Oficialmente me convertí en la puta de mi tío.

Entonces llego por fin el gran momento,sinceramente yo esperaba que nunca llegara porque me sentía bien con todo loque ellos habían despertado en mí y generaban a cada momento pero era sabidoque entre sus propuestas laborales y las tensiones entre ellos por mi iba allegar el momento en el que cada uno tomara su rumbo, cuando me pidieron que medecidiera por alguno de los dos no pude hacer y entonces cada uno tomo su rumbopor separado, no es que no haya sabido nunca más nada de ellos, quedamos comobuenos amigos pero sin ningún tipo de responsabilidad afectiva entre nosotros.


Los acompañe a los dos al aeropuerto, cada unoen su momento, ni siquiera se fueron juntos, pero cuando ya todo estaba roto nohabía más vuelta que darle.


Últimamente mi tío me acompañaba a todos ladosque no fuera con ellos, de hecho, ya se había enterado que se iban y cuandoiban a hacerlo, por ese motivo es que él ya me había reclamado como supropiedad para cuando esto finalmente sucediera y bajo sus propios términos, yono podía meterme con la familia ni decir nada que él no me permitiera decir, esdecir, él me iba a tomar para una relación completamente clandestina y, lo peorde todo, es que yo estaba completamente de acuerdo con eso.


Los chicos se fueron finalmente y elliteralmente no espero a que saliéramos del aeropuerto para tomarme en elestacionamiento del mismo, los hombres son así y siempre quieren marcarterritorio con aquello que quieren que les pertenezca, me regalo un collar quesupuestamente era un signo de que yo era suyo y no me lo podía sacar nunca. Algoa mi favor es que decidí mudarme solo a un lugar más pequeño, más a mi gusto yel accedió a ayudarme con el alquiler del mismo. Él me dijo que yo podía hacerlo que quisiera, pero cuando él no estuviera, si el me escribía o iba a casa yotenía que estar disponible para él y si había alguna otra historia en medio élno debía enterarse porque tenía derecho a castigarme si eso sucedía, habíamos firmadouna especie de pacto que aclaraba básicamente que yo era de su propiedad acambio de cierto privilegios de distintos tipos, por eso el me trataba como suputa porque literalmente lo era y aunque yo tenía alguna ventajas sobre el encuanto al vínculo decidí no usar nada de todo eso.


Mi cuerpo siempre le había pertenecido aalguien más sin descanso de algún modo.


No subíamos fotos ni videos a redes sociales,solo él tenía acceso a filmaciones y fotos mías cogiéndome, si bien siento quelos chicos despertaron cosas hermosas en mi fue definitivamente mi tío el queme convirtió en una puta con todas las letras, a la semana de haberme mudado alnuevo departamento ya teníamos sexo todos los días y hasta me había compartidocon su mejor amigo o un compañero de trabajo, no sé bien quien era, pero sí séque por su orden tuve que prestarle mis servicios a ambos.


Como ya mencioné, teníamos sexo prácticamente todoslos días, salvo aquellos días en que la no venía porque mi tía sospechaba algo.Sino era algo fijo, incluso cualquier momento libre en su día él me tomaba parasatisfacerse.


Esa tarde, casualmente después de cogerme como siyo fuera una pequeña hembra y el un gran caballo salvaje, me dijo que mepreparara para la noche porque venía a verme con un amigo y esto era mucho másdirecto, no había vueltas ni dobles interpretaciones, sino que sencillamente yosabía que ellos dos venían a cogerme y yo debía tratarlos como mis amos y, porobvias razones, mi tío siempre era el verdadero controlador de la situación engeneral.


Esa noche entonces preparé una comida más biensencilla y me vestí con un catsuit y una tanga de color negro, era lo que másme gustaba a mi tío, no me masturbe porque a mi tío le gustaba que mi cuerpoofreciera resistencia a su imposición entonces al natural y como estaba los recibí,les abrí la puerta, me besaron ambos con ese aroma tan particular a tabaco yalcohol que las personas mayores tienen en su boca y mi tío no pudo esperarpara comenzar a manosearme, yo a esas alturas ya estaba convertida en una mujercon todas las letras y solo me ruborizaba sonriente a mas no poder mientrasesperaba ordenes cuando me dijo que les sirviera la comida y eso hice.


Me estaba por sentir a la mesa, ellos dos yaestaban sentados y habían empezado a comer cuando mi tío me ordeno que lespracticara sexo oral mientras comían, por debajo de la mesa, por un momento mellamo la atención, pero lo hice al momento, en realidad después me puse apensar que quizás era mejor no comer si lo que me esperaba era una noche largade a tres. Su amigo acabo rápido por primera vez en mi boca, no tuve más opciónque tragarme su espeso y amargo semen pero el quedo mal, esa maldita vergüenza quesienten los hombres cuando creen que acaban antes de tiempo por lo que espere aque mi tío me diera su leche también para luego sentarme en la falda de suamigo y consolarlo dulcemente un momento mientras terminaban de comer, mi tíofue al baño no sin antes sonreírme cómplice y aprovechando que el pantalón desu amigo estaba bajo y su pene erecto nuevamente aproveche y le dije que metomara por lo que me agarro de la cintura, rompió mi vestimenta, corrió mitanga y me penetro a pelo, su verga era grande, no la más grande que había estadodentro mío pero si me conformaba su tamaño, poco a poco fue entrando conconfianza y apropiándose con sus manos de mi cuerpo mientras me cogía cada vez másfuerte, yo le decía suave al odio mientras me lo hacía que aguantara.


Mi tío salió del baño ya desnudo mientras suamigo seguía cogiéndome, me tomo de la cabeza y me direcciono a su pene paraque me lo comiera, eso fue exactamente lo que hice y de un modo lento recorriéndolode punta a punta, desde la base del tronco hasta el glande sin dejar dehumectar con mi lengua sus testículos a los que metía en mi boca de vez encuando.


Su amigo se fue al baño esta vez mientras mi tíome tomaba contra la pared exterior del cuarto, yo ya estaba completamentedesnudo y mi cola comenzaba a gotear fluidos al igual que mi boca, cuando yaestuvieron los dos disponibles nos fuimos al cuerpo y me cogieron con fuerza enmi cama y por turnos, en cuatro, boca abajo, cogieron mi boca con fuerzaensuciando mi cuerpo por completo y de los pelos me llevaban al baño paramearme cuando sentían la necesidad de hacerlo, los dos eran bastante agresivosy más cuando finalmente se soltaron, ya no tenían reparos en escupirme,golpearme y cogerme incluso cuando yo gritaba que me dolía y que pararan porfavor. Solo lo hicieron cuando sus néctares estuvieron depositados en mí y luegode que los dos recostados en la cama luego del sexo, uno a cada lado, recibierami boca entre sus piernas para limpiarlos por completo con mi lengua aunhambrienta.