Les voy a contar una historia
Miércoles, 15 de marzo,20 hs en una Córdoba que no quería atardecer. El sol parece caer suavemente detrás de las hojas de los árboles, que se tiñen de un tono dorado, rojizo y marrón. Las hojas que caen lentamente en el suelo y los árboles desnudos en el horizonte forman un hermoso paisaje. Dentro mío crecía la ansiedad, es maldita sensación, que es como una guitarra eléctrica con el volumen al máximo y las cuerdas tan tensas que parecen que van a explotar en cualquier momento. Es un solo de batería frenético que no puede dejar de golpear y un bajo que vibra en tu pecho como si quisiera salir de él, ahí estaba yo, tratando de buscar un buen Gin, buscaba algún Tanqueray,Beefeater, Bombay Sapphire, finalmente el ganador fue Beefeater, junto con unas cazuelas de arándanos que encontré por los pasillos del Walmart, La noche invitaba, no dejamos lugar de la casa, sin que esta, nos viera cómplices, de charlas , de risas, de miradas, pasaban los tragos, y se nos presentaban los recuerdos, se pasaba el tiempo, cuando nos dimos cuenta, ya estábamos sobre las tres de la madrugada, la terraza fue testigo de los proyectos, el sillón fue el carcelero del tiempo, se agotaba la botella de Gin, y Me miraste como un extraño, después de mirarnos como únicos, me hablaste diferente, indiferente, después me llamaste por mi nombre, solo Mariano, como a cualquier mortal ,nada especial, nada malo, solo común, estoy seguro que lo imposible te pudo más, no nos dejó avanzar, mis manos jugaban con lo último que quedaba de hielo en mi copa , desnude en palabras mis pensamientos, de frente, pero lo imposible pudo más, en esa noche lo fuimos todo, sin ser nada, abrimos mil veces nuestras almas, mis adicciones, mis contradicciones, tus miedos, tus emociones, estuvimos a punto de intentarlo, fui yo, fuiste vos, fue el mundo que nos rodeaba, no éramos nada, pero yo sentía todo!
Esa fue la ultima vez que te vi, si cruzamos un par de textos, nada importante, todo casual, y finalmente entendí que este fue un viaje de una sola persona, en la radio sonaba una de divididos, ¿Qué ves?
¿Qué ves cuando me ves?
Cuando la mentira es la verdad
Miércoles, 15 de marzo,20 hs en una Córdoba que no quería atardecer. El sol parece caer suavemente detrás de las hojas de los árboles, que se tiñen de un tono dorado, rojizo y marrón. Las hojas que caen lentamente en el suelo y los árboles desnudos en el horizonte forman un hermoso paisaje. Dentro mío crecía la ansiedad, es maldita sensación, que es como una guitarra eléctrica con el volumen al máximo y las cuerdas tan tensas que parecen que van a explotar en cualquier momento. Es un solo de batería frenético que no puede dejar de golpear y un bajo que vibra en tu pecho como si quisiera salir de él, ahí estaba yo, tratando de buscar un buen Gin, buscaba algún Tanqueray,Beefeater, Bombay Sapphire, finalmente el ganador fue Beefeater, junto con unas cazuelas de arándanos que encontré por los pasillos del Walmart, La noche invitaba, no dejamos lugar de la casa, sin que esta, nos viera cómplices, de charlas , de risas, de miradas, pasaban los tragos, y se nos presentaban los recuerdos, se pasaba el tiempo, cuando nos dimos cuenta, ya estábamos sobre las tres de la madrugada, la terraza fue testigo de los proyectos, el sillón fue el carcelero del tiempo, se agotaba la botella de Gin, y Me miraste como un extraño, después de mirarnos como únicos, me hablaste diferente, indiferente, después me llamaste por mi nombre, solo Mariano, como a cualquier mortal ,nada especial, nada malo, solo común, estoy seguro que lo imposible te pudo más, no nos dejó avanzar, mis manos jugaban con lo último que quedaba de hielo en mi copa , desnude en palabras mis pensamientos, de frente, pero lo imposible pudo más, en esa noche lo fuimos todo, sin ser nada, abrimos mil veces nuestras almas, mis adicciones, mis contradicciones, tus miedos, tus emociones, estuvimos a punto de intentarlo, fui yo, fuiste vos, fue el mundo que nos rodeaba, no éramos nada, pero yo sentía todo!
Esa fue la ultima vez que te vi, si cruzamos un par de textos, nada importante, todo casual, y finalmente entendí que este fue un viaje de una sola persona, en la radio sonaba una de divididos, ¿Qué ves?
¿Qué ves cuando me ves?
Cuando la mentira es la verdad
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