Hola, esta es la primera vez que escribo un relato, quería contarles lo que me paso, se que lo que hice está mal, pero me gusto y no le hice daño a nadie. Mi nombre es Jonathan , tengo 18 años, mis padres están divorciados desde hace 7 años. Mí madre me crío sola desde entonces, actualmente tiene 35 años, voy a describirles cómo es físicamente, ella es morena, de 1.65, cabello rizado, cuerpo esbelto, le gusta hacer ejercicio, tiene buenos senos, pero lo más resaltante de su cuerpo y lo que personalmente más me gusta es su gran trasero, tiene un muy buen culo, bien formado y duro por el ejercicio. Bueno esto sucedio cuando tenía 12 años, a esa edad yo ya empecé en fijarme en los atributos de las mujeres, yo y mí mamá dormiamos en el mismo cuarto y en la misma cama. La cosa es que era verano y mí mama dormía solo con un polo y un pequeño short que hacía resaltar sus nalgas. Una noche me desperté como a las 2 am, fui al baño y al regresar vi a mí madre estaba echada dándome la espalda, baje la mirada a su culo y tuve una erección, la verdad es que de esa posición se podia apreciar su traserote, me excite mucho, me eché a en la cama y empeze a masturbarme, mí mamá tiene un sueño profundo y difícilmente se despierta con algo, me sentía culpable por lo que estaba haciendo pero mí calentura podía más, así que no me resistí y toque con un dedo su trasero, sentía su respiración profunda y puse una mano completa en su trasero, y luego comenzé a apretar un poco, seguí masturbandome no pude más y eyacule. Al día siguiente mí mamá estaba normal como siempre, cariñosa conmigo ya que era el único en su vida, en ese entonces ya se había divorciado de mí papá, esa misma noche espere con ansias a volver a hacer lo mismo y lo hice de nuevo, me comportaba más cariñoso con ella la abrazaba por detrás, incluso a modo de juego le daba una nalgada de vez en cuando , mí mamá solo se reía y creo nunca pensó mal de mis acciones. Tenia mucha confianza con ella, se cambiaba de ropa delante de mí, pero no de ropa interior, aunque a veces sin querer la veía sin sostén. Después agarre más confianza y en la madrugada cuando dormía ella, me sacaba el pene y le ponía en una de nalgas por encima de su short, mientras olía su cabello y con la otra mano le tocaba su otra nalga hasta eyacular, no pase de eso. Al año siguiente ya cada uno tenía su propio cuarto y decidí ya no hacer lo mismo, además de que conocería otras chicas. Aunque debo reconoce que ahora esta mucho mejor, un lomazo de mujer, y los vecinos y mis amigos más cercanos opinan lo mismo. Bueno me gustaría saber su opinión de mí historia y si les ha pasado algo similar, los leeré en los comentarios.
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