Ocurre que comencé a estudiar otra carrera y, conocí a otro grupo de gente. Entre tanta gente conocí a mi compañero que, anteriormente, había estudiado abogacía, pero no había terminado acabado la carrera.
El asunto con él es que yo comencé siendo genial entre el grupo. Desde el inicio había administrado todo el grupo de compañeros y me hice con la popularidad que él quería.
No sabía que él también quería ser popular, porque en todas las clases sólo se mostraba egocéntrico con su actitud y haciendo alarde de su novia. Para no decir su nombre completo me referiré a ella como Li.
Li es una chica linda, que yo no conocía realmente. Recién nos vimos por primera vez en el primer examen presencial y -aún lo recuerdo bien- cuando entró al salón fue directamente a verme y querer besarme la mejilla.
A ver, para mí es extrañísimo saludar con besos en la mejilla, primero por lo que vivimos tras la pandemia de coronavirus y, segundo, porque no soy tan confianzudo con todos.
El asunto es que se aproximó a mí, luego me miró y me dijo: "Hola, ///////." Después de ella llegó su novio, el abogado que les digo. Y el compañero con toda la confianza me estruja la mano. Pero está claro que entre hombres hay que estrecharse las manos, pero otra cosa muy distinta es estrujarlas, como si fuéramos amigos, pero él lo hizo ya mirándome con ojos de superioridad.
Al principio su presencia en mi vida me provocaba cierta incertidumbre, porque un compañero que se cree el Alfa siempre es un peligro, en cualquier ámbito de la vida. De todas formas ese cuatrimestre no dije más ni me estuve metiendo con ellos.
Lo emocionante vio al finalizar el cuatrimestre, porque me invitaron a tomar unos tragos y a jugar billar. No me negué, porque me parecía genial salir del examen y relajarme jugando billar.
Entonces llegamos y comenzamos a jugar. Él, como conductor designado no tomó, y ella tampoco porque él no le dejaba tomar. Más bien se la pasaba conmigo ya que él la criticaba cada que ella quería tocar las bolas de billar con las manos sólo porque así se divertía. Ya desde ese momento iba entendiendo la actitudes que tenía él con ella y el tipo de relación que era.
Bueno, esa noche terminó conmigo embriagado y, aún así, demostrando mi capacidad para realizar cálculos de porcentaje a gran velocidad. Ya que fuimos en grupo y algunos se fueron, así que para pagar había que dividir los gastos. Sólo con eso creo que bastaba para hacerme notar.
Posterior a eso no hablamos porque comenzaron las vacaciones. Ella estaba trabajando y yo también. El abogado tampoco me hablaba, y un día de la nada me invita a su emprendimiento para organizarlo. Así que me enlacé a la empresa y comencé a organizar todos los grupos de trabajo para alcanzar la máxima eficiencia.
Ahora sí llegamos a este presente donde él está ocupado con su empresa, ella está estresada por su emprendimiento a parte y yo estoy de por medio, ayudándolo a él en su empresa y ella con sus estudios.
Justamente ocurre que ella explota. Me escribe diciéndome que se siente mal, que las actitudes del abogado la tienen harta, que todos los problemas se le suman y su brillo se va apagando.
Entonces mi respuesta es sencilla. Le hablo para subirle los ánimos, ya que me gusta, y no le niego ni un minuto de mi día para que se sienta acompañada. Entonces, comenzamos a acercarnos, hasta el punto donde me acepta los comentarios inapropiados sobre propuestas de sexo.
Y este sería nuestro inicio como amigos. Ya que me envió una foto cuando se la pedí, aunque la foto es normal sé que habrán más.
PD: Esta historia recién comienza, sólo voy anotando el contexto para que cuando suba las actualizaciones no tenga que crear otra introducción.
El asunto con él es que yo comencé siendo genial entre el grupo. Desde el inicio había administrado todo el grupo de compañeros y me hice con la popularidad que él quería.
No sabía que él también quería ser popular, porque en todas las clases sólo se mostraba egocéntrico con su actitud y haciendo alarde de su novia. Para no decir su nombre completo me referiré a ella como Li.
Li es una chica linda, que yo no conocía realmente. Recién nos vimos por primera vez en el primer examen presencial y -aún lo recuerdo bien- cuando entró al salón fue directamente a verme y querer besarme la mejilla.
A ver, para mí es extrañísimo saludar con besos en la mejilla, primero por lo que vivimos tras la pandemia de coronavirus y, segundo, porque no soy tan confianzudo con todos.
El asunto es que se aproximó a mí, luego me miró y me dijo: "Hola, ///////." Después de ella llegó su novio, el abogado que les digo. Y el compañero con toda la confianza me estruja la mano. Pero está claro que entre hombres hay que estrecharse las manos, pero otra cosa muy distinta es estrujarlas, como si fuéramos amigos, pero él lo hizo ya mirándome con ojos de superioridad.
Al principio su presencia en mi vida me provocaba cierta incertidumbre, porque un compañero que se cree el Alfa siempre es un peligro, en cualquier ámbito de la vida. De todas formas ese cuatrimestre no dije más ni me estuve metiendo con ellos.
Lo emocionante vio al finalizar el cuatrimestre, porque me invitaron a tomar unos tragos y a jugar billar. No me negué, porque me parecía genial salir del examen y relajarme jugando billar.
Entonces llegamos y comenzamos a jugar. Él, como conductor designado no tomó, y ella tampoco porque él no le dejaba tomar. Más bien se la pasaba conmigo ya que él la criticaba cada que ella quería tocar las bolas de billar con las manos sólo porque así se divertía. Ya desde ese momento iba entendiendo la actitudes que tenía él con ella y el tipo de relación que era.
Bueno, esa noche terminó conmigo embriagado y, aún así, demostrando mi capacidad para realizar cálculos de porcentaje a gran velocidad. Ya que fuimos en grupo y algunos se fueron, así que para pagar había que dividir los gastos. Sólo con eso creo que bastaba para hacerme notar.
Posterior a eso no hablamos porque comenzaron las vacaciones. Ella estaba trabajando y yo también. El abogado tampoco me hablaba, y un día de la nada me invita a su emprendimiento para organizarlo. Así que me enlacé a la empresa y comencé a organizar todos los grupos de trabajo para alcanzar la máxima eficiencia.
Ahora sí llegamos a este presente donde él está ocupado con su empresa, ella está estresada por su emprendimiento a parte y yo estoy de por medio, ayudándolo a él en su empresa y ella con sus estudios.
Justamente ocurre que ella explota. Me escribe diciéndome que se siente mal, que las actitudes del abogado la tienen harta, que todos los problemas se le suman y su brillo se va apagando.
Entonces mi respuesta es sencilla. Le hablo para subirle los ánimos, ya que me gusta, y no le niego ni un minuto de mi día para que se sienta acompañada. Entonces, comenzamos a acercarnos, hasta el punto donde me acepta los comentarios inapropiados sobre propuestas de sexo.
Y este sería nuestro inicio como amigos. Ya que me envió una foto cuando se la pedí, aunque la foto es normal sé que habrán más.
PD: Esta historia recién comienza, sólo voy anotando el contexto para que cuando suba las actualizaciones no tenga que crear otra introducción.
0 comentarios - La novia de mi amigo el supuesto Abogado.