Gracias por sus comentarios de verdad me halagan mucho y me calientan, como dije mis relatos serán publicados en orden cronológico, (siempre tomo nota de los encuentros más ricos para recordarlos) así que esté relato se desarrolla después del relato Mi primera vez II, gracias nuevamente y vamos al relato.
Habían pasado ya unos meses desde mi primera vez en el sexo y seguía cogiendo con mi tío cuando podíamos pero yo deseaba seguir experimentando y probar más vergas, por lo que decidí ser un poco más seductora con los hombres que me gustaban, así que puse mi mirada en el profesor de gimnasia de mi instituto, deben saber que siempre he asistido a colegios privados, por lo que hay materias optativas y en mi caso era gimnasia.
El profesor de gimnasia, un hombre de unos 40 años, musculoso aunque delgado, peludo y de barba de candado, alto de unos 182m y con un paquete que se le veía enorme, piel morena, era soltero así que no había "problema" comencé a seducirlo cuando me ponía un top para gimnasia que ya casi no me quedaba por lo que cuando hacía las posiciones de salida siempre se me subía y descubría mis pezones, yo fingía no darme cuenta hasta que el me decía que acomodara mi top, en cuanto a mis leggins usaba los más entallados para que se marcará mi trasero, y yo podía notar como su paquete crecía al verme.
La dinámica duró así unos días, las vacaciones estaban cerca y tendríamos la competencia estatal de gimnasia, por lo que yo al ser la elegida para el salto de caballo debia estar a punto, por lo que me acerqué al profesor al terminar el entrenamiento y le dije...
-Entrenador, necesito perfeccionar mi salto aún me voy a la izquierda en la salida, ¿Podría darme un poco más de entrenamiento?
-No hay problema Kieysha, mañana al terminar las clases pasa al gimnasio y trabajamos en tu salida.
Al día siguiente me presenté puntual llevando esta vez un leotardo que ya me quedaba chico, para que todo se marcara más, pero el destino estaría más a mi favor, así que tras cambiarme el profesor me vio y tragó saliva, mi leotardo era de tirantes, muy parecido a un traje de baño de una pieza pero los tirantes apenas cubrían mis pezones y en la entrepierna me tiraba mucho, dolía pero mi objetivo se estaba cumpliendo...
-Bueno, ve a la posición de carrera y haz un primer salto. -me dijo después de calentar.
Fui entonces al principio del carril de salto, y tome impulso, mi salto fue perfecto (modestia aparte) pero al caer en la colchoneta, el impacto provocó que mi leotardo se rasgara justo por el medio de la entrepierna y también uno de los tirantes se rompió, mi concha y nalgas quedaron al aire así como mi pezón derecho, yo no contaba con que eso pasara pero era obvio...
-Kieysha ¿Estás bien?
-Si solo se rompió mi leotardo.
-Dejemoslo por hoy aún tenemos tiempo para entrenar antes de la competencia.
-No se preocupe, puedo seguir.
-¿Traes otro leotardo?
-No pero puedo entrenar sin ropa. -dije retirándome los jirones de mi leotardo.
-Esto no es correcto, no podría dejarte.
-Entrenador, no hay problema yo no le diré a nadie.
El entrenador lo pensó mucho pero al final acepto, así que me mandó al inicio del carril y repetí mi ejecución pero falle a propósito (con algo de riesgo por que casi me golpeo la cabeza) y caí de panza dejando expresamente las piernas bien abiertas, el profesor corrió a ver cómo estaba y pudo ver a todas luces mi concha que ya para entonces estaba súper mojada...
-Kieysha ¿Estás bien?
-Si profesor estoy bien. - me incorporé pero procuré que mi mano "accidentalmente" se posara en el paquete del profesor...
-Hay lo siento.
-No te preocupes. -dijo sin retirar mi mano.
Recorrí el falo por sobre su ropa, el me miraba a los ojos y no pudo más que ceder a sus deseos, me plantó un beso en la boca metiendo su lengua hasta adentro mientras sus manos recorrían mis hombros, y luego acariciaban mis pezones, por mi parte liberé su verga, estaba dura y gruesa, lo mire y me agache a meterla a mi boca, eso debió tomarlo por sorpresa por qué exclamó al cielo, y se deshizo de su playera revelandome su torso peludo, se puso de pie y yo de rodillas seguí mamando su verga, dándome gusto, recorrí con la lengua todo su falo, chupé sus huevos como mi tío me había enseñado, y el suspiraba y gemía dándome más calor, tuvo que detenerme porque lo habría hecho correrse, me recostó sobre la colchoneta y abrió mis piernas, hundiendo su rostro en mi concha y comiendosela desesperado, sacándome gemidos de placer, su lengua me cogía la concha y el culo, sabía que eso significaba que ninguno de mis agujeros se salvaría ese día, me hizo venir delicioso y lo jalé hacia mi a comerme los pezones, el los chupaba con ternura...
-Muerdeme. -dije y lo hizo suavemente. -Mas fuerte que me duela.
Cumplió mi deseo un poco más fuerte y me habría arrancado los pezones, tome su verga y la apunté a mi concha...
-Cogeme. -le dije.
No se hizo esperar y me la calvo de golpe, simule que me había dolido, apreté mis caderas para que sintiera cierta presión y listo el había creído que me había desvirgado, entonces comenzó a bombear rico y fuerte, su verga era gruesa y entraba toda, (no era muy larga)...
-Mas fuerte. -le dije.
Volvió a hacerme caso, pero ahora lo hacía con mucha fuerza mientras retorcía mis pezones de manera deliciosa...
-¡HAAAA! ¡HAAAA! ¡HAAAA! ¡SI ASI! ¡DAME DURO!
-Kieysha me vengo.
-¡No la saques vente adentro!
-¡No Kieysha!
Pero no le di oportunidad, lo atrapé con mis piernas y lo jalé hacia mi, por lo que no pudo evitar venirse dentro de mí, y finalmente se rindió y dejo salir toda su leche para llenarme, nos besamos y nos quedamos así un momento, y cuando sacó su verga me apresure a meterla a mi boca para limpiarla, así no podría ver qué no había sangre, luego de eso lo bese de nuevo y lo jalé hacia las duchas, dónde nos bañamos y me dedico una mamada de concha deliciosa que me hizo venirme unas cuantas veces más, luego de bañarnos me vestí, lo bese de nuevo y le dije que "tomaría la píldora" y que aquello debería repetirse, y claro que se repitió pero eso será para otro relato.
1 comentarios - Con el profesor de gimnasia