Cacería de conejitas / Alejandra M. en Bunny Hunt (Parte 1)

Introducción:

Bunny Hunt, el deporte más excitante: la cacería de chicas vestidas de conejitas. Empezó primero como un entretenimiento para millonarios, y de a poco se convirtió en un reality porno y sangriento donde se juega y gana mucha plata. En la Deep Web se ven las cacerías online, y los usuarios, que primero pagan una tasa carísima para ingresar, apuestan a sus cazadores favoritos influyendo en el resultado a través de polls: una chica puede vivir o ser asesinada de las maneras más crueles según como voten los usuarios, pero más bien se define de que manera morirá, pocas son las que son salvadas, y en general, es sólo para correr una vez más.

Las futuras conejitas son también votadas por los usuarios, en general se busca a chicas de la red; only fans es uno de las plataformas que usan los reclutadores, aquellos que proveen al juego de las futuras presas o Bunnies. Una vez marcada la presa, la pueden llevar mediante engaños, siempre con mucha plata como enganche, o, cuando es una chica conocida, directamente secuestrandola. Una vez en poder de los reclutadores, la llevan a alguno de los sitios de caza secretos, en general en algún lugar bien apartado, para evitar que Interpol, que siempre está atras de ellos, los ubique.

Los cazadores mantienen sus identidades en secreto, sólo son conocidos por los administradores del juego (hoy los carteles narcos están atrás del juego). Los Hunters o Killers como también se los conoce, son en general profesionales pero todos muy crueles y despiadados, pueden torturar y matar a sus presas con los metodos más sádicos sin que les importen nada las súplicas de sus pobres víctimas, de hecho todos ellos lo disfrutan. Casi todos incluyen la violación como parte de su performance, lo que es siempre muy bien premiado por los usuarios con bonus de varios miles de dólares. Una buena cacería puede dejarle hasta 1 millón de dólares al cazador; así y todo la mayor parte va para los organizadores, que la reinvierten en gran parte en los sitios de caza y reclutadores. Un cazador se hace cada vez más valioso cuantas más presas acumula en su historial, esto le reporta un share mayor en las ganancias. Los nuevos cazadores tratan de escalar en el ranking lo más pronto posible, para lo cual están dispuestos a satisfacer los pedidos más depravados de los usuarios, incluso sexo con los cuerpos de las conejitas ya asesinadas.