Saludos amigos ya hace un rato que no escribía. En esta ocasión les traigo una experiencia que vivió una amiga cercana. He cambiado algunas situaciones, nombres, tiempos y sin duda fue una experiencia deliciosa poder llevar a la literatura esto para ustedes, disfruten y dejenme saber en sus comentarios lo que hayan sentido y piensen. Sin más empecemos!
Marco I
Ese día anunciaron que mi compañero Mario era la persona que iban a ascender. A mí me cayó como balde de agua fría saber que alguien que no había probado tener la capacidad para liderar el equipo se quedaba a cargo. Sin embargo, me quedé ecuánime y escuché todo. La razón era que llevaba más tiempo en el equipo. Sin duda fue una sorpresa para todos.
Pase la tarde meditando la situación y al final le platique a mi líder, aún lo era, que no estaba de acuerdo. Le expuse los puntos y me indicó que por proceso así debía ser. Yo le mencioné que si tenía algún problema con que levantara una explicación con Recursos Humanos y me replicarón que no. El resto del día redacté la aclaración argumentando todo. Pero sabía de mis ánimos, así que decidí enviarla mañana. Cómo era de esperar cambie la redacción a algo más neutro y argumentativo y no a queja o berrinche mío.
Días más tarde recibí una primera entrevista con RH. Expliqué la situación, di más detalles, algunas fechas y personas que podían verificar todo lo que ya venía en mis evaluaciones. Y días más tarde, maldito proceso, me volvieron a llamar, esta vez con algo que me cayó de sorpresa.
— Marco, tenemos un previo resultado. Sin embargo, nos gustaría consultarte porque es una situación un poco delicada.
— Claro díganme
— Con normalidad no hacemos este tipo de aclaración. La hicimos porque no es común que un Rol bajo como el tuyo esté en esta situación y porque tu compañero no ha tenido el desempeño esperado. De hecho, creemos que cometimos un error al asignarle ese error. Está mal que lo digamos.
— disculpe pero no estoy entendido del todo
— Verás. Si continúas esta aclaración, es muy probable tengamos que bajar el Rol que Mario y con ello un decremento en su salario. Incluso, tu compañero no estaría capacitado para nuevas responsabilidades.
— Entiendo se vería afectado. Esto no era lo que buscaba.
— sabemos que es una decisión complicada. ¿Te parece si nos dices tu respuesta en un par de días?
— Claro.
Mi respuesta era que continuarán pero, ya que me habían ofrecido ellos el tiempo y casi casi tenía la respuesta que esperaba, decidí tomarme ese tiempo de a gratis.
Ese día más tarde fue mi amiga Angy, la esposa de Mario. Ella y yo somos muy amigos y me sabía mal esta situación por ella. Ella me pidió que no continuara con la aclaración ya que los afectaría. Yo me quede en silencio y solo la mire, quizá decepcionado. Ella intentó explicarme que entendía mi posición pero que eso les ocasionaria problemas económicos.
Yo te expliqué que esa oportunidad me pertenecía por el esfuerzo y capacidad que había mostrado los últimos años que sin duda había sido superior a la de él y que no era mi afán mostrarme presumido ni nada personal. Ella tan amable, comprensiva me dijo que podía abogar por mi y conseguirme un aumento de suelo, a lo que yo le dije que porque no hacía eso con su esposo y dejaba que yo pudiera tomar el liderazgo. Yo sabía la respuesta, ella no podía abogar por su marido una vez que la aclaración estuviera hecha.
Tengo que decir que yo había empezado a grabar la conversación porque no me fiaba de nada en esos momentos. De nuevo insistió y me mencionó que tenían colegiaturas, la hipoteca, el coche y gastos de su familia. Estaban muy apretados y una disminución los haría dejar muchas cosas. Lo único que le respondí es que mencionaría que Mario no se merece la baja de Rol, sino que solo no lo dejen asumir el liderazgo. Ella no termino muy convencida. Obvio yo tampoco y ambos sabíamos el resultado. Ahí termino nuestra conversación.
En la noche recibí un mensaje de Angy y me dijo que quería hablar de nuevo.
Angy I
— Angélica que crees que hizo Marco ?!
— Tranquilo Mario qué pasa
— Se puso contra mi, con el ascenso !
— Relájate un poco mira cómo te pones
— Es que levantó una aclaración con RH y me citaron para revisar unas cosas. Me sentí tan humillado, pusieron en tela de juicio todo lo que había hecho.
Mario estaba muy alterado y lo comprendía. No sabía cómo Marco pudo haber hecho algo así.
Al día siguiente le pedí a Karla que si me podía mostrar el expediente del caso. Cómo somos muy amigas y sabía que yo no podía influir, me lo mostró. Al leerlo varias veces podía ver que en efecto Mario no se merecía el ascenso y que su desempeño era más bien el necesario para cumplir su trabajo.
En ese momento lo que me preocupo fue el pre dictamen que decía Baja de Rol por error de administración. En espera de resolución con el afectado. Y me atreví a hablar con Marco. Nuestra situación estaba pendiendo de un hilo. Ya era suficiente con que nuestro matrimonio no fuera bien como para tener problemas económicos. Debíamos en las tarjetas, mandamos dinero a nuestros padres en Colombia, la hipoteca, el coche y todo se estaba derrumbando. Esto sería casi el fin. Lo peor es que entendía la queja de Marco. Y yo me sentía tan desesperaba por ponerlo en esa encrucijada.
Cuando hablé con él sabía que no cedería. Pero que más podía hacer además de haberle ofrecido el aumento que no le convenció.
Durante esos días estuve escuchando a mi Marido quejarse, pero como siempre no hacía nada para solucionarle. Yo le propuse que hablara con Marco y le explicara la situación, pero su orgullo estúpido no lo dejo. También le dije que le sugiriera renunciar a ser líder y le dejara el puesto a él con la condición de cancelar la aclaración. Pero tampoco le gusto.
Cuando volví hablar de nuevo con Marco casi le supliqué que no lo hiciera. Estaba desesperada y de nuevo le ofrecí que podía asegurarle un aumento, que yo podría arreglarlo. Él dijo que lo sentía, pero que no lo haría. Yo angustiada sentí una rabia y empecé a decirle muchas cosas y el se enojo también y empezamos a hablarnos pesado. Hasta que saco el teléfono y puso las grabaciones. Toda mi voz, mi acento, mis frases. Sentí que el mundo se me venía encima.
— Creo que podría hacer una solución— dijo—
— Cuál? — murmure abatida, arrinconada—
Él se abrió de piernas hacia a mi. Yo entendía. Sentí una rabia. ¡Insinuarme eso en mi propia casa !, yo casada! Aprovecharse de todo! Solo cerré los ojos, respiré. No tenía muchas opciones y el estúpido de mi marido no hacía nada para resolverlo.
Me arrodillé. Él se bajo el pantalón y dejo salir una verga gorda, algo larga, unos 13 cm, flácida, dormida aún. Debo confesar que me sorprendió. Yo estaba temblando, era un mar de sentimientos. Humillación, impotencia, me sentía abusada, enojada con mi marido por su incompetencia. Abrí mi boca y Marco debió tomarme del cabello, no recuerdo, porque sentí su carne en mi boca e ir ganando dureza. Él movía su cadera y mi boca se iba llenando de su virilidad. Tomo mis manos y las llevo a su miembro que yo sostenía mientras comía con enojo su carne.
Él gemía y me decía. Eso! Vamos Angy, qué rico , mira nada más que ofrecida, Así que un aumento verdad. Lo peor es que entre todos mis sentimientos me sentía excitada. Cuando me di cuenta de eso vi su enorme palo en mis manos, mi boca abierta completa, mi saliva cayendo por mis labios, su miembro palpitando y me levante enojada y lo corrí. Él solo se levantó y se fue.
Toda esa noche no podía creer lo que había pasado. Me comporté como una zorra. Estaba temblando, así que salir a caminar antes de que llegara Mario. Tuve las cosas en claro. Era la única forma, no podía arriesgarme a su chantaje. Ni podía dejar las cosas en manos de Mario.
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Les dejo algunos links de mis otros relatos por si quieren leerlos y pasarla rico
* Mi obligación con el joven negro
* Mi esposo hospeda a un negrito
* Mi sobrino y yo la tía tetona
Marco I
Ese día anunciaron que mi compañero Mario era la persona que iban a ascender. A mí me cayó como balde de agua fría saber que alguien que no había probado tener la capacidad para liderar el equipo se quedaba a cargo. Sin embargo, me quedé ecuánime y escuché todo. La razón era que llevaba más tiempo en el equipo. Sin duda fue una sorpresa para todos.
Pase la tarde meditando la situación y al final le platique a mi líder, aún lo era, que no estaba de acuerdo. Le expuse los puntos y me indicó que por proceso así debía ser. Yo le mencioné que si tenía algún problema con que levantara una explicación con Recursos Humanos y me replicarón que no. El resto del día redacté la aclaración argumentando todo. Pero sabía de mis ánimos, así que decidí enviarla mañana. Cómo era de esperar cambie la redacción a algo más neutro y argumentativo y no a queja o berrinche mío.
Días más tarde recibí una primera entrevista con RH. Expliqué la situación, di más detalles, algunas fechas y personas que podían verificar todo lo que ya venía en mis evaluaciones. Y días más tarde, maldito proceso, me volvieron a llamar, esta vez con algo que me cayó de sorpresa.
— Marco, tenemos un previo resultado. Sin embargo, nos gustaría consultarte porque es una situación un poco delicada.
— Claro díganme
— Con normalidad no hacemos este tipo de aclaración. La hicimos porque no es común que un Rol bajo como el tuyo esté en esta situación y porque tu compañero no ha tenido el desempeño esperado. De hecho, creemos que cometimos un error al asignarle ese error. Está mal que lo digamos.
— disculpe pero no estoy entendido del todo
— Verás. Si continúas esta aclaración, es muy probable tengamos que bajar el Rol que Mario y con ello un decremento en su salario. Incluso, tu compañero no estaría capacitado para nuevas responsabilidades.
— Entiendo se vería afectado. Esto no era lo que buscaba.
— sabemos que es una decisión complicada. ¿Te parece si nos dices tu respuesta en un par de días?
— Claro.
Mi respuesta era que continuarán pero, ya que me habían ofrecido ellos el tiempo y casi casi tenía la respuesta que esperaba, decidí tomarme ese tiempo de a gratis.
Ese día más tarde fue mi amiga Angy, la esposa de Mario. Ella y yo somos muy amigos y me sabía mal esta situación por ella. Ella me pidió que no continuara con la aclaración ya que los afectaría. Yo me quede en silencio y solo la mire, quizá decepcionado. Ella intentó explicarme que entendía mi posición pero que eso les ocasionaria problemas económicos.
Yo te expliqué que esa oportunidad me pertenecía por el esfuerzo y capacidad que había mostrado los últimos años que sin duda había sido superior a la de él y que no era mi afán mostrarme presumido ni nada personal. Ella tan amable, comprensiva me dijo que podía abogar por mi y conseguirme un aumento de suelo, a lo que yo le dije que porque no hacía eso con su esposo y dejaba que yo pudiera tomar el liderazgo. Yo sabía la respuesta, ella no podía abogar por su marido una vez que la aclaración estuviera hecha.
Tengo que decir que yo había empezado a grabar la conversación porque no me fiaba de nada en esos momentos. De nuevo insistió y me mencionó que tenían colegiaturas, la hipoteca, el coche y gastos de su familia. Estaban muy apretados y una disminución los haría dejar muchas cosas. Lo único que le respondí es que mencionaría que Mario no se merece la baja de Rol, sino que solo no lo dejen asumir el liderazgo. Ella no termino muy convencida. Obvio yo tampoco y ambos sabíamos el resultado. Ahí termino nuestra conversación.
En la noche recibí un mensaje de Angy y me dijo que quería hablar de nuevo.
Angy I
— Angélica que crees que hizo Marco ?!
— Tranquilo Mario qué pasa
— Se puso contra mi, con el ascenso !
— Relájate un poco mira cómo te pones
— Es que levantó una aclaración con RH y me citaron para revisar unas cosas. Me sentí tan humillado, pusieron en tela de juicio todo lo que había hecho.
Mario estaba muy alterado y lo comprendía. No sabía cómo Marco pudo haber hecho algo así.
Al día siguiente le pedí a Karla que si me podía mostrar el expediente del caso. Cómo somos muy amigas y sabía que yo no podía influir, me lo mostró. Al leerlo varias veces podía ver que en efecto Mario no se merecía el ascenso y que su desempeño era más bien el necesario para cumplir su trabajo.
En ese momento lo que me preocupo fue el pre dictamen que decía Baja de Rol por error de administración. En espera de resolución con el afectado. Y me atreví a hablar con Marco. Nuestra situación estaba pendiendo de un hilo. Ya era suficiente con que nuestro matrimonio no fuera bien como para tener problemas económicos. Debíamos en las tarjetas, mandamos dinero a nuestros padres en Colombia, la hipoteca, el coche y todo se estaba derrumbando. Esto sería casi el fin. Lo peor es que entendía la queja de Marco. Y yo me sentía tan desesperaba por ponerlo en esa encrucijada.
Cuando hablé con él sabía que no cedería. Pero que más podía hacer además de haberle ofrecido el aumento que no le convenció.
Durante esos días estuve escuchando a mi Marido quejarse, pero como siempre no hacía nada para solucionarle. Yo le propuse que hablara con Marco y le explicara la situación, pero su orgullo estúpido no lo dejo. También le dije que le sugiriera renunciar a ser líder y le dejara el puesto a él con la condición de cancelar la aclaración. Pero tampoco le gusto.
Cuando volví hablar de nuevo con Marco casi le supliqué que no lo hiciera. Estaba desesperada y de nuevo le ofrecí que podía asegurarle un aumento, que yo podría arreglarlo. Él dijo que lo sentía, pero que no lo haría. Yo angustiada sentí una rabia y empecé a decirle muchas cosas y el se enojo también y empezamos a hablarnos pesado. Hasta que saco el teléfono y puso las grabaciones. Toda mi voz, mi acento, mis frases. Sentí que el mundo se me venía encima.
— Creo que podría hacer una solución— dijo—
— Cuál? — murmure abatida, arrinconada—
Él se abrió de piernas hacia a mi. Yo entendía. Sentí una rabia. ¡Insinuarme eso en mi propia casa !, yo casada! Aprovecharse de todo! Solo cerré los ojos, respiré. No tenía muchas opciones y el estúpido de mi marido no hacía nada para resolverlo.
Me arrodillé. Él se bajo el pantalón y dejo salir una verga gorda, algo larga, unos 13 cm, flácida, dormida aún. Debo confesar que me sorprendió. Yo estaba temblando, era un mar de sentimientos. Humillación, impotencia, me sentía abusada, enojada con mi marido por su incompetencia. Abrí mi boca y Marco debió tomarme del cabello, no recuerdo, porque sentí su carne en mi boca e ir ganando dureza. Él movía su cadera y mi boca se iba llenando de su virilidad. Tomo mis manos y las llevo a su miembro que yo sostenía mientras comía con enojo su carne.
Él gemía y me decía. Eso! Vamos Angy, qué rico , mira nada más que ofrecida, Así que un aumento verdad. Lo peor es que entre todos mis sentimientos me sentía excitada. Cuando me di cuenta de eso vi su enorme palo en mis manos, mi boca abierta completa, mi saliva cayendo por mis labios, su miembro palpitando y me levante enojada y lo corrí. Él solo se levantó y se fue.
Toda esa noche no podía creer lo que había pasado. Me comporté como una zorra. Estaba temblando, así que salir a caminar antes de que llegara Mario. Tuve las cosas en claro. Era la única forma, no podía arriesgarme a su chantaje. Ni podía dejar las cosas en manos de Mario.
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Les dejo algunos links de mis otros relatos por si quieren leerlos y pasarla rico
* Mi obligación con el joven negro
* Mi esposo hospeda a un negrito
* Mi sobrino y yo la tía tetona
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