■ Les traigo esta historia candente sobre una madre que tuvo sexo con el compañero de fútbol de su hijo.
■ Disfruten y comenten.
Decidí ir a los partidos de mi hijo después de varias veces que me lo insistía, no quería ir ya que siempre lo ponían en las gradas por ser un mal jugador.
Fui algo casual, un top blanco corto, bra rojo, un short de mezclilla muy corto con una tanga roja. Al principio me aburría de tener las miradas de todos los padres en mi, pero todo cambió cuando el partido terminó y vi al jugador estrella.
Jose era un joven de 19 moreno, buena condición física y más en sus piernas por jugar demasiado fútbol, cuando lo vi quede totalmente prendida en calor y decidí ir a hablar con el.
Después de ignorar a mi hijo en toda la celebración y charlar mucho hasta tenernos confianza entre nosotros, nos quedamos solos.
J: Su hijo es un hombre afortunado de tenerla, es muy genial.
M: Si lo se, lastima que no sepa valorar a esta gran mujer.
J: Yo si la valoraría eh, digo solo por tratarse de usted.
M: Ay vamos jaja claro que se que harías eso y más por mi...
J: Jaja bueno... si usted me lo pediría yo haría lo que fuera por usted.
Solo esas palabras bastaron para tomarle la palabra y llevarlo de la mano hacia la casa dejando a mi hijo totalmente varado en la escuela.
No paso ni un día y el ya había caído en mis encantos, pero bueno... soy una buena milf ¿Que se puede esperar de un joven hormonal?.
Ahí estaba yo de rodillas dándole la mamada de su vida mientras el se toma del sillón jadeando, sintiendo mi lengua mojar todo su duro tronco sin parar.
Se que debería sentirme culpable pero en cierta forma no la siento, es amigo de mi hijo y ahora estoy de rodillas frente a él.
Las posiciones cambiaron y ahora me tiene en 4 dándome duro mientras yo no paro de gemir como la puta que soy, mi coño no para de ser penetrado por el jugador.
Perdí la noción del tiempo por las posiciones en las que me tuvo, la casa no paraba de sonarse el ruido de muestras pieles chocando sin parar.
Ahí estaba yo bañada de leche y comiéndome el esperma de ese joven. El se puso de nuevo su uniforme y se dispuso a irse ya que se sentía culpable de follarme, pero a mi no me engaña y se que en cuanto quiera tener sexo el caerá sin dudar...
■ Disfruten y comenten.
Decidí ir a los partidos de mi hijo después de varias veces que me lo insistía, no quería ir ya que siempre lo ponían en las gradas por ser un mal jugador.
Fui algo casual, un top blanco corto, bra rojo, un short de mezclilla muy corto con una tanga roja. Al principio me aburría de tener las miradas de todos los padres en mi, pero todo cambió cuando el partido terminó y vi al jugador estrella.
Jose era un joven de 19 moreno, buena condición física y más en sus piernas por jugar demasiado fútbol, cuando lo vi quede totalmente prendida en calor y decidí ir a hablar con el.
Después de ignorar a mi hijo en toda la celebración y charlar mucho hasta tenernos confianza entre nosotros, nos quedamos solos.
J: Su hijo es un hombre afortunado de tenerla, es muy genial.
M: Si lo se, lastima que no sepa valorar a esta gran mujer.
J: Yo si la valoraría eh, digo solo por tratarse de usted.
M: Ay vamos jaja claro que se que harías eso y más por mi...
J: Jaja bueno... si usted me lo pediría yo haría lo que fuera por usted.
Solo esas palabras bastaron para tomarle la palabra y llevarlo de la mano hacia la casa dejando a mi hijo totalmente varado en la escuela.
No paso ni un día y el ya había caído en mis encantos, pero bueno... soy una buena milf ¿Que se puede esperar de un joven hormonal?.
Ahí estaba yo de rodillas dándole la mamada de su vida mientras el se toma del sillón jadeando, sintiendo mi lengua mojar todo su duro tronco sin parar.
Se que debería sentirme culpable pero en cierta forma no la siento, es amigo de mi hijo y ahora estoy de rodillas frente a él.
Las posiciones cambiaron y ahora me tiene en 4 dándome duro mientras yo no paro de gemir como la puta que soy, mi coño no para de ser penetrado por el jugador.
Perdí la noción del tiempo por las posiciones en las que me tuvo, la casa no paraba de sonarse el ruido de muestras pieles chocando sin parar.
Ahí estaba yo bañada de leche y comiéndome el esperma de ese joven. El se puso de nuevo su uniforme y se dispuso a irse ya que se sentía culpable de follarme, pero a mi no me engaña y se que en cuanto quiera tener sexo el caerá sin dudar...
2 comentarios - Relato: Amigo de Futbol