Hace rato que me quería cojer a una treintañera (casada) de la ciudad..trabaja en una empresa de la zona, solo diré q su nombre empieza con “C”.
no muy alta, pelo lacio, un poco narigona, un culo alucinante y buenas tetas. Toda una “señora” de su casa.
una mañana de sábado q dejo a su hije (lo digo en inclusivo así no la mando al frente), logro que se suba al auto. Nos empezamos a matar a besos. Estacione el auto por cerca del autódromo. Saque la verga y me la empezó a mamar cómo nunca. Quise que se la ponga toda en la boca pero no pudo “la Tenes el doble más grande que la de mi marido”, eso me re excito. Le dije que se pase atrás , le baje el pantalón y le chupe la concha y el culo desde atrás. Gemía cómo loca. Yo la tenía durísima y se la empecé a frotar por la concha “ponete un forro” me dijo. “No tengo” le dije, entonces apunté a su culo y le apoyé la cabeza, cuando entro el glande me dijo “ despacio”, de a poco se la empecé a meter la verga hasta que entró toda, la empecé a coger con fuerza y yo le decía “ queres que pare?” “No..seguí..cógeme “. Seguí hasta que no pude más y le llené el culo de leche.
cambie algunas cosas del relato para preservar su intimidad.
no muy alta, pelo lacio, un poco narigona, un culo alucinante y buenas tetas. Toda una “señora” de su casa.
una mañana de sábado q dejo a su hije (lo digo en inclusivo así no la mando al frente), logro que se suba al auto. Nos empezamos a matar a besos. Estacione el auto por cerca del autódromo. Saque la verga y me la empezó a mamar cómo nunca. Quise que se la ponga toda en la boca pero no pudo “la Tenes el doble más grande que la de mi marido”, eso me re excito. Le dije que se pase atrás , le baje el pantalón y le chupe la concha y el culo desde atrás. Gemía cómo loca. Yo la tenía durísima y se la empecé a frotar por la concha “ponete un forro” me dijo. “No tengo” le dije, entonces apunté a su culo y le apoyé la cabeza, cuando entro el glande me dijo “ despacio”, de a poco se la empecé a meter la verga hasta que entró toda, la empecé a coger con fuerza y yo le decía “ queres que pare?” “No..seguí..cógeme “. Seguí hasta que no pude más y le llené el culo de leche.
cambie algunas cosas del relato para preservar su intimidad.
0 comentarios - Treintañera de Brandsen