Con mi mujer llevamos varios años ya juntos, hemos probado muchas cosas y por lo tanto no estamos reacios a explorar aún más
Un día entramos a una de esas páginas de citas, dejando en claro que eramos una pareja. Siempre dejando nuestra identidad en el anonimato. La cuestión es que andábamos buscando un espectador/ra para nuestro momento de intimidad. No tardaron en picar la carnada, muchos hombres muy mayor de edad, otros gays atraídos por mi físico pero hubo uno que llamo nuestra atención casi de inmediato. Era un tipo de nuestra ciudad que decía ser bisexual y al igual que nosotros nunca había experimentado una actividad como esta.
Luego de una semana de conversaciones intermitentes pactamos un encuentro en casa. Lo invitamos a pasar a nuestro living, destacamos un vino y las conversaciones no se tardaron en dar. Al rato mi mujer se mete a la habitación y quedamos ambos expectantes, debo admitir que estaba medio nervioso y parecía que nuestro invitado también.
De adentro salió mi mujer con un body y porta ligas.
Ella tiene una gran figura por lo que el muchacho quedo hipnotizado con su físico, el conjunto le resaltaba las caderas y la cintura y los dos grande pechos que querían escaparse de ese conjunto.
Ella lo miró con cara atrevida mientras agarraba del pantalón que no tardó en quitar y dejar mis partes completamente expuesta mi erección.
Un día entramos a una de esas páginas de citas, dejando en claro que eramos una pareja. Siempre dejando nuestra identidad en el anonimato. La cuestión es que andábamos buscando un espectador/ra para nuestro momento de intimidad. No tardaron en picar la carnada, muchos hombres muy mayor de edad, otros gays atraídos por mi físico pero hubo uno que llamo nuestra atención casi de inmediato. Era un tipo de nuestra ciudad que decía ser bisexual y al igual que nosotros nunca había experimentado una actividad como esta.
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De adentro salió mi mujer con un body y porta ligas.
Ella tiene una gran figura por lo que el muchacho quedo hipnotizado con su físico, el conjunto le resaltaba las caderas y la cintura y los dos grande pechos que querían escaparse de ese conjunto.
Ella lo miró con cara atrevida mientras agarraba del pantalón que no tardó en quitar y dejar mis partes completamente expuesta mi erección.
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