Este es mi primer relato, así que me disculpo por si hay faltas de ortografía o no se llega a entender bien.
Soy una mujer casada con dos hijos varones de 18 y 24 años, el mayor de mis hijos ya no vive con nosotros, hace tiempo que se mudo y solo vivimos tres en mi casa, aunque la mayor parte del tiempo solo somos dos, ya que mi esposo trabaja durante el día y llega hasta en la noche, por lo que solo mi hijo de 18 años y yo nos quedamos en la casa.
Esta historia comienza cuando mi hijo entró a preparatoria, hace tres años, como era una nueva escuela y nuevos alumnos, mi hijo le costó hacer amigos, hasta que un día trajo a un nuevo amigo que se llama Diego, aquel nuevo amigo con el paso del tiempo se hizo el mejor amigo de mi hijo, es un chico muy educado y amable, y así transcurrieron esos tres años, hasta que al salir de la preparatoria, tanto mi hijo como Diego, pasaron más tiempo en mi casa, se la pasaban estudiando para su examen de ingreso a la universidad.
Yo a veces iba al cuarto de mi hijo y les llevaba algo de comer o beber, se estaban esforzando mucho, hasta que llegó el día del examen, recuerdo que un día antes Diego se quedó a dormir en mi casa, básicamente porque mi casa está más cerca de la universidad, yo no tuve ningún inconveniente, pues ya antes el se habia quedado a dormir, pero esa noche me percate de algo raro, pues cuando creía que tanto mi hijo como Diego ya estaban dormidos, yo decidí tomar un baño, básicamente lo hice alrededor de las 11 de la noche, porque no quería salir del baño y encontrarme con Diego al salir, no quería pasar esa vergüenza.
Pero mientras me estaba bañando, escuché como la puerta de la habitación de huéspedes (la cual antes era la habitación de mi hijo mayor), se abría, lo primero que pensé que Diego quería entrar al baño, pero después de un rato no escuché nada más, así que supuse que o me había equivocado o Diego sólo había bajado por algo para beber y listo, así que seguí bañandome, pero había cierta incomodidad, sentía que me veían, que alguien estaba ahí conmigo en el baño, pero no era así.
Terminé de bañarme y antes de abrir la puerta del baño, escuché nuevamente como la puerta de la habitación de huéspedes se abría, me espere un poco, no sabía si otra vez me había equivocado o si Diego habia salido o entrado, así que me espere dentro del baño un poco, aunque después de no escuchar nada más, salí y me fui directo a mi habitación.
Al amanecer, tanto mi hijo como Diego se fueron desde temprano a la universidad, así que cuando yo desperté no había nadie en la casa, me cambié de ropa, (mi ropa normal) y así paso toda la mañana y un poco de la tarde, hasta que sonó el timbre salí a abrir y era Diego, el había llegado antes que mi hijo, el entró a la casa y me dijo que mi hijo tardaría un poco más, ya que le había tocado en otra parte el examen, entonces en lo que llegaba mi hijo, Diego se puso a ver la televisión en la sala y yo me fui a la cocina a preparar la comida, pero después de un rato, sentí otra vez la misma incomodid, sentía miradas a mi alrededor, así que gire lentamente la mirada, pero sin ser tan obvia y descubrí algo que me dejó totalmente helada.
Diego tenía su verga juvenil fuera de sus pantalones, se estaba masturbando lentamente, mientras me veía hacer la comida, Deigo estaba demasiado sumergido en su excitacion, que no se percató que había girado la mirada disimuladamente, el me veía muy excitado, en ese momento sentí un placer extraño, no podía creer que me estaba poniendo cachonda, sentía como subía mi temperatura, seguí haciendo la comida, pero ahora trataba de enseñarle más mis nalgas a Diego.
Quería ver como reaccionaba, pero después de un rato llevo mi hijo y el guardo rápidamente su verga.
Espero les haya gustadl mi primer relato, y si quieren saber que más ha pasado, diganme por los comentarios.
Saludos.
Soy una mujer casada con dos hijos varones de 18 y 24 años, el mayor de mis hijos ya no vive con nosotros, hace tiempo que se mudo y solo vivimos tres en mi casa, aunque la mayor parte del tiempo solo somos dos, ya que mi esposo trabaja durante el día y llega hasta en la noche, por lo que solo mi hijo de 18 años y yo nos quedamos en la casa.
Esta historia comienza cuando mi hijo entró a preparatoria, hace tres años, como era una nueva escuela y nuevos alumnos, mi hijo le costó hacer amigos, hasta que un día trajo a un nuevo amigo que se llama Diego, aquel nuevo amigo con el paso del tiempo se hizo el mejor amigo de mi hijo, es un chico muy educado y amable, y así transcurrieron esos tres años, hasta que al salir de la preparatoria, tanto mi hijo como Diego, pasaron más tiempo en mi casa, se la pasaban estudiando para su examen de ingreso a la universidad.
Yo a veces iba al cuarto de mi hijo y les llevaba algo de comer o beber, se estaban esforzando mucho, hasta que llegó el día del examen, recuerdo que un día antes Diego se quedó a dormir en mi casa, básicamente porque mi casa está más cerca de la universidad, yo no tuve ningún inconveniente, pues ya antes el se habia quedado a dormir, pero esa noche me percate de algo raro, pues cuando creía que tanto mi hijo como Diego ya estaban dormidos, yo decidí tomar un baño, básicamente lo hice alrededor de las 11 de la noche, porque no quería salir del baño y encontrarme con Diego al salir, no quería pasar esa vergüenza.
Pero mientras me estaba bañando, escuché como la puerta de la habitación de huéspedes (la cual antes era la habitación de mi hijo mayor), se abría, lo primero que pensé que Diego quería entrar al baño, pero después de un rato no escuché nada más, así que supuse que o me había equivocado o Diego sólo había bajado por algo para beber y listo, así que seguí bañandome, pero había cierta incomodidad, sentía que me veían, que alguien estaba ahí conmigo en el baño, pero no era así.
Terminé de bañarme y antes de abrir la puerta del baño, escuché nuevamente como la puerta de la habitación de huéspedes se abría, me espere un poco, no sabía si otra vez me había equivocado o si Diego habia salido o entrado, así que me espere dentro del baño un poco, aunque después de no escuchar nada más, salí y me fui directo a mi habitación.
Al amanecer, tanto mi hijo como Diego se fueron desde temprano a la universidad, así que cuando yo desperté no había nadie en la casa, me cambié de ropa, (mi ropa normal) y así paso toda la mañana y un poco de la tarde, hasta que sonó el timbre salí a abrir y era Diego, el había llegado antes que mi hijo, el entró a la casa y me dijo que mi hijo tardaría un poco más, ya que le había tocado en otra parte el examen, entonces en lo que llegaba mi hijo, Diego se puso a ver la televisión en la sala y yo me fui a la cocina a preparar la comida, pero después de un rato, sentí otra vez la misma incomodid, sentía miradas a mi alrededor, así que gire lentamente la mirada, pero sin ser tan obvia y descubrí algo que me dejó totalmente helada.
Diego tenía su verga juvenil fuera de sus pantalones, se estaba masturbando lentamente, mientras me veía hacer la comida, Deigo estaba demasiado sumergido en su excitacion, que no se percató que había girado la mirada disimuladamente, el me veía muy excitado, en ese momento sentí un placer extraño, no podía creer que me estaba poniendo cachonda, sentía como subía mi temperatura, seguí haciendo la comida, pero ahora trataba de enseñarle más mis nalgas a Diego.
Quería ver como reaccionaba, pero después de un rato llevo mi hijo y el guardo rápidamente su verga.
Espero les haya gustadl mi primer relato, y si quieren saber que más ha pasado, diganme por los comentarios.
Saludos.
13 comentarios - El Mejor Amigo De Mi Hijo, Me Observa En Secreto.