Delicioso encuentro con Desiree en la fiesta

Estaba con unos amigos en un local en una fiesta con espectáculos y música en directo. Me encontré con Desirée, Estuvimos charlando y, como siempre, no pude dejar de mirarla el escotazo de su vestido azul oscuro, con estampado de flores, de falda amplia, hasta las rodillas, manga larga. El escotazo en v, dejaba ver el tremendo canalillo de sus enormes tetas operadas. Sus amigas y amigos la llamaron, pues los llevaban unas botellas con espectáculo a su mesa. Al despedirse, me dijo que, seguro que volvíamos a vernos más tarde, mientras acariciaba mi paquete.
Pasado un tiempo, Desirée se me acerco y metió algo en uno de los bolsillos de mi pantalón, mientras me decía al oído que en diez minutos estuviera en unas escaleras que había en la entrada. Saqué de mi bolsillo lo que esta me había introducido y vi que era una braguita azul de encaje. A los diez minutos estuve en la escalera que esta me dijo y en cuanto llego, nos dimos un buen beso y comencé a acariciar su culo, confirmando que la braga era suya, pues no llevaba nada, debajo el vestido en esa zona.
Desirée me cogió de la mano y subimos las escaleras. Fuimos a una sala donde al entrar cerro con pestillo. Nos volvimos a besar y me dijo que conocía a uno de los dueños del local y no había problema por usar la sala. Volví a acariciar su culazo y mi cara se introdujo por primera vez entre sus tetazas. Lamí y besé su canalillo y subía, lamiéndola todo, hasta llegar a sus labios deliciosos. Mis manos agarraron sus tetazas y Desirée, saco mi polla del pantalón para empezar a masturbarme.
Se arrodillo y comenzó a hacerme un mamadón. De vez en cuando se pasaba la polla por el canalillo poniéndome cachondísimo. Mientras me la mamaba, me quito el pantalón y agarro fuerte mi culo, clavándome las uñas. Con ella durísima, lamia los huevos y pasaba su lengua por ella entera, jugueteando en el glande, antes de volver a mamármela entera.
Se levanto y tras un beso, con mi polla agarrada, me llevo a un sofá viejo que había allí. Me sentó y esta se sentó sobre mí. Se subió un poco el vestido para agarrar mi polla y ponerme un condón. Volvió a masturbarme, mientras nos besábamos, antes de metérsela en su coño. Esta se movía despacio, en círculos, con sus manos rodeando mi cuello. Me apretó la cabeza, para colocarla entre sus tetazas, las cuales tenía bien agarradas. Volví a devorar su canalillo y apretar fuerte esas tetazas de plástico tan grandes.
Desabroche una pequeña cremallera trasera en el cuello, que tenía el vestido y Desirée se lo subió hasta quitárselo. Llevaba un sujetador igual que la braga, azul y de encaje, por donde se la transparentaban sus gordos pezones. La comí y acaricié las tetazas, con el puesto y mordí sus pezones que tan morbosos se veían trasparentados. Acabe sacándolas del sujetador, para comérselas y acariciárselas, con más ganas aún. Desirée comenzó a moverse más veloz cada vez. Cuando más cachonda estaba, apretó fuerte mi cabeza contra sus tetazas, momento que disfrute como un niño pequeño. Cuando me soltó, nos volvimos a besar, acaloradamente y mis pulgares jugaban en sus pezones, mientras mis manos rodeaban esas tetazas.
Desirée se giró y se colocó dándome la espalda. Se metió mi polla en su culo y comenzó a moverse en círculos. Mis manos no podían soltar sus tetazas, acariciándolas bien y nos besábamos. Desirée subió sus pies colocándolos, sobre el sofá, con mi polla aun dentro de su culo. Ahora comenzó a dar saltos, metiéndosela bien profunda y la besaba la espalda y el cuello, mientras sus tetazas no eran soltadas para nada.
Nos levantamos y Desirée se coloco contra la pared, ofreciéndome bien su culazo. La agarre de la cintura y la volví a follar el culo. La azotaba el culo y esta me pedía que lo hiciera mas fuerte. Metí mi polla en su coño, nuevamente y me eché sobre su espalda, agarrando sus tetazas y besándonos. Cada vez se la metía mas fuerte. Desirée se arrodillo y me quito el condón. Metió mi polla entre sus tetazas, haciendo que casi desapareciera, y comenzó a hacerme una cubana morbosísima. Esta me miraba con cara de pilla y me decía que me corriera sin avisarla. Así hice y cuando exploté, mi leche salió bien de golpe, manchando esa sonrisa y la parte de arriba de sus tetazas. Cuando paro de salir semen, Desirée comenzó a hacerme una nueva mamada, dejándomela bien limpia. Luego se limpio con las manos el semen de sus pechos, llevándoselo a la boca.

Tras limpiarnos, vestirnos y besarnos un poco más, volvimos abajo con el resto de la gente.