Habíamos quedado, mi novia y yo, con Leti y Héctor para cenar en nuestra casa y realizar un rico intercambio de los que tanto nos gustan. Mi novia llevaba un vestido granate, ajustado marcando sus tetazas, hasta medio muslo y unas medias negras transparentes, todo muy sexy. Leti también iba muy sexy, con un vestido también muy ajustado, marcando sus pechitos y su culazo, morado con rombos pequeños marrones, de manga larga, hasta medio muslo, y unas medias negras transparentes y finas.
Durante la cena, mi novia no paro de besarse y meterse mano con Héctor, y yo hacía lo mismo con Leti. Acariciando sus pechitos, descubrí que no llevaba sujetador. Por eso cuando estábamos tomando el postre, un rico helado, cogí parte con mis dedos y lo pase por su cuello. Entre el frio de este y mis lametones para quitárselo, sus pezones se pusieron bien duritos, marcándose en el vestido. Agaché la cabeza y los di un par de mordiscos, haciendo que se marquen más aun en el vestido.
Cuando levante la cabeza y deje de morder los pezones de Leti, pude ver que Raquel y Héctor también habían empezado a jugar con el postre. Héctor se había sacado la polla del pantalón y Rakety estaba llenándosela de helado, y comiéndosela. Leti se sentó encima de mí, lateralmente y nos volvimos a besar, mientras acariciaba sus piernazas y pellizcaba sus pezones. Coloque a Leti de pie, mirando la mesa y yo, aun sentado, acaricie su culazo, con el vestido tapándolo. De vez en cuando se lo azotaba y ella me miraba sonriente y mordiéndose los labios. Me coloque de rodillas en el suelo y bese ese culazo tan delicioso, mientras seguía azotándolo y acariciándolo. Comencé a acariciar sus piernas desde abajo y cuando llegué a su vestido comencé a subírselo. Según se mostraba su culazo, tapado por las medias, se lo besaba. Deje su vestido por la cintura y mordí, azote, bese y acaricie ese culazo tan maravilloso que Leti tiene. Debajo de las medias se la veía un tanga negro de encaje. Mientras disfrutaba de su culo, una de mis manos paso entre sus piernas, para acariciar su tapado coño.
Gire a Leti y se apoyó en el borde de la mesa. Comencé a morder su coño, aun tapado, con mis manos acariciando fuerte su culazo. Sus medias eran tan finas que no me costó mucho rompérselas, mordiéndolas, tirando de ellas y apretando con mis manos a sus lados. Hice un buen roto y seguí mordiendo su coño, ya solo con el tanga. Aparte el tanga y la comí el coño. Mi lengua jugaba veloz dentro de su coño, mientras mis manos continuaban con su maravilloso culazo. Leti coloco sus piernas sobre mis hombros y yo apretaba fuerte sus muslazos, mientras comía más y mejor su coño.
Me levanté y vi como Héctor estaba ya follando a Rakety, que tenía el vestido subido, con el cuerpo contra la mesa. Nos volvimos a besar Leti y yo, con mis manos en sus muslazos. Leti me empujo hacia atrás y comenzó a pasar uno de sus pies por mi paquete. Me quite el pantalón mientras ella se quitaba los botines. Paso sus pies por mi polla, la cual comenzó a crecer con el tacto de sus medias. Empezó a masturbarme con los pies, mientras me miraba y sonreía pícaramente.
Cuando tuve la polla durísima, me puse un condón y me arrimé bien a ella, entre sus piernas. Aparte su tanga y metí bien dentro mi polla. Comenzamos a follar, nos besamos y agarre sus muslazos. No paraba de darla profundas penetraciones y nos besábamos mas apasionadamente. Leti me dijo que la llevara a la habitación, por lo que la cogí en vilo y así hice. De camino seguimos follando y besándonos.
Me senté en el borde de la cama y seguimos follando. Leti se quitó el vestido y comencé a comerla sus pechitos, con los pezones tan duritos. Leti me apretaba fuerte la cabeza y yo hacia lo mismo con sus muslazos. Leti comenzó a soltar fuertes gemidos, mientras me empezó a morder la oreja y el cuello poniéndome cachondísimo. Me levante y tire a Leti en la cama, tumbándola. Me eche sobre ella y seguimos follando. Mis manos seguían agarrando sus muslazos y nos besábamos como locos. Leti me rodeo con sus piernas y yo la follaba más duro.
Me coloqué de rodillas, con sus piernas bien abiertas y seguí follándola duro, con sus tobillos agarrados bien fuerte. La tumbé algo de lado, subí una de sus piernas a mi hombro y seguí follándola, mientras besaba su pie y acariciaba su muslazo. Cuando esta se corrió, la gire y la coloque tumbada boca abajo. Hice mas grande el roto de las medias y le di varios buenos bocados a su culazo. Aparte el tanga y me tumbe sobre ella, metiendo mi polla en su culazo. Se lo folle bien duro, mientras aplastaba su cara contra la cama, con mi mano, y la mordía el cuello.
Me levante y Leti se sentó en el borde de la cama. Me quito el condón y comenzó a masturbarme y besarme la polla. Sus gorditos labios me ponen muchísimo siempre. Pronto agarré yo la polla y comencé a golpear su preciosa cara con ella. Agarre su cabeza y la aprete contra mi polla, pasándosela bien por su cara. La hice abrir su bocaza y comencé a follársela bien duro. Poco a poco a Leti le costaba más tragar su saliva y la iba cayendo algo por la barbilla. Yo subía más y más la velocidad de la follada, hasta que agarre bien su cabeza para hacerlo durísimo. No pare hasta que esta tuvo varias arcadas. La deje respirar y la deje que llevara entonces ella la iniciativa de la mamada, hasta que me corrí en su bocaza. Esta trago y trago, hasta dejarme sequito, con la polla bien limpia.
Nos tumbamos en la cama y nos besamos y acariciamos un rato. Leti volvió a pasar uno de sus pies por mi polla y esta comenzó a ponerse dura. Comenzó a masturbarme y, mientras se me ponía bien dura, nos besamos. Leti se sentó y comenzó a masturbarme con la mano, mientras seguía con un pie acariciando mis huevos.
Me puso un condón y se sentó, de espaldas, sobre mí, metiéndosela en su culazo. Comenzó a botar como una loca, sintiéndola bien dentro. La perra cada vez botaba mas veloz, follando mas fuerte. Mis manos acariciaban su culazo. Leti se inclinó y acabo con las manos apoyadas en la cama. Seguía moviéndose sin parar con mi polla penetrando su culazo. Me coloque de rodillas tras ella, tras colocarla a gatas. Metí mi polla en su culo y seguí follándoselo bien duro, mientras lo azotaba.
Leti me hizo volver a tumbarme y nuevamente se sentó sobre mí, esta vez de frente. Metió mi polla en su coño y echo su cuerpo hacia atrás, hasta volver a apoyarse en la cama con las manos. Empezó a moverse en círculos y mi polla se sentía bien dentro de ella. Nos mirábamos y sonreíamos y mis manos acariciaban sus piernas.
Leti volvió a tumbarse sobre mí y seguimos follando, cambiándosela del culo al coño cada poco, mientras nos besábamos. Yo no paraba de acariciar su culazo, muslazos y pechitos. De vez en cuando Leti se sentaba para cabalgar, pero acababa tumbada nuevamente.
No paramos hasta que me corrí dentro de su coño. Entonces nos colocamos en posición de un 69, y nos comimos rico, tras quitarme ella el condón. Cuando Leti también se corrió, nos tumbamos y besamos un rato.
Volvimos al salón donde Rakety y Héctor estaban en el sofá desnudos, tomando una copa. Le acompañamos y tras esta acopa, Leti y Héctor se vistieron y fueron pues no podían quedarse a dormir.
Durante la cena, mi novia no paro de besarse y meterse mano con Héctor, y yo hacía lo mismo con Leti. Acariciando sus pechitos, descubrí que no llevaba sujetador. Por eso cuando estábamos tomando el postre, un rico helado, cogí parte con mis dedos y lo pase por su cuello. Entre el frio de este y mis lametones para quitárselo, sus pezones se pusieron bien duritos, marcándose en el vestido. Agaché la cabeza y los di un par de mordiscos, haciendo que se marquen más aun en el vestido.
Cuando levante la cabeza y deje de morder los pezones de Leti, pude ver que Raquel y Héctor también habían empezado a jugar con el postre. Héctor se había sacado la polla del pantalón y Rakety estaba llenándosela de helado, y comiéndosela. Leti se sentó encima de mí, lateralmente y nos volvimos a besar, mientras acariciaba sus piernazas y pellizcaba sus pezones. Coloque a Leti de pie, mirando la mesa y yo, aun sentado, acaricie su culazo, con el vestido tapándolo. De vez en cuando se lo azotaba y ella me miraba sonriente y mordiéndose los labios. Me coloque de rodillas en el suelo y bese ese culazo tan delicioso, mientras seguía azotándolo y acariciándolo. Comencé a acariciar sus piernas desde abajo y cuando llegué a su vestido comencé a subírselo. Según se mostraba su culazo, tapado por las medias, se lo besaba. Deje su vestido por la cintura y mordí, azote, bese y acaricie ese culazo tan maravilloso que Leti tiene. Debajo de las medias se la veía un tanga negro de encaje. Mientras disfrutaba de su culo, una de mis manos paso entre sus piernas, para acariciar su tapado coño.
Gire a Leti y se apoyó en el borde de la mesa. Comencé a morder su coño, aun tapado, con mis manos acariciando fuerte su culazo. Sus medias eran tan finas que no me costó mucho rompérselas, mordiéndolas, tirando de ellas y apretando con mis manos a sus lados. Hice un buen roto y seguí mordiendo su coño, ya solo con el tanga. Aparte el tanga y la comí el coño. Mi lengua jugaba veloz dentro de su coño, mientras mis manos continuaban con su maravilloso culazo. Leti coloco sus piernas sobre mis hombros y yo apretaba fuerte sus muslazos, mientras comía más y mejor su coño.
Me levanté y vi como Héctor estaba ya follando a Rakety, que tenía el vestido subido, con el cuerpo contra la mesa. Nos volvimos a besar Leti y yo, con mis manos en sus muslazos. Leti me empujo hacia atrás y comenzó a pasar uno de sus pies por mi paquete. Me quite el pantalón mientras ella se quitaba los botines. Paso sus pies por mi polla, la cual comenzó a crecer con el tacto de sus medias. Empezó a masturbarme con los pies, mientras me miraba y sonreía pícaramente.
Cuando tuve la polla durísima, me puse un condón y me arrimé bien a ella, entre sus piernas. Aparte su tanga y metí bien dentro mi polla. Comenzamos a follar, nos besamos y agarre sus muslazos. No paraba de darla profundas penetraciones y nos besábamos mas apasionadamente. Leti me dijo que la llevara a la habitación, por lo que la cogí en vilo y así hice. De camino seguimos follando y besándonos.
Me senté en el borde de la cama y seguimos follando. Leti se quitó el vestido y comencé a comerla sus pechitos, con los pezones tan duritos. Leti me apretaba fuerte la cabeza y yo hacia lo mismo con sus muslazos. Leti comenzó a soltar fuertes gemidos, mientras me empezó a morder la oreja y el cuello poniéndome cachondísimo. Me levante y tire a Leti en la cama, tumbándola. Me eche sobre ella y seguimos follando. Mis manos seguían agarrando sus muslazos y nos besábamos como locos. Leti me rodeo con sus piernas y yo la follaba más duro.
Me coloqué de rodillas, con sus piernas bien abiertas y seguí follándola duro, con sus tobillos agarrados bien fuerte. La tumbé algo de lado, subí una de sus piernas a mi hombro y seguí follándola, mientras besaba su pie y acariciaba su muslazo. Cuando esta se corrió, la gire y la coloque tumbada boca abajo. Hice mas grande el roto de las medias y le di varios buenos bocados a su culazo. Aparte el tanga y me tumbe sobre ella, metiendo mi polla en su culazo. Se lo folle bien duro, mientras aplastaba su cara contra la cama, con mi mano, y la mordía el cuello.
Me levante y Leti se sentó en el borde de la cama. Me quito el condón y comenzó a masturbarme y besarme la polla. Sus gorditos labios me ponen muchísimo siempre. Pronto agarré yo la polla y comencé a golpear su preciosa cara con ella. Agarre su cabeza y la aprete contra mi polla, pasándosela bien por su cara. La hice abrir su bocaza y comencé a follársela bien duro. Poco a poco a Leti le costaba más tragar su saliva y la iba cayendo algo por la barbilla. Yo subía más y más la velocidad de la follada, hasta que agarre bien su cabeza para hacerlo durísimo. No pare hasta que esta tuvo varias arcadas. La deje respirar y la deje que llevara entonces ella la iniciativa de la mamada, hasta que me corrí en su bocaza. Esta trago y trago, hasta dejarme sequito, con la polla bien limpia.
Nos tumbamos en la cama y nos besamos y acariciamos un rato. Leti volvió a pasar uno de sus pies por mi polla y esta comenzó a ponerse dura. Comenzó a masturbarme y, mientras se me ponía bien dura, nos besamos. Leti se sentó y comenzó a masturbarme con la mano, mientras seguía con un pie acariciando mis huevos.
Me puso un condón y se sentó, de espaldas, sobre mí, metiéndosela en su culazo. Comenzó a botar como una loca, sintiéndola bien dentro. La perra cada vez botaba mas veloz, follando mas fuerte. Mis manos acariciaban su culazo. Leti se inclinó y acabo con las manos apoyadas en la cama. Seguía moviéndose sin parar con mi polla penetrando su culazo. Me coloque de rodillas tras ella, tras colocarla a gatas. Metí mi polla en su culo y seguí follándoselo bien duro, mientras lo azotaba.
Leti me hizo volver a tumbarme y nuevamente se sentó sobre mí, esta vez de frente. Metió mi polla en su coño y echo su cuerpo hacia atrás, hasta volver a apoyarse en la cama con las manos. Empezó a moverse en círculos y mi polla se sentía bien dentro de ella. Nos mirábamos y sonreíamos y mis manos acariciaban sus piernas.
Leti volvió a tumbarse sobre mí y seguimos follando, cambiándosela del culo al coño cada poco, mientras nos besábamos. Yo no paraba de acariciar su culazo, muslazos y pechitos. De vez en cuando Leti se sentaba para cabalgar, pero acababa tumbada nuevamente.
No paramos hasta que me corrí dentro de su coño. Entonces nos colocamos en posición de un 69, y nos comimos rico, tras quitarme ella el condón. Cuando Leti también se corrió, nos tumbamos y besamos un rato.
Volvimos al salón donde Rakety y Héctor estaban en el sofá desnudos, tomando una copa. Le acompañamos y tras esta acopa, Leti y Héctor se vistieron y fueron pues no podían quedarse a dormir.
0 comentarios - Que buen postre es Leti