Danna Palacio (Shemale) Remake

Buenas noches, les traemos un nuevo remake, este relato es de mi tercera vez teniendo sexo con una chica trans, Ella se llama Danna, les dejaré unas fotos recientes que encontré. Actualmente ya no tengo ningún contacto con ella.








Este relato sucedió en la ciudad de Medellín colombia, me encontraba allí por un viaje de negocios, el primer dia lo tenia totalmente libre, así que aproveché para revisar el catalogo y no hubo que pensarlo dos veces al escoger a esta mujer por sobre las demás. En ese tiempo ya tenia el cuerpazo que lleva en las fotos, pechos grandes, cintura pequeña, dos lindas nalgas redondas y un hermoso pene.

La llamé y nuestra cita quedó a las 10 Pm en un hotel cerca al centro de la ciudad. Yo me preparé, salí a conseguir condones y lubricante, me bañé, limpié y depile para estar listo para Danna. al llegar la hora estuve en el hotel sin contra tiempos, toque la puerta de su habitación y al abrir, un espectáculo visual al instante, una lencería negra era lo único que llevaba. No pude contenerme y me acerqué a ella, la besé con fuerza y mis manos fueron directamente a sus redondas nalgas, avanzamos un poco y ella cerró la puerta, sus manos también acariciaban mi cuerpo.

Lentamente avanzamos hasta un sofá que estaba en el cuarto, inicié besando su cuello lentamente, bajando despacio hacia sus grandes pechos. Al llegar me quedé un minuto admirándolos mientras los sostenía con mis manos. Los besaba sobre la ropa mientras lograba desabrochar el sostén, una vez liberados sus hermosos pechos, los lamí y apreté con fuerza.

Danna tenia sus manos en mi entre pierna, había metido su mano dentro de mi pantalón y acariciaba con suavidad mi pene. Noté como su pene sobresalía un poco de la tanga, llevé mi mano allí y empecé a acariciarlo. Dejé sus pechos por otro tesoro, llevé mi boca hasta su pene y lo liberé de las ataduras. Inicié lamiendo la punta, mi mano por otra parte jugaba suavemente con sus huevos y su ano. Lamí el pene de arriba a abajo mirándola fijamente a los ojos.

Chupaba más rápido cada minuto que pasaba, Danna gemia suavemente y pasaba sus manos por mi cabello Lo metía todo en mi garganta, utilizaba la saliva que se derramaba para lubricar su ano con Delicadeza. Finalicé con una última lamida de arriba hacia abajo, me desnudes por completo y dirigí mi pene hacia su boca, ella se arrodilló con una separación de la piernas y tomó la carne con sus manos, lo acarició por completo y lo pasaba por su cara entre besos. Al meterlo en su boca sentí un inmenso placer, su forma de chuparlo era distinto a lo que había probado hasta ahora.

Me sentía en el cielo, lo metía al fondo de su garganta, lo lamia y succionaba con fuerza la punta utilizando la lengua como ayuda. Sus dedos ya estaban dentro de mí, los metía y saca suavemente intentando hacerme correr, pero debí detenerla. Tomé un condon junto al lubricante, se lo puse a ella y me recosté en la cama; Danna tomó mis piernas y lentamente me penetró. Mirándome a los ojos fijamente comenzó a bombear, primero suavemente para acostumbrarme. Al notar que ahora tenía un poco más de facilidad aumentó el ritmo, no pude evitar gemir, me mastubaba con suavidad mirando su cara para aumentar el placer.

Unos minutos después cambiamos de posición, me coloqué de perrito y ella desde atrás apretando mis nalgas y palmeandolas empezó a darme placer, ambos gemiamos y disfrutamos el momento. Danna no tardó en correrse, sacó su pene y lo colocó sobre mi, se quitó el condon y derramó la leche en mi espalda baja. Sentí como una cálida lengua lamia el semen con cuidado mientras me acariciaba.

Mi turno de hacerla gozar llegó, me sentí en la cama con la espalda en la pared, abrí mis piernas y coloqué un condon junto a lubricante. Invité a Danna a sentarse sobre mi pene dándome la espalda. La visual de sus dos hermosas y grandes nalgas sobre mi era espectacular. apreté esas nalgas unos momentos mientas mi pene entraba lentamente en su apretado ano. Cuando lo tuvo todo dentro la tomé de las caderas con fuerza e inicié a embestirla con fuerza aunque tenía la Movilidad limitada.

Danna tomó el control e inició un campaña de sentó es violentos que hacía resonar la habitación de ruido, ambos gemiamos y a medida que el placer aumentaba la tomaba de las caderas con fuerza hasta sentir que me corría, en ese momento la tomé de los brazos y la abracé por detrás y con mi mano derecha apreté uno de sus pecho mientras me corría con mucha fuerza.

Al terminar, mi pene salió de su ano, ambos nos quedamos en la cama por un momento. Hablamos un poco y luego me arreglé para irme del lugar.