Para los que nos siguen, ya saben quien es Martina, para los que no, les cuento, Martina es petisa, no llega a 1,60. 20 años en ese momento, 21 ahora, rubia natural, ojos celestes, una cara divina, delicada, tetas naturales de lindo tamaño, el culo hermoso, un cuerpo todo entrenado. Mentalmente morbosa, incluso a nuestro lado es muy morbosa.
Nosotros que somos una pareja bastante open mind nos la enfiestamos y después como que nos enamoramos de ella, ella de nosotros, vivimos juntos un tiempo y toda esta locura amorosa y sexual tenía fecha de vencimiento, ella tenía super decidido irse a vivir afuera, no lo iba a cambiar y creo que también nos animamos a vivirlo sabiendo que tenía esa fecha de cierre, al menos en lo físico, pero realmente la amamos, de hecho Eve (mi mujer) acaba de volver de un viaje para visitarla.
Esto pasó en ese tiempo que vivíamos juntos los 3. Evelin se había juntado con unos amigos, Martu y yo íbamos a salir a cenar.
Salí de ducharme y me quedé desnudo sentado en la cama contra el respaldo, destapado mirando TV. Entró Martina a ducharse, cuando sale del baño sale también completamente desnuda, perra y decidida.
M: Qué estás mirando?
S: Ahora? A vos.
M: Es la respuesta que quería.
S: Y mi amor, si salís desnuda del baño y estás re buena.
M: Vamos a ver si te caliento rápido.
Directamente se sienta sobre mi pija y empieza a moverse. En pocos segundos ya tenía la pija bien dura y dentro de ella. Me dio una cabalgata zarpada pasándome las tetas por la cara para que se las chupe. Claramente la pendeja venía muy caliente, acabó rapidísimo, cambiamos a un misionero y al toque acabé yo llenándole la concha de leche. Fue todo muy rápido e intenso.
Nos quedamos recostados con mi pija adentro de ella, besándonos.
S: Saliste intensa de la ducha.
M: Te voy a ser directa y sincera. Tuve una idea, me la quedé pensando, me calenté y me empecé a tocar pensando en eso.
S: Que querés hacer?
M: Un 69 con vos.
S: Pero acabamos de garchar.
M: Lo se.
S: Entonces?
M: Era la previa mi amor. Quiero chuparte la pija, sentir como se agranda nuevamente en mi boca y que me chupes la conchita toda acabada.
Como soy muy gauchito me recosté boca arriba, ella se giró y se puso sobre mi para el 69. Empecé a chuparle la concha y de a poco iba saliendo la leche que le había acabado, entre chupada y lamida me la fui tragando todita. Ella gemía con mi pija entera en la boca y la mantuvo mientras iba creciendo.
Me calentó mucho la situación y también me volvía loco pensar que ella estaba sintiendo el sabor de su propia concha en mi pija.
Martu acabó otra vez. La hice poner de costadito y en cucharita apoyándole el culo me la cogí para volver a acabar yo.
Cambiamos los planes, pedimos delivery y miramos una peli esperando a que llegara Eve para dormir los 3 juntitos. Una borrachita y 2 bien garchados.
Nosotros que somos una pareja bastante open mind nos la enfiestamos y después como que nos enamoramos de ella, ella de nosotros, vivimos juntos un tiempo y toda esta locura amorosa y sexual tenía fecha de vencimiento, ella tenía super decidido irse a vivir afuera, no lo iba a cambiar y creo que también nos animamos a vivirlo sabiendo que tenía esa fecha de cierre, al menos en lo físico, pero realmente la amamos, de hecho Eve (mi mujer) acaba de volver de un viaje para visitarla.
Esto pasó en ese tiempo que vivíamos juntos los 3. Evelin se había juntado con unos amigos, Martu y yo íbamos a salir a cenar.
Salí de ducharme y me quedé desnudo sentado en la cama contra el respaldo, destapado mirando TV. Entró Martina a ducharse, cuando sale del baño sale también completamente desnuda, perra y decidida.
M: Qué estás mirando?
S: Ahora? A vos.
M: Es la respuesta que quería.
S: Y mi amor, si salís desnuda del baño y estás re buena.
M: Vamos a ver si te caliento rápido.
Directamente se sienta sobre mi pija y empieza a moverse. En pocos segundos ya tenía la pija bien dura y dentro de ella. Me dio una cabalgata zarpada pasándome las tetas por la cara para que se las chupe. Claramente la pendeja venía muy caliente, acabó rapidísimo, cambiamos a un misionero y al toque acabé yo llenándole la concha de leche. Fue todo muy rápido e intenso.
Nos quedamos recostados con mi pija adentro de ella, besándonos.
S: Saliste intensa de la ducha.
M: Te voy a ser directa y sincera. Tuve una idea, me la quedé pensando, me calenté y me empecé a tocar pensando en eso.
S: Que querés hacer?
M: Un 69 con vos.
S: Pero acabamos de garchar.
M: Lo se.
S: Entonces?
M: Era la previa mi amor. Quiero chuparte la pija, sentir como se agranda nuevamente en mi boca y que me chupes la conchita toda acabada.
Como soy muy gauchito me recosté boca arriba, ella se giró y se puso sobre mi para el 69. Empecé a chuparle la concha y de a poco iba saliendo la leche que le había acabado, entre chupada y lamida me la fui tragando todita. Ella gemía con mi pija entera en la boca y la mantuvo mientras iba creciendo.
Me calentó mucho la situación y también me volvía loco pensar que ella estaba sintiendo el sabor de su propia concha en mi pija.
Martu acabó otra vez. La hice poner de costadito y en cucharita apoyándole el culo me la cogí para volver a acabar yo.
Cambiamos los planes, pedimos delivery y miramos una peli esperando a que llegara Eve para dormir los 3 juntitos. Una borrachita y 2 bien garchados.
2 comentarios - Me tragué mi propia leche desde su conchita
Es parte de una historia enorme que fue la pendeja esta.