Lizbeth, la pequeña evangélica 5

Otra de las razones para ir a veracruz y de las más importantes fue ver de nuevo a Lizbeth, la pequeña evangélica, una zorrita de 19 añitos que le encanta demasiado el sexo, con ella de vez en cuando nos mandamos algunas fotos hot o hasta videos, ya sea de ella tocandose o hasta bailando y fotos donde sale en lencería y desnuda, tiene un buen cuerpo para su corta edad y en realidad le gusta complacerme, al ser su familia muy estricta no puede salir con quien ella quiera, así que batalla para eso y por eso tiene guardada esa parte caliente de ella, su abuela es muy religiosa y a la más mínima la reta, su madre trabaja para la policía por lo cual no está mucho en casa, me llevó bien con la familia y como demuestro poco interes en ella dejan que me acerque o hasta que salgamos, aunque debo de actuar, si ellas supieran la realidad y que ya me la cogi por todos sus agujeros, no dejarían que estuviera cerca de ella, así que fui a verla, aprovechando el viaje, ya que no se cuando pueda volver, como siempre linda ella, ella sabía que estaba en veracruz por lo cual no se sorprendió pero si le gustó mucho verme, ya que corrió a darme un abrazo.
L: que bueno que estas aquí, me da mucho gusto verte papi.
J: a mi también pequeña, como estas?
L: que no vez? Si estoy buena.
Ella tiene ese toque sensual y divertido, ya era algo tarde, ella iba al cine, esa película de barbie salió muy lucrativa, me invito a ir con ella, acepte, iba con un vestido de una sola pieza rosa, dejando ver sus bien torneadas piernas.
En lo personal no vi nada de la peli, estuve metiendole mano toda la función, ella se notaba visiblemente turbada, quería gozar de mis manos, pero quería ver la película, se dejaba hacer, yo por otro lado me recreaba en sus piernas, tocaba cerca de su panochita y le tocaba las tetas, metía la mano, ella solo se dejaba, al terminar la función ella fue al baño y luego me encaro.
L: valla que eres malo, meterme mano así, me dejaste bien caliente.
J: eso se soluciona.
L: si, solo porque en serio quería ver esa película, que si no, cogiamos en la sala.
J: te creo, pero ahora podemos ir a otro lugar.
En eso ella toma mi mano y pone algo ahí, se sentía mojado.
L: no lo mires hasta que lleguemos a la camioneta.
Así que intrigado me fui, al llegar a la camioneta ya pude ver que es lo que era, se había quitado su tanga que es de color negra y me la había dado, estaba muy mojada, igual que ella, se le veía una cara de niña traviesa y satisfecha, iríamos a su casa, su abuela salió a un viaje con la iglesia y su madre trabajaría hasta tarde, así que nos fuimos, en el camino fue el turno de ella de tocarme, pero quise algo más, me saque la verga, ella empezó a jalarmela primero, para después metersela en la boca, durante todo el camino ella se la fue metiendo, con algunos baches y bordos se le iba más a la garganta, le daban pequeñas arcadas, aunque intentaba, llegamos a su casa y ella se recompuso, no quería que la vieran saliendo con saliba o algo más, entramos normales a su casa, aunque nomas cerrar la puerta nos fuimos rápido a su cuarto.
L: ahora si papi, ya fue mucho calentamiento, ahora ya quiero entrar en acción.
Rápido me quite la ropa, ella hizo lo mismo, la tome en mis brazos, la cargue y se la fui metiendo, la tenia cargada, la agarraba de su culo y la iba dejando caer sobre mi verga, ella tenía sus brazos alrededor de mi cuello, trataba de no gritar.
L: que rico papi, ya extrañaba que me cogieras así, me encanta tu verga papi.
Esa niña sabe como ponerme loco, la subía todo lo que podia y la volvía a bajar, me fui acercando a la cama, ya ahí me deje caer enterandole más mi verga.
L: aaaaaaahhhhhhh, queeeee riicooo papiiiii.
La tome de sus piernas y se las abrí y le daba unas fuertes embestidas, eran secas y duras, sacando casi por completo mi verga, solo dejando la cabeza adentro para volversela a meter fuerte, ella estaba sudando y gimiendo bajito, en una que saque por completo mi verga, no calcule bien y de golpe entro toda mi verga en su ano, ella lanzó un grito desgarrador y empezó a llorar.
L: papi malo, me acabas de romper el culo.
No me moví, la dejé así adentro de ella un rato más, ella seguía llorando, valla que la había dolido, hasta a mi me dolió, ya se la había metido por el culo, mejor seguirle dando por el ano, despacio la saque para volver a metersela igual, ahora despacio y lento, lo que a la primera fue dolor, ya después fue solo placer, a ella le gustaba.
L: así papi, despacito.
Lanzaba varios gemidos y gritos, tratando de no hacer mucho ruido, empecé a aumentar las embestidas de fuerza, hasta sentir que me venía, le dejé toda la leche en los intestinos, al sacar mi verga, tenía restos de popo y algo de sangre, igual de su culo salía mi leche y sangre.
L: valla que me rompiste, pero me gustó papi.
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