Trío de ensueños PARTE 4

Hola a todos, les recomiendo que vayan a las anteriores partes del relato, espero en esta no renegar como lo hice para subir la tercer parte.


Les recuerdo como nombro a los personajes "E" es mi esposa, "T" es nuestra invitada y "YO" soy yo...

Seguimos con lo que sigue...

Se vuelven a besar, se acariciaban la espalda, y mi esposa baja la mano para acariciarle el culo, y nuestra invitada imita la acción pero subiendo la apuesta, ya que su mano se coló entre el pantalón y la tanga, acariciando directamente los cachetes del culo de mi mujer. A lo que esta reacciona con un gemido y tira su cabeza hacia atrás. Acto seguido T, baja la cabeza y besa suavemente los pechos de E, sin todavía dejarlos desnudos.

Listo, este tren ya no tenía frenos, las chicas estaban envueltas en llamas. Yo disfrutaba verlas, y la verga ya no sabía como expresarme que quería entrar a jugar...


Mi esposa desprende el corpiño para dejar sus hermosos pechos desnudos, y lo arroja al piso, T pasa a darle tiernos y pequeños besitos a los pezones, mientras con sus manos las presiona desde los costados para que se junten. Abre la boca, saca su lengua y empieza suavemente a acariciarlos con ella. 
Mi mujer gemía, jadeaba, movía su cabeza, acariciaba a nuestra tercera apasionadamente, la miraba, y no paraba de gemir.
T abre la boca y se mete todo el pezón derecho para comenzar a chuparlo, morderlo, lengüetearlo, babearlo, y volver a chuparlo. Cada tanto con cada mordisco la agasajada daba como saltos mezcla de dolor, placer, excitación, y sus gemidos lo demostraban. También su calentura se intensificaba ya que la agarra con ambas manos por el rostro, y la arrastra para besarla fuertemente.

E- Sácatelo... mientras acariciaba sus tetas por sobre el corpiño. T lo desprende y se lo saca lentamente, yo no podía despegar mi mirada de la escena ya que había soñado con esos pechos infinidad de veces. Al dejarlos libres salen a la luz unas tremendas tetas, del tamaño esperado (grandes), firmes, y con pezones grandes y super erectos. T se los auto acaricia, me mira, la mira a ella y nos dice...

T- Les gustan?... y se pasa la lengua por ambas maravillas, luego las presiona juntándolas, y se mueve mostrándomelas, y a mi mujer.


T- Hay una para cada uno...

Me pongo de pie, camino hacia ellas, E ya estaba prendida a una, y T con la mano me ofrecía la otra. Se la agarro, acariciándola intensa y suavemente, pellizcando los pezones y mientras la beso. Mi mujer paso de una teta a la otra varias veces, dejando ambas muy húmedas, bajo mi cabeza y ahí si, chupamos una cada uno. Nuestra invitada gemía y nos acariciaba la cabeza, la nuca, etc...

Que bien la estábamos pasando, nos mirábamos con mi esposa y sonreíamos sin dejar de chupar. Habíamos fantaseado con ese momento muchas veces y al fin lo estábamos viviendo, juntos, excitados, calientes, y con una invitada de ENSUEÑOS.

Casi coreografiadas ambas entre caricias, se desprenden el botón y cierre de sus pantalones, y comienzan a bajarlos. Acaricié la piel de ambos culos, las besé en la boca y me retiré a mi trono para seguir disfrutando.
Chau calzado, chau pantalones, chau medias, y hola a esas tangas. Besos, tetas que se rozan y esas manos que transitan la espalda, cintura y acarician y aprietan culos. Nuestra invitada se acaricia la vulva corriendo la bombacha a un lado, sube lentamente su mano y un hilo de sus jugos muestra la humedad de la zona, lleva sus dedos a su lengua, y entre las dos los limpian mientras se besan, se chupan. Repite la situación, pero esta vez metiendo su mano en la vulva de mi mujer, la cual desprende gemidos mientras es tocada, y entre lengüetazos limpian la mano nuevamente. Se sacan la poca "ropa" que les quedaba y pasan a la cama.
Yo me aflojé el cinto, botón, cierre y metí mi mano para acariciarme la verga. Tampoco quería tocarme tanto, ya que estaba demasiado a full. Podía acabar sin rozarme prácticamente. Me saqué la parte de arriba, y el calzado, todo sin moverme de mi silla.
Ellas enfrentadas de rodilla, masturbándose una a la otra, mientras sube la intensidad de los gemidos. Luego nuestra invitada la empuja para que la espalda de E quede apoyada en el colchón, y entrelaza sus piernas para comenzar con un tijera explosiva. Al principio solo comandada por nuestra tercera, pero al minuto las dos se frotaban fogosamente.Me paré, me saque el pantalón y los bóxers, y mi mástil saltaba de alegría. Una gota preseminal asomaba tímidamente.
Ellas en pleno disfrute, con las cabezas colgando hacia atrás. Mi esposa estaba teniendo su primer orgasmo, y...

T: Mmmmmm que rico... mirándome. y vuelve a tirar la cabeza hacia atrás.

Fui directo hacia ella, y desde atrás agarré mi verga para metérsela en esa boca abierta y gimiente. Con la otra mano manoteé una teta y comencé a masajearla. Por la posición se atragantaba con mi pija engullida, mientras mi esposa nos veía sin dejar la tijera. El dilema de acabo o no acabo me atormentaba, quería bañar esas tetas con mi semen, pero no...

CONTINUARA...