Lo até y lo masturbé

Conocí a un tipo de 20 años, pajero como yo, y con ganas de ser pajeado; nunca lo había masturbado otro tipo, quería probar cosas nuevas.

Quedamos en que yo iría a su casa, déjamos la cita para un sábado en la tarde,yo llevaba mis esposas y la cinta para amordazar.

Él había leído mis relatos de masturbación y estuvo de acuerdo con ser esposado y amordazado, para él era una experiencia nueva y excitante.

Nos sentamos un rato en la sala a hablar y ver porno, ya estábamos calentandonos,su erección estaba siendo notoria,aunque yo no me quedaba atrás.

Le pedí que se quitara la camiseta,los zapatos y las medias,para que estuviera más cómodo, lo hizo aunque se notaba que estaba muy nervioso.

Le puse las manos atrás y se las esposé y después lo amordacé con la cinta,después de eso le quité el pantalón.

Su erección se notaba a través de la tela del boxer,no aguante y empecé a acariciar su pene por encima; él solo miraba pero se notaba que le gustaba.

Le dije que podía gemir a través de la mordaza,que íbamos a pasarla muy bien los dos.

Lo senté en mi regazo y empecé a acariciarlo despacio,dejando de últimas su pene; cuando él se sentó sintió mi erección pero se acomodó aún mejor y dejó que mis manos lo acariciara.

Agarre su cintura y empecé a moverlo de tal forma que su cola restregara mi pene, ahí empezó a soltar unos gemidos que iban creciendo en intensidad y la verdad yo también gemí,no pude resistir.

Despues de eso lo puse de pie y despacio le quité el boxer, lo lleve a mi cara y lo olí un rato, tenía un buen olor.

Su pene estaba totalmente erecto, su cabecita roja y redonda.

Le pregunté si le gustó la cabalgada y con la cabeza me dijo que si,y me puse a mirar su pene con atención.

Es de tamaño normal,lo cual me encanta,ya que los penes tan grandes no me atraen.

Estaba totalmente depilado,le di la vuelta, acaricié su cola y le di un par de nalgadas.

Nos fuimos a su habitación,yo iba detrás de él y lo senté en la cama.

Empece a acariciar su pene despacio, con mis dos manos,mientras el cerraba los ojos y gemía suavemente.

Con mis dedos acariciaba su cabecita tan roja y húmeda,eso lo hizo gemir más duro.

Me quité la ropa (previamente él me había dicho que nunca había visto a otro hombre desnudo) y él se quedó viendo mi erecto pene, se lo puse cerca de la cara para que lo viera bien y no perdiera detalle alguno.

Despues de eso empecé a masturbarlo en varias poses, y por último lo puse en 4 y lo ordeñé un buen rato mientras al tiempo acariciaba su ano.

Eso lo excitó tanto que empezó a gemir lo más duro que podía, parecía que no quería que yo parara y así seguí un buen rato.

De su cabecita asomó el precum,lo cual recogí con mis dedos y lo unté en su ano.

Lo puse bocarriba y como seguía saliéndole precum lo recogí y lo unté en la cabecita de mi pene y me dediqué a pajearme un rato mientras el miraba.

Empezó a salir precum de mi pene,lo dejé allí colgando cuando él se puso en 4 y acercó el ano a la gota de precum que estaba cayendo, entendí lo que quería y se lo unté en su ano.

Estaba tan excitado que pase la cabecita de mi pene cerca de su ano y deposité allí mi precum,lo cual hizo que gimiera duro nuevamente.

Le pregunté si quería cabalgar ota vez y con su cabeza me dijo que si, entonces lo senté en mi regazo y otra vez cabalgamos,mi pene golpeando en la parte baja de su espalda,y él gimiendo.

Después se arrodilló y acerco su cara a mi erecto pene,su mejilla rozó la cabecita de mi pene y quedó untada de precum,eso era lo que quería,así que le pasé la cabecita de mi pene por su cara,untandola de precum.

Se puso de pie, lo masturbé y eyaculó sobre mi pecho,toda su corrida cayó sobre mi cuerpo,salieron varios chorros de caliente esperma.

Me recosté en la cama para terminar de masturbarme,y eyacule a chorros sobre mi cuerpo,mi semen se mezcló con el que él había eyaculado sobre mi.

Después de un rato me limpié con un boxer de él que habíamos dejado previamente para eso, le quité la mordaza y las esposas.

Le pregunté como le había parecido y me dijo que nunca se había imaginado que fuera tan delicioso,y que nunca había sentido tanta excitación y quería otra cita para otra paja.