El medicamento equivocado

Yo siempre estuve acomplejada con mi cuerpo. Mi nombre es Carolina tengo 27 años, el resto de mis amigas y de más compañeras de la universidad ya tenían un buen busto, unas piernas tonificadas y unos glúteos sobresalientes, mientras que yo permanecía plana y sin gracia. Los chicos que me gustaban no me hacían caso pues obviamente preferían a las curvilíneas de mis amigas, dejándome a mí como la ignorada del grupo.


Cansada de ello decidí investigar como mejorar mi figura. Busque recetas milagrosas, hice sentadillas todos los días hasta probé esos audios subliminales, pero nada funcionaba, la genética al parecer no estaba de mi lado. Pero, justo cuando pensé en rendirme, encontré en un anuncio del internet, mi solución estuvo completa. Unas pastillas cargadas con diferentes hormonas femeniles, las cuáles tenían la finalidad de formar el cuerpo más femenino perfecto. En el anunció se mostraba el antes y después de las chicas que se lo tomaban y los resultados era todo un éxito y claramente increíbles, pasaban de ser chicas tan o igual de planas como yo a mujeres salidas de una revista de play voy.
Sin pensarlo mucho cogí todos mis ahorros y me compré un frasco con esas milagrosas pastillas, que la verdad eran bastantes caras. Pensaba en ocultarlas en mi habitación, pero para mí mala suerte, llegaron justo cuando mi padre estaba en casa. Obviamente él preguntó que había en aquel frasco y yo tuve que mentir diciendo que eran pastillas para mis cólicos menstruales. Debido a la mentira tuve que poner el frasco junto el resto del gabinete de los medicamentos de la casa.

Mi papá se llamaba Santiago tenía 53 años, pero se conservaba físicamente escultural, desde que mi madre falleció en un accidente automovilístico, quedamos solamente él y yo


A partir de ese momento, siempre tuvo una buena alimentación y figura muy esbelta, él compraba pastillas en vitaminas Complejo B.
En el gabinete de los medicamentos había pastillas para el resfriado, dolor de cabeza, las vitaminas de mi papá y mis nuevas pastillas hormonales, etc. Además de quitar la etiqueta del frasco para que mi papá no se diera cuenta de lo que realmente eran.
Entonces, discretamente, empecé a tomar las pastillas a diario, pues en la descripción de la página decía que debía consumir una dosis diaria por un mes y esperar los resultados esperados con muchas de mis ansias.
Estaba realmente emocionada por tener un cuerpo bonito, al fin podría usar todas esas prendas escotadas y ceñidas que usaban mis amigas y el ser el centro de atención de los chicos.
Sin embargo, pasaron tres semanas y mi cuerpo no mostraba ningún cambio, mis senos seguían sin llenar mi sostén copa A y mis pantalones subían sin dificultad, me sentía estafada. Pero quién si tuvo cambios notorios en todo ese tiempo fue mi padre. En primera su cuerpo se hizo más delgado, su sobresaliente abdomen masculino empezó a desaparecer durante la primera semana y sus brazos junto a sus piernas adelgazaron mucho para la segunda. Luego su cabello creció de manera extraordinaria, pasó de tener una cabeza varonil a tener un melena rubia sedosa que caía hasta los hombros. Todo su vello corporal se fue cayendo con el pasar de los días, a los dos semanas ya tenía el cuerpo tan lampiño como el mío.
Mi padre al inicio se mostraba feliz, pues era nuevamente más joven, delgado y aparentemente sus pastillas de sus vitaminas complejo B. Sin embargo cuando su pelo empezó a crecer de la cuenta y sus brazos empezaron a parecer fideos se empezó a preocupar.
No podíamos ir con un doctor, pues mi padre no contaba con un seguro y estábamos algo escasos de dinero como pagar una clínica. Quiso remediar aquello por su cuenta comiendo mucho más , haciendo más ejercicio y cortándose su largo cabello. Sin embargo por más esfuerzos que se hicieses para ser más masculino, su cuerpo seguía en proceso de feminización, con el pasar de los días. Hasta que un día me levantó con sus gritos y cuando fui a su habitación para ver qué pasaba, vi con sorpresa como ahora mi padre tenía unos senos pegados a su pecho, senos, irónicamente, más grandes que los míos.

Ya era muy tarde cuando me di cuenta que ambos habíamos estado tomado por tres semanas las pastillas equivocados. Los dos frascos eran tan similares tanto en color como en forma de tamaño que yo sin querer tomaba las pastillas de las vitaminas de mi padre y él tomaba las que yo compraba en el internet. Cuando lo vi tan desesperado al no encontrar explicación del porqué ahora tenía senos grandes, no tuve otra opción que decirle la verdad. Obviamente me cayó el peor castigo de mi vida y la verdad me lo merecía, por mi culpa mi papá era una mezcla entre un hombre joven de 50 años y una mujer.
Le propuse a mi padre ir a la fábrica donde se producían las pastillas, pues quizás podríamos encontrar una forma de revertir los efectos de estás en él. Sin muchas más opciones partimos hacia la fábrica, en donde de inmediato nos mandaron con un doctor a una revisión para mi papá. Lamentablemente, para ese punto, los efectos, no podían revertirse. Mi padre había tomado las pastillas dos veces al día, durante esas semanas, provocando que el proceso de feminización no solamente, se diera con mucha aceleración y si no un proceso de transformación intensivo. Por lo que ahora su tenía cuerpo mucho más estrógenos que testosterona e incluso su organismo ahora segrega la primera hormona. - ya estás alturas, me temo, que es mucho más factible que usted terminé su transición al sexo femenino, para que así pueda volver a tener una vida "normal" -. Dijo el doctor dejándonos solos.


Mi padre, con el orgullo roto, prefirió seguir la recomendación del doctor que vivir como un horrible monstruo. La empresa farmacéutica, con tal de mantener todo esto oculto y evitar que su nombre quedará en el entredicho, pagaron todo el tratamiento. Mi padre tuvo que seguir tomando aquellas pastillas que iniciaron todo esto por un buen tiempo más.
Obviamente también tuvo que renunciar a su trabajo, pero aquello no fue el problema pues la empresa nos daría una manutención temporal. Todo eso tiempo vi como mi papá se transformaba en supongo ¿Mi nueva mamá? Sus senos siguieron creciendo, al mismo tiempo sus glúteos. Por lo contrario, su cintura se encogía, al igual que el ancho de sus hombros. Su piel cada vez era más suave y tersa, sin necesidad de usar ninguna crema.
Incluso su voz gruesa fue poco haciéndose más femenina. Así mi padre empezaba a adquirir esa figura de supermodelo, que yo ansiaba tener.

Ya tras cuatro meses de seguir el tratamiento, ya no era para nada aquel hombre grande y rudo que solía ser , ahora lucía como toda una mujer. Nos confundían como hermanas y obviamente todos los piropos, silbidos y miradas iba dirigidos hacia mi padre y su espectacular figura. Sin embargo por más luciese y sonará como toda una mujer, aún había algo entre sus piernas que lo delataba como un hombre. El doctor que controlaba su transición, le propuso hacer una operación de reasignación de sexo, es decir, transformar su pene en una vagina quirúrgicamente, la empresa nuevamente pagaría por todo. Mi padre se tomó algunos días, para pensarlo pero termino accediendo, pues según sus propias palabras tener su miembro, aún entre sus piernas no hacía más que recordarle todo lo que fue y eso lo hacía sentir mal. Así, tras una operación exitosa, mi padre se convirtió en toda una mujer por completo.

Lo último en lo que nos ayudó la empresa fue conseguir nuevos documentos legales de identidad para mí padre, incluso modificaron los míos para que ahora él figure como mi nueva madre.
Mi nueva madre se llamaba Beatriz
Además nos dieron una gran suma de dinero en compensación con la condición de mantener nuestra situación en secreto.
Para evitar tener inventar alguna excusa a nuestros conocidos, decidimos mudarnos, vendimos nuestra y pequeña casa y compramos una mucha más grande y bonita gracias al dinero de que nos dió la empresa.
El dinero sobrante lo utilizamos en la matrícula de mi nueva escuela y en renovar todo el guardarropa femenino para mí papá.

Desde que no mudamos, cada que venía de la escuela tenía enseñarle a mi papá a ser una mujer, para que no pase vergüenzas, cuando empiece a reincorporarse a la sociedad. Irónicamente ahora yo parecía la adulta, la cuál le enseñaba a su hija colocarse un sostén, a maquillarse, a sentarse correctamente cuando llevaba falda entre cosas. Claro que mi papá puso algo de resistencia al inicio, hizo toda un capricho, cuando le dije que se pusiera un vestido, pero al final terminaba aceptado su nuevo rol de nueva mujer. Nunca me había dado cuenta pero jamás había pasado tanto tiempo con papá, cuando era un hombre.
Éramos algo distantes y cada quien paraba metido en sus cosas . Sin embargo ahora nos pasábamos horas y horas conversando, yo me sentía en la confianza de contarle mis dramas y él se había vuelto mucho mejor oyente y consejero, además de volverse también bastante sensible y muy cariñoso.

Ya habían pasado más de ocho meses desde que pedí aquellas pastillas por internet y el dinero que nos sobraba de la empresa había empezado a agotarse. Yo me propuse a conseguir un empleo, pues sabía que mi padre, aún tenía algo de vergüenza de salir al mundo como una mujer. Sin embargo, él o ella me dijo que me concentrará en estudiar, que era momento de que él retomé sus responsabilidades. Así que un día aplicó todo lo que le enseñe, se maquilló, arregló su cabello y sorprendentemente se puso un vestido junto con unos tacones y salió a buscar trabajo.

Sorprendentemente encontró rápidamente un trabajo como secretaria, uno con buen sueldo, aunque imagino las razones por las que hayan contratado tan fácilmente. Mi padre odiaba ser una secretaria. Siempre venía renegando, si no era por la falda corta que tenía que usar, era por los tacones o por sus compañeros que no paraba de invitarlo salir o a comer etc.



Pero sin duda a quien más detestaba era a su jefe, siempre hablaban de él, quejándose de que era un creído, un soberbio y diciendo que si fuera un hombre lo habría puesto en su lugar desde hace mucho tiempo. Hablaban tanto de él que yo empecé fastidiarlo diciendo que el odio al amor hay solo camino y más un solo un paso, provocando que empiece a ser un berrinche.
Sin embargo, parece que con los meses fue adaptándose a su empleo. Ya no venía renegando, por el contrario, venía muy feliz e incluso parecía que alguien lo traía a casa. Veía como se pasaba horas y horas hablando por teléfono con una persona misteriosa, cómo le ponía más esmeró en arreglarse para ir a trabajar y sorprendentemente, cómo vestía esos cortos y ceñidos vestidos de fiesta para salir de noche a " Supuestas reuniones de trabajo". Era evidente que mi padre salía con alguien, imaginaba y esperaba que con una mujer, pues es extraño saber que tú padre, tu figura masculina por excelencia, tenga que ver algo que ver con otro hombre. Pero , cierto día llegó a la casa un ramo grande y hermoso de flores, claro que no era para mí, si no para mí padre, de parte de un tal Luis. Mi padre me confesó que desde hace un tiempo estaba saliendo con su jefe, el mismo del que se quejaba.
Me contó que un día mientras estaba en la oficina, perdió sus últimos rastros de masculinos, su jefe lo llamó a su oficina.... Ahí sin decirle nada, su jefe lo comenzó a abrazar, le daba caricias, con sus manos lo tomo su cuerpo, mientras tomaba sus nalgas y besándose cada instante, con sus suspiros fuertes lo subió en su escritorio y lo estuvo besando por más de media hora.

Mas tarde, esa misma noche su jefe, se la llevó para su mansión y allí, su transición termino aceptando su nuevo rol como una mujer, que tenía un trabajo como secretaria y tenía una hija llamada Carolina.

Cuando llegaron a la mansión de su jefe, él la tomó en sus brazos y la llevo como si fuera una mujer recién casada, una doncella que estaba lista para asimilar su vida.



Que ese momento fue algo muy rico para ella, que su jefe fue muy amable y muy comprensible aunque al principio su jefe nunca creyó que estaba cogiendo a su secretaria, pero sin imaginar que aquella mujer, era todavía virgen, tanto en vagina y así como en su culo....su jefe Luis la hizo su mujer, terminaron al final cansados, ya que estuvieron en esa habitación disfrutando una y otra vez haciendo el amor y acompañando del sexo


Al otro día, me dijo que estaba dormida en la cama y despertó, él se acercó y le dió un beso... y una nalgada en su culo, indicado, que ese momento ya era su mujer. Y para ser más específico que yo era nueva novia, me tenía ropa preparada y me dijo que me fuera para pasar un fin de semana con mi hija Caro....
Tanto como aquella confesión y esa noticia me cayeron un balde de agua fría. Siempre quise que mi padre hiciera su vida luego que mi mamá falleciera, pero nunca se me pasó por la cabeza que terminaría siendo un hombre en qué sería nueva vida. La verdad no me lo tomé muy bien y me fui molesta a mi cuarto, sin responderle nada. Ella me dejó unas horas a solas y luego entró a mi habitación para hablar conmigo. Me dijo que lo sentía y que si me incomodaba ella dejaría de salir con él. En ese momento ella , fue a su habitación....
Entonces me dí cuenta que había sido una persona egoísta, apesar de ser mi culpa que mi padre sea una mujer.
Que yo estaba impidiendo que fuera feliz... Con esa persona


Ahora yo fui quien la vió y primero me disculpe y la ví en sus ojos , ella acostada en su cama.... Abrazándola le dije que me trataría de acostumbrar así como él, se acostumbrar a ser una mujer.

Mi papá o mamá fue trayendo a Luis poco a poco a la casa y realmente parecía un buen tipo, era bien parecido, la consentía mucho y se nota que la amaba. Mi padre se comportaba como toda una princesa enamorada, cada que salía con él, pasándose horas frente al espejo, preguntándome si el atuendo X o Y se veía bien o era muy revelador, sin duda ya se comportaba como cualquier mujer. Así finalmente terminaron formalizando su relación sentimental, quien diría, mi papá se convirtió en la novia de un importante empresario del país.


Pasó un año desde que pedí aquellas pastillas, nos mudamos a la gran mansión de Luis o debo decir de mi nuevo Papi... Él cuál nos ama y nos consiente con todos los deseos a las dos y trata como a sus princesas hermosas.


Mi segunda mamá ya es toda una mujer, dejo el trabajo de secretaria, pues consiguió un trabajo de modelo. Obviamente gracias al magnífico cuerpo que tenía.


Además en qué unos meses, se casará con Luis, está muy emocionada por ver los vestidos de novia y a la vez preparándose para con su lencería de noche de bodas.

Mientras gracias a las propinas de mi nuevo papá, pude cómprame un nuevo frasco de pastillas para mí. Nuevamente tuve la mala suerte y mi madre me descubrió pero en lugar de regañarme, me dijo que tenga cuidado y las guardé en mi habitación para evitar que Luis las tomé. Así que las guardé en mi habitación y tomé una al día, obteniendo como resultado un cuerpo sexy , cómo el de mi madre....


Mi vida ha cambiado radicalmente, tengo un padre y una madre, por decirlo de algún modo, soy más popular en mi nueva escuela y vivo una vida de lujo, gracias por esta decisión ....
En este momento mi madre esta lista para ir con papi a un fin de semana....

Lista con esa sonrisa y siempre con un atuendo para complacer a su esposo....... Ya que siempre ella queda muy satisfecha.....
🔥❤️‍🔥🔥🔥❤️‍🔥🔥🧑❤️‍🔥😍😙🥰😘
Sin imaginar, en mi mente de está forma ........


😀😀😀😀😀😀🥰 FIN 🥰🥰❤️‍🔥❤️‍🔥🤤🤤🤤😜😜😜😜😜😜
Espero que les guste..... Hasta la próxima ....
Espero tus visitas, sus puntos y sus comentarios