Tenía la vergota de mi hijo deslechada en mi culo, como madre me sentía la más puta pues lo que acaba de pasar me había encantado.
Tenía que seguir avanzando, mi hijo al parecer por su cuenta no daría el paso a algo más.
Moví mi mano hacia atrás buscando su verga, sentí en mis nalgas su semen aún tibio y avance un poco más al centro de mi culo, sentí su palo llenó de semen en mi mano, pero fue apenas un segundo pues mi hijo se apartó de mí y se levantó de la cama.
Volví a avanzar muy rápido supongo, creo que la inexperiencia de mi hijo lo hacía tener miedo y retrocedía al sentir que lo que pasaba no estaba bien. Volví a quedarme en la cama fingiendo dormir esperando a ver qué sucedía.
Lo oí levantarse pensé que se iría a su cuarto pero no, se metió al baño y unos minutos después oí que regresaba, me alegré tanto por qué podía seguir con mi plan.
Me puse boca arriba en la cama, traía un brassier de broche al frente así que lo desabroché sin quitarme el Bra.
C: avanza despacio, no lo asustes.
Me dije, pues el regresaba del baño a la cama.
Apenas se metió a la cama yo me acomode nuevamente de lado dándole el frente está vez.
C: fuiste al baño amor?
L: si ma, estás despierta?
C: me despertó el ruido del WC
L: lo siento es que ya me urgia
C: no te apures, ven abrázame
Lo puse de lado frente a mi buscando que su cara quedará lo más pegada a mi pecho, puse mi mentón en su cabello y eso hizo que su cara quedará en mi cuello, sentí que se resistía a pegarse a mi cuerpo pues yo tenía mi brazo en su espalda y el sus brazos pegados al cuerpo, parecía un gatito asustado.
C: abrázame hijo tengo un poco de frío.
L: ok ma.
Pasó su mano tras de mí y la puso en mi espalda, tras unos minutos así yo fingí nuevamente dormir, el ruido de mi respiración debió advertirle que ya estaba dormida.
L: ma, mami!!!
No tuvo respuesta de mi parte y eso le dió el permiso de avanzar.
Su mano bajó de mi espalda a mi cintura y de ahí a una de mis nalgas, puso toda la palma de la mano en ella y sentí que la apretó un poquito.
Mi hijo me estaba tocando el culo y me encantaba, aún tenía restos de su corrida en mi culo y con un par de dedos me la empezó a batir en todo el culo, yo me deje hacer pues la sensación y el morbo de saber que mi hijo me estaba manoseando me encantaba.
Con su mano aún en mi nalga, sentí que bajaba un poco y pude sentir su cara en mis tetas, metió la cara entre mis tetas, su mano soltó mi nalga y con la subió por mi cintura, la paso a mis costillas y busco mis bubis.
Dió un pequeño susto al sentir que mi brassier estaba suelto y supongo que se sorprendió saber que tenía casi las tetas al aire.
No se movió durante unos segundos así que yo hice el ademán de acomodarme y moví mi pecho hacia su cara liberando del todo mis tetas del brasier, quedaron en su cara.
L: mamá!!!
Comprobando que estaba aún dormida, volvió a poner su mano en mi nalga y su boca en uno de mis pezones.
Lo lamía, le daba pequeños besitos y su mano seguía jugando con mi nalga, su verga la sentía en mis piernas casi en las rodillas como dije soy bajita y él pues en la posición que estaba quedaba casi a esa altura.
Después de unos minutos soltó mi culo y su boca se separó de mi pezon, me quedé quieta esperando algún movimiento de mi hijo, fue subiendo hasta que está vez yo quedé con la cara en su pecho, pegó su cuerpo al mío y sentí su verga en mi vagina.
La fina tela de mi tanga era el único impedimento entre su verga y la vagina que lo trajo al mundo, estuve a punto de correrme la tanga y decile méteme esa vergota hijo, pero antes el comenzó a eyacular.
Esta vez su descarga terminó en mi entrepierna, fue igual que la anterior, sus lechazos quedaron en mi tanga y si verga, sentía que apretaba las manos para no emitir ningún sonido pues se estaba corriendo en su mamá.
Tras unos segundos donde sentí como su verga descansaba en mi pierna después de vaciarse, el no se movía.
Estaba encantada con todo esto, tenía las tetas de fuera y tenía llenos de semen mi culo y mi panochita.
Pensaba en que debía educar la verga de mi hijo para soportar más, el día que lo ví masturbarse aguanto bastante tiempo haciéndolo pero en esta ocasión llevaba dos corridas en muy poco tiempo y bueno entiendo que la situación tal vez lo tenga más caliente que nunca pero debe aprender a satisfacer primero a la putita con la que esté en la cama y después correrte las veces que quieras, ya le enseñaré pensé.
Se separó de mí y se volteo hacia el lado contrario de la cama, no quería ni moverme tal vez el saber que estaba despierta podría ponerlo nervioso y terminaría saliendo de la cama, por ahora lo dejaría descansar, aunque estaba más que caliente decidí darle tiempo a qué lo asimilará.
No es que quisiera que él diera el paso definitivo a cogerme pero quiero que el día que suceda no tenga dudas, no lo haga a escondidas, quiero que esté seguro y que me use como una puta toda la noche, por lo pronto el plan seguía en marcha.
Intenté dormir pues mi mente se hacía más y más preguntas y la que más me quitaba el sueño es si mi hijo quería seguir con esta morbosidad entre el y yo.
Desperté como a las 7 de la mañana unas cuántas horas dormí nada más, apenas abrí los ojos volteé a ver si mi hijo seguía ahí y con alegría comprobé que estaba durmiendo a mi lado.
Los primeros rayos de luz entraban por la ventana y mi mente empezó a carburar mi actuar.
Con los pies rápidamente avente las cobijas que nos cubrían y mi hijo quedó boca arriba en la cama completamente desnudo ante mis ojos.
Que hombre estaba hecho, esas piernas fuertes, su pecho y pectorales eran excelentes y qué decir de su verga, estaba en estado de relajación y aún así se veía gorda y grande, la tenía descansando sobre su muslo izquierdo.
Me hinque en la cama y mi cara la fui poniendo lo más cerca que podía de su verga, las ganas de darle un beso de lamerla de chuparle ese pitote me estaban consumiendo, pero si lo hacía despertaba a mi hijo y tal vez la impresión sería demasiado.
Le di un besito rápido a su verga apenas un segundo y volteé a ver si mi hijo no había despertado.
C: vas a ser mío, pronto.
Le dije esto dirigiéndome a su verga.
Me acosté al lado de mi hijo boca arriba al igual que el.
Mis tetas estaban fuera y mi mano bajó hasta agarrar su verga. Me quedé quieta y comencé después de unos segundos a mover mi mano por todo el tronco de su pito.
Mis ojos no perdieron detalle al espectáculo, del estado en el que estaba está empezó a despertar, se puso más grande y si se puede más gorda justo en mi mano y yo no cabía de emoción.
Tome su verga del tronco justo en la base y la Vi estoica, un mástil delicioso quedó ante mis ojos, sentí que mi hijo se movía así que cerré los ojos y dejé mi mano quieta sujetando su verga.
L: ma, mami, mamita.
C: que pasa hijo.
L: tienes las tetas de fuera.
Abrí los ojos simulando despertar y lo mire a los ojos.
C: el brasier se debió desabrochar anoche, que pena hijo.
L: ¿Te ayudo a abrocharlo?
C: te molesta que tenga las tetas al aire, cuando eras niño las chupaste mucho o es que las tengo muy feas para tu gusto.
L: que dices, por mi anda todo el día con ellas fuera porque son geniales.
C: entonces déjalas fuera hijo.
Sus ojos no dejaban de ver mis tetas y mi mano seguía en su verga, sentía ganas de lanzarme sobre él y besarlo, pedirle que me hiciera su putita en ese instante.
L: ma.
C: dime hijo.
Sus ojos bajaron y me mostró con un ademán de su cabeza que observará su verga.
C: ayyy hijo perdona, no me di cuenta que te estaba sujetando el pene.
L: no te apures mami.
C: pero Luis mira esa cosa!!!
Mi hijo puso sus manos en su verga intentando taparla pero yo no lo permitiría.
C: espera, deja verla bien!!!
L: es que me da pena contigo mami.
C : ya lo dijiste soy tu madre no pasa nada si me muestras un poquito.
L: ok mami.
Mis ojos se deleitaron con ese monstruo.
C: que cosa Luis!!! Que rica verga tienes hijo, mira nada más, es perfecta, es grande, gorda, que bien armado estás hijo.
L: me sonrojas mami.
C: siéntete orgulloso hijo que rico pito tienes, yo encantada de tener un hombre con esa cosa en mi cama.
L: pero si papá se entera que dormí desnudo en su cama me mata.
Esto último lo dijo dando un salto de la cama y poniéndose de pie.
C: espera tranquilo hijo nadie le dirá nada a tu padre yo te pedí el favor de dormir conmigo por miedo y lo dejaremos en secreto ok.
L: ok mami.
Seguía con ese miedo a su padre y esa inseguridad así que debía quitársela o no lograría que me cogiera.
C: voy a darme un baño por qué no te acuestas otro rato aún es temprano.
Sin decir palabra se metió a la cama y prendió la televisión, busco las sábanas que yo había tirado antes y se cubrió hasta la cintura.
Su verga quedó bajo la sábana y aún así se dibujaba perfectamente toda su largura y grosor.
Me levanté de la cama y me quite aún el brassier que traía colgando en los brazos, quedé solo en tanga frente a mi hijo.
C: crees que aún tengo buenas tetas hijo?
Con mis manos una en cada teta las levanté y estruje.
L: yo creo que están perfectas ma.
C: no las tengo caídas?
L: no.
C: te gustan las mujeres tetonas así como yo o con menos teta?
L: así como tu mami.
Su verga estaba más que excitada, la sábana que la cubría se levantaba como una casa de campaña y mi hijo no podía evitarlo.
C: Cuando eras niño las chupaste mucho tiempo y me gustaba mucho.
L: enserio.
C: si, para las mujeres es muy rico cuando nos chupan las tetas.
L: que lastima ya no ser niño.
C: pero eres mi hijo, digamos que siguen siendo tuyas.
L: osea que si algún día se me antoja chuparte las tetas lo puedo hacer mamá?
C: claro hijo, ya las has chupado antes, no veo nada de malo en que lo hagas de nuevo.
Se quedó mudo con mi respuesta, le estaba invitando a chuparme las tetas cuando le plazca y no había marcha atrás.
C: bueno voy a darme un baño mira como estoy.
Me di una vuelta y le mostré mi culo, la tanga negra manchada con su semen, gire y le mostré mi vagina también manchada con ese rico semen de su verga.
L: parece que sudaste en la noche y manchaste tu tanga mami.
C: si verdad, es que creo que estaba muy cachonda anoche, bueno hacía mucho calor.
Me dirigí al baño y cerré la puerta, que sensación tan rica el estar calentado a mi hijo.
Abrí las llaves de la regadera y recordé que puse un tapón de papel en ella para que no saliera mucha agua. Seguía el plan.
C: Luis hijo.
L: qué pasó más.
C: puedes venir a revisar la regadera no le sale agua.
L: voy.
Abrí la puerta del baño y él entró, se había puesto su bóxer, esperaba que entrara desnudo pero no todo puede ser perfecto.
L: que pasa mami.
C: no sale agua hijo y yo ya encuerada para bañarme.
Quité mis manos que cubrían mi vagina ya no traía tanga así que por primera vez ante sus ojos su madre quedaba encuerada frente a él.
L: ¡qué panochota!!!
Fue lo primero que salió de su boca, creo que no lo pensó simplemente fue instinto.
C: ¿te gusta?
L: mmm perdon ma es que bueno está muy, bueno se ve muy…
C: dilo hijo no pasa nada te dije ayer que podías tener confianza en mí y eso implica hablar sin rodeos.
L: se ve muy rica ya lo dije perdón.
C: ¿Qué te parece que la lleve rasurada?
L: genial ma.
C: no debes tener pena conmigo yo ya te Vi desnudo y ahora tú a mí es normal entre madre e hijo ok.
L: ok mami.
Su boxer ya no ocultaba su erección, esa verga enorme estaba encantada de verme desnuda.
L: listo ma ya quedó, ya puedes bañarte.
Salió del baño no sin antes voltear y darme otro repaso, sus ojos me escanearon desde la cabeza hasta los pies y para su deleite le di una imagen de mi culo al entrar a la regadera y una sonrisa cómplice.
Me bañe y bueno me di una masturbada riquísima, salí del baño envuelta en una toalla, el seguía acostado en la cama viendo tv.
C: Que rico baño, me siento genial.
Camine a mi buro y busque que ponerme.
C: vamos a salir a algún lado hijo?
L: no, bueno yo no quiero salir.
C: perfecto entonces no te molesta si ando en tanga todo el día
L: solo en tanga?
C: si, ayer así anduve y estuve comodísima.
L: por mi no hay problema.
C: perfecto, está estará bien?
Saqué del cajón una tanga azul transparente de la parte delantera y se la mostré a mi hijo.
L: está bonita ma.
C: o este hilito?
Desenrrolle un hilo dental blanco, que más que otra cosa son solo tres hilos amarrados por qué hasta la parte delantera es muy pequeña.
L: mmm este, yo creo que…
Su cara era de incredulidad, su propia madre estaba frente a él pidiéndole opinión sobre qué tanga usar en casa.
C: qué te parece si ahorita en el día uso la tanga y ya en la noche que vayamos a dormir me pongo el hilo dental.
L: quieres que vuelva a dormir aquí contigo?
C: tu padre no vuelve hoy y no quiero estar sola además me encantó que durmieras conmigo hijo.
Su verga seguía paradisima ya no hacía por evitar su erección creo que mi plan estaba funcionando.
Le di la espalda y dejé caer la toalla, regalando la imagen de mi culo recién bañado. Tome la tanga y me la puse, primero una pierna y después otra y la subí despacio sin prisa, quería que se deleitará con la imagen de ver cómo se me iba metiendo en el culo esa tela hasta dejar solo a la vista mis dos enormes nalgas.
C: Aún tengo buen culo hijo?
Una nalgada a una de mis pompas lo sacó del encantamiento.
L: el mejor de todos ma.
C: Me la voy a creer ehhh
L: es verdad, ya quisiera que alguna de las chicas con las que salgo tuviera un culo así como el tuyo.
C: así como?
L: pues grande, redondo, con esas nalgotas y en tanga.
C: yo jamás había tenido una verga como la tuya en mi cama.
L: y papá?
C: tu papá ya no puede cogerme!!!
Su cara era de sorpresa ante lo que acababa de escuchar y tuve que seguir explicando aunque con eso estuviera traicionando la confianza de mi esposo pues era algo que nadie debía de saber.
C: por la edad de tu padre ya no se le para, lleva mucho tiempo sin usarme y yo soy una mujer aún joven y muy caliente. No me culpes si aún quiera que un buen macho me disfrute.
L: yo… tu… es que…
C: no digas nada mi amor solo te estoy diciendo lo que pasa. Anda ve a darte un baño y sirve que bajas está cosa o va a romper la sábana.
Le di un apretón a su verga por encima de la sabana.
C: ve a bañarte yo bajaré a hacer el desayuno y te espero en la cocina ok.
Apenas baje a la cocina, estaba haciendo el desayuno cuando sonó el teléfono, era mi hermana que venía para la casa a visitarme no tuve manera de negarlo y tuve que subir a comunicarle a mi hijo la mala noticia
C: Luis hijo, cuando salgas de bañarte, te vistes tu tía viene en camino a la casa yo también me pondré algo de ropa.
L: encerio?, Que mala onda le hubieras dicho que saldríamos.
C: No pude negarme, yo también no estoy muy contenta con la situación pero bueno.
Me puse un vestido veraniego sin sostén y volví a la cocina, diré que el resto del día entre que estuvo mi hermana en casa, la comida y demás cosas se fue el día, mi hijo no salió a ningún lado se la paso con nosotras y en su cuarto jugando al play.
Casi las 9 de la noche y tuve que pedirle a mi hermana un taxi o nunca se iría y le dije que ya era hora que más tarde me daría pendiente el que se fuera a su casa.
Apenas salió mi hermana de la casa subí a ver a mi hijo.
C: por fin se fue tu tía.
L: vaya señora ehhh no para de hablar en todo el día.
C: bueno ya se fue, voy a darme un baño, te espero en la cama ok
L: Ok mami yo también me ducharé, voy en un segundo.
Corrí a mi cuarto y me desnudé, entré al baño y me preparé, rasure mi vagina pues ya tenía algunos pelitos y usaría una minitanga de hilo así que lo necesitaba, ya bañadita salí y me dispuse a ponerme lo acordado con mi hijo.
Me puse ese diminuto hilo blanco y me mire al espejo.
C: pero que puta me veo, espero que te guste hijo.
No me quise meter a la cama pues el espectáculo era que él me viera así. Estuve caminando en mi habitación hasta que entro.
L: listo ma, ya…
Enmudeció solo de verme, estaba frente a él en una diminuta tanga que solo tapaba la rajita de mi vagina y tenía las tetas al aire.
C: hijo? ¿Estás bien?
L: si, si mami, estás espectacular.
C: gracias hijo, no vayas a dormir con ese shorts esa tela es muy fría y al abrazarme sentiré frío.
Traía puesto un shorts deportivo, la verdad no sé si lo que dije lo creyó o no por qué era una tontería pero quería tener su verga lista.
L: es que no traigo más que esto.
C: sabes que no me importa que duermas desnudo, al contrario.
Me acerqué a él justo cuando comenzó a soltar la cuerda que sujetaba su shorts.
C: déjame ayudarte.
Quede de frente a él y le quite las manos de la prenda, me fui bajando hasta quedar en cuclillas frente a su verga y comencé a bajar su shorts.
Justo cuando lo bajé y al estar mi cara tan cerca su verga salió como un resorte golpeando mi mejilla.
C: travieso me golpeaste.
Le dije esto justo al sentir su verga en mi cara y con mi mano le di un pequeño golpecito a su verga como si lo estuviera regañando.
C: Es una broma hermoso, nunca me enojaría contigo.
Al decir esto tome su verga en mis manos y sin avisarle a mi hijo le di un beso en la cabeza de ese tronco que tenía frente a mi.
Levanté la vista y mi hijo me veía con una cara de incredulidad que más que otra cosa era un poema de no saber qué estaba pasando.
C: le gustan los besitos!!! Mira se puso más grande.
Aún estaba en esa posición con su verga en mi mano.
C: quieres que le dé otro beso?
Volte a ver la cara de mi hijo pues no dijo nada, solo asintió con la cabeza en señal de aprobación.
Un beso más en la cabeza de su verga y otro en su tronco.
Me levanté sin quitarle los ojos de la cara de mi hijo.
Le di un beso de piquito en los labios.
C: te quieres meter a la cama con mami?
L: si.
C: me encanta tenerte en mi cama y más con esta vergota así, espero que está noche la pasen genial con mami.
Tenía que seguir avanzando, mi hijo al parecer por su cuenta no daría el paso a algo más.
Moví mi mano hacia atrás buscando su verga, sentí en mis nalgas su semen aún tibio y avance un poco más al centro de mi culo, sentí su palo llenó de semen en mi mano, pero fue apenas un segundo pues mi hijo se apartó de mí y se levantó de la cama.
Volví a avanzar muy rápido supongo, creo que la inexperiencia de mi hijo lo hacía tener miedo y retrocedía al sentir que lo que pasaba no estaba bien. Volví a quedarme en la cama fingiendo dormir esperando a ver qué sucedía.
Lo oí levantarse pensé que se iría a su cuarto pero no, se metió al baño y unos minutos después oí que regresaba, me alegré tanto por qué podía seguir con mi plan.
Me puse boca arriba en la cama, traía un brassier de broche al frente así que lo desabroché sin quitarme el Bra.
C: avanza despacio, no lo asustes.
Me dije, pues el regresaba del baño a la cama.
Apenas se metió a la cama yo me acomode nuevamente de lado dándole el frente está vez.
C: fuiste al baño amor?
L: si ma, estás despierta?
C: me despertó el ruido del WC
L: lo siento es que ya me urgia
C: no te apures, ven abrázame
Lo puse de lado frente a mi buscando que su cara quedará lo más pegada a mi pecho, puse mi mentón en su cabello y eso hizo que su cara quedará en mi cuello, sentí que se resistía a pegarse a mi cuerpo pues yo tenía mi brazo en su espalda y el sus brazos pegados al cuerpo, parecía un gatito asustado.
C: abrázame hijo tengo un poco de frío.
L: ok ma.
Pasó su mano tras de mí y la puso en mi espalda, tras unos minutos así yo fingí nuevamente dormir, el ruido de mi respiración debió advertirle que ya estaba dormida.
L: ma, mami!!!
No tuvo respuesta de mi parte y eso le dió el permiso de avanzar.
Su mano bajó de mi espalda a mi cintura y de ahí a una de mis nalgas, puso toda la palma de la mano en ella y sentí que la apretó un poquito.
Mi hijo me estaba tocando el culo y me encantaba, aún tenía restos de su corrida en mi culo y con un par de dedos me la empezó a batir en todo el culo, yo me deje hacer pues la sensación y el morbo de saber que mi hijo me estaba manoseando me encantaba.
Con su mano aún en mi nalga, sentí que bajaba un poco y pude sentir su cara en mis tetas, metió la cara entre mis tetas, su mano soltó mi nalga y con la subió por mi cintura, la paso a mis costillas y busco mis bubis.
Dió un pequeño susto al sentir que mi brassier estaba suelto y supongo que se sorprendió saber que tenía casi las tetas al aire.
No se movió durante unos segundos así que yo hice el ademán de acomodarme y moví mi pecho hacia su cara liberando del todo mis tetas del brasier, quedaron en su cara.
L: mamá!!!
Comprobando que estaba aún dormida, volvió a poner su mano en mi nalga y su boca en uno de mis pezones.
Lo lamía, le daba pequeños besitos y su mano seguía jugando con mi nalga, su verga la sentía en mis piernas casi en las rodillas como dije soy bajita y él pues en la posición que estaba quedaba casi a esa altura.
Después de unos minutos soltó mi culo y su boca se separó de mi pezon, me quedé quieta esperando algún movimiento de mi hijo, fue subiendo hasta que está vez yo quedé con la cara en su pecho, pegó su cuerpo al mío y sentí su verga en mi vagina.
La fina tela de mi tanga era el único impedimento entre su verga y la vagina que lo trajo al mundo, estuve a punto de correrme la tanga y decile méteme esa vergota hijo, pero antes el comenzó a eyacular.
Esta vez su descarga terminó en mi entrepierna, fue igual que la anterior, sus lechazos quedaron en mi tanga y si verga, sentía que apretaba las manos para no emitir ningún sonido pues se estaba corriendo en su mamá.
Tras unos segundos donde sentí como su verga descansaba en mi pierna después de vaciarse, el no se movía.
Estaba encantada con todo esto, tenía las tetas de fuera y tenía llenos de semen mi culo y mi panochita.
Pensaba en que debía educar la verga de mi hijo para soportar más, el día que lo ví masturbarse aguanto bastante tiempo haciéndolo pero en esta ocasión llevaba dos corridas en muy poco tiempo y bueno entiendo que la situación tal vez lo tenga más caliente que nunca pero debe aprender a satisfacer primero a la putita con la que esté en la cama y después correrte las veces que quieras, ya le enseñaré pensé.
Se separó de mí y se volteo hacia el lado contrario de la cama, no quería ni moverme tal vez el saber que estaba despierta podría ponerlo nervioso y terminaría saliendo de la cama, por ahora lo dejaría descansar, aunque estaba más que caliente decidí darle tiempo a qué lo asimilará.
No es que quisiera que él diera el paso definitivo a cogerme pero quiero que el día que suceda no tenga dudas, no lo haga a escondidas, quiero que esté seguro y que me use como una puta toda la noche, por lo pronto el plan seguía en marcha.
Intenté dormir pues mi mente se hacía más y más preguntas y la que más me quitaba el sueño es si mi hijo quería seguir con esta morbosidad entre el y yo.
Desperté como a las 7 de la mañana unas cuántas horas dormí nada más, apenas abrí los ojos volteé a ver si mi hijo seguía ahí y con alegría comprobé que estaba durmiendo a mi lado.
Los primeros rayos de luz entraban por la ventana y mi mente empezó a carburar mi actuar.
Con los pies rápidamente avente las cobijas que nos cubrían y mi hijo quedó boca arriba en la cama completamente desnudo ante mis ojos.
Que hombre estaba hecho, esas piernas fuertes, su pecho y pectorales eran excelentes y qué decir de su verga, estaba en estado de relajación y aún así se veía gorda y grande, la tenía descansando sobre su muslo izquierdo.
Me hinque en la cama y mi cara la fui poniendo lo más cerca que podía de su verga, las ganas de darle un beso de lamerla de chuparle ese pitote me estaban consumiendo, pero si lo hacía despertaba a mi hijo y tal vez la impresión sería demasiado.
Le di un besito rápido a su verga apenas un segundo y volteé a ver si mi hijo no había despertado.
C: vas a ser mío, pronto.
Le dije esto dirigiéndome a su verga.
Me acosté al lado de mi hijo boca arriba al igual que el.
Mis tetas estaban fuera y mi mano bajó hasta agarrar su verga. Me quedé quieta y comencé después de unos segundos a mover mi mano por todo el tronco de su pito.
Mis ojos no perdieron detalle al espectáculo, del estado en el que estaba está empezó a despertar, se puso más grande y si se puede más gorda justo en mi mano y yo no cabía de emoción.
Tome su verga del tronco justo en la base y la Vi estoica, un mástil delicioso quedó ante mis ojos, sentí que mi hijo se movía así que cerré los ojos y dejé mi mano quieta sujetando su verga.
L: ma, mami, mamita.
C: que pasa hijo.
L: tienes las tetas de fuera.
Abrí los ojos simulando despertar y lo mire a los ojos.
C: el brasier se debió desabrochar anoche, que pena hijo.
L: ¿Te ayudo a abrocharlo?
C: te molesta que tenga las tetas al aire, cuando eras niño las chupaste mucho o es que las tengo muy feas para tu gusto.
L: que dices, por mi anda todo el día con ellas fuera porque son geniales.
C: entonces déjalas fuera hijo.
Sus ojos no dejaban de ver mis tetas y mi mano seguía en su verga, sentía ganas de lanzarme sobre él y besarlo, pedirle que me hiciera su putita en ese instante.
L: ma.
C: dime hijo.
Sus ojos bajaron y me mostró con un ademán de su cabeza que observará su verga.
C: ayyy hijo perdona, no me di cuenta que te estaba sujetando el pene.
L: no te apures mami.
C: pero Luis mira esa cosa!!!
Mi hijo puso sus manos en su verga intentando taparla pero yo no lo permitiría.
C: espera, deja verla bien!!!
L: es que me da pena contigo mami.
C : ya lo dijiste soy tu madre no pasa nada si me muestras un poquito.
L: ok mami.
Mis ojos se deleitaron con ese monstruo.
C: que cosa Luis!!! Que rica verga tienes hijo, mira nada más, es perfecta, es grande, gorda, que bien armado estás hijo.
L: me sonrojas mami.
C: siéntete orgulloso hijo que rico pito tienes, yo encantada de tener un hombre con esa cosa en mi cama.
L: pero si papá se entera que dormí desnudo en su cama me mata.
Esto último lo dijo dando un salto de la cama y poniéndose de pie.
C: espera tranquilo hijo nadie le dirá nada a tu padre yo te pedí el favor de dormir conmigo por miedo y lo dejaremos en secreto ok.
L: ok mami.
Seguía con ese miedo a su padre y esa inseguridad así que debía quitársela o no lograría que me cogiera.
C: voy a darme un baño por qué no te acuestas otro rato aún es temprano.
Sin decir palabra se metió a la cama y prendió la televisión, busco las sábanas que yo había tirado antes y se cubrió hasta la cintura.
Su verga quedó bajo la sábana y aún así se dibujaba perfectamente toda su largura y grosor.
Me levanté de la cama y me quite aún el brassier que traía colgando en los brazos, quedé solo en tanga frente a mi hijo.
C: crees que aún tengo buenas tetas hijo?
Con mis manos una en cada teta las levanté y estruje.
L: yo creo que están perfectas ma.
C: no las tengo caídas?
L: no.
C: te gustan las mujeres tetonas así como yo o con menos teta?
L: así como tu mami.
Su verga estaba más que excitada, la sábana que la cubría se levantaba como una casa de campaña y mi hijo no podía evitarlo.
C: Cuando eras niño las chupaste mucho tiempo y me gustaba mucho.
L: enserio.
C: si, para las mujeres es muy rico cuando nos chupan las tetas.
L: que lastima ya no ser niño.
C: pero eres mi hijo, digamos que siguen siendo tuyas.
L: osea que si algún día se me antoja chuparte las tetas lo puedo hacer mamá?
C: claro hijo, ya las has chupado antes, no veo nada de malo en que lo hagas de nuevo.
Se quedó mudo con mi respuesta, le estaba invitando a chuparme las tetas cuando le plazca y no había marcha atrás.
C: bueno voy a darme un baño mira como estoy.
Me di una vuelta y le mostré mi culo, la tanga negra manchada con su semen, gire y le mostré mi vagina también manchada con ese rico semen de su verga.
L: parece que sudaste en la noche y manchaste tu tanga mami.
C: si verdad, es que creo que estaba muy cachonda anoche, bueno hacía mucho calor.
Me dirigí al baño y cerré la puerta, que sensación tan rica el estar calentado a mi hijo.
Abrí las llaves de la regadera y recordé que puse un tapón de papel en ella para que no saliera mucha agua. Seguía el plan.
C: Luis hijo.
L: qué pasó más.
C: puedes venir a revisar la regadera no le sale agua.
L: voy.
Abrí la puerta del baño y él entró, se había puesto su bóxer, esperaba que entrara desnudo pero no todo puede ser perfecto.
L: que pasa mami.
C: no sale agua hijo y yo ya encuerada para bañarme.
Quité mis manos que cubrían mi vagina ya no traía tanga así que por primera vez ante sus ojos su madre quedaba encuerada frente a él.
L: ¡qué panochota!!!
Fue lo primero que salió de su boca, creo que no lo pensó simplemente fue instinto.
C: ¿te gusta?
L: mmm perdon ma es que bueno está muy, bueno se ve muy…
C: dilo hijo no pasa nada te dije ayer que podías tener confianza en mí y eso implica hablar sin rodeos.
L: se ve muy rica ya lo dije perdón.
C: ¿Qué te parece que la lleve rasurada?
L: genial ma.
C: no debes tener pena conmigo yo ya te Vi desnudo y ahora tú a mí es normal entre madre e hijo ok.
L: ok mami.
Su boxer ya no ocultaba su erección, esa verga enorme estaba encantada de verme desnuda.
L: listo ma ya quedó, ya puedes bañarte.
Salió del baño no sin antes voltear y darme otro repaso, sus ojos me escanearon desde la cabeza hasta los pies y para su deleite le di una imagen de mi culo al entrar a la regadera y una sonrisa cómplice.
Me bañe y bueno me di una masturbada riquísima, salí del baño envuelta en una toalla, el seguía acostado en la cama viendo tv.
C: Que rico baño, me siento genial.
Camine a mi buro y busque que ponerme.
C: vamos a salir a algún lado hijo?
L: no, bueno yo no quiero salir.
C: perfecto entonces no te molesta si ando en tanga todo el día
L: solo en tanga?
C: si, ayer así anduve y estuve comodísima.
L: por mi no hay problema.
C: perfecto, está estará bien?
Saqué del cajón una tanga azul transparente de la parte delantera y se la mostré a mi hijo.
L: está bonita ma.
C: o este hilito?
Desenrrolle un hilo dental blanco, que más que otra cosa son solo tres hilos amarrados por qué hasta la parte delantera es muy pequeña.
L: mmm este, yo creo que…
Su cara era de incredulidad, su propia madre estaba frente a él pidiéndole opinión sobre qué tanga usar en casa.
C: qué te parece si ahorita en el día uso la tanga y ya en la noche que vayamos a dormir me pongo el hilo dental.
L: quieres que vuelva a dormir aquí contigo?
C: tu padre no vuelve hoy y no quiero estar sola además me encantó que durmieras conmigo hijo.
Su verga seguía paradisima ya no hacía por evitar su erección creo que mi plan estaba funcionando.
Le di la espalda y dejé caer la toalla, regalando la imagen de mi culo recién bañado. Tome la tanga y me la puse, primero una pierna y después otra y la subí despacio sin prisa, quería que se deleitará con la imagen de ver cómo se me iba metiendo en el culo esa tela hasta dejar solo a la vista mis dos enormes nalgas.
C: Aún tengo buen culo hijo?
Una nalgada a una de mis pompas lo sacó del encantamiento.
L: el mejor de todos ma.
C: Me la voy a creer ehhh
L: es verdad, ya quisiera que alguna de las chicas con las que salgo tuviera un culo así como el tuyo.
C: así como?
L: pues grande, redondo, con esas nalgotas y en tanga.
C: yo jamás había tenido una verga como la tuya en mi cama.
L: y papá?
C: tu papá ya no puede cogerme!!!
Su cara era de sorpresa ante lo que acababa de escuchar y tuve que seguir explicando aunque con eso estuviera traicionando la confianza de mi esposo pues era algo que nadie debía de saber.
C: por la edad de tu padre ya no se le para, lleva mucho tiempo sin usarme y yo soy una mujer aún joven y muy caliente. No me culpes si aún quiera que un buen macho me disfrute.
L: yo… tu… es que…
C: no digas nada mi amor solo te estoy diciendo lo que pasa. Anda ve a darte un baño y sirve que bajas está cosa o va a romper la sábana.
Le di un apretón a su verga por encima de la sabana.
C: ve a bañarte yo bajaré a hacer el desayuno y te espero en la cocina ok.
Apenas baje a la cocina, estaba haciendo el desayuno cuando sonó el teléfono, era mi hermana que venía para la casa a visitarme no tuve manera de negarlo y tuve que subir a comunicarle a mi hijo la mala noticia
C: Luis hijo, cuando salgas de bañarte, te vistes tu tía viene en camino a la casa yo también me pondré algo de ropa.
L: encerio?, Que mala onda le hubieras dicho que saldríamos.
C: No pude negarme, yo también no estoy muy contenta con la situación pero bueno.
Me puse un vestido veraniego sin sostén y volví a la cocina, diré que el resto del día entre que estuvo mi hermana en casa, la comida y demás cosas se fue el día, mi hijo no salió a ningún lado se la paso con nosotras y en su cuarto jugando al play.
Casi las 9 de la noche y tuve que pedirle a mi hermana un taxi o nunca se iría y le dije que ya era hora que más tarde me daría pendiente el que se fuera a su casa.
Apenas salió mi hermana de la casa subí a ver a mi hijo.
C: por fin se fue tu tía.
L: vaya señora ehhh no para de hablar en todo el día.
C: bueno ya se fue, voy a darme un baño, te espero en la cama ok
L: Ok mami yo también me ducharé, voy en un segundo.
Corrí a mi cuarto y me desnudé, entré al baño y me preparé, rasure mi vagina pues ya tenía algunos pelitos y usaría una minitanga de hilo así que lo necesitaba, ya bañadita salí y me dispuse a ponerme lo acordado con mi hijo.
Me puse ese diminuto hilo blanco y me mire al espejo.
C: pero que puta me veo, espero que te guste hijo.
No me quise meter a la cama pues el espectáculo era que él me viera así. Estuve caminando en mi habitación hasta que entro.
L: listo ma, ya…
Enmudeció solo de verme, estaba frente a él en una diminuta tanga que solo tapaba la rajita de mi vagina y tenía las tetas al aire.
C: hijo? ¿Estás bien?
L: si, si mami, estás espectacular.
C: gracias hijo, no vayas a dormir con ese shorts esa tela es muy fría y al abrazarme sentiré frío.
Traía puesto un shorts deportivo, la verdad no sé si lo que dije lo creyó o no por qué era una tontería pero quería tener su verga lista.
L: es que no traigo más que esto.
C: sabes que no me importa que duermas desnudo, al contrario.
Me acerqué a él justo cuando comenzó a soltar la cuerda que sujetaba su shorts.
C: déjame ayudarte.
Quede de frente a él y le quite las manos de la prenda, me fui bajando hasta quedar en cuclillas frente a su verga y comencé a bajar su shorts.
Justo cuando lo bajé y al estar mi cara tan cerca su verga salió como un resorte golpeando mi mejilla.
C: travieso me golpeaste.
Le dije esto justo al sentir su verga en mi cara y con mi mano le di un pequeño golpecito a su verga como si lo estuviera regañando.
C: Es una broma hermoso, nunca me enojaría contigo.
Al decir esto tome su verga en mis manos y sin avisarle a mi hijo le di un beso en la cabeza de ese tronco que tenía frente a mi.
Levanté la vista y mi hijo me veía con una cara de incredulidad que más que otra cosa era un poema de no saber qué estaba pasando.
C: le gustan los besitos!!! Mira se puso más grande.
Aún estaba en esa posición con su verga en mi mano.
C: quieres que le dé otro beso?
Volte a ver la cara de mi hijo pues no dijo nada, solo asintió con la cabeza en señal de aprobación.
Un beso más en la cabeza de su verga y otro en su tronco.
Me levanté sin quitarle los ojos de la cara de mi hijo.
Le di un beso de piquito en los labios.
C: te quieres meter a la cama con mami?
L: si.
C: me encanta tenerte en mi cama y más con esta vergota así, espero que está noche la pasen genial con mami.
9 comentarios - Me vuelvo una madre incestuosa lV