Había terminado la noche de fiesta con unos amigos, entre los que estaban mi amiga Mayte y su cornudo marido y mi también amiga Geo. Mayte llevaba, una camiseta roja, sin mangas y unos botones por la parte delantera, hasta la mitad del pecho, un minivaquero cortísimo que apenas la tapaba el culo, ajustado, rojo, y unas medias amarillas. Al estar su marido sereno, apenas nos tocábamos los culos de vez en cuando. Con la que, sí que jugaba algo más, al no estar su marido, era con Geo, aunque también con cuidado pues había gente que no nos debía ver hacer cosas mala. Ella llevaba una camiseta de rayas horizontales negras y amarillas y un vaquero negro ajustado.
Geo y yo acabamos encerrados en un departamento del baño de mujeres, besándonos. Mis manos acariciaban su rico culo redondito, hasta que subieron, metiéndose por su camiseta y acariciando sus pechos con el sujetador de aro puesto. Geo acabo arrodillándose, bajándome los pantalones, empezando a hacerme una deliciosa mamada. Geo no paraba en ningún momento y mi mano se acabó posando en su cabeza acompañándola. Geo también me comía los huevos de vez en cuando, masturbándome. Geo a veces me miraba fijamente y me decía lo cachonda que se ponía con estas situaciones de riesgo conmigo.
No paso mucho tiempo antes de que entraran al baño y oyéramos la voz de Mayte llamándonos. Abrí la puerta y según entro, la agarre del culo y la bese. Esta le dijo a Geo que era una cabrona, aprovechándose de que su marido no esta y el de ella sí. Tras una breve risa, seguimos besándonos, mientras Geo no paraba de comérmela. Mi mano dejo la cabeza de Geo, para acariciar los pechos de Mayte. Desabroché los botones de esta y metí mi mano, acariciando sus pechos, solo con un sujetador de encaje y sin aro.
Mayte me dijo que no teníamos mucho tiempo y se arrodillo, uniéndose a Geo con la mamada. Entre ambas me comían la polla deliciosamente y mis huevos quedaron bien empapados. De vez en cuando pasaban sus lenguas a la vez por mi glande, rozándose entre ellas. Cuando me iba correr, ambas abrieron bien sus bocas y yo pase mi polla, durísima, por ellas, metiéndola y sacándola y golpeando sus preciosas caras. Me masturbé rápido y cuando me corrí, apunte a sus bocas, llenándolas con mi semen. Estas, antes de tragar, se besaron y pasaron mi semen de una a otra. Cuando tragaron, se levantaron y nos besamos. Nos colocamos bien la ropa, se limpiaron y salimos de nuevo a la fiesta.
En la pista de la disco seguimos tonteando Geo y yo, con cuidado, ante la mirada de Mayte, que se moría por estar allí con nosotros y no con su marido. Mi novia, también había encontrado compañía con un tío de la disco, con el que no tardo en irse a su casa. Tras varias copas, Geo y yo decidimos irnos a mi casa a tener algo más de marcha e intimidad. Geo se lo dijo a Mayte, la cual le dijo a su marido que se iba con nosotros a otra disco. Por suerte este decidió quedarse allí con sus amigos.
Por el camino, nos besamos los tres y las acaricie bien los culos, al igual que ellas hicieron con el mío. En el ascensor los besos subieron de tono y mis manos también acariciaron ya sus pechos. Fuimos directos a mi habitación, donde seguimos besándonos y metiéndonos mano, frente a la cama. Ambas me quitaron la camiseta y besaron el cuello y el pecho, mientras acariciaba y azotaba sus culos. Mayte se arrodillo y me quito el pantalón. Lamio mi polla y me masturbo, para, en cuanto la tuve dura, volver a mamármela sin parar.
Cogí la camiseta de Geo y se la quite, dejándola con un sujetador negro de aro. Las aprete fuerte y bese su canalillo, antes de sacárselas de él y comérselas despacio y disfrutando de ellas. Cuando sus pezones estaban duritos, disfrute más aun de ellas, mordiéndolas y estirándoselos, cogidos por mis labios. Geo se acabó arrodillando y comenzó a hacerme la mamada, en lugar de Mayte, que se levantó. Nos besamos y acaricie sus pechos y su culo. Volví a desabrochar los botones de la camiseta y metí mi mano para acariciar sus pechos. Cuando note sus pezones duros, la quite la camiseta, dejándola con el sujetador de encaje y sin aro, col negro. En él se le marcaban los pezones y los empecé a morder, por encima de la tela. Tras pellizcárselos fuerte y estirar de ellos, provocándola un fuerte grito de dolor, la saque los pechos del sujetador y se los comí.
Las hice ponerse a gatas en el borde de la cama y acaricie y azote sus culos. La desabroche los pantalones y acaricie sus coños, tapados aun, metiendo mi mano entre sus piernas. Cogí el vaquero de Geo y se lo quité, dejándola con unas medias transparentes hasta los muslos y un tanga negro. Cogí el minivaquero de Mayte y lo fui bajando, viendo cómo se transparentaba, debajo de las medias amarillas que la tapaban el culo, un tanguita negro. Cuando le quite el minivaquero, me arrodille y comencé a besarlas y acariciarlas los culos. Cogí las medias de Mayte y se las bajé, lo necesario, para dejar al descubierto su culo solo con el tanga. Metí mis manos por dentro de sus tangas y las masturbé, mientras seguía besándolas los culos.
Abrí las piernas de Geo, aparte su tanga y comencé a comerla el coño. Seguía masturbando a Mayte y mi lengua y dedo se movían más o menos rápido en ambos sitios a la vez. Cambie, comiéndola el coño a Mayte y masturbando a Geo. Esta no tardo en levantarse y sentarse frente a Mayte para que esta la comiera el coño. Pare de comerla el coño a Mayte y me puse de pie en la cama. Golpee la cara de Geo con mi polla, antes de hacerla abrir la boca y follársela duro.
Me baje, me puse un condón y me coloque detrás de Mayte. Aparte, de nuevo, su tanga y comencé a follar a Mayte. No pude resistir la tentación y pare de follarla. La subí las medias y tiré de ellas, haciéndola un buen roto. Lo abrí lo necesario para meter mi polla y follarla el culo. Me incline sobre ella y agarre sus pechos. Geo comenzó a acariciarme el pelo y yo estire una de mis manos, para follarla la boca con dos de mis dedos.
Deje de follar a Mayte y agarre a Geo de una pierna, tirando de ella, tumbándola frente a mí. La subí las piernas a mi cintura, aparte su tanga y la comencé a follar. Acariciaba sus muslos, mientras Mayte se colocó a gatas a su lado y se besaban, mientras se masturbaba. Me coloque de rodillas en el borde de la cama, coloque las piernas de Geo contra mi pecho y la folle el culo. Me tumbe sobre Geo, que me rodeo con sus piernas, y volví a follarla el coño. Nos besamos y acariciaba sus pechos. Mayte me besaba y azotaba mi culo.
Ne tumbe en la cama y Mayte se sentó sobre mí. Metió mi polla en su coño y me movió en círculos a una gran velocidad. Geo se puso de rodillas, con mi cabeza entre sus piernas. Aparto su tanga y la comí el coño. Mis manos acariciaban sus pechos y los de Mayte. Cuando Geo se corrió, se bajó de mi cara y Mayte se tumbó sobre mí. Seguimos follando y la acariciaba culo y pechos, mientras nos besábamos.
Mayte se giró y se tumbó sobre mí, metiéndose mi polla, ahora, en su culo. Se volvió a mover en círculos sintiéndola bien dentro. Una de mis manos acariciaba su clítoris, mientras Geo la comía el coño. No paro hasta que Mayte se corrió.
Las ordene colocarse a gatas en el borde de la cama, mirando hacia fuera. Me puse de pie frente a ellas, me quité el condón y las comencé a follar la boca, hasta que me corrí en la de Geo.
Nos tumbamos los tres en la cama, besándonos y acariciándonos un rato, hasta que ambas se vistieron para irse, pues no querían llegar muy tarde y que sus maridos sospecharan.
Geo y yo acabamos encerrados en un departamento del baño de mujeres, besándonos. Mis manos acariciaban su rico culo redondito, hasta que subieron, metiéndose por su camiseta y acariciando sus pechos con el sujetador de aro puesto. Geo acabo arrodillándose, bajándome los pantalones, empezando a hacerme una deliciosa mamada. Geo no paraba en ningún momento y mi mano se acabó posando en su cabeza acompañándola. Geo también me comía los huevos de vez en cuando, masturbándome. Geo a veces me miraba fijamente y me decía lo cachonda que se ponía con estas situaciones de riesgo conmigo.
No paso mucho tiempo antes de que entraran al baño y oyéramos la voz de Mayte llamándonos. Abrí la puerta y según entro, la agarre del culo y la bese. Esta le dijo a Geo que era una cabrona, aprovechándose de que su marido no esta y el de ella sí. Tras una breve risa, seguimos besándonos, mientras Geo no paraba de comérmela. Mi mano dejo la cabeza de Geo, para acariciar los pechos de Mayte. Desabroché los botones de esta y metí mi mano, acariciando sus pechos, solo con un sujetador de encaje y sin aro.
Mayte me dijo que no teníamos mucho tiempo y se arrodillo, uniéndose a Geo con la mamada. Entre ambas me comían la polla deliciosamente y mis huevos quedaron bien empapados. De vez en cuando pasaban sus lenguas a la vez por mi glande, rozándose entre ellas. Cuando me iba correr, ambas abrieron bien sus bocas y yo pase mi polla, durísima, por ellas, metiéndola y sacándola y golpeando sus preciosas caras. Me masturbé rápido y cuando me corrí, apunte a sus bocas, llenándolas con mi semen. Estas, antes de tragar, se besaron y pasaron mi semen de una a otra. Cuando tragaron, se levantaron y nos besamos. Nos colocamos bien la ropa, se limpiaron y salimos de nuevo a la fiesta.
En la pista de la disco seguimos tonteando Geo y yo, con cuidado, ante la mirada de Mayte, que se moría por estar allí con nosotros y no con su marido. Mi novia, también había encontrado compañía con un tío de la disco, con el que no tardo en irse a su casa. Tras varias copas, Geo y yo decidimos irnos a mi casa a tener algo más de marcha e intimidad. Geo se lo dijo a Mayte, la cual le dijo a su marido que se iba con nosotros a otra disco. Por suerte este decidió quedarse allí con sus amigos.
Por el camino, nos besamos los tres y las acaricie bien los culos, al igual que ellas hicieron con el mío. En el ascensor los besos subieron de tono y mis manos también acariciaron ya sus pechos. Fuimos directos a mi habitación, donde seguimos besándonos y metiéndonos mano, frente a la cama. Ambas me quitaron la camiseta y besaron el cuello y el pecho, mientras acariciaba y azotaba sus culos. Mayte se arrodillo y me quito el pantalón. Lamio mi polla y me masturbo, para, en cuanto la tuve dura, volver a mamármela sin parar.
Cogí la camiseta de Geo y se la quite, dejándola con un sujetador negro de aro. Las aprete fuerte y bese su canalillo, antes de sacárselas de él y comérselas despacio y disfrutando de ellas. Cuando sus pezones estaban duritos, disfrute más aun de ellas, mordiéndolas y estirándoselos, cogidos por mis labios. Geo se acabó arrodillando y comenzó a hacerme la mamada, en lugar de Mayte, que se levantó. Nos besamos y acaricie sus pechos y su culo. Volví a desabrochar los botones de la camiseta y metí mi mano para acariciar sus pechos. Cuando note sus pezones duros, la quite la camiseta, dejándola con el sujetador de encaje y sin aro, col negro. En él se le marcaban los pezones y los empecé a morder, por encima de la tela. Tras pellizcárselos fuerte y estirar de ellos, provocándola un fuerte grito de dolor, la saque los pechos del sujetador y se los comí.
Las hice ponerse a gatas en el borde de la cama y acaricie y azote sus culos. La desabroche los pantalones y acaricie sus coños, tapados aun, metiendo mi mano entre sus piernas. Cogí el vaquero de Geo y se lo quité, dejándola con unas medias transparentes hasta los muslos y un tanga negro. Cogí el minivaquero de Mayte y lo fui bajando, viendo cómo se transparentaba, debajo de las medias amarillas que la tapaban el culo, un tanguita negro. Cuando le quite el minivaquero, me arrodille y comencé a besarlas y acariciarlas los culos. Cogí las medias de Mayte y se las bajé, lo necesario, para dejar al descubierto su culo solo con el tanga. Metí mis manos por dentro de sus tangas y las masturbé, mientras seguía besándolas los culos.
Abrí las piernas de Geo, aparte su tanga y comencé a comerla el coño. Seguía masturbando a Mayte y mi lengua y dedo se movían más o menos rápido en ambos sitios a la vez. Cambie, comiéndola el coño a Mayte y masturbando a Geo. Esta no tardo en levantarse y sentarse frente a Mayte para que esta la comiera el coño. Pare de comerla el coño a Mayte y me puse de pie en la cama. Golpee la cara de Geo con mi polla, antes de hacerla abrir la boca y follársela duro.
Me baje, me puse un condón y me coloque detrás de Mayte. Aparte, de nuevo, su tanga y comencé a follar a Mayte. No pude resistir la tentación y pare de follarla. La subí las medias y tiré de ellas, haciéndola un buen roto. Lo abrí lo necesario para meter mi polla y follarla el culo. Me incline sobre ella y agarre sus pechos. Geo comenzó a acariciarme el pelo y yo estire una de mis manos, para follarla la boca con dos de mis dedos.
Deje de follar a Mayte y agarre a Geo de una pierna, tirando de ella, tumbándola frente a mí. La subí las piernas a mi cintura, aparte su tanga y la comencé a follar. Acariciaba sus muslos, mientras Mayte se colocó a gatas a su lado y se besaban, mientras se masturbaba. Me coloque de rodillas en el borde de la cama, coloque las piernas de Geo contra mi pecho y la folle el culo. Me tumbe sobre Geo, que me rodeo con sus piernas, y volví a follarla el coño. Nos besamos y acariciaba sus pechos. Mayte me besaba y azotaba mi culo.
Ne tumbe en la cama y Mayte se sentó sobre mí. Metió mi polla en su coño y me movió en círculos a una gran velocidad. Geo se puso de rodillas, con mi cabeza entre sus piernas. Aparto su tanga y la comí el coño. Mis manos acariciaban sus pechos y los de Mayte. Cuando Geo se corrió, se bajó de mi cara y Mayte se tumbó sobre mí. Seguimos follando y la acariciaba culo y pechos, mientras nos besábamos.
Mayte se giró y se tumbó sobre mí, metiéndose mi polla, ahora, en su culo. Se volvió a mover en círculos sintiéndola bien dentro. Una de mis manos acariciaba su clítoris, mientras Geo la comía el coño. No paro hasta que Mayte se corrió.
Las ordene colocarse a gatas en el borde de la cama, mirando hacia fuera. Me puse de pie frente a ellas, me quité el condón y las comencé a follar la boca, hasta que me corrí en la de Geo.
Nos tumbamos los tres en la cama, besándonos y acariciándonos un rato, hasta que ambas se vistieron para irse, pues no querían llegar muy tarde y que sus maridos sospecharan.
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