, no la juzgo eh.
F: que no, no lo hice, no pasó de unos fajes.
M: bueno, no pues, aunque solo hubo un faje, que afortunadote ese cobrador.
F: ay, y yo eh, porque estaba acá, bien mamey.
M: pero bueno, nunca es tarde Doña Faby, aproveche ahorita que puede, y aproveche tooodo el potencial que tiene, (le dirigí una mirada a su bien moldeado cuerpo).
F: si ¿verdad?, hasta me pagarían re bien por estar conmigo, jijiji.
M: ni lo dude eh.
F: imagínate tu, que gastas en promedio mil por estar con señoras casadas, yo ni hotel pediría, jijiji.
M: no pues, lo bueno que usted tiene casa, y si no pues por eso tenemos tanta naturaleza en nuestro municipio.
F: si eh, yo siempre quise irme de dia de campo, hacer algo asi como en la canción “y las mariposas, volaban alrededor”.
M: andele, y con su falda escolar.
F: jijijiji, no como crees, ya estoy vieja para esas prendas.
M: pues, hasta ese vestido es mas atrevido que una falda escolar.
F: bueno, eso si, pero me vería ridícula de colegiala.
M: no que va, si alguien la podría ver ridícula, yo la vería asi con ganas como de darle unas buenas lecciones eh, que alumnota (otra vez las miradas a su cuerpo, y uno que otro toqueteo a sus piernas, ya ni se inmutaba porque se las tocara, y ya no quite mi mano después de varios toqueteos)
F: ay, escuincle cochino (manotazitos en mis manos, pero ya no las quitó de sus piernas, esas suaves y abundantes piernas)
M: ni se imagina mi bella señora.
F: nunca conocí a alguien tan lanzado como tu eh.
M: igual no es que haya conocido tantos hombres Doña Faby.
F: pues si, eso es cierto, aquel cobrador era como tu, y casi logra que fuera una promiscua adultera.
M: pero por algo no se dieron las cosas señora, y porque algo se dio su divorcio, porque a usted, uy, le queda demasiada cuerda.
F: y tal vez si eh, no me imaginé estar así a mi edad, en el auto de un joven adonis, paseando y asi de arreglada, como una piruja como las que le gustan a mi ex marido, jijijiji.
M: pero usted no es eso señora, y puede hacer ahora lo que se le de su gana, con cuidadito claro, pero lo que quiera, la neta.
F: si es cierto Mati, muchas gracias por invitarme a salir, la verdad que, si no fuera por ti, yo estaría como una vieja amargada en la tienda, o en mi casa, hace días que te dignaste a pasar por mi local, ese dia en la mañana, no se que me dio de vestirme como me vestí, simplemente aproveché que mi hija no estaba y me quise sentir mas joven, mas llamativa, mas guapa.
M: y lo logró señora, henos aquí, soy muy afortunado de estar con la mujer mas guapa que hasta el momento se ha subido a mi auto.
F: ay exagerado, barbero.
M: no señora, en serio, se lo juro por mi mamacita, nunca había subido a una mujer asi como usted de chula a mi carro, se lo juro.
F: bueno, te quiero creer entonces.
Ya llegábamos al tianguis, se veía el gentío y se antojaba desayunar.
M: primero desayunamos, ¿gusta?, porque igual se me antoja otro tipo de carne (le apreté las piernas, ella gimió, pero no me quitó las manos de ahí) pero primero hay que comer comida (se mordió los labios, y también se los relamió, gimiendo otra vez.
F: escuincle condenado, te aprovechas que estoy en la canícula.
M: uy, eso es poquito Faby.
F: ¿ahora hasta me tuteas?
M: pues si, si no la gente va a pensar que es mi patrona, mejor que piensen que somos amigos, novios, algo así.
F: ¿y vas a querer agarrarme la mano? ¿Abrazarme?
M: si, ¿te molestaría?
F: no, para nada (me lanzó una mirada coqueta, o como dicen en la película de Ted, la mirada de cógeme)
Continuará…

1 comentarios - La Madura de la Tienda 4

Maikmoreno1
No aparecen las partes que van antes de esta bro